EDUCACIÓN AMBIENTAL EN EXPERIENCIAS URBANAS<br>
 Representaciones sociales de un sujeto ambiental en el escenario de una ciudad verde

EDUCACIÓN AMBIENTAL EN EXPERIENCIAS URBANAS
Representaciones sociales de un sujeto ambiental en el escenario de una ciudad verde

Jorge Alirio Peñaloza Páez
Universidad Pedagógica Experimental Libertador, Venezuela

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CategoríaA.    La paradójica Educación Ambiental, más allá de su copioso contenido, como desafiada por las ciudades sustentables

Conceptos sustantivos

La “apropiación” de un espacio físico mediante experiencias individuales y luego colectivas
La Sostenibilidad local se entiende como una  cultura de convivencia armónica de un Sujeto con su ambiente, con actitudes para asumir compromisos que le permitan identificar factores que ponen  en riesgo su desarrollo personal y el entorno (Avellaneda, 2006). Esto permite que se tomen posiciones críticas, reflexivas, responsables y participativas para el ejercicio de la prevención y solución de problemas ambientales de su localidad, es decir el sujeto internaliza el asunto ambiental como parte de su existencia. Este proceso de apropiación se escribe para todos los escenarios, por ejemplo, en el ámbito educativo los programas PRAE. Estos proyectos contemplan desde lo escolar la problemática ambiental desde una visión sistémica del ambiente que intenta generar “espacios comunes de reflexión” para la  construcción de los sentidos de pertenencia y de manera significativa, en los criterios de identidad local, regional y nacional. Se pretende entonces formar al individuo para su accionar colectivo.
Un informante señala que “deberían empezar a funcionar con los profesores de la parte ambiental, digamos así con los profesores de la biología para trabajar esa parte de concientización ambiental con cada uno, y así los buenos hábitos pueden ser copiados por el vecino, por ejemplo”. Así mismo,…continua señalando que…” formar al muchacho de una forma ética, social, cultural y participativa para que los mismos jóvenes empiecen a ver como son los comportamientos sociales que afectan el ambiente dentro del mismo entorno social, eso depende de que estén formados primero… (05E). Otro informante reconoce el proceso de arborización en Cúcuta como una…”cultura promovida por una necesidad individual, un árbol que diera sombra frente a su casa, comenzó a generar una necesidad colectiva y empezaron a sembrarse árboles que en cierta forma mejoran el clima y reducen la contaminación…” (18E)
Se infiere, con lo anterior, que al Sujeto asumir lo conceptual, lo actitudinal y procedimental puede participar en el desarrollo de comportamientos sociales. Ha logrado su apropiación de lo ambiental y en consecuencia actúa: (06E)…”estamos en ese proceso de formación no solo para aprender sinotambién para definir y descubrir y dar posibles soluciones a esa problemática ambiental que hoy vemos desde nuestra región desde nuestros barrios, desde nuestro municipio, desde nuestro departamento…”, (18E). Esto supone que a las cuestiones técnicas o normativas le es fundamental la implicación de la ciudadanía,  para lo cual las iniciativas de educación ambiental, de participación, sensibilización y capacitación por la sostenibilidad ambiental urbana desempeñan un papel crucial. “La ciudadanía ambiental global significa adquirir un mejor conocimiento del ambiente y utilizar esa información como herramienta para una acción ambiental ciudadana responsable, tanto individual como colectiva” (PNUMA, 1997). En este proceso de aprehensión personal de lo ambiental por los miembros de la familia se configuran  los hogares ecológicos.

Los necesarios hogares ecológicos

Bonet (2009) los define como aquellos cuyo impacto ecológico son mínimos, están construidos en función de exigencias ecológicas que fomentan, en primer lugar, el ahorro de energía. Así lo entiende un informante: El hogar familiar es el lugar donde podemos enseñar a los niños y adultos hábitos ambientales como durar pocos minutos en la ducha, dividir los desechos, no desperdiciar agua cuando se está lavando en la lavadora, cuando se cepilla, se lavan los platos, mantener limpio el lugar... (12E). Elegir un hogar ecológico es elegir sostenibilidad y adoptar un modo de vida que permitirá preservar y, a largo plazo, mejorar el medio ambiente. Es “reducir la utilización de productos de limpieza contaminantes, cuidar de las plantas, desconectar los cargadores de los teléfonos cuando no se usen, evitar los ruidos exagerados... según (05E).
Este espacio de la familia, donde se comienza toda reflexión bajo términos educativos en la comprensión de la formación del ciudadano, es resaltada por un informante:…” si no tienen principios desde sus casas nunca van a tener ni a saber lo que es tener principios de EA, no vale solo la propaganda sobre cuidar el ambiente, hay que formarse en la familia” (07E). Resultan vitales para los informantes éste estilo de hogares, de allí que no sorprenda el proyecto, promovido en la red llamado Por un millón de hogares ecológicos.

