El siglo XXI ha marcado con creces el desarrollo científico-tecnológico, y contrastante con ello, se agravan problemas de carácter planetario que atentan contra la propia existencia del ser humano sobre la tierra.
El constante crecimiento de la información que está hoy a disposición de los seres humanos es asombroso, lo que demanda de preparación para seleccionar, calificar y elaborar esa información y convertirla en conocimiento útil, que permita la transformación de los sujetos, su contexto de actuación y de la sociedad en que le ha correspondido vivir. Se trata, por tanto, de formar sujetos críticos y reflexivos, capaces de aportar soluciones creativas a la diversidad de problemas, lo que resulta imposible sin la superación adecuada de los profesionales responsabilizados con la tarea de educar, que significa, como afirmó de manera categórica el Apóstol, preparar al hombre para la vida.
La llamada “era del conocimiento” penetra en todos los campos en que el hombre, la sociedad y la educación como fenómeno social están presentes: lo económico, lo político, lo ideológico, lo artístico, lo científico, lo tecnológico, lo cual, a su vez, realiza el valor de la educación como producto y productora de la sociedad, y como única vía posible de formar ese hombre integral que exige la sociedad en esta revolución del conocimiento.
Es por ello, que la mejora cualitativa de la educación es preocupación prácticamente de todos los países y en especial de aquellos cuyos sistemas sociales se preocupan, en mayor o menor medida, por el bienestar del hombre. Sin embargo, en muchos casos, estas preocupaciones quedan en un plano formal y no siempre los resultados en la preparación de los docentes, como máxima responsabilidad del avance de los sistemas educacionales, dan respuesta inmediata a las necesidades imperantes.
El modelo de escuela cubana que hoy se pone en práctica en todas las escuelas del país, es fruto de las transformaciones que se introducen en los diferentes niveles de enseñanza, como resultado de la profunda revolución educacional en la que está inmerso el Ministerio de Educación, cuyo objetivo fundamental es desarrollar en los alumnos una cultura general y alcanzar su transformación como persona, a partir del saber conocer, saber hacer, saber ser, saber convivir y saber comprender, y su cumplimiento con calidad no está al margen de la superación del personal docente.
“Hoy se trata de perfeccionar la obra realizada partiendo de ideas y conceptos enteramente nuevos. Hoy buscamos, a lo que nuestro juicio debe ser y será, un sistema educacional que corresponda cada vez más con la igualdad, la justicia plena, la autoestima y las necesidades morales de la sociedad, que el pueblo de Cuba se ha propuesto crear”.1
Estas transformaciones van dirigidas a lograr la formación de un profesor integral que pueda impartir todas las asignaturas, excepto Inglés y Educación Física, en la Secundaria Básica y en la Enseñanza Media Superior, que enseñe las asignaturas por áreas del conocimiento, Ciencias Naturales, Ciencias Exactas y Humanidades.
Para alcanzar tales aspiraciones es indispensable la puesta en práctica de un sistema de superación que permita, como nunca antes, una preparación constante, consciente y sistemática, que contribuya a garantizar la dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje y provoque en los alumnos las modificaciones necesarias, al vencer los diferentes objetivos trazados para cada nivel de educación.
Los nuevos retos que tienen ante sí los profesores, sobre todo, los formados con los planes de estudio A (1977-1978), B (1982-1983) y el C (1990-1991), con una marcada especialización, pone a prueba la superación puesta en práctica y el cumplimiento de sus objetivos, para lograr que los profesores que son responsables y dirigentes de la formación de niños y jóvenes, sean idóneos, para llevar a vías de hecho la aspiración de que Cuba se convierta en el país más culto del mundo y que los resultados que se alcancen en el aprendizaje de los alumnos se destaquen, ante todo, por la calidad.
En este sentido, la superación de los docentes como sistema debe privilegiar, en lo fundamental:
La formación del docente y su profesionalización sigue siendo factor clave y urgente en Cuba. Es preciso elevar paulatinamente la formación inicial hasta alcanzar, de manera generalizada el nivel universitario, que propicie la formación científica en que prevalezca, a la vez, el carácter puramente humanista de esta profesión, así como propiciar las vías que garanticen la preparación permanente a lo largo de su vida laboral, pudiendo ser un agente de cambio.
Solucionar los problemas de la calidad de la educación significa alcanzar altos niveles de calidad en la dirección del aprendizaje, expresados en la calidad de los conocimientos de los alumnos, en el desarrollo de sus habilidades, en el desarrollo integral de la personalidad, sus cualidades humanas y su espíritu patriótico y solidario.
El significado que tiene la superación del personal docente ha sido reconocido históricamente a tal punto, que constituye una unidad de pensamiento, no solo en los pedagogos cubanos de todas las épocas, sino de América Latina y el mundo. Este tema forma parte de la prioridad número tres del Ministerio de Educación, sobre la formación inicial y posgraduada de los profesionales de la educación. La línea de investigación es la número tres (trabajo metodológico, investigativo y superación del docente). Se ubica en el programa ramal número ocho que se basa en la formación inicial y permanente del profesional de la educación.
