COMERCIO INFORMAL EN MÉXICO, POSIBILIDAD DE ENCAUSAMIENTO HACIA LA APORTACIÓN TRIBUTARIA

IV.3.3 Formas de registrar a los sujetos del sector informal

En la medida en que los trámites de registro para los sujetos del sector informal disminuyan, para el supuesto de pago de impuestos, este resultará en mayor cuantía para las finanzas del sujeto activo.

Las formas que se proponen para registrar a los sujetos que realizan el comercio de manera informal, podrían ser:

1. A través de barridos de calles, es decir, se deberá ir negocio por negocio, puesto por puesto, para verificar que ya se encuentren registrados ante el RFC, y en el caso que no sea así, tomar los datos y levantar un censo para realizar la inscripción del mismo ante el SAT, la cual se podría llevar de la siguiente manera: efectuar encuestas en las principales zonas comerciales, áreas industriales, en tianguis preestablecidos, mercados sobre ruedas, y por último en las zonas habitacionales, así se identificaría a los posibles contribuyentes que aún no se encuentran registrados ante la base de contribuyentes.

2. También podría realizarse el registro de los potenciales contribuyentes de este sector, a través de los archivos de datos que se tengan en las cámaras empresariales, tomando así dicha información de esos organismos, y de esta manera verificar cuales aún se encuentran vigentes para que posteriormente se den de alta ante el SAT.

3. A través de las empresas establecidas que se les obligue a verificar aquellos clientes que realizan compras de manera continua y solicitar el alta ante el SAT para confirmar que estén efectuando el cumplimiento tributario, así como una opinión de dicha autoridad de que están al corriente en sus obligaciones fiscales.

IV.3.4 Estructura del Impuesto al sector informal, para encausarlo hacia la aportación tributaria.

Tomando como base la reforma fiscal para 2014, se puede hacer un comentario inicial, en el sentido de que la misma al mes de julio de 2014, ha tenido un efecto negativo, debido a que los contribuyentes que se pretende incorporar a la formalidad están teniendo un sinfín de inconvenientes, verbigracia la determinación y entero de sus impuestos, ya que se creó una plataforma informática sumamente complicada, siendo que la mayoría de este tipo de contribuyentes no tiene acceso a una computadora, por lo tanto lo que la autoridad pretende que llene una serie de formatos es casi imposible, dado que aparte de tener conocimientos de informática y manejo de sistemas computacionales, se debe tener la certeza de qué se debe incluir en dichos formatos, ya que si algún contribuyente llegara a tener algún dato erróneo, esto pudiera desencadenar un sanción pecuniaria, resultando entonces más caro que el propio impuesto que debería pagar.

Hasta hace algunas décadas, los formatos mediante los cuales se pagaban los impuestos en México, considero que tenían una mejor estructura y no había pauta para cometer errores, ya que se contaba con recuadros en los cuales se sumarizaban o totalizaban los importes utilizados por lo que había más certeza jurídica de que su determinación era correcta; posteriormente se fueron modificando hasta llegar hace algunos años a los formatos que se conocieron como 1D esto para los pagos provisionales, o las formas oficiales de declaraciones anuales 2, 6, 8, etc., hasta llegar a los programas electrónicos que actualmente se utilizan, y que en la mayoría de los casos debes contar con un equipo de cómputo de punta para que puedas accesar a dichos sistemas y así poder presentar las declaraciones mensuales, informativas, anuales y ahí es donde se encuentra uno de los problemas ya que muchos de los contribuyentes que se pretenden incluir a la formalidad no cuentan con dichos recursos para poder solventar tales obligaciones.

Ahora bien en lo referente a la apertura comercial internacional, ocurrida en los 90´s,  se marcaba la pauta para una mejoría de la economía, y el gobierno de aquel entonces tuvo que realizar cambios estructurales de gran importancia, de tal manera que el efecto resultante fuera en beneficio del país, pero la idea no fue crear más impuestos, ni ampliar las tasas tributarias, si no lo contrario, tal como lo expresa Ismael Gómez Gordillo,1 ya que comenta lo siguiente: “Cabe recordar el doble reto que enfrentaba en su inicio la presente Administración. Por una parte, era necesario promover cambios a la legislación fiscal que permiten a la economía mexicana ser más competitiva en un entorno de creciente apertura, y por otra, era necesario culminar con éxito el proceso de estabilización de la economía.

Si bien estos objetivos hubieran parecido, en principio, incompatibles, hoy podemos afirmar que ambos han sido alcanzados con buen éxito.

Así, mientras que se han eliminado varios impuestos las tasas de otros han sufrido reducciones significativas, los ingresos fiscales se han fortalecido, reduciendo así la necesidad de recurrir a un financiamiento inflacionario del gasto y, por tanto, creando condiciones más estables que propician mayor inversión y crecimiento económico.

Los dos objetivos antes expuestos, es decir, mejorar la competitividad de las empresas mexicanas y fortalecer las finanzas públicas, se ha logrado a través de una serie de medidas para reducir la evasión fiscal y elevar el número de contribuyentes registrados. Esta estrategia, a su vez, ha redundado en un sistema fiscal más equitativo, pues la carga fiscal se reparte entre un mayor número de contribuyentes, y también más eficiente, pues los diferenciales en cargas fiscales efectivas se han reducido significativamente. Este último elemento ha sido de crucial importancia para que la economía mexicana respondiera ágilmente a la apertura comercial, ya que el efecto de ésta hubiera sido parcial de haberse mantenido la “protección fiscal” de algunos sectores.

