IDENTIDAD Y CAMBIO SOCIAL EN UNA COMARCA DE CANTABRIA: EL CASO DE CAMPOO

IDENTIDAD Y CAMBIO SOCIAL EN UNA COMARCA DE CANTABRIA: EL CASO DE CAMPOO

Alfonso Muñoz Güemes (CV)

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5.    Lírica popular, géneros musicales e identidad social en Campoo.

      La lírica de las canciones, junto a la narrativa o memoria oral de todo grupo social, refleja su sabiduría acumulada en torno a la naturaleza y a sí mismo; además reflejan aspectos de su estructura sociales. La lírica, son contenedoras de las simbologías asociadas a las creencias religiosas, a las prácticas litúrgicas y rituales, dando a conocer una serie de datos sobre estas mismas prácticas y la cosmovisión del grupo1 .
      La etnomusicología 2 plantea que todas las actividades sociales de los grupos humanos han estado acompañadas de alguna forma de narrativa, o de canto. Bajo esta premisa metodológica se recopilaron distintos repertorios lírico poéticos, con el fin de examinar los contextos culturales en los que se producen; además, se recogieron muestras de distintos estilos y conjuntos instrumentales y corales, que se cultivan y permanecen vigentes formando parte del acervo histórico cultural vivo de Campoo, en el ámbito urbano: rondas corales de voces masculinas; coros mixtos; una banda de alientos juvenil mixta, y una “banda de tambores y cornetas” que acompaña a los desfiles cívicos; en el ámbito rural: marzas formadas por grupos de iguales masculinos, rabel y canto como género musical masculino; pandereta y canto como género musical practicado por grupos de mozas; el canto a capella femenino; el dueto masculino formado por un ejecutante de tambor y uno de clarinete o saxofón soprano; y finalmente la música ejecutada por dos tipos de instrumento de aliento que son más característicos de la actividad de pastoreo: la música de “chifla”, y la de la gaita serrana o Alboka.
      Coincidimos con el planteamiento en torno al origen árabe del rabel3 y a la hipótesis de que sea un instrumento pastoril que fue introducido en la comarca de Campoo por los pastores de ovejas trashumantes castellanos. El rabel es un cordófono4 no temperado que se  toca por frotación de arco, de la familia de los violines; hoy en día se encuentra con distintos tamaños y denominaciones en los países balcánicos como Albania y la ex Yugoslavia y se extiende hacia los países y regiones de influencia árabe como Azerbayján y Rajasthan5 , habiendo sido introducido a Europa del Este por los países que quedaron bajo el imperio Otomano. En los países del mundo islámico que aún lo conservan, utilizan el rabel  para acompañar tanto las veladas familiares, como las ceremonias y rituales en los que se narran los mitos de origen de los distintos grupos. En Campoo, el rabel y su poética asociada han pasado, al contrario del sentido litúrgico ceremonial que posee en aquellos países, a formar parte del acervo cultural en donde la lírica rompe aunque sea momentáneamente, con los tabúes en torno a la sexualidad, haciendo de los versos “verdes” válvulas de escape para aliviar la tensión que hablar de sexo puede generar.
      Ahora bien, consideramos que el rabel no es un cordófono de la misma familia que el laúd, ya que éste último es un cordófono que produce el sonido por golpe directo sobre las cuerdas, ya sea en forma de punteo para producir melodías por medio de secuencias de notas, ya sea como base armónica produciendo acordes, que implican tres o mas notas simultáneas (tónica, fundamental y dominante). La forma del laúd lo acerca más a la familia de cordófonos de los que surgen la guitarra en su versión italiana y en la española, la mandolina y otros cordófonos de golpe directo que han caído en desuso en la Península Ibérica, pero que al haber pasado a América con el contacto colonial, han permanecido vigentes hasta el día de hoy. Tal es el caso de instrumentos derivados de la familia del Laúd como las vihuelas, las jaranas veracruzanas o el cuatro venezolano.
      Nosotros mantenemos la hipótesis en torno al género músico-poético del rabel, de que el grupo social que habitaba en los valles de la Merindad de Campoo haya sancionado su frontera social diferenciándose de los pastores de origen castellano posiblemente musulmanes, adaptando el repertorio y sobre todo la lírica, desde el ámbito de las narraciones de origen, hacia la liberación de la líbido rompiendo los tabúes sobre el sexo, entre el grupo altomedieval cristiano de Campoo.
      Siguiendo la misma línea hipotética de la creación de la frontera de grupo, diremos en cuanto al repertorio de la música femenina de pandereta y voz, que éste género es otra de las aportaciones, como el rabel, del Islam a la cultura de la Península Ibérica, ya que ha sido trasladado a los usos y costumbres del grupo social cristiano medieval de Campoo, pasando de ser única y exclusivamente de uso masculino en el mundo árabe6 , a ser un género privativo del género femenino, en el que se hace alusión al universo simbólico y cultural de éste género en la vida social del grupo.

1 Merriam, Alan P.: The anthropology of music.  Evanston, Illinois, Northwestern University Press, 1964.

2 Blacking, John: How musical is man?. Seattle University Press, 1973.

3 Rivas Rivas, Ana María: “Tiempo de canción, tiempo de creación: la representación de la identidad”, en Meridies, Nº 19-20, 1994/1995, pp. 223-237.

4 Mames, León: Atlas de música, 1. Alianza Atlas.  2ª Ed. 1987. pp. 40-41.

5 Dournon, Geneviève: Instruments de musique du monde. Collection du Centre National de la Recherche Scientifique et du Musée de l´Homme. Le Chant du Monde, LDX, 274 675, CM 251. France.

6 Merriam, Alan P.: Op. Cit. Dournon, Geneviève: Op. Cit.