SISTEMA VIABLE AUTORREGULADO PARA LA SEGURIDAD Y SOBERANÍA AGROALIMENTARIA EN EL MARCO DE LA SEGURIDAD, DEFENSA Y DESARROLLO INTEGRAL EN VENEZUELA

SISTEMA VIABLE AUTORREGULADO PARA LA SEGURIDAD Y SOBERANÍA AGROALIMENTARIA EN EL MARCO DE LA SEGURIDAD, DEFENSA Y DESARROLLO INTEGRAL EN VENEZUELA

Manuel Ricardo Cristopher Figuera
Universidad Militar Bolivariana de Venezuela

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Estudio y empleo de la estrategia de deconstrucción

Para el empleo de la estrategia de deconstrucción aplicada a este estudio, con el fin de identificar doctrinas y paradigmas de seguridad nacional, se requiere que los elementos teóricos a exponer, sean colocados en orden cronológico. Por ello, en una secuencia temporal, extraeremos de los documentos fundamentales del Libertador el origen del paradigma, doctrina y filosofía bolivariana; que además permitirán demostrar que el bolivarianismo es un paradigma identitario1 y libertario, que por mucho tiempo han tratado de invisibilizar. Los documentos a analizar en profundidad son los siguientes:
1.- Empezaremos por el Manifiesto de Cartagena, fechado el 15 de diciembre de 1812, también conocido como: “Memoria dirigida a los ciudadanos de la Nueva Granada por un caraqueño”, Para entonces Simón Bolívar contaba con apenas 29 años de edad y ya había liberado a Venezuela de la corona española, pero Venezuela se había perdido y, en ese documento, entre otros aspectos, expone las causas de la perdida de la Primera República y, solicita el apoyo de los pueblos hispanoamericanos, a emanciparse del imperio español. Entre las principales causas que dieron fin a la Primera República (1810-1812), citadas por el Libertador, tenemos: a) La carencia de un ejército ordenado y disciplinado para mantener el orden y repeler los ataques de los grupos realistas; b) La mala administración del erario público; c) La adopción de federalismo como forma de gobierno; en contraposición con una Nación republicana; d) La explotación de la ignorancia de los ciudadanos por parte de los sacerdotes, luego del terremoto de 1812, donde se indicaba como castigo divino la emancipación de Venezuela y; e) La actitud filantrópica y tolerante de nuestros gobernantes.
Con un altísimo conocimiento de la praxis de filosofía política y de estrategia militar, así como, una elevada conciencia le permiten exponer al libertador Simón Bolívar, aspectos como estos:
“Los códigos que consultaban nuestros magis­trados no eran los que podían enseñarles la ciencia práctica del Gobierno, sino los que han forma­do ciertos buenos visionarios que, imaginándose repúblicas aéreas, han procurado alcanzar la perfección política, presuponiendo la perfectibili­dad del linaje humano. Por manera que tuvimos filósofos por Jefes, filantropía por legislación, dialéctica por táctica, y sofistas por soldados. Con semejante subversión de principios y de cosas, el orden social se sintió extremamente con­movido, y desde luego corrió el Estado a pasos agigantados a una disolución universal, que bien pronto se vio realizada”2.
En breve síntesis podemos destacar el carácter de analista político del Libertador.
2.- Documento del que no se conoce otro título que el de Manifiesto de Carúpano, fechado el 7 de septiembre de 1814, en el que el Libertador se queja por la ignorancia de sus paisanos para entender la justicia de los hombres y, la importancia de la República; además señala que la justicia divina no llega de la mano de las personas, destacando que sus conciudadanos carecían de preparación para el ejercicio práctico de la justicia y el desarrollo de sus propias leyes; hecho que llevó al Libertador a forzar a su pueblo a apropiarse el ejercicio de la libertad y la práctica de la justicia, aún cuando desconocían la plenitud de su esencia. No obstante, con el don de la palabra, le imprime una carga ética de espiritualidad y rebeldía:
