SUJETOS SUBALTERNOS, POLÍTICA Y MEMORIA

SUJETOS SUBALTERNOS, POLÍTICA Y MEMORIA

Mariano Salomone (CV)

La convocatoria: mapear el conflicto

Tal como anticipaba, el 1 de julio del año 2007 OSA envía, a través de una cadena de e-mails, una convocatoria a “todos los interesados” a realizar una reunión para debatir sobre los terrenos del Ferrocarril Gral. San Martín 1 (ver Apéndice Documental I). La misma tiene como motivación la defensa del carácter público de esos terrenos, preocupación que despierta a partir de las “versiones periodísticas sobre un proyecto inmobiliario desarrollado por Puerto Madero”. El título de la convocatoria, “Frente al avance de emprendimientos privados”, delimita uno de los ejes del conflicto, la disputa entre lo público-privado. La invitación hecha desde OSA, presentaba algunos de los contenidos principales que organizarán el discurso en defensa de los terrenos del ferrocarril en Mendoza. Si bien el énfasis del comunicado está puesto en la necesidad de crear un espacio de debate y para ello, una “amplia convocatoria”, el texto presenta ciertos posicionamientos que serán acordados posteriormente con el resto de los/las participantes: la defensa de lo público frente a lo privado; la participación de la sociedad civil en la planificación; las “necesidades de la provincia” como criterio para el diseño de proyectos.
            En las primeras reuniones, participan algo más de 30 personas, en su mayoría, miembros de diferentes organizaciones. Entre ellas, dirigentes de La Fraternidad, el Ferroclub Trasandino, Casa Amérika, la CECA (centro cultural), OSA, el Colegio de Arquitectos de Mendoza, el Observatorio de Desarrollo Urbano y personas cuya participación no estaba encuadrada en ninguna organización (ferroviarios, artistas, arquitectos/as, vecinos/as).
En esos encuentros, como resultado del debate y el intercambio, se acordaron tanto los ejes del conflicto como algunas reivindicaciones y propuestas sobre cómo continuar la lucha. Al mes de haber comenzado las primeras reuniones, el grupo hace circular un primer documento que expresa el debate desarrollado, bajo el título “No al uso privado de tierra pública” (ver Apéndice Documental II). En el mismo se expresa la preocupación por la falta de participación en las decisiones sobre el destino de los terrenos de la Estación y por el hermetismo de los/as funcionarios/as respecto del proyecto diseñado por Puerto Madero. El programa queda sintetizado en los siguientes puntos:

  • No al uso privado de tierra pública.
  • Planeamiento y gestión participativos sobre los destinos de estos terrenos.
  • Priorizar actividades que sean de interés de toda la Provincia.
  • Registro público de proyectos e ideas y de organizaciones y personas interesadas.
  • Rescate del patrimonio histórico cultural del ferrocarril en Mendoza.

            Esta misma interpretación del conflicto se plasma en el panfleto repartido durante la primera actividad en la que participaron todas las organizaciones. En la actividad del 26 de agosto (2007), la Mansa Movida (ver Apéndice Documental III).
Estos documentos públicos, redactados colectivamente (el primer documento y el panfleto), pertenecen al campo de los discursos políticos, es decir, se presentan como palabra adversativa, por decirlo en los términos de Eliseo Verón (1987). El panfleto presenta un mapeo del conflicto que escinde el campo entre destinatarios y paradestinatarios, a los que hay que convencer, y adversarios (“frente al avance de emprendimientos privados”). En tal sentido, los enunciadores se presentan como portavoces del interés general (“recuperación de los espacios públicos”; “no al uso privado de tierra pública”) frente a adversarios que representan “el negocio privado”. Si en un primer momento ese adversario es abstracto, luego irá precisándose: Puerto Madero y algunos organismos del Estado (Municipalidad de Capital, ONABE 2, Policía de Mendoza) fueron los adversarios más “visibles”3 .
Tal como analiza Verón, el discurso político se caracteriza por una disociación estructural en relación a la construcción del Otro/a que postula (replica y supone) y a los cuales se dirige al mismo tiempo. Así como construye Otros/as negativos, a los que se enfrenta y excluye, también interpela a Otros/as positivos, a los que convoca y con los que presupone compartir una creencia, los mismos valores y por lo tanto, perseguir los mismos objetivos (un “nosotros inclusivo”): OSA y las distintas organizaciones y ciudadanos interesados en reactivar y revalorizar los terrenos del FCGSM. La convocatoria se sostiene sobre la importancia que ha tenido históricamente la Estación en “la construcción de nuestra identidad” (mendocina); la cual motiva esa preocupación por la “falta de participación provincial” sobre su destino, el “hermetismo de la información” y la “nula participación ciudadana”. Estos “componentes descriptivos” del enunciado político (ejercidos por medio de constataciones) funcionan, retomando el análisis de Verón, a la manera de balance de la situación en cuestión. Es decir, la lectura de la situación conflictiva se apoya en una mirada que vuelve la vista al pasado para articularlo al presente, otorgándole su plena “actualidad”, tiempo-ahora. Inscripción histórica que, como decía, resulta fundamental en la configuración del conflicto (volveré sobre este asunto en el próximo capítulo). Del mismo derivan los componentes prescriptivos del enunciado, pertenecientes al orden del deber: “no podemos perder-privatizar Tierra Pública”.

1 En el capítulo VII, dedicado al análisis de la experiencia de OSA, se podrá advertir que esta iniciativa corresponde a la politicidad propia de este colectivo, preocupado desde su conformación, por una articulación de las luchas que llevan adelante diferentes organizaciones sociales con vistas a superar la fragmentación en la que se encuentran actualmente.

2 En el caso del ONABE, la relación será variable a la largo del conflicto. En primer lugar, porque habrá diferentes posiciones políticas entre la dirigencia de ese organismo a nivel nacional y su responsable en la provincia; en segundo lugar, porque esas diferencias determinarán distintas posiciones asumidas por este último, el cual terminará hacia finales del 2008, participando de algunas reuniones con quienes defienden la Estación como espacio público.

3 No obstante, serán reiteradas y permanentes las dificultades que tendrá el grupo para poder identificar las diferentes posiciones dentro del campo político, esto es, conocer por ejemplo los convenios efectivamente firmados (aquellos vigentes) entre el Estado y Puerto Madero, tener acceso al “Plan Maestro” diseñado por este último y, en general, conocer cuáles son las intenciones políticas del Gobierno (nacional, provincial y municipal) sobre el futuro de la Estación y sus terrenos. Un verdadero “hermetismo” en el manejo de todo tipo de información que, en términos jurídico-formales, debería ser pública, de acceso público.