PROPUESTA DE DESCENTRALIZACIÓN FISCAL DEL IMPUESTO AL VALOR AGREGADO PARA EL ESTADO DE VERACRUZ

PROPUESTA DE DESCENTRALIZACIÓN FISCAL DEL IMPUESTO AL VALOR AGREGADO PARA EL ESTADO DE VERACRUZ

Juana Umaña Aguilar*
Escuela Libre de Ciencias Políticas y Administración Pública de Oriente, México

Volver al índice

III.10 La necesidad de un impuesto federal

Para que el impuesto opere cabalmente se requiere que sea federal con participación a las Entidades Federativas, por las siguientes razones:
Para que el IVA tenga sentido en su aplicación se requiere, entre otros aspectos, que el impuesto se pague desde el inicio del proceso de producción o importación hasta su consumo en el país, con el derecho al acreditamiento del impuesto trasladado y pagado en cada una de las etapas de dicho proceso de producción y comercialización; por lo tanto, los bienes y servicios que se exporten no deben pagar el impuesto en el país exportador, sino en el país que importe tales bienes o servicios.
Acerca del acreditamiento, la Exposición de Motivos de la Iniciativa de la Ley del Impuesto al Valor Agregado, enviada al H. Congreso de la Unión en diciembre de 1978, destaca:
"Para eliminar los resultados nocivos del impuesto en cascada, la generalidad de los países han abandonado sus impuestos tradicionales a las ventas, similares a nuestro impuesto sobre ingresos mercantiles y, en su lugar, han adoptado el impuesto al valor agregado que destruye el efecto acumulativo del gravamen en cascada y la influencia que la misma ejerce en los niveles generales de precios, elimina la desigualdad en la carga fiscal que favorece a los artículos de consumo suntuario en relación con los bienes que adquiere la generalidad de la población, hace desaparecer la ventaja competitiva de las mayores empresas frente a las medianas y pequeñas y favorece la exportación."

"El impuesto al valor agregado que se propone en esta Iniciativa, se debe pagar también en cada una de las etapas entre la producción y el consumo; pero el impuesto deja de ser en cascada, ya que cada industrial o comerciante al recibir el pago del impuesto que traslada a sus clientes, recupera el que a él le hubieran repercutido sus proveedores y entrega al Estado sólo la diferencia. En esta forma, el sistema no permite que el impuesto pagado en cada etapa influya en el costo de los bienes y servicios y al llegar éstos al consumidor final no llevan disimulada u oculta en el precio, carga fiscal alguna."

"Con el impuesto que se propone resultará la misma carga fiscal para los bienes por los que deba pagarse, independientemente del número de productores e intermediarios que intervengan en el proceso económico, lo que permite suprimir numerosos impuestos especiales que gravan la producción o venta de primera mano."
Si el impuesto fuera local sería prácticamente imposible llevar a cabo el acreditamiento del impuesto trasladado y pagado en las etapas de producción y comercialización debido, principalmente, a la diferencia que se presentaría entre las Entidades Federativas productoras, las importadoras y las consumidoras. En algunos casos se estaría frente a "exportaciones locales."
En relación a esta situación, la Exposición de Motivos mencionada señala:
"Las características del impuesto al valor agregado obligan a variar substancialmente el procedimiento para hacer la distribución de participaciones a las entidades federativas; pues al contrario de lo que ocurre en el impuesto federal sobre ingresos mercantiles, el lugar donde se recaude el nuevo impuesto no es necesariamente el lugar en el que en definitiva se realiza el consumo final. Consecuentemente, las participaciones no se otorgarán en función de las recaudaciones que se obtengan en cada entidad, sino que se llevarán a un Fondo General de Participaciones, con cargo a todos los impuestos federales, el cual se distribuirá entre las entidades, en los términos de una nueva Ley de Coordinación Fiscal y de los convenios que las entidades que así lo deseen, celebren con la Federación. En dichos convenios se señalarán también las facultades para administrar el impuesto, que ejercerán las entidades federativas."
Las empresas exportadoras de bienes y servicios (que no deben pagar el impuesto) tendrían problemas sin solución al determinar saldo a favor y solicitar su devolución, pues con toda seguridad tendrían un impuesto acreditable procedente de varios Estados y la reclamación del saldo a favor a cargo de otro diferente.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público y los Gobiernos de las Entidades Federativas han estado trabajando conjuntamente para buscar los mecanismos que permitan distribuir, de una manera proporcional y equitativa, la recaudación del IVA, conciliando las diferencias entre las Entidades Federativas importadoras y exportadoras, las productoras y las consumidoras.