“Yo os juro, amados compatriotas, que este augusto título que vuestra gratitud me tributó cuando os vine a arrancar las cadenas, no será vano. Yo os juro que libertador o muerto, mereceré siempre el honor que me habéis hecho, sin que haya protestad humana sobre la tierra que detenga el curso que me he propuesto seguir hasta volver segundamente a libertaros, por la senda del occidente, regada con tanta sangre y adornada de tantos laureles. Esperad, compatriotas, al noble, al virtuoso pueblo granadino que volará ansioso de recoger nuevos trofeos, a prestaros nuevos auxilios, y a traeros de nueva la libertad, si antes vuestro valor no la adquiere. Sí, sí, vuestras virtudes solas son capaces de combatir con suceso contra esa multitud de frenéticos que desconocen su propio interés y honor; pues jamás la libertado ha sido subyugada por la tiranía. No comparéis vuestras fuerzas físicas con las enemigas, porque no es comparable el espíritu con la materia. Vosotros sois hombres, ellos son bestias, vosotros sois libres, ellos esclavos. Combatid, pues, y venceréis. Dios concede la victoria a la constancia”3.
En pocas palabras queremos valorar la virtuosidad, espiritualidad, nobleza y rebeldía del Libertador.
3.- Contestación de un Americano Meridional a un caballero de esta Isla, conocida como Carta de Jamaica4, fechada el 6 de septiembre de 1815, es una carta dirigida en respuesta a una misiva del señor Henry Cullen5; en este documento el libertador Simón Bolívar plantea lo siguiente: a) La visión geopolítica de la América española, hecho que lo adelanta a Friedrich Ratzel (1844-1904)6; b) Características sociales y físicas de las colonias españolas, mostrando su espíritu ecologista; c) Esboza la situación política, social y las riquezas naturales con las que cuenta la América hispana; d) Las ventajas para el continente europeo, que representaba la independencia americana; e) La amenaza que representa los Estados Unidos para el continente americano. En dicho documento el Libertador muestra sus facultades de pensador y estadista; inspiración emancipadora que tal vez obtuvo del sacerdote jesuita, el peruano Juan Pablo Viscardo y Guzmán (1748-1798) en su documento “Carta a los españoles americanos”7, traducido y editado por Francisco de Miranda, hecho que resaltan varios historiadores latinoamericanos8, 9
Sucintamente nos atrevemos a destacar el talante internacionalista, estratega, visionario, politólogo, estadista y ecologista del Libertador.
4.- El discurso leído por el libertador Simón Bolívar, en la instalación del segundo Congreso en Angostura, el 15 de febrero de 1819; conocido como el discurso de Angostura.
Las circunstancias en las que surge el discurso, que es el más célebre documento político de Simón Bolívar, estaban antecedidas de intrigas, sediciones, divisiones de jefes militares y políticos y de vestigios de anarquía; recordemos que dieciséis meses antes había ocurrido el fusilamiento del General en Jefe Manuel Carlos Piar, quien estuvo incurso en los delitos de insubordinación, deserción, sedición y conspiración10.
Destaca el intelectual e historiador tachirense, Aurelio Ferrero Tamayo (1918-2004); que el Libertador vertía en Angostura, toda su energía creadora y su infatigable don de mando, para poder gobernar con dificultades a un pueblo indómito11. Imaginémonos al Bolívar dibujado en la primera biografía que realizara un tal “señor Mccomb”, fechada el 24 de septiembre de 1815 en Jamaica, publicada en el periódico “The Columbian” el 7 de septiembre de 1816 en la ciudad de Nueva York; que entre otras cosas, refiriéndose al  Libertador expresaba:
“…Es capaz de sufrir cansancios y aguantar privaciones como el más hombre [entre nosotros]. Pocos tienen mayor constancia ya sea ante el peligro o la adversidad – y su perseverancia no conoce límites: ambas cualidades de su carácter han sido plenamente comprobadas por acontecimientos de mi conocimiento. No se puede decir qué hace mejor, hablar o escribir, es excelente en las dos actividades. Entiende bien el francés, y puede traducir el Inglés Ha leído mucho y posee una excelente memoria. Cuando el señor “C” haya visto la voluminosa carta que el general le dirigió sobre el estado de Sur América” 12.
Ese es el Simón Macabeo de las Américas, ya más maduro y curtido por la adversidad. El General Simón Bolívar, debió imaginar muchas veces en su tránsito por el río Orinoco, ó en la inmensidad de las selvas de Guayana, como debía ser la Constitución Republicana, más adecuada y conveniente para la Venezuela de entonces13, 14. Por otra parte, Daniel Florencio O’Leary, dejó para la posteridad, plasmada en sus memorias, episodios en los que el más grande hombre de América, redactó el magnánimo Discurso de Angostura. En el que plantea la creación del Poder Moral; la responsabilidad del Estado por la educación de los pueblos. Deja a la posteridad su clamor de que: “Moral y luces son los polos de la República, moral y luces son nuestras primeras necesidades”. Destaca que los vicios, la ignorancia y  la tiranía, son los principales cooperantes para el fracaso de los gobiernos.