La preferencia por tener un árbol frente a casa

Con Berger y Luckman (1968) el individuo trata de ver las realidades, mediante los procesos internos y externos que en sí mismo construye  y reconstruye, el sujeto compone el espacio en su interior, para ubicarse y comprenderlo desde su punto de vista. El espacio simbólico urbano permite expresar su valor social  a través de los cuales se supone es posible propiciar el compromiso con la ciudad y en consecuencia la consolidación de un urbanismo más razonable. Esto hace referencia a la identificación y caracterización de las ciudades o parte de ellas, fenómeno que se da en función de la calidad de vida que representan (Valera, 1997). Plantar un árbol en la ciudad, de sombra o frutal en el patio de la casa o en el andén “permite integrar la acción a sus vivencias, es dejar huella…. es sentirse de aquí” (18E). Con la satisfacción que les da la pertenencia al lugar, los cucuteños ven a su ciudad como…”una ciudad arborizada, con fuentes hidrográficas”, a partir de allí lamentan los daños ambientales como tala de árboles, contaminación por carros que no cumplen con la revisión técnico mecánica, basuras en la calle, falta de puntos de reciclaje, fabricas  con alta contaminación ambiental, contaminación de ríos y lagunas...” (05E).
Desde la ecología urbana, según el autor arriba citado, definir los aspectos simbólicos de estos espacios facilita “la construcción social de estos significados por parte de los miembros de las comunidades analizadas y…con las que ésta se relaciona como una variable fundamental en la comprensión de las relaciones ecológicas que se dan en la ciudad” (p.40). Para los especialistas en el tema que describe la condición de ciudad y su paisajismo urbano, tales procesos individuales tienden a su transformación en colectivo, cubriendo un proceso educativo conjunto que afectan o favorecen el tratamiento con la Tierra “El hogar de la humanidad es el planeta Tierra y el  hogar individual, permite que seamos amables con los demás, que nos afecte lo que le pasa a nuestro amigo, nuestro familiar o nuestro vecino, si partimos de esto, cuidaremos más a Cúcuta”(05E).
Con firmeza el informante expresa que sin los árboles “Cúcuta pierde un poco su brillo, el sol es más fuerte y la piel se dora, como escribió alguien en la prensa”…. el cují es “un árbol símbolo,  sobre él dicen los expertos es el último recurso que le queda a los cerros circundantes  de tierra roja de Cúcuta…la fauna y la flora de Cúcuta se rompe cuando tumban los árboles para hacer un edificio o un centro comercial, eso es un abuso” (05E). Entre las especies nativas están el matarratón, chiminango, urapo y el guayacán amarillo. También, el samán, la ceiba, el mamón, el níspero y el totumo. El oithí, que en este momento abunda en los andenes de la ciudad es oriundo de Brasil. Es tan importante el árbol para el habitante que en el 2003, reposó en la Catedral de Cúcuta un símil de árbol de cují en cuyas hojas se agregan los caídos en manos de los violentos. Un interesante estudio sobre Arboles para Cúcuta, lo exponen el Grupo de Ciudad, Medio Ambiente y Hábitat popular, de COLCIENCIAS.

El papel de los veedores ambientales.

Un desarrollo urbano sostenible involucra una planificación urbana con propósitos de vida saludable y calidad de las ciudades para sus habitantes. Según la  Ley 850 del 2003, se crean las veedurías ciudadanas como mecanismo democrático de control ciudadano de la gestión pública. La Veeduría Ambiental  se ocupa de la temática respectiva y denuncia, en  su condición de órgano de control, por ejemplo “los hechos ocurridos en los años 2007 y 2011, que ocasionaron contaminación en el Río Pamplonita y una situación de emergencia en el normal suministro de agua para la ciudad de Cúcuta” según la página web de la Cámara de Comercio de Cúcuta (2012). Un titular de prensa señala: El primer hallazgo de las especies sin vida se produjo abajo del puente Benito Hernández. A la espera de las respectivas investigaciones que determinen las causas de la muerte de cientos de peces registrada durante los últimos días en los ríos Pamplonita y Táchira, en Cúcuta, se encuentran veedores ciudadanos de la ciudad (Mejía, 2015, El Tiempo). Cuando las veedurías funcionan, señala el informante “es una maravilla, controlan o previenen el impacto ambiental de proyectos en la ciudad, de la Alcaldía o de empresas particulares…pero no siempre lo hacen y ahí es cuando uno ve que tumban árboles por poner un edificio, ¿dónde están los veedores?” (10E).
Otro grupo importante que se ocupa del medio ambiente son los Vigías ambientales.  Estos actúan como veedores ambientales al interior de las instituciones educativas para cumplir el Proyecto de Ambiente Escolar PRAE y los Planes Integrales de Gestión Ambiental PIGA. Se ocupan de la comunidad intra y extra escolar en el cuidado del ambiente social, natural, económico y político. También se proponen “capacitar a la comunidad en los comparendos ambientales…” (08E), entendidos estos como norma de prevención y control del medio ambiente y la salud pública. El alcance de tal labor se realiza…”mediante sanciones pedagógicas y económicas a todas aquellas personas naturales o jurídicas que infrinjan la normatividad existente en materia de residuos sólidos… así como propiciar el fomento de estímulos a las buenas prácticas ambientalistas” (Ley 1259 de 2008).

