JÓVENES EMPRENDEDORES RURALES

JÓVENES EMPRENDEDORES RURALES

Jany Mary Jarquín Mejía (CV)
Atlantic International Universiity

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II- MARCO DE REFERENCIA

El marco de referencia destaca la importancia del marco legal y la política institucional de la juventud en Nicaragua, así como los instrumentos que éstas proponen impulsar con respecto a la Capacitación Técnica y Formación Laboral; luego, se destaca el desarrollo de las competencias laborales en la educación rural en Nicaragua y las experiencias más destacadas de ONG´s, que han impulsado el emprendedurismo en adolescentes y jóvenes rurales tanto en Nicaragua como en otros países de Latinoamérica. Por último se conceptualizan los principales términos utilizados en esta investigación.

2.1 Diagnóstico Contextual
El diagnóstico contextual hace una reseña sobre el marco legal y la política institucional de la juventud en Nicaragua, indica los entes responsables de las políticas de capacitación técnica y formación laboral, sus principales problemas, el desarrollo de las competencias laborales en la educación rural y las principales experiencias de ONG´s que apoyan a jóvenes emprendedores rurales en Nicaragua y América Latina.
2.1.1- Marco legal y política institucional de la juventud en Nicaragua

En 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, desde entonces ha habido un gran progreso para consolidar un marco jurídico internacional que reconozca a los individuos como sujetos de derecho, en las distintas sociedades. Sin embargo, no existe un tratado universal que proteja específicamente los derechos individuales y colectivos de las personas jóvenes (OIJ, 2013).

Medio siglo más tarde, en 1999, esta misma Asamblea, proclama el Día Internacional de la Juventud, dentro del Programa de Acción Mundial para los Jóvenes, con el fin de que los gobiernos crearan programas centrados en la educación, el empleo, el hambre y la pobreza, la salud, el ambiente, la droga, la delincuencia juvenil y la violencia. UNESCO. Conferencia 12 de agosto 2004, (citado por Gamboa, M. 2009).

En Nicaragua, también es de muy reciente data, el marco legislativo y las políticas institucionales que garantizan los derechos y obligaciones de los jóvenes en edades comprendidas entre 18 y 30 años, (Abaunza, H. et. al, 2007), pudiéndose destacar las siguientes:

2001: Ley 392 de Promoción al Desarrollo Integral de la Juventud.
2001: Política Nacional para el Desarrollo Integral de la Juventud.
2002: Creación de la Secretaría de la Juventud.
2002: Reglamento de la Ley 392.
2003: Creación de la Comisión Nacional de Juventud.
2004: Plan de Acción de la Política Nacional de Juventud 2005 – 2015
2005: Nicaraguafirmó la Convención Iberoamericana de Derechos de los
Jóvenes, que entró en vigor en el 2008. En la actualidad se encuentra
en trámite la ratificación.
2007: Creación del Instituto Nicaragüense de la Juventud, su órgano oficial.
2009: Programa conjunto de Juventud, Empleo y Migración.
2012-2016: El Plan Nacional de Desarrollo Humano (PNDH) de Nicaragua,
dentro de las Políticas para la Juventud Nicaragüense, reconoce a la juventud como eje central del desarrollo de Nicaragua y
promueve la participación efectiva de los jóvenes en el proceso de transformación económica, social, política y cultural del país.

En todos los instrumentos de políticas antes mencionados, se proponen impulsar los siguientes aspectos (Gamboa, M., 2009):

Con respecto a la capacitación y formación ocupacional:

  • preparar a personas en especialidades requeridas por los diferentes sectores de la economía;
  • priorizar a poblaciones rurales, a los grupos más vulnerables, a personas con capacidades diferentes, grupos étnicos y a las mujeres desempleadas;
  • desarrollar un sistema educativo que responda a sus necesidades, estimulando las capacidades de aprender a aprender;
  • llevar la capacitación técnica hasta los centros de producción;
  • priorizar y fortalecer el bachillerato técnico;
  • transformación curricular basada en competencias laborales;
  • ampliar la oferta de formación técnica a distancia.