Simón Bolívar poseía la virtud de comunicarse empleando la exquisitez de su lenguaje, con campesinos, del mismo modo que alternaba con aristócratas, así lo señalan quienes estudiaron y estudian su vida y obra. Y para que el mensaje, las proclamas y los logros revolucionarios no se quedaran en palabras que se llevara el viento, ordenó un año antes la creación del “Correo del Orinoco”, y así combatir la “Gaceta de Caracas”, órgano de difusión de los Realistas15. Por esta razón, al terminar de pronunciar tan celebérrimo discurso, que su amanuense, el Capitán Jacinto Martel, había transcrito, le solicitó al Doctor Manuel Palacio Fajardo, que lo corrigiera, y Coronel James Hamilton (1770-1840), que lo tradujera al ingles para publicarlo al mundo16. Hace especial énfasis en el poder moral para que se ocupara de la educación de los niños, influenciado sin lugar a dudas por el pensamiento y la obra rousseauniana17. Insiste también, en inculcar la ética ciudadana, combatir la impunidad y el abuso de los gobernantes. El proyecto de constitución esbozado en Angostura, sirvió de base para el proyecto de constitucional boliviano de 182618.
En tan magistral alocución, donde Bolívar hace un recorrido histórico desde la antigüedad hasta su época, expresó conocimientos detallado de los postulados de Montesquieu y de Rousseau; los principios de la revolución francesa; de la estratégica militar de Gengis Kan, en fin, de la política y filosofía del lejano oriente; mostró su alta sensibilidad social; dio cátedra de historia y deleitó a la audiencia hablándole de ciudades y personajes míticos y legendarios que, a pesar de despojarse voluntariamente del mando, para que los electores escogieran al más capaz. Les mostró al mundo con una sumisión casi absoluta, sus cualidades de estadista sin parangón que lo acreditaban para emprender la misión de la libertad suramericana.
“Señor: ¡Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando ha convocado la soberanía nacional para que ejerza su voluntad absoluta! Yo, pues, me cuento entre los seres más favorecidos de la Divina Providencia, ya que he tenido el honor de reunir a los representantes del pueblo de Venezuela en este augusto Congreso, fuente de la autoridad legítima, depósito de la voluntad soberana y árbitro del destino de la Nación”19.
Con estas palabras iniciales, cargadas de virtuosismo, republicanismo, legitimación del discurso, mediante la participación de los representantes de la voluntad del soberano; pretendía el Libertador esquivar cualquier pensamiento de sedición de quienes en silencio pudieran envidiarle, por ello, en varias ocasiones durante el discurso, se somete a la voluntad del soberano, para que éste elija a quien considere el más capaz para dirigir los destinos de la patria. 
El Discurso de Angostura es un poema épico, donde el Libertador expone en su tiempo, lo que debía ser la República del futuro; aún hoy es un reto para el gobierno actual y los futuros, lograr lo planteado en el Discurso de Angostura, crear un sistema político que garantice “la mayor suma de felicidad posible, la mayor suma de seguridad social y la mayor suma de estabilidad política”20. Planteaba allí Bolívar, la arquitectura para construir las leyes y los poderes que debía tener la Constitución Federal de Venezuela. Tal vez sea aventurado señalar este momento histórico como el nacimiento del paradigma y doctrina bolivariana; pero en la historia republicana, es aquí donde por vez primera se habla de un Poder Ejecutivo, Poder Legislativo, Poder Judiciario y además, proponía un Poder Moral21. Es probable que esta idea la haya extraído del intelectual, abogado y filósofo ingles Jeremy Bentham (1748-1832), teórico del utilitarismo. Todo ello con una característica muy particular, debía ser un modelo propio que se pareciera a nuestro pueblo mestizo, por lo que sostenía:
“Tengamos presente que nuestro pueblo no es el europeo, ni el americano del norte, que más bien es un compuesto de África y de América, que una emanación de Europa, pues que hasta España misma deja de ser Europa por su sangre africana, por sus instituciones y por su carácter. Es imposible asignar con propiedad a qué familia humana pertenecemos. La mayor parte del indígena se ha aniquilado, el europeo se ha mezclado con el americano y con el africano, y éste se ha mezclado con el indio y con el europeo”22.
Puede observarse la raíz del reconocimiento y comprensión de nuestra verdadera cosmovisión; además de exaltar el mestizaje y la interculturalidad que nos caracteriza. Figurémonos por un instante, a los presentes en aquella sala, luego que el Libertador se refiriera a nuestro progenie, mirándose entre unos y otros con disimulo, el color de su piel, formas de los ojos, de los cabellos y rasgos faciales; el General los estaba sometiendo a su voluntad con el fusil de su verbo. Recordemos que él poseía el don del encanto mediante la palabra23, así como también, un alto sentido de la publicidad; que ya la había puesto en práctica cuatro años antes en la isla de Jamaica, al solicitarle al editor de “The Royal Gazeete”,  que publique una carta, “a un caballero de esta isla”24. Esto lo hizo durante todo el periodo de la lucha emancipadora25
Desde su punto de vista, los colonialistas españoles tenían razón. Bolívar era tan fatal para el gobierno español con su pluma como con su espada. La mitad de su influencia era atribuible a la palabra, a su poder de convicción. Sus amigos, sus detractores, sus enemigos: todos sintieron el magnetismo que de él emanaba cuando hablaba o escribía26. Desde luego el Libertador poseía una maestría personal única, era un comunicador y pedagogo excepcional, y un estético publicista. Destacamos que esta es una visión personal del investigador.
5.- Mensaje al Congreso Constituyente de Bolivia, enviado desde Lima, Perú, el 24 de mayo de 1826; en dicho mensaje les hace un exhorto a los legisladores a elaborar leyes justas que impidan la violación de los derechos de las personas, leyes que fueran contra la esclavitud, leyes por la libertad religiosa, la administración correcta del erario público y un poder judicial verdaderamente justo y ético; además hacer una marcada separación de la religión y la política. Mostrando de este modo su elevada condición y capacidad de legislador y jurista genial.
Los antecedentes del proyecto constitucional boliviano se originan el 9 de febrero de 1825, impulsado por el Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre; quien en esa fecha convoca mediante asamblea a los diputados de los pueblos de las provincias del Alto Perú. Sin embargo, dicho proyecto lleva el sello indeleble del General en Jefe del Ejército libertador del continente Suramericano27.  
Recordemos que la última batalla para liberar a la América hispana del yugo español, fue dirigida por el Libertador Simón Bolívar, y comandada por el General Sucre el 9 de diciembre de 1824, a quien el Parlamento peruano lo nombró Gran Mariscal y General en Jefe de los Ejércitos, por tan magnífica hazaña. En reconocimiento al titán americano que con su temple y sabiduría echó de estas tierras al imperio español, se funda una República que lleva su nombre28. En agosto de 1825, la Asamblea Constituyente de Bolivia, consciente de las facultades del Libertador, solicita secretamente sus buenos oficios para la redacción de una constitución para el nuevo estado, dicha constitución debía ser producto de las luces y la experiencia de su genio29.
Sin duda alguna, la constitución de Angostura fue el soporte documental que sirvió de base para el proyecto constitucional boliviano presentado ante el Congreso Constituyente de Bolivia en 182630. Por otra parte, podemos apreciar la marcada influencia de su maestro Simón Rodríguez y el pensamiento rousseainiano, al dedicar especial atención a la educación y al fortalecimiento de la moral pública31.
La admiración y amor que sentía el Libertador por Bolivia quedó plasmada en una carta que le enviara el 27 de junio de 1825, al político y poeta ecuatoriano, José Joaquín de Olmedo (1780-1847):