La condición de sostenibilidad de la ciudad

Surge como una necesidad apremiante la discusión sobre los espacios urbanos donde converjan autoridades, empresas, organizaciones sociales, entre ellas la familia y la escuela, ciudadanos con buenas prácticas urbanas, a fin de reorientar  las ciudades hacia el progreso bajo condiciones de sostenibilidad. Naredo (1997) define una ciudad sostenible como aquella que ofrece una alta calidad de vida a sus habitantes, que reduce sus impactos sobre el medio natural sin acabar con sus recursos naturales. Este tipo de ciudades se permiten una adecuada movilidad, ahorro de energía y recursos hídricos (solar, eólica, geotérmica), disminución de la contaminación auditiva; reutilización y reciclado de basura, y espacios verdes. Esto incluye techos verdes en los edificios para reducir el efecto de isla de calor y reducir las inundaciones al absorber parte del agua de lluvia, jardines verticales, implementación de arquitectura bioclimática, buen transporte colectivo, ciclo vías como medio de transporte, privilegio del peatón, entre otros elementos que las definen.
El Plan de acción ajustado 2007-2011 de CORPONOR sintetiza los problemas ambientales que  Cúcuta presenta, esto fue corroborado por su representante entrevistado. Señalan que existe una extracción incontrolada de madera en la reserva forestal del Catatumbo, pérdida de bosques protectores de aguas en las microcuencas abastecedoras de los acueductos municipales, crecimiento subnormal de Cúcuta, contaminación de las fuentes hídricas por aguas residuales domésticas, industriales, basuras y agroquímicos; explotación negativa de minas de carbón y roca caliza; contaminación atmosférica; uso inadecuado de suelos, problemas socio ambientales de los pequeños productores agropecuarios, no existen programas de promoción, apoyo y fomento a la recuperación y reciclaje. Expresan la necesidad de nueva cultura “de responsabilidad compartida y de retos hacia la creatividad con ciencia y tecnologías dirigidas a la producción más limpia y la disminución de las altas tasas de consumo de energía, emisiones de gases y vertimientos sólidos y líquidos”
Es cierto que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE, 2011) se plantea que mientras más verde sea una ciudad, esta puede generar más desarrollo y fuentes de trabajo, mediante el “estímulo a la demanda de bienes, servicios y tecnologías verdes, mediante la instauración de incentivos a la eficiencia en el uso de los recursos naturales, la reducción de los desechos y del consumo de energía”… En la misma vía el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) emite el Premio Ciudad Sostenible del Planeta como reconocimiento al esfuerzo de los municipios al desarrollo sostenible. En Colombia, Montería, capital del Departamento de Córdoba  ganó el premio a la capital colombiana de sostenibilidad. Su fortaleza es promover prácticas urbanísticas equilibradas con el medio ambiente dentro de su Política de cambio climático.  Medellín, la capital de Antioquia, la ciudad de la eterna primavera, fue premiada como la ciudadanía más consciente de la importancia de la sostenibilidad, según se expresa en las notas periodísticas de El Colombiano (28/03/2014).
Pero es que Cúcuta también tiene su designación de Ciudad Verde. Esto, teóricamente implica que tienen capacidad de “recuperación, autosuficiencia y sostenibilidad social, económica y ambiental…” (FAO). Los entrevistados opinan: …excelente, es un ejemplo a seguir, es un orgullo saber que muchas ciudades nos miran por este logro tan grande que hemos conseguido, yo soy cucuteña estoy orgullosa de decir que mi ciudad es una ciudad verde, podemos hacer más cosas por ella, hay el recurso como le decía, el recurso y las ideas están pero no tenemos quien nos apoye (06E). Otro cucuteño  opina que... es muy hermoso que la ciudad tenga esa cantidad  de árboles porque oxigena, refresca mucho a la ciudad porque contamos con un clima muy cálido es un pulmón más en nuestra ciudad, la idea es conservar y cuidar estos árboles (08E). Un tercer informante contrasta la realidad y reflexiona…”esto que es uno de los focos primordiales, pero nos falta más sentido de responsabilidad y de pertenencia, no solo por la misma ciudad, sino por este desarrollo ambiental  (05E).
            En el 2012, bajo el Proyecto “Ciudades Sostenibles y Competitivas”, Cúcuta es postulada para participar. Para el Alcalde de Cúcuta (2012-2015) existe la posibilidad que para el año 2033, Cúcuta, sea una ciudad sostenible,  según el programa del Banco Interamericano de Desarrollo, BID y que en Colombia coordina Findeter (Financiera del Desarrollo Territorial S.A.,  sociedad anónima vinculada al Ministerio de Hacienda y Crédito Público). Las premisas del evento giraron alrededor de la sostenibilidad ambiental y el cambio climático; sostenibilidad urbana en donde se incluye usos del suelo, vivienda, servicios públicos y movilidad; el manejo de los ingresos, el gasto público y la transparencia en su ejecución y la sostenibilidad económica y social fomentada en la educación, salud, empleo, asociaciones público-privadas y del desarrollo sostenible. Un informante señala: “pues eso es muy bueno, lo que quiere decir que aún no es sostenible, parece muy lejano y no sé cómo lo harán con tantos problemas hoy, pero bueno esperamos que los políticos no se atraviesen” (05E). Otro optimista expresa “claro que podemos, por algo comenzamos y es nuestra arborización, además los arquitectos aquí se lucen, construyen con estética, además por ejemplo en el SENA se intentan paneles solares, en las universidades también” (19E).
La arborización,  un símbolo institucional de la ciudad verde