Sobre la política laboral plantea:

  • el desarrollo de programas de emprendimientos juveniles,
  • programas de creación de empresas y cooperativas juveniles,
  • la creación de incentivos mediante el apoyo institucional o fiscal para las empresas que fomenten la asociatividad con micro, pequeñas y medianas empresas de jóvenes.
  • el fortalecimiento a la generación de empresas familiares o no, que prioricen la mano de obra juvenil,
  • la promoción de la contratación por parte de instituciones estatales y privadas de un mínimo de un 30% de mano de obra juvenil, para la incorporación de la juventud al mercado de trabajo, que les permita obtener ingresos y mejorar sus condiciones de vida.
  • el desarrollo de planes, programas y proyectos que incluyan acciones para el acceso de los jóvenes a la propiedad, al crédito, la tecnología, la información.

2.1.2- Responsables de las Políticas de Capacitación Técnica y Formación Laboral

La educación en Nicaragua está regida por la Ley General de Educación No. 582 emitida en el año 2006, y actualmente se trabaja con el Plan Estratégico de Educación 2011 -2015.
La estructura del sistema educativo está conformado por los siguientes subsistemas:

  • Educación básica: Educación inicial, primaria y secundaria.
  • Educación Autónoma Regional (SEAR).
  • Educación técnica-profesional.
  • Educación Superior.

En la educación secundaria, a partir de los resultados obtenidos con el “Proyecto fomento de la cultura emprendedora con alumnos de educación secundaria, Nicaragua (2008-2010)”, ejecutado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) con el Ministerio de Educación de Nicaragua, se hizo la institucionalización del “Fomento de la Cultura Emprendedora” en el nuevo currículo nacional de educación. Los contenidos de Emprendedurismo se desarrollan en el marco de la asignatura de Orientación Técnica y Vocacional que se imparte en cuarto y quinto año de secundaria (AECID, 2011).

El Instituto Nacional Tecnológico (INATEC) es el encargado de la capacitación técnica en Nicaragua, para promover el desarrollo socioeconómico y mejorar la calidad de vida de la población. Ante un mercado cada vez más globalizado y cambiante, su reto es contribuir a mejorar el desempeño productivo laboral, para elevar la competitividad empresarial, así como también, fomentar y habilitar profesionalmente a la población de escasos recursos, principalmente los segmentos en extrema pobreza, para que generen su propio empleo o se inserten en el mercado de trabajo en un empleo remunerado.

Es dirigida a jóvenes de 14 a 25 años con un nivel educativo de sexto grado, noveno grado y bachilleres. Sus salidas finales son de Técnico Básico Rural, Técnico Básico, Técnico Medio y Bachillerato Técnico.

Este programa se financia con fondos del Tesoro Nacional y con fondos provenientes del 2% de la nómina que las empresas aportan al INATEC y en menor medida por cuenta propia de los alumnos.

De acuerdo al PNDH 2012-2016 del actual Gobierno, se priorizará y fortalecerá al bachillerato técnico. “Los programas escolares del INATEC pasarán al Ministerio de Educación como parte del fortalecimiento de la institución, pero INATEC seguirá con los programas para trabajadores y productores de la ciudad y del campo” (PNDH, (2008). Esto significaría que los bachilleratos técnicos que hasta ahora fueron responsabilidad del INATEC pasarán a ser competencia del Ministerio de Educación.
Otros actores involucrados en la capacitación técnica son: MARENA, MAGFOR, MIFIC, INTUR, IDR, INTA, INPYME e INJUVE.

2.1.3- Principales problemas en la Capacitación Técnica y Formación
Laboral
De acuerdo a la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID, 2011), los principales problemas que afectan la Capacitación Técnica y Formación Laboral son:

  • Falta de un modelo de Formación Profesional
  • No hay articulación con otros subsistemas
  • Poco acceso y cobertura
  • Oferta poco adecuada y en ocasiones con poca calidad

Según Castillo, M. (2008), la formulación de las políticas de desarrollo de habilidades y competencias laborales, no fue elaborada a través de consultas entre los actores pertinentes, sino que fueron diseñadas “verticalmente”, sin espacios de diálogo para la construcción y análisis de estas políticas.

A nivel central como local, la implementación de estas políticas por parte de INATEC ha sido muy débil. La continuidad de éstas ha sido afectada por la rotación de sus funcionarios, por las limitaciones presupuestarias, así como la poca autonomía de los centros de INATEC para gestionar sus propios fondos con la cooperación internacional. Por último, el impacto de estas políticas sobre la inserción laboral de sus egresados se desconoce, ya que hay muy pocos mecanismos para evaluar, dar seguimiento y mejorar los resultados.