“He llegado ayer al país clásico del sol, de los Incas, de la fábula y de la historia. Aquí el sol verdadero es el oro; los Incas son los virreyes o prefectos; la fábula es la historia de Garcilazo; la historia, la relación de la destrucción de los indios por Las Casas. Abstracción hecha de toda poesía, todo me recuerda altas ideas, pensamientos profundos; mi alma está embelesada con la presencia de la primitiva naturaleza, desarrollada por sí misma, dando creaciones de sus propios elementos por el modelo de sus inspiraciones íntimas, sin mezcla alguna de las obras más extrañas, de los consejos ajenos, de los caprichos del espíritu humano, ni el contagio de la historia de los crímenes y de los absurdos de nuestra especie. Manco Capac, Adán de los indios, salió de su Paraíso titicaco y formó una sociedad histórica, sin mezcla de fábula sagrada o profana. Dios lo hizo hombre, él hizo su reino, y la historia ha dicho la verdad; porque los monumentos de piedra, las vías grandes y rectas, las costumbres inocentes y la tradición    genuina, nos hacen testigos de una creación social de que no tenemos ni idea, ni modelo, ni copia. El Perú es original en los fastos de los hombres”.32
También podemos apreciarlo en el discurso ante el Congreso Constituyente de Bolivia; aquel jueves 25 de mayo de 1826 en Chuquisaca, cuando se conmemoraban VXII aniversario del primer alzamiento popular contra la corona española en Perú, en las tierras que antiguamente fueron asentamiento de los indios Charcas; el mismo día que el Marqués de La Fayette, le obsequió un medallón que había pertenecido a Jorge Washington; hombre por el que el Libertador sentía profunda admiración33. Con inocultable emoción el Libertador Simón Bolívar señaló lo siguiente:
“Mi desesperación se aumenta al contemplar la inmensidad de vuestro premio, porque después de haber agotado los talentos, las virtudes, el genio mismo del más grande de los héroes, todavía sería yo indigno de merecer el nombre que habéis querido daros, ¡el mío!!! ¡Hablaré yo de gratitud, cuando ella no alcanzará jamás a expresar ni débilmente lo que experimento por vuestra bondad que, como la de Dios, pasa todos los límites. Sí: sólo Dios tenía potestad para llamar a esa tierra Bolivia... ¿Qué quiere decir Bolivia? Un amor desenfrenado de libertad, que al recibirla vuestro arrobo, no vio nada que fuera igual a su valor”34.
Ese amor frenético que sentía el Libertador por Bolivia, lo manifiesta hasta en sus últimos días, cuando en Santa Marta, el viernes 10 de diciembre de 1830, ordena ante José Catalino Noguera, Escribano Público, en la cláusula sexta de su testamento lo siguiente:
“Es mi voluntad: que la medalla que me presentó el Congreso de Bolivia a nombre de aquel pueblo, se le devuelva como se lo ofrecí, en prueba del verdadero afecto, que aún en mis últimos momentos conservo a aquella República”35.
Consciente de las particularidades y diversidad de la sociedad boliviana, donde la mayoría de sus pobladores eran originarios de esas tierras, pero gobernados por una minoría instruida y minada de vicios heredados de la oligarquía imperial, Simón Bolívar redactó una constitución incluyente que le rinde tributo a la diversidad, a la igualdad ante las leyes y a la inclusión; con espacio para todos los sectores sociales, pero eminentemente original, que no se apoyara en arquetipos de otras culturas distintas a la cultura de la Patria Grande, exaltando la singularidad de nuestros pueblos; tanto así que llega a compararla con el arca de la alianza para la América española, donde pueblo y ejército se fusionen, en la cual los federalistas, aristócratas y demócratas convivieran en igualdad y en perfecto equilibrio36. Donde la ética ciudadana, se erigiera como la principal virtud de gobernantes y legisladores como ejemplo de ciudadanía. Dicho proyecto de constitución contaba con los elementos que permitían al pueblo, combatir el abuso y la impunidad de quienes dirigieran el estado37. De esta manera el Libertador se anticipaba a cualquier intento de anarquía de la naciente República. En el proyecto constitucional boliviano pueden apreciarse de modo definido cuatro poderes, un poder electoral que establece las condiciones que deben tener las personas a ser elegidas para el desempeño de las funciones públicas, donde cada diez ciudadanos nombraban a un elector, de este modo ampliaría la capacidad de participación ciudadana tomando en cuenta un número importante de personas de bajo nivel académico; un poder legislativo que emana del poder electoral, responsable de hacer las leyes acorde con la constitución propuesta, pero compuesto por tres cámaras, la cámara de los tributos, la de los senadores y la de los censores. Esta última cumpliría las funciones del poder moral similar al propuesto en la constitución de Angostura en 1819, debían tener una intachable conducta, el más alto nivel educativo para velar por la moral republicana y la instrucción sobre todo de los más jóvenes38; un poder ejecutivo que contempla al Presidente vitalicio, con facultades para nombrar al Vicepresidente, pero con la aprobación del cuerpo legislativo39.