Parece que el valor de un árbol en la ciudad no es sólo para las familias, es también para las instituciones del lugar. Algunos personeros lo confirman, por ejemplo para García Herreros (2011) la ciudad muestra “…un bello espectáculo por su arborización”... (p.1),  y precisa que en 1988 fue premiada por su mérito forestal como Roble de Oro, y como Ciudad Verde designada por el INDERENA ampliando finalmente el premio al de Municipio verde de Colombia. En contraposición el mismo García (2014) reflexiona críticamente sobre tal consideración ciudad ‘verde’ ciudad pulmón’ o ‘ciudad de los árboles’ por el hecho de tener incontables árboles, pero afirma: “quizá la ciudad aún esté lejos de obtener ese título y no lo sea, por lo menos, técnicamente”.  Así mismo responde un entrevistado ante tal distinción  en relación con Cúcuta, al confirmar que sí está arborizada pero que es…”diferente a una ciudad educada en lo ambiental”… (19E). De manera tajante un estudiante de ambiental se refiere al papel de la EA y al estado de la ciudad…”es una ciudad que tiene una caracterización por su cultura deplorable en cuanto al  cuidado… me parecería que en cuanto a la E.A. debía dar a socializar los proyectos es importante y eso ayudaría mucho al prójimo… (16E).
En su documento Cúcuta territorio habitable y Sostenible, se plantean la creación y acondicionamiento de Parques, Corredores medioambientales, el Programa Ciudad, Paisaje, Belleza y Economía, Programa de Arborización Urbana: Plan de Calles Verdes, “Bóvedas arbustivas entre otros Su propósito lo señalan como orientado a la arborización y embellecimiento de ejes viales del centro urbano, ejes viales principales, y secundarios y anillos viales, entorno suburbano, áreas residenciales, y cinturones verdes.
Esta condición de arborizada tiene sus bajas, un informante expresa “los proyectos de expansión urbana de la ciudad han ido desgastando la cantidad de árboles en la ciudad…” (05E). Esto es ratificado por otro informante “aunque Cúcuta tiene muchos árboles está muy lejos de ser lo que era antes, con el paso de las distintas administraciones la ciudad fallidamente le han quedado consecuencias negativas medioambientales” (07E). Sin embargo en su página web, CORPONOR  identifica  que “ con el fin conmemorar el día mundial del árbol adelantó jornadas de siembra y embellecimiento paisajístico en diferentes barrios  de la  ciudad de  Cúcuta...(p.1) Se realizó como un trabajo conjunto entre los Comités Ambientales de barrio y la Institución quien  dona a las localidades árboles, estos son plantados por los mismos habitantes de la  zona y  asesorados por profesionales de la Corporación