La reducción en la evasión fiscal y el aumento en el número de contribuyentes, que entre 1988 y 1993 más que se duplicó para el caso de personas morales y físicas con actividad empresarial, permitieron no sólo elevar los ingresos tributarios, sino, además reducir la carga fiscal de los contribuyentes cumplidos hasta 50% en el mismo periodo”.
(Énfasis añadido)

Como bien se observa las tendencias que se toman para el sistema tributario en el país, de bajar las tasas impositivas, redunda en una mayor recaudación, aunado a esto de que se amplíe la base de contribuyentes, disminuyendo también los beneficios a algunos sectores o regímenes fiscales específicos, para el ejercicio de 2014, como se ha comentado se hicieron algunos cambios “importantes” al sistema tributario en nuestro país, sólo que no se tomaron en cuenta diversos factores tanto internos como externos, esto es que actualmente se considera-aunque no reconocida por el propio gobierno- hay recesión en nuestro país, por lo que las condiciones económicas para muchos no es la más apta para incrementarles las tasas impositivas en casi un 17% es decir a las personas físicas se les incrementó de tener una tasa del 30% aumentó al 35%, y para aquellos contribuyentes de menores ingresos, el cambio fue radical, ya que, de tan sólo presentar un pago mediante una cuota, ahora tiene que cumplir con una serie de requisitos, formatos, información, cálculos etc., que los tiene sumamente desconcertados y agobiados, y por tanto, la tendencia es en términos generales de inconformidad e incertidumbre jurídica, ya que prefieren presentar su baja ante el SAT, que dar cumplimiento con todo este embrollo fiscal.

Para constatar lo anterior, se pone de relieve lo manifestado en un artículo del Heraldo de Aguascalientes, 2  del día 01 de abril de 2014, el cual de manera literal expresa lo siguiente: “La Secretaria de Hacienda no ha entendido el mensaje de la mal llamada Reforma Fiscal, pues el cambio de REPECOS a facturación electrónica, le ha representado una caída en la recaudación del 9 por ciento, y el que más de 100 mil pequeños contribuyentes en todo el país, se hayan dado de baja, por lo que urge un cambio al respecto, señaló el presidente del Centro de Innovación Empresarial, Salvador Esqueda Esqueda.

Dijo que además a quien no cumpla, al vencerse el plazo este lunes, se le impondrá una multa de 27 mil pesos, lo que orillará a no pagar impuestos. “En Aguascalientes hay alrededor de 140 mil REPECOS, y seguramente ni la mitad ha cambiado de régimen fiscal, por desconocimiento, por falta de equipo y por falta de tiempo, y tacto del SAT”, sostuvo.

Calificó el asunto como un problema grave para los empresarios y para la propia autoridad, pues la caída en la captación de impuestos y en el número de pequeños contribuyentes inscritos al padrón, es una clara señal de que no estamos preparados, “se equivocó la autoridad para buscar las formas de recaudar más, nosotros siempre hemos dicho que se amplíe el padrón y se den facilidades, pues es muy difícil poder tributar así como actualmente está planteado”, indicó.

“Además, se les está poniendo una multa de 27 mil pesos si no se cambiaron a la facturación electrónica, y con ésta situación en lugar de ampliar el padrón, lo van a reducir, y vamos a salir con la misma de siempre, cargarle más a los cautivos”.

Manifestó que Hacienda y los legisladores están a tiempo de cambiar esa situación y ofrecer facilidades para el pago de impuestos, “ya es momento de que reconozcan que se equivocaron”.

Consideró que la autoridad fiscal debería tomar el asunto a la inversa, dar facilidades a los contribuyentes para que tributen más, pagando poco, y bajo un esquema más sencillo, pues si los REPECOS venían cumpliendo con la autoridad, ahora los están obligando a irse a la informalidad.

En Aguascalientes se calcula que existen más de 140 mil REPECOS, “y es momento que no sabemos cuántos han migrado al nuevo sistema fiscal, y cuántos no, por ello, consideró que los problemas para los pequeños contribuyentes se complicarán a partir de estos días”.
En ese sentido, lamentó que muchos micros, pequeños y medianos se vayan a ir a la informalidad, sobre todo que la propia Secretaria de Hacienda reconoce que ya se dieron de baja más de 100 mil en todo el país, y que los ingresos fiscales se cayeron en un 9 por ciento.

Destacó que los REPECOS si quieren pagar impuestos, pero actualmente el mecanismo es complicado para la tienda de la esquina, para el pequeño “changarro”, por ello sería prudente extender el plazo o de plano ofrecer nuevos mecanismos sencillos para el cumplimiento con Hacienda.”

Derivado de lo anterior, y por otros puntos comentados durante toda esta investigación, se hace necesario que la propuesta que se pretende sea lo más sencilla y práctica, para que pueda alcanzar los objetivos previstos de este estudio, los cuales son incrementar la base de contribuyentes y que éstos aporten conforme a su capacidad contributiva, en específico aquellos que se encuentran en el comercio informal, ya que existe una cantidad importante de personas que pudieran incluirse a la formalidad para compartir la carga tributaria del país y soportar los gastos generados por vivir en sociedad.