En tal sentido, ha sido abordada por diferentes investigadores como objeto de estudio, y se han aportado importantes resultados científicos que han permitido enriquecer la teoría acerca de la superación como vía esencial para mejorar el desempeño de los profesionales de la educación. Entre estos investigadores se encuentran J. Añorga(1995), L.García(1996), A. González(1996), N. Valcárcel(1998), N Levy(1999), M. Rojas(2001), A. Roca(2001), L. Castell(2002), A. Maturel(2002), C. Palma(2007), L. Suárez(2007), C. Torres(2007), entre otros, los que han aportado diferentes alternativas para la superación de todos aquellos que de manera directa o indirecta responden al proceso de enseñanza-aprendizaje, ya sean metodologías, alternativas didácticas y metodológicas, modelos, estrategias, sistema de acciones, entre otros.
Entre las principales investigaciones desarrolladas en Cuba relacionadas con el tema, se destacan los trabajos de J. Añorga (1995), y el centro de estudios sobre la Educación Avanzada (1994, 1995, 2001, 2004), que aportan resultados en relación con los principios y las vías de la superación.
M. Levy (1999), propuso los procesos de la gestión de recursos humanos para docentes universitarios. La investigación de A. Maturel (2002), ofreció una estrategia para la superación de los docentes de preuniversitario, L. Suárez (2007), formuló una alternativa metodológica para la formación de los docentes de las Sedes Pedagógicas. Por otra parte C. Palma (2007), elaboró una estrategia didáctica para fortalecer la preparación del tutor en el componente investigativo y la más reciente realizada por C. Torres (2007), en que se brindó un modelo de superación al profesor a tiempo parcial de la Facultad de Profesores Generales Integrales de Secundaria Básica.
A pesar de los esfuerzos realizados en la superación para lograr mejoras sustanciales en el proceso de enseñaza-aprendizaje, aún no se satisfacen los requerimientos que, de forma inmediata, exige una adecuada y actualizada preparación científico- pedagógica. La situación que se refleja ha sido corroborada mediante diagnósticos realizados en diferentes cursos escolares (2005-2006, 2006-2007, 2007-2008), los resultados de operativos de calidad, diagnósticos realizados para elaborar los diseños de superación, visitas de inspección y de ayuda metodológica y la experiencia como asesor de superación del autor al comprobar que:
Orientar la superación garantizando que los objetivos para lo que fue diseñada se cumplan, permite que individualmente los profesores estén mejores preparados para solucionar los problemas de la escuela, de la familia y la comunidad; tomar decisiones y desarrollar estrategias para mejorar la calidad del aprendizaje de los alumnos y en general de la educación.
Ante las nuevas transformaciones en la educación, resulta imprescindible e impostergable mejorar los sistemas de superación diseñados en los diferentes niveles de educación, por un lado se ponen en práctica nuevos planes de estudio para la formación del docente y por otro, hay que repensar la superación para ese profesor en ejercicio formado durante años en el principio de la especialización, y que hoy le resulta muy difícil dirigir, con éxito, el proceso de enseñanza-aprendizaje, ya sea integralmente o por área del conocimiento.
Existe una contradicción entre el nivel real de preparación alcanzado por los docentes y la manera en que hoy debe dirigir el proceso de enseñanza-aprendizaje, sobre todo de aquellas asignaturas para las que no se preparó.
En consecuencia, se asumió como problema de investigación: ¿Cómo perfeccionar la superación individual de los docentes de preuniversitario del municipio Majibacoa?
Fue seleccionado como objeto de investigación: proceso de la superación continua de los docentes del municipio Majibacoa y como campo de acción: la superación individual de los docentes.
El objetivo que guió la investigación fue:
Proponer una alternativa metodológica para perfeccionar la superación individual de los docentes de preuniversitario del municipio Majibacoa.
En calidad de idea científica a defender se planteó la siguiente:
Es posible, perfeccionar la superación individual de los docentes de preuniversitario del municipio Majibacoa, provincia Las Tunas, mediante una alternativa metodológica si esta:
Para el cumplimiento del objetivo de la investigación fue necesario cumplir las siguientes tareas de investigación:
Para desarrollar las tareas planteadas, se utilizaron los siguientes métodos de investigación.
El aporte está en la alternativa metodológica para perfeccionar la superación individual de los docentes, lo que reviste gran importancia considerando que es hoy la superación la vía por excelencia para lograr un profesor preparado en correspondencia con las transformaciones actuales producidas en la educación.
La novedad de la presente investigación está dada en concebir la superación individual de los docentes, a partir de sus intereses y necesidades cognitivas y afectivas – motivacionales y conjugar, de manera sistemática y sistémica, las diversas formas en que el docente puede superarse.
La importancia y actualidad del presente trabajo radica en que la búsqueda de un sistema de superación que garantice mejorar la actuación de docentes y alumnos, está en correspondencia con la urgente necesidad de preparar a los docentes para darle solución a la diversidad de problemas profesionales que hoy enfrentan, y que se relacionan con las profundas transformaciones que en la educación y la sociedad se producen.
1 Fidel Castro Ruz: Discurso pronunciado en el inicio del curso escolar 2002-2003, Periódico Granma, 5 septiembre de 2002, p.5.