La notable información escolar de lo ambiental

Información escolar a todos los niveles, información en los medios de comunicación que podrían completarlos, programaciones institucionales en abundancia, todo indica que lo ambiental está en la mesa de discusión; pero los problemas ambientales parecen no esperar a los procesos de información, se dan con más rapidez y nos afectan cotidianamente. Sobre el esfuerzo educativo ambiental se es categórico al indicar que “…desde mi perspectiva considero que hay desvinculación entre la educación ambiental y la calificación que recibió Cúcuta como ciudad verde, ya que se observa el descuido que tiene los ciudadanos  con el ambiente.” (08E) y en cuanto a la designación de la ciudad también encuentra distinción: …”ahora en cada uno de los lugares se observan uno que otro árbol, además es notable la carencia de amplias zonas verdes, la falta de cuidado a las pocas zonas que existen, la cantidad de basuras que hoy en día adornan las calles de la ciudad…”
La EA es un eje vinculante con toda disciplina académica que diserta sobre la condición de sostenible para optimizar los recursos naturales a favor del contexto y sus habitantes. Las disciplinas que se ocupan del urbanismo, economía, sociología, ingeniería, derecho, geografía, historia local apuntan a conseguir estrategias de solución, un ejemplo lo representa el planteamiento de las ecociudades.  Esto implica algo más que un  plantar árboles, pero parece un punto importante. El ama de casa dice no conocer que significa el término ecociudad a profundidad pero “supongo que una ciudad que cuida las zonas verdes”…es un nombre nuevo para el ambiente”. Para el docente las ecociudades “están en otros países, que muestran estrategias distintas para cuidar el ambiente” representan un intento de diseñar una forma urbana que sitúe las necesidades de las personas y del entorno de forma satisfactoria,  reduciendo el impacto ecológico, “ahora es menos fácil, los problemas han aumentado, la complejidad de las ciudades implica un esfuerzo mayor”.
Hay suficiente información académica o informal, sobre la problemática ambiental y su manera de prevenirla. Existen muchos esfuerzos de los responsables, muchas normas de los países, muchas organizaciones con o sin fines de lucro que se motivan para aportar alternativas de solución. Pero a su vez concurre más polución, contaminación, degradación, pérdida de biodiversidad, procesos de desertificación, pasivos ambientales, sitios contaminados, basurales, contaminación de los recursos hídricos y el consecuente aumento de la pobreza, desocupación, enfermedades, hambre y refugiados ambientales.  También puede evidenciarse que a mayor Educación Ambiental, mas necesidad de la misma. El informante (03D) señala que “Creo que hay suficiente información en los medios de comunicación y de las instituciones encargadas, inclusive muchos programas mensuales”.
Meira (2006) en su artículo El elogio de la Educación Ambiental realiza una interesante reflexión que valora la EA independiente de su uso. Su punto de partida lo ubica en el momento en que la “ruta de la respuesta educativa a la crisis ambiental” (p. 43),  pasó de EA a Educación para el Desarrollo Sustentable, EDS, sin el consenso necesario para ello. Realiza una fundamentada crítica sobre una tendencia en el campo de la EA a “aceptar –y casi a sacralizar– el discurso de la ONU como referente principal, cuasi natural, atribuyéndole propiedades de consenso y “neutralidad” que, como cualquier propuesta para entender o representar… en este caso, la realidad educativa, no puede poseer” (p.44). La discusión de términos es propia de los salones de clase que en ocasiones facilita entender los discursos ambientales. El estudiante se queja “en clase es puros términos, que si este lo llama así, que el otro de otra manera y total pasa el semestre y no vamos afuera ni a sembrar una mata!”, en algunos semestres EA online, imaginese”.
Meira asume la EDS como una herramienta educativa más para superar los excesos ecológicos y sociales de la modernidad, pero con la necesidad de dejar cabida a “otras visiones, otras alternativas, otros paradigmas, más críticos y consecuentes con una construcción igualmente sustentable, pero también emancipadora, equitativa y orientada hacia la justicia social del presente y del futuro de la humanidad” (p.51). A su favor un informante señala “antes y después de una cita sobre ambiente hay mucha publicidad, pero aunque cada docente tendría que manejar esto para estar al día, desafortunadamente son pocos los que se interesan por saber lo que allí se dice” (08UM). Parece entonces que hay algo de indiferencia por las nuevas visiones.
 Resulta coincidente que los distintos escenarios de discusión y análisis, han permitido la consideración de la EA como la estrategia indispensable para alcanzar los cambios culturales y sociales necesarios para el logro de la preservación del ambiente; surge como una herramienta para enfrentar la crisis ambiental. Pero esta tarea de la EA se enfrenta a un rompecabezas de elementos que implica más de un sector, afronta el reto, no ya de intentar resolver problemas concretos, sino de implicar a la ciudadanía en la construcción de un modelo de sociedad que los evite. Para (04D) “la universidad tiene su cátedra en educación ambiental donde se trata de concientizar al estudiante como cuidar a su ambiente, pero algo sucede que en las cosas mínimas como es el uso de un baños, el uso de una caneca, uno encuentra que los estudiantes que ya son seres formados  porque superan los 18 años tienen el mínimo uso correcto”. El informante muestra desánimo por el alcance de la EA universitaria.