También es conocido que en 1805 el Simón Bolívar protagonizó un escándalo de negarse a besar la sandalia del papa Pío VI, como señal de sumisión ante éste. Observando desde su punto de vista, Bolívar advierte el poco respeto que debe sentir el papa por el símbolo de la religión cristiana al llevarlo en sus sandalias40. Posteriormente la situación vivida durante el terremoto del 26 de marzo de 1812 en Caracas, que fue atizado por el fanatismo religioso que le proporcionaron las autoridades religiosas del momento41. Estos episodios sirvieron de antecedentes para que el Libertador se manejara con cautela en el tema religioso. Por ello deja claro en el proyecto de constitución boliviano que la religión no debe mezclarse con la política al exponer:
“La religión es la ley de la conciencia. Toda ley sobre ella la anula porque imponiendo la necesidad al deber, quita el mérito a la fe, que es la base de la religión. Los preceptos y los dogmas sagrados son útiles, luminosos y de evidencia metafísica; todos debemos profesarlos, mas este deber es moral, no político”42.
En opinión del investigador, de este modo el Libertador Simón Bolívar coloca en tan excelso proyecto constitucional revolucionario, la religión en su justa dimensión.
6.- Mensaje a la Convención de Ocaña, fue escrito en Bogotá el 29 de febrero de 1828, reducía su exposición a la deficiente aplicación de la constitución y la corrupción de los legisladores. Dicha asamblea fue convocada el 7 de agosto de 1827, la convención se celebró entre el 9 de abril y el 10 de junio de 1828, en la ciudad de Ocaña, cordillera oriental de Nueva Granada. Esta convención, fungió como una asamblea constituyente en la que existían dos tendencias; una a favor de Francisco de Paula Santander y otra a favor del libertador Simón Bolívar. En ella el Libertador hacía un intento desesperado por mantener la unión grancolombiana apelando a lo ético:
“Considerad, legisladores, que la energía en la fuerza pública es la salvaguardia de la flaqueza individual, la amenaza que aterra al injusto, y la esperanza de la sociedad. Considerad, que la corrupción de los pueblos nace de la indulgencia de los tribunales y de la impunidad de los delitos. Mirad, que sin fuerza no hay virtud; y sin virtud perece la República. Mirad, en fin, que la anarquía destruye la libertad, y que la unidad conserva el orden.
¡Legisladores! A nombre de Colombia os ruego con plegarias infinitas, que nos deis, a imagen de la Providencia que representáis, como árbitros de nuestros destinos, para el pueblo, para el Ejército, para el juez, y para el magistrado: ¡¡¡Leyes inexorables!!!”
Lamentablemente, el resultado de dicha convención no fue el esperado para el Libertador, que en opinión del investigador, aquí se establecieron las bases definitivas para la disolución de La Gran Colombia43.
7.- Mensaje al Congreso Constituyente de Colombia, también llamado Congreso Admirable, fechado en Bogotá el 20 de enero de 1830; donde el Libertador hace un último esfuerzo por impedir la disolución de La Gran Colombia. El Libertador había convocado al congreso el 24 de diciembre de 1828 en proclama a los colombianos en la cual lo califica de: “…la sabiduría nacional, la esperanza legítima de los pueblos y el último punto de reunión de los patriotas...”44. El congreso se reunió entre el 20 de enero y el 11 de mayo, pero el resultado fue tal que el Libertador del continente suramericano, terminó separándose del mando; expresaba apesadumbrado:
“Me ruborizo al decirlo, la independencia es el único bien que hemos adquirido a costa de los demás”. Al realizar oficialmente la entrega de la magistratura expresó: "Desde hoy no soy más que un ciudadano armado para defender y obedecer al gobierno”45, 46.
En síntesis, podemos destacar que el Libertador sumergido en una profunda reflexión, señala el inmenso e incalculable costo de la libertad suramericana, y un profundo respeto por las instituciones republicanas.