2.1.4- Desarrollo de competencias laborales en la educación rural
La enseñanza técnica - agropecuaria, desarrolla sus contenidos pedagógicos a partir de definir las competencias laborales que requieren los jóvenes rurales para su inserción en los sectores agro-productivos, así como para generar autoempleo, a través del desarrollo de emprendimientos propios vinculados a las cadenas productivas más dinámicas de la economía nacional (Programa Talento Jóvenes Rurales, 2010).

La formación basada en competencias es un modelo que el sistema educativo ha venido adoptando poco a poco, con una variedad de propuestas, diferenciando las competencias generales que se adquieren en la educación básica y las competencias específicas en el mundo laboral.

En Nicaragua, la formación basada en competencias laborales es promovida cada vez más por ONG´s con presencia en las áreas rurales, las que vienen
siendo apoyadas por Agencias de Cooperación Internacional. A partir de los años ´90 ha venido incrementándose esta participación, abordando múltiples temas que han contribuido para fortalecer sus conocimientos y habilidades. No obstante, ha habido poca coordinación a nivel local, entre éstas, las Alcaldías y el Ministerio de Educación para potenciar esta intervención de las organizaciones de la sociedad civil, entre ellas las ONG´s dedicadas a la educación.
Entre las experiencias más destacadas implementadas por estas ONG´s, cuyo objetivo es desarrollar competencias laborales en adolescentes y jóvenes rurales, podemos mencionar las siguientes (IPADE, 2010):

  • Asociación de Educación y Comunicación “La Cuculmeca”. Dedicada al fortalecimiento de capacidades empresariales para jóvenes rurales. El objetivo que persiguen es que los jóvenes rurales contribuyan al desarrollo integral, a la autodeterminación y sostenibilidad de sus familias y comunidades, para mejorar la calidad de vida, en dos departamentos del Norte de Nicaragua. Su ámbito de acción se encuentra en La Fundadora, la Pita del Carmen y el Cuá, Jinotega.
  • Fundación Familia Padre Fabreto. Utiliza el sistema de Aprendizaje Tutorial (SAT), el cual propicia la integración de la educación con el trabajo y de los procesos educativos con los procesos de la comunidad, que les hagan capaces de asumir autónomamente los desafíos del desarrollo. Su ámbito es San José de Cusmapa, Madriz.
  • Fundación Nicaragüense para la Promoción y Desarrollo de los Centros Familiares de Educación Rural (FUNPROCEFER). Su objetivo es proporcionar a las y los jóvenes rurales, educación básica y capacitación agropecuaria práctica, adecuada a su propia realidad y necesidades, es decir, que reciban una educación y capacitación para la vida, la producción y para el trabajo. Su ámbito es San Isidro de Bolas en Managua; Telpaneca y San Lucas en Madriz y La Paz en Carazo.
  • Instituto de Promoción Humana (INPRHU). Brinda Educación Técnica Agroecológica a Través de los Centros de Educación Alternativa Rural (CEAR). Su objetivo es posibilitar a adolescentes y jóvenes campesinos de ambos sexos, sin acceso a la educación secundaria, una formación técnica – agroecológica, con visión de desarrollo sostenible, que les permita llevar adelante alternativas económicas diversificadas en sus comunidades, para mejorar sus condiciones de vida y de sus familias. Su ámbito está en Las Sabanas, San Lucas y Totogalpa, Madriz.

2.1.5- Jóvenes emprendedores rurales
En los últimos años, en América Latina se ha venido promocionando el emprendedurismo entre los jóvenes rurales como una manera de contrarrestar el desempleo juvenil, evitar la migración, mejorar su calidad de vida y alcanzar su independencia económica.
Los jóvenes emprendedores que actualmente se auto-emplean, han manifestado que sus principales limitantes para alcanzar sus objetivos son la compleja gestión administrativa, la falta de asesoría e información (OTI, 2012).

En Nicaragua, el PNDH (2012-2016) plantea algunos desafíos para la generación de empleo y autoempleo de la juventud nicaragüense, entre los que se puede destacar: “fomentar el emprendedurismo empresarial mediante la creación y fortalecimiento de 460 microempresas y cooperativas juveniles, a fin de instalar modelos asociativos, que generen la creación de autoempleos y contribuya a la disminución de la migración, acceso al empleo y disminución de la violencia”.
Así mismo, se pretende “ promover la transversalización del enfoque de género y juventudes, especialmente entre las instituciones asociadas a las políticas y acciones de empleo juvenil como garantía de formación estratégica para el aprovechamiento del bono demográfico”.
Entre los emprendedurismos rurales exitosos en Nicaragua se pueden destacar:

  • El proyecto “Jóvenes Emprendedores” de la Asociación para la Diversificación y el Desarrollo Agrícola Comunal (ADDAC), ha logrado

que los Jóvenes Emprendedores hayan impreso un efecto motivador en sus familias, en sus comunidades y en sus cooperativas.
Gracias al apoyo brindado por los padres de familia a las ideas y proyectos de estas/os jóvenes, éstos vienen ejecutando y proyectando con mucha honradez y responsabilidad sus microempresas, las que han resultado ser de mucho impacto en el proceso de establecimiento del Desarrollo Rural Sostenible en las comunidades del departamento de Matagalpa.

  • Proyectos impulsados por La Cuculmeca, Padre Fabreto, FUNPROCEFER y el INPRHU. Éste último ha apoyado la asociatividad de jóvenes emprendedores rurales, motivo de estudio de esta tesis.

El emprendedurismo rural, también ha sido impulsado con éxito en algunos países de Latinoamérica como:

México: el Programa Joven Emprendedor Rural y Fondo de Tierras, ha trabajado con grupos socialmente excluidos, logrando la conformación de agroempresas rentables y sustentables y la capacitación de los jóvenes beneficiarios (OIT, 2012).

Colombia: El Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), lleva a cabo el Proyecto Jóvenes Rurales Emprendedores, el cual promueve la gestión de proyectos de emprendimientos en jóvenes rurales, asociados a su proceso formativo, que les permiten mejorar sus ingresos, su calidad de vida y disminuir la migración y el desempleo .(Programa Talento Jóvenes Rurales, 2010).

Brasil: el Instituto Souza Cruz es una ONG que impulsa el Programa para la formación de jóvenes emprendedores rurales, (Programa Emprendedorismo do Jovem Rural - PEJR), cuya misión es formar jóvenes emprendedores en las zonas rurales brasileñas, por medio de iniciativas que desarrollen su protagonismo en la sostenibilidad de sus territorios rurales.

Argentina: Proyecto piloto para jóvenes emprendedores rurales “promoción de la cultura emprendedora” (PJER). Sus objetivos fueron:

  • Favorecer la permanencia de los jóvenes rurales, evitando su emigración, a través del fortalecimiento del desarrollo sostenible del sector primario argentino.
  • Ayudar a las instituciones rurales para fomentar políticas, programas y servicios dirigidos hacia la juventud rural.
  • Promover el emprendedurismo en los jóvenes rurales, impulsando la diversificación e innovación de sus productos para crear nuevos negocios.

2.2 Definición de conceptos:

Juventud: Es la etapa posterior a la adolescencia. En la juventud se adquieren mayores responsabilidades familiares y socio-económicas.
Actualmente no existe un consenso para definir la etapa etaria de la niñez, adolescencia y juventud. Para el presente estudio, tomando en cuenta las condiciones socio-económicas y psicológicas de nuestro contexto rural, adoptamos el rango etario de 18 a 30 años para definir al joven, como lo establece la ley 392 de Promoción del Desarrollo Integral de la Juventud, en Nicaragua y el PNUD, 2011.
La juventud no es una categoría homogénea. Se pueden clasificar por rangos de edad, por género, por aspectos culturales y étnicos, por sus niveles de pobreza, entre otros. Por lo tanto, si se desean implementar políticas públicas para éste sector, se deben de tomar en cuenta sus múltiples características. Como por ejemplo, jóvenes emprendedores (as), que están estudiando o no, auto-empleados, empleados o desempleados; indígenas; urbanos, rurales, independientes o no de sus padres, entre otros. (Andino, R. 2011) (Steel, G y Sosa, C., 2011).

Los jóvenes rurales, en la actualidad cuentan con más escolaridad que sus padres, tíos y abuelos, también son más conscientes del medio ambiente y más proclives a la innovación y al cambio tecnológico. (Spíndola, D. 2006).

Rural: Tradicionalmente, “lo rural” se concebía comparando lo urbano y lo rural, denominando siempre a éste último como más atrasado, más pobre, más inculto, dedicado a las actividades primarias, suplidor de alimentos y mano de obra barata, con baja densidad poblacional y propio para descansar y vacacionar (Vargas, C. et.al, 2010).

En la actualidad el término “rural” ha tenido una re conceptualización, donde la “nueva ruralidad” parte de centrar el análisis en lo territorial, y afirma que la economía rural es multisectorial y diversificada. Spíndola, 2002, (citado por Andino, 2011).

