HABILIDADES INVESTIGATIVAS DE LOS EGRESADOS DEL POSTGRADO EN CIENCIAS SOCIALES,
EN EL CONTEXTO DE LA EDUCACIÓN EN LÍNEA

HABILIDADES INVESTIGATIVAS DE LOS EGRESADOS DEL POSTGRADO EN CIENCIAS SOCIALES, EN EL CONTEXTO DE LA EDUCACIÓN EN LÍNEA

Octavio Reyes López*
Universidad Continente Americano

Volver al índice

Marco teórico situacional

El denominado marco teórico situacional corresponde a la descripción completa de la entidad u organización en donde se planea hacer dicha investigación, pudiendo tratarse de personas físicas o morales, sobre las que se desarrollará nuestra investigación, esto con el propósito de darle el enfoque situacional a nuestro análisis y evitar el hacer generalizaciones que puedan ser tendenciosas, a esta revisión de literatura se le conoce como el Sujeto de Estudio en un proceso investigativo (Reyes, Blanco y Chao, 2014).
De acuerdo con Castells (2007), en la era que nos ha tocado vivir es posible compartir información y generar conocimiento de una forma no imaginada anteriormente por la humanidad, cuya característica cultural es la movilidad de personas, datos y capitales, lo cual demanda de los individuos una enorme capacidad de adaptación y amplitud de funciones, tal es el caso del proceso educativo que hoy nos convoca, en donde los profesores y estudiantes requieren demostrar un conjunto de competencias, que entre otras implica el saber trabajar juntos en un nuevo esquema a distancia.
En este sentido, las modalidades educativas surgen a partir del uso de TIC, en particular de internet, lo que representa una oportunidad potencial de aprendizaje para generar cambios en la concepción de la enseñanza y el aprendizaje tradicional, así como en la identidad de los docentes y los estudiantes, junto con los cambios en el tipo, uso y acceso a los materiales y, en consecuencia, transformaciones notorias en las prácticas de profesores y alumnos (Islas, 2014 y Marín, 2010).
La presencia de tecnologías en el mundo ha posibilitado, entre otros aspectos, múltiples formas de enseñar y aprender, combinando espacios y tiempos síncronos y asíncronos. El futuro se visualiza extendiendo las opciones de aprendizaje a otros escenarios que no sean los típicos escolares; esto, gracias a la miniaturización e integración de las tecnologías y el desarrollo de soportes móviles y las conexiones inalámbricas; ello apunta a que los alumnos puedan seguir avanzando en su formación accediendo en todo momento a través de dispositivos móviles a documentos, portafolios, foros, chats, plataformas, etcétera (Coll y Monereo, 2008).
Llorente (2008) llevó a cabo un estudio en el que se valoraron las actitudes de los estudiantes de la Universidad de Sevilla que participaban en un proceso formativo mixto; para lograr el objetivo, se aplicó un instrumento validado tipo cuestionario. Este trabajo reveló que los estudiantes mostraban una actitud positiva hacia el uso de la Internet como recurso para la formación y lo calificaban como útil, necesario e informativo, para integrar una comunidad virtual de aprendizaje (Meirinhos y Osorio, 2009).
En la opinión de Zapata (2013), para implementar el aprendizaje en línea (e-Learning) es necesario contar con dos apoyos básicos: I) un modelo educativo que de soporte y fundamentación al proceso enseñanza–aprendizaje en línea; así también II) un esquema de parametrización para evaluar la calidad en la educación virtual.
Esto implica que se requiere de un sistema de principios, políticas, actividades, metas y criterios que den estructura, secuencia y sentido a los procesos, técnicas y materiales que coadyuvan para alcanzar la calidad en los ambientes virtuales de aprendizaje (Ferrándiz, Prieto, Ballester y Bermejo, 2004).
Según Stephenson y Yorke (1998), se requiere incorporar cambios sustantivos en las prácticas de enseñanza-aprendizaje en el sector educativo, para lo cual es necesario:
a. Pasar de una educación basada en los contenidos, a una educación que integra conocimiento aplicado y habilidad para resolver problemas.
b. Un aprendizaje flexible, que favorezca la experimentación.
c. Aprovechar las oportunidades del extended blended learning, que combina el uso de plataformas de aprendizaje, con la enseñanza cara-a-cara y con el aprendizaje basado en proyectos, que ayudan a estimular un aprendizaje contextual y orientado a la acción. Se trata a fin de cuentas, de que los estudiantes de la educación virtual no solo sean consumidores de información, sino productores de información y constructores de conocimiento.
Osorio y Duart (2011) investigaron la interacción en ambientes de aprendizaje híbridos con base en una metodología cuantitativa fundamentada en el análisis de actividades educativas, de las discusiones virtuales asincrónicas, de la representación de las interacciones y la relación entre la interacción, el rendimiento académico y la transferencia de tecnología.
Adicionalmente existe otra modalidad en línea denominada b-learning, lo cual es traducido como aprendizaje mixto y hace referencia al uso de recursos tecnológicos no presenciales y presenciales para optimizar los resultados de la formación escolar. Este aspecto será abordado como el contexto de estudio para la investigación en curso.

*************************

“Las revoluciones científicas consisten en que un programa de investigación
reemplaza a otro (superándolo de modo progresivo).
Esta metodología proporciona una nueva reconstrucción racional de la ciencia”

Imre Lakatos

“Los libros no están hechos para pensar, sino para ser sometidos a investigación”

Umberto Eco


“El bien común,
no es solamente lo que salva la coexistencia de los hombres en sociedad,
ni únicamente lo que permite una convivencia comunitaria, sino
lo que ennoblece y dignifica la vivencia de cada hombre.
El bien común no es el bien exigible a las personas por la sociedad;
es el bien exigido a las personas en virtud de su condición de personas”.

Adolfo Muñoz Alonso