1 El empleo de este término no está referido a un estereotipo, gurda relación con un concepto ideológico, político y filosófico.

2 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información.  Antología – Simón Bolívar. Pp. 57-71.

3 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. Antología. Ob. Cit. Pp. 77-85.

4 La Carta de Jamaica es una comunicación dirigida por Simón Bolívar, en respuesta al comerciante Henry Cullen, fechada el 6 de Septiembre de 1815; cuya traducción al español, se hizo en 1833. Existe un complemento de dicha carta, dirigida al editor de The Royal Gazette, de Kingston, fechada el 28 de septiembre de 1815.

5 Henry Cullen es un comerciante de origen ingles, a quien el libertador Simón Bolívar trataba de persuadir para que le apoyara financieramente para lograr la independencia de Venezuela.

6 Friedrich Ratzel, un geógrafo de origen alemán, considerado por occidente el padre de la geopolítica.

7 Carta a los españoles americanos. Escrita originalmente en idioma francés, por Juan Pablo Viscardo y Guzmán, con el título de Lettre aux espagnols americains traducida por Francisco de Miranda, quien lo publicó por primera vez en 1799, en Filadelfia, Estados Unidos.

8 Salvador Méndez Reyes, en Francisco de Miranda y México. Jornadas de Historia y Religión. Miranda, Bolívar y Bello: tres tiempos del pensar latinoamericano: memoria de VI jornada de historia y religión en homenaje a los doscientos años de la expedición libertadora de Francisco de Miranda. Pp. 137-151.

9 Georges L. Bastin y Elvia R. Castrillón  en La “Carta dirigida a los españoles americanos”, una carta que recorrió muchos caminos. Publicado en la revista: HERMENEUS No.6, 2004. Pp.276-290.

10 Germán Guía, en El voto militar de 1819: Instituido durante las vicisitudes de la Guerra de Independencia. Publicado en CONHISREMI, Revista Universitaria Arbitrada de Investigación y Diálogo Académico. [Revista en línea], Disponible en: http://conhisremi.iuttol.edu.ve/articles.php?code=PUBL000004. 

11 Aurelio Ferrero Tamayo, en Ideas del Libertador como gobernante a través de sus escritos 1813-1821. Caracas, Venezuela: Biblioteca de la Academia Nacional de la Historia. Pp. 63-64.

12 Gonzalo Palacios G., en La Primera Biografía de Simón Bolívar. Literanova.  [Página Web en línea]. Disponible en: http://www.literanova.net/index.php/la-primera-biografia-de-simon-bolivar-1.

13 John Lynch, en Simón Bolívar. Pp. 161.

14 Víctor. A. Belaunde, en Bolívar y el pensamiento político de la revolución Hispanoamericana. Pp. 128.

15 Francisco Pividal, en Bolívar – Pensamiento precursor del antiimperialismo. Caracas, Venezuela: Presidencia de República. Pp. 133.

16 Presidencia de la República. (1975). Discurso de Angostura. Caracas, Venezuela: Editorial Arte.     

17 Miguel Malagón Pinzón, en El pensamiento republicano de bolívar en el proyecto constitucional de angostura de 1819 y en la constitución boliviana de 1826.     Revista de Derecho de la División de Ciencias Jurídicas › Núm. 27, Julio 2007.