En nuestro caso, el concepto de “rural” en Nicaragua, solo toma en cuenta la parte poblacional. Haciendo una relación entre los términos “rural” del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE) y “urbano” del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER), podríamos inferir que “lo rural” es un poblado con menos de 15,000 habitantes, donde más del 70% de la población económicamente activa (PEA) se dedica a actividades agropecuarias (IEEPP, 2012). El Ministerio de Educación todavía no define el término ruralidad para el ámbito educativo (IPADE, 2010).
Competencias laborales: es la integración de conocimientos, habilidades y actitudes que al implementarse en un determinado contexto, producen un desempeño eficaz y responsable en las actividades laborales (Irigoin, M. y Vargas, F. 2002).

El Curriculum basado en Competencias posibilita mantener una enseñanza disciplinaria y simultáneamente prestar atención al desarrollo de Competencias Genéricas y Específicas reconocidas como vitales para la profesión. (Cocca, J. 2009).

En un estudio realizado sobre las capacidades que tiene la juventud rural en Nicaragua, se encontró que una cuarta parte de los jóvenes (24.5%) expresaron que tenían conocimientos de agricultura y ganadería, principalmente en Boaco, Estelí y El Castillo. Similar cantidad de jóvenes señalaron que conocían el desempeño de un oficio (24.4%), tales como ebanistería, belleza, elaboración de alimentos, mecánica, construcción, etc., con mayor énfasis en Jinotepe, Matagalpa y El Castillo. Del mismo modo, una proporción parecida dominaba actividades no especializadas (24%), como ayudantes de albañilería, lavar/planchar, labores de apoyo en general, principalmente en el trabajo del campo como cocina, ordeño y chapoda, mayor en Estelí y Juigalpa. Solo un pequeño grupo tenía conocimientos técnicos especializados (11.4%), tales como refrigeración, computación, electrotecnia e incluso como maestros rurales, principalmente en El Castillo y Estelí; y apenas un ínfimo grupo tenían una profesión universitaria como su principal conocimiento. (Andino, R.,2007).

Microempresa: En general, una microempresa es definida como una unidad productiva de autoempleo, con no más de 10 empleados; estas pueden dividirse en:

  • Microempresas de subsistencia, que funcionan en las casas, en el mercado o en la venta ambulante de las calles, y
  • Microempresa de acumulación simple: ya tienen un lugar de venta como tiendas, y da empleo para 3 personas o más; tecnológicamente son poco desarrolladas, cuentan con poco capital, pocos inventarios y les resulta difícil el acceso al crédito. (Lizarazo, M. 2009)

Emprendimiento:
Es la creación de nuevas empresas que generen autoempleo, la reorganización de un negocio o la expansión de un negocio existente por parte de un individuo, grupo de individuos o empresa ya establecida”. Global Entrepreneurship Monitor, GEM, 2005 (citado por Zevallos, E. (2009).

Innovación: "es la introducción de nuevos productos y servicios, nuevos procesos, nuevas fuentes de abastecimiento y cambios en la organización industrial, de manera continua, y orientados al cliente, consumidor o usuario". Schumpeter. J. (citado por Euskadinnova.net).
Sistematización: Es un proceso metodológico participativo, para reconstruir y reflexionar críticamente el proceso acontecido, en el cual intervienen los actores directos de la experiencia y se producen conocimientos y aprendizajes significativos (Berdegué, J.,2007); FIDAMERICA y PREVAL, 2008 (citado por Morgan, M. (2012).

Generación de empleo: En nuestro caso se refiere, al esfuerzo individual o colectivo que realizan los jóvenes emprendedores, para crear fuentes de trabajo, ya sean permanentes o temporales, a través de la producción y transformación de sus productos.
Calidad de vida: En nuestro caso se refiere, a la mejoría alcanzada en las condiciones de vida, al cubrir modestamente sus necesidades básicas, como son la alimentación, salud, vivienda, vestuario, educación, entre otros, como consecuencia de obtener mejores ingresos a través del emprendedurismo.
Economía local: En nuestro caso se refiere, al esfuerzo individual o colectivo que realizan los jóvenes emprendedores para producir productos de calidad, e impulsar el comercio local, generar empleo, disminuir la migración juvenil, impulsar jornadas ambientalistas, y mejorar el desarrollo sostenible del territorio.