Las Citas ambientales mundiales, escenarios de asistencia                        

Dentro de lo llamado Gobernanza Ambiental por PNUMA, se describe la  gestión multilateral para responder a la compleja problemática ambiental. El hecho que la degradación ambiental se acentúa y nuevos problemas ambientales aparecen se asocian al estado de la gobernanza ambiental mundial. Estos factores  fueron examinados en la  XVI Reunión del Foro de Ministros de Medio Ambiente de América Latina y el Caribe (2008) y refieren a…”los métodos descoordinados a nivel mundial, regional y nacional, así como la duplicación y fragmentación de los mandatos han agravado esta situación, a la falta de coordinación que ocurre en los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil.2 (p.4)
Cada 26 de Enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, que tiene su origen en 1975, año en que se celebró en Belgrado, el Seminario Internacional de Educación Ambiental- Una Estructura Global para la Educación Ambiental. En su Informe la Carta de Belgrado se definieron las metas Ambientales, Mejorar todas las relaciones ecológicas, incluyendo la relación de la humanidad con la naturaleza y de las personas entre sí. Igualmente las metas y objetivos de la EA como formar una población mundial consciente y preocupada con el medio ambiente y con los problemas asociados, “y que tenga conocimiento, aptitud, actitud, motivación y compromiso para trabajar individual y colectivamente en la búsqueda de soluciones para los problemas existentes y para prevenir nuevos”.
En Tbilisi (1977) se acuerda la incorporación de la Educación Ambiental a los sistemas de educación, estrategias, modalidades y la cooperación internacional en esta materia;  intensificar su labor de reflexión, investigación e innovación con respecto a la educación ambiental; intercambio de experiencias, investigaciones, documentación y materiales, poniendo, además, los servicios de formación a disposición del personal docente y de los especialistas de otros países; a la comunidad internacional, a que ayude generosamente a fortalecer esta colaboración en una esfera de actividades que simboliza la necesaria solidaridad de todos los pueblos y que puede considerarse como particularmente alentadora para promover la comprensión internacional y la causa de la paz. Igualmente en el Foro Global Ciudadano de Río 92 se aprobó 33 tratados; uno de ellos lleva por título Tratado de Educación Ambiental hacia Sociedades Sustentables y de Responsabilidad Global, el cual parte de señalar a la Educación Ambiental como un acto para la transformación social, no neutro sino político, contempla a la educación como un proceso de aprendizaje permanente basado en el respeto a todas las formas de vida.
Si se cuenta desde 1975 hasta hoy 2015 han transcurrido cuarenta años en que los países han colocado sobre el tapete la necesaria EA como medio adecuado para la transformación hacia una sociedad ambientalmente favorable. Se presume la participación de todos los representantes nacionales a dichas citas mundiales celebradas en distintos lugares del globo terráqueo, “pero cuando llega el momento del compromiso realmente de cada país, decir bueno yo me comprometo en reforestar, me comprometo a hacer algo por el cuidado del  medio ambiente desde cada país, pues la gente ahí ya le da la prioridad a otras cosas mas no a lo que realmente se tiene” (07E).
Caballero (1997) reflexiona que en Colombia “un paso imprescindible para lograr un posicionamiento consistente y racional en la esfera internacional es un adecuado conocimiento de los principios, convenios, acuerdos, tendencias y mecanismos que se gestan a nivel multilateral, bien sea global o regional.” (p1). Esto facilita, según el autor,  la necesaria visión e instrumentos para actuar en un mundo regido por la interdependencia y la globalización y que ha de traducirse de manera adecuada en los diversos sectores y niveles que constituyen el país sociopolítico, para identificar necesidades, proponer metas y trabajar conjuntamente para cumplirlas.
Los informantes, particularmente docentes y vecinos, al respecto de las citas ambientales de tan larga trayectoria no reconocen de manera cercana sus contenidos. Los miembros académicos que forman parte de organizaciones o grupos ambientales presumen la condición de EA como eje transversal de la curricula. Perales y García (1999) apuntan que “eso de la responsabilidad compartida no cuadra con una práctica educativa real y efectiva…salvo los profesores comprometidos a título personal “(p.2) para afirmar luego que lo que la escuela no hace los medios de comunicación lo manejan de manera abrumadora, en este caso, la temática ambiental. Esto podría entenderse como que no siempre el discurso de la educación formal se apareja con los significados específicos que se manejan en un momento histórico.
Un docente de la cátedra de ambiental arguye que “el contenido de estas citas mundiales no son valoradas académicamente” (1E); otros aspiran su discusión actualizada “esos conocimientos o tardan mucho o no llegan a los claustros universitarios o es a muy pocos a los que le llegan esas informaciones” (4E). Otra docente sugiere que han surgido nuevas lecturas ambientales por lo que “cada docente que este manejando esta materia tiene que estar al día” (3E), un estudiante de psicología argumenta que el contenido de estas citas mundiales que se realizan ha permitido que “los discursos se hayan enriquecido por esos debates, se han creado otras lógicas y otras visiones del tema” (E4).
El estudiante de pedagogía asevera que “la des actualización actual de los docentes es también, es un meollo que conlleva a una falta de información loable y confiable (10E). Como respuesta a pregunta adicional un mayor número de entrevistados manejan el internet pero ven muy poco la información de los tan variados blogs, o páginas web de las diferentes organizaciones mundiales o colombianas sobre la protección ambiental o particularmente lo que sucede en las citas internacionales que van sucediéndose.

 

Lo ambiental en el eje de articulación rural – metropolitano

López  y otros (2005) en su artículo sobre la interfase urbano rural como territorio y espacio para la sostenibilidad ambiental, intentan conceptuarlo como “un elemento espacial diferenciable de la ciudad y del campo, pero que a la vez reconozca la articulación que de estos dos mundos se da en ella.” (p.1) como una manera de abordar los problemas que se dan en las relaciones campo ciudad. Parten de la premisa que la crisis ambiental encuentran estos espacios proclives a problemáticas que se colocan en conflicto y requieren una gestión adecuada. Representan áreas peri-urbanas donde confluyen ecosistemas agrícolas y urbanos, afectados por flujos de materia y energía demandados por ambos. Cúcuta presenta estos espacios con aquellas poblaciones que se han ido conformando en la periferia de la ciudad y hoy forman parte del sector urbano.
La Alcaldía en la revisión del Plan de Ordenamiento territorial (2011)  en el aspecto La Estructura Funcional Municipal tiene como objetivo garantizar la funcionalidad de los elementos que componen las Estructuras Ecológica Principal y Socio-económica… y el Sistema de Movilidad, portador de infraestructuras de servicios públicos, que garantiza la integración de los nodos a diferentes escalas. La estructura del sistema de movilidad se conforma por: a) Eje de articulación rural – metropolitano…. Analizar los espacios rurales y urbanos por separado dificulta el reconocimiento de las interfases o punto donde establecer con exactitud donde de manera particular se presenta lo exclusivamente urbano o lo rural.
Ante la inquietud por conocer la percepción sobre espacios geográficos y su relación con el cuido ambiental, identificaron controversia entre lo rural y urbano…”las ciudades quieren ser cada vez más verdes” por el contrario ciertas áreas naturales protegidas como Parques Naturales en las zonas rurales “cada vez están siendo más amenazadas por compañías extranjeras para su explotación aurífera u otro elemento, ello con el beneplácito de las autoridades nacionales”  (10E).  El ama de casa selecciona la zona rural, porque ha sido bien cuidada y por mostrar mejores potencialidades…”por eso, allí ahora se hace turismo por lo exótico del paisaje,  acá en Colombia tenemos el eje cafetero que es muy turístico y es parte rural. Hay turismo rural por la parte económica (17E).
El Turismo Rural es una tendencia en el mundo y también en Colombia. Es una actividad  que se perfila como, productiva, “que articula la multifuncionalidad rural y se convierte en un vínculo urbano-rural dinámico y alternativa sostenible de desarrollo territorial rural” (p. 15). Lo que pareciera una alternativa de desarrollo local, cualquier actuación relacionada debe prever “… el uso sostenible de los recursos, la revitalización de las economías locales y la integración de la población local en un proceso de desarrollo planificado y controlado, que implique la no masificación, y un bajo impacto” (Pérez, 2010, p. 17).
En lenguaje particular el estudiante de comunicación señala el rural como espacio más conservado, “La parte rural creo yo, porque de lleno todavía no ha entrado la tecnología a hacer los cambios que ha hecho en la parte urbana” (11E). En las zonas rurales se cuida el ambiente como su hábitat que les da subsistencia, por eso “no sobreexplota los recursos y contamina en menor grado” (09E).  De manera disidente el descuido ambiental no distingue espacios “Porque uno ve, por ejemplo, cuando va al campo el montón de basuras en el piso, las plantas secas, el río contaminado, igual que en la ciudad. Entonces podemos decir que en ninguno de los dos se lleva a cabo ese cuido” (12E). La reflexión la complementa “Cambio de uso de los suelos rurales agrava la situación…explotación indebida de recursos en lo rural… ausencia de hábitos ambientales y contaminación en lo urbano, la gente de las zonas rurales se vienen a la ciudad y viven mal…” (04E). En ambos espacios, los residuos domésticos e industriales, generan preocupación,…” el depósito de estos residuos se hace en vertederos abiertos o botaderos, con graves consecuencias para la salud, las zonas rurales no tienen rellenos sanitarios….los cartoneros son los que hacen  reciclaje…hay personas que viven de recogerlos y también se lleva las latas” (13E)