18 Rafael Caldera, en Estadista de la libertad. [Documento en línea]. Disponible en: http://rafaelcaldera.com/image/userfiles/image/libros_y_folletosRC_pdf/Estadista_de_la_libertad.pdf.

19 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. P. 115.

20 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. P. 131.

21 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. Pp. 142-147.

22 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. Pp. 129.

23 “…No se puede decir qué hace mejor, hablar o escribir, es excelente en las dos actividades. Entiende bien el francés, y puede traducir el Inglés Ha leído mucho y posee una excelente memoria. Cuando el señor “C” haya visto la voluminosa carta que el general le dirigió sobre el estado de Sur América, la verdad de estas observaciones lo convencerá, escritas muy a la ligera y que no transmiten una idea adecuada del personaje que se trata de describir aquí”. Estas fueron las palabras que quien se considera realizó la primera biografía del Simón Bolívar. En comunicación dirigida al Editor de The Columbian, fechada en Jamaica, 24 de Septiembre de 1815.

24 Alfonzo Littuma A., en Dimensión Geopolítica y Geoestratégica de Pensamiento Bolivariano. Caracas, Venezuela. Pp. 65

25 Juvenal Herrera Torres, Op. Cit. P. 175.

26 Gerhard Masur, Ob. Cit. P. 207.

27 El Libertador Simón Bolívar, ya tenía experiencia en la redacción de leyes de estas dimensiones, y ésta fue aprobada casi en su totalidad como está señalado en Antecedentes históricos de la constitución boliviana de 1826. Capítulo primero [Documento en línea]. Disponible en: http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/1/180/3.pdf.

28 En asamblea el gobierno del Perú, hizo la Ley de premios y honores a los Libertadores y fue del Presbítero Manuel Martín Cruz, la idea de crear en honor a Simón Bolívar, quien había renunciado a los poderes ilimitados que le diera el Gobierno peruano, un estado que llevara su nombre.

29 Jorge Machicado, en Derecho constitucional boliviano. Universidad San Francisco Xavier. Sucre, Bolivia, p. 18.

30 Pedro Grases, (Compilador), en Los proyectos constitucionales del Libertador. Congreso de la República, pp. 105-152.

31 Miguel Malagón Pinzón. Ob. Cit.

32 Así lo destaca Carlos Grez Pérez, en Simón Bolívar Palacios. Pp. 48-49.

33 Sally Frahm los señala en su escrito: ¿Cuál es la verdad acerca de George? Tal como son percibidos sus papeles como masón, cristiano, desde una perspectiva estadounidense y latinoamericana. [Documento en línea]. Disponible en: http://www.crossandcompass.com/washington_sp.pdf. Pp. 2-12.

34 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. P. 173.

35 Alberto Gutiérrez, en La iglesia que entendió el libertador Simón Bolívar. Universidad Católica Andrés Bello. Caracas/San  Cristóbal. Pp. 264-267.

36 Zenaida Guanchez de Méndez, en Simón Rodríguez, la Constitución de 1826 y el Proyecto de Educación Popular. Rev. Ped. [online]. ene. 2005, Vol.26, N°.75. Pp. 63-106. [Ensayo en línea]. Disponible en:  http://www.scielo.org.ve/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0798-97922005000100004&lng=es&nrm=iso.

37 Juvenal Herrera Torres. Ob. Cit. Pp. 71-81.

38 Miguel Malagón Pinzón. Ob. Cit.

39 Bolivia, Constitución de 1826 documento en línea:  http://www.ensayistas.org/antologia/XIXA/bolivar/bolivia.htm .

40 Así lo destaca el John Lynch. Ob. Cit. P. 35.

41 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. Pp. 64-66.

42 Ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información. (2009). Ob. Cit. P. 171.

43 Pedro Grases, (Compilador), en Pensamiento Político de la Emancipación Venezolana. Pp. 241-250.

44 José Manuel Restrepo, en Historia de la Revolución de la República de Colombia En la América Meridional. Besanzón, Francia: Imprenta de José Jacquin, 4 vols. Pp. 277-284.

45 Carlos Grez Pérez. Ob. Cit. Pp. 60-61.

46 Pedro Grases, (Compilador). Ob. Cit. Pp. 250-256.