Lo que veo cada día como paisaje

Como un ejercicio rememorativo de lo que la ciudad deja en cada quien, se preguntó acerca de cómo ven la ciudad, cada día. Describieron las sensaciones cuando entran a un espacio de estudio, salen de su casa o realizan paseo por la ciudad: “lo que veo es la falta de zonas verdes en los sitios pues se han dedicado más  hacer de Cúcuta un volumen de solo concreto, que día a día tiende a crecer más, hay carencia ambiental de parques, jardines, zonas blandas, zonas verdes, etc,”,  así lo señala un estudiante de arquitectura (15E). Una ciudad verde identifica espacios públicos ecológicos, con condiciones óptimas de habitabilidad “en Cúcuta se percibe en algunas urbanizaciones, pero no en los barrios, allí hay hacinamiento…” (13E).
Otra informante (14E) percibe a su alrededor “…por lo general mucha contaminación, la contaminación de los vehículos, además la contaminación sonora  el ruido de los vendedores en la calle  los pitos de los carros…”. Para Gómez (2010) “El paisaje es determinante en la construcción de las culturas e identidades colectivas y es un importante instrumento de interpretación del territorio.”(p.1). Identifica el espacio físico, natural o no, a través de todo tipo de áreas verdes sustentables, o el medio donde se desenvuelve diariamente el ciudadano.
Además del cuidado con la jardinería, se requiere cuidar los cauces de agua, las condiciones del clima en los edificios, la luz de los salones educativos u oficinas, “cuando entro a clase generalmente los salones se encuentran llenos de empaques de “comida chatarra”, botellas plásticas, pupitres desorganizados, tableros llenos de tinta…” Sobre el espacio universitario percibe “…que algunos lugares que son utilizados por los estudiantes para realizar trabajos o estudiar están rodeados de basuras que los mismos alumnos dejan allí cuando se levantan de estos puestos y por lo general permanecen allí por semanas. Y en relación con la ciudad el estudiante revela “cuando paseo por la ciudad observo que la gente tira papeles al piso, grita, hace sonar fuertemente el silbato de sus carros y motocicletas y en algunas ocasiones  se ve a muchas personas que discuten por la competencia que se crea entre sus negocios ambulantes.”(15E)
Retomamos a Gómez (2010) para coincidir que la calidad ambiental del paisaje bajo criterios de sostenibilidad, “debe entender el paisaje de manera integral y holística, donde la valoración cultural de una comunidad en constante interacción con su ambiente, condiciona la dinámica particular de su desarrollo visual y espacial y, en consecuencia, determina la calidad ambiental deseable.” (p.1). Una informante describe “cuando me monto en la buseta me gusta mirar las personas, el paisaje…me hace analizar al cucuteño promedio y creo que nos falta sentido de pertenencia por nuestra tierra…siempre noto basura en las  calles, zonas verdes deforestadas y contaminadas , los muros rallados con frases o con restos de publicidad que dejaron los políticos, animales indefensos en las calles, vendedores ambulantes causando contaminación auditiva y desorden público, muchas personas caminando, otras manejando, pero todas ellas en su propio mundo, actuando como si la ciudad fuera solo de ellos, cuando debería ser todo lo contrario…” (17E.)

Codificación Selectiva. Síntesis argumentativa

El microanálisis de los conceptos sustantivos se orienta  hacia un proceso de  abstracción que dé cuenta de haceres y significados que se toman como datos para la generación conceptual. De tal manera que los dos primeros, como puede verse, corresponden a El hogar escenario de apropiación ambiental lo que traduce el interés teórico de la sostenibilidad en el ámbito ecológico, económico y social, visto el planeta como un espacio a cuidar. Los informantes opinan que el hogar familiar es un espacio clave, junto con los maestros para garantizar la apropiación de comportamientos adecuados, para lograr la concientización ambiental individual para luego actuar en el grupo. Sin embargo, la realidad es que los informantes ven en la arborización uno de los pocos hábitos de las familias que se extienden a la comunidad. Presuponen que los hogares ecológicos logran el mínimo impacto posible sobre el medio ambiente, por eso los suponen necesarios, pero no necesariamente los practican. Saben de oídas que la vida en su interior ha de estar centrada en el ahorro de energía y consumo para ingresar a la sostenibilidad, allí han de apropiarse de lo ambiental. Señalan actos aislados de buen consumo, que no siempre realizan todos en la familia, pero tiene pendiente que “si no tienen principios desde sus casas nunca van a tener, ni a saber lo que es tener principios de EA” (07E). Afirman que si adquieren buenos hábitos familiares, de convivencia “cuidaremos más a Cúcuta” (05E)
Los conceptos sustantivos 3 y 4, entendidos como Cultura ambiental local, resume la simbología del cucuteño alrededor de sembrar un árbol frente a su casa, que algunos lo interpretan como un compromiso con la ciudad, de alguna manera se sienten identificados con aciertos administrativos locales; por otro lado lamentan la situación ambiental en general. Aun cuando nombran los graves problemas y desafíos ambientales de la ciudad contemplados en las definiciones de sostenibilidad…”contaminación por carros, basuras en la calle, ausencia de reciclaje…” (05E) no identifican proyectos de responsabilidad colectiva, de interés general. Consideran propio de las instituciones educativas capacitar los veedores ambientales que funcionan en su interior y realizan actividades relacionadas con los comparendos ambientales. A su vez piensan que el manejo de las normas de prevención y control resultan incompletas para estos funcionarios que se enfrentan a decisiones que casi siempre trasgreden las leyes, como “los arboricidios en Cúcuta” (06D), punto sensible del ciudadano del lugar.
Como Percepción de la ciudad, surge la categoría que emerge de los conceptos sustantivos 5 y 6, referidos a la interpretación del término Sostenible desde la ciudad en estudio. Así mismo se dilucida la significación de lo verde como preocupación de las autoridades e instituciones para el tratamiento de lo ambiental. De tal manera que para los informantes la ciudad de aleja de unas buenas practicas urbanas. Se explica por lo que se quiere suceda o por lo que se ha leído sobre estrategias ambientales de uso en otros lugares, pero que se reconocen como una necesidad, “que hay que aplicar aquí”, así lo reafirman: “hay que buscar salidas para mitigar el impacto ambiental que está ocurriendo sobre ella “(10E). La ciudad se queda en lo verde de los árboles, pero según la OCDE esto debía generar desarrollo y fuentes de trabajo. Apuntar a la corriente naturalista que centra la actividad ambiental en la naturaleza solamente, según Sauve, incompleta una versión importante de la EA.
La Critica a los nuevos paisaje recoge aquellos paisajes que se están formando en la interfase rural-urbano de Cúcuta y los pocos hábitos colectivos que se reflejan diariamente en la ciudad y en aquellos recintos donde se administran contenidos de EA como las universidades. Lo primero implica a las comunidades que se han adjuntado a la ciudad también llamadas ámbito periurbano. Esto implica el intercambio de fortalezas pero también de debilidades que implica la agregación espontánea de una población. El comportamiento colectivo demuestra pocos hábitos ambientales, según los informantes, resultando incoherente con los esfuerzos institucionales de los organismos encargados o de los espacios escolares.
Puede afirmarse que los informantes reportan abundante información escolar y propagandista sobre el tema ambiental. Junto con los medios de comunicación, se enteran de los esfuerzos de las Citas ambientales. Pero el contenido de estas actividades no es muy valorado en clase universitaria  y bastante menos a otros niveles o en la vida familiar.  Solo la opción de asistir a ellos aportaría interés sobre el tema y esa posibilidad “se queda para los representantes nacionales”. Sospechan que los contenidos ambientales resumen la trayectoria de estas citas y el pensamiento de los ministerios nacionales de los países y se dan en lo escolar, per se duda de la actualización de los maestros. Esto forma un entorno teóricamente comprometido, cuya práctica parece aún no estar cubierta de manera satisfactoria para los informantes.
Resulta una contradicción más que aparente que la EA la respalda un copioso contenido, disciplinario o informal, que se actualiza con cada momento ambiental, pero que no alcanza a liderizar los movimientos a favor de los espacios diarios del ciudadano para una mejor calidad de vida, así lo perciben los informantes. La arborización de la ciudad es un punto a favor del desarrollo urbano en el área, las esperanzas a largo plazo de la sustentabilidad es una opción “que requiere formación y participación del cucuteño, que no demuestra de manera firme hábitos ecológicos”.