MODELO DE GESTIÓN HUMANA PARTICIPATIVA EN LA TRANSFORMACIÓN ORGANIZACIONAL DEL COLEGIO UNIVERSITARIO DE LOS TEQUES “CECILIO ACOSTA”  (CULTCA) A LA UNIVERSIDAD POLITÉCNICA TERRITORIAL DE LOS ALTOS MIRANDINOS “CECILIO ACOSTA”  (UPTAMCA)

MODELO DE GESTIÓN HUMANA PARTICIPATIVA EN LA TRANSFORMACIÓN ORGANIZACIONAL DEL COLEGIO UNIVERSITARIO DE LOS TEQUES “CECILIO ACOSTA” (CULTCA) A LA UNIVERSIDAD POLITÉCNICA TERRITORIAL DE LOS ALTOS MIRANDINOS “CECILIO ACOSTA” (UPTAMCA)

Flavio Orestes Salerno Mata
Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada Nacional

Volver al índice

Evolución de las organizaciones en el siglo XX

En este mismo orden de ideas, se presenta ahora, el resumen de los modelos organizacionales, teniendo en cuenta el pensamiento gerencial.

Modelo gerencial del siglo XXI

Lo hasta aquí considerado en este aparte, muestra un fragmento del senda organizacional y gerencial andado, lo que no puede apreciarse de manera lineal ni calmado, sino por el contrario, lleno de contradicciones de diversas índoles. Además, cuando lo tratado se analiza a la luz de las relaciones laborales y se tiene en cuenta lo convulso que en algunas épocas se han conformado, dado que el patrón como el trabajador, se apreciaban como antagónicas pues proponían someter o imponerse uno al otro, asunto aún por superar.
Es así como producto de ese enfrentamiento y dado el carácter mediador del estado, por medio de sus instituciones, y según la orientación política de este, se han promovido y promueven dispositivos legales orientados a garantizar el desarrollo humano, máxime cuando a los trabajadores se les aprecia como el débil económico en la relación laboral. No obstante, el avance de la vinculación en el mundo del trabajo, tiene presente, además de las experiencias particulares de lo local, igualmente se ve impactado por el pensamiento planetario, y que hoy cuenta con ejes fundamentales como la profundización de la democracia, llevada al mundo del trabajo bajo diversas concepciones a razón del modelo organizacional, el nivel de desarrollo, las formas de implementar, el grado o nivel en que se aplica, la intensidad y otras cuestiones que serán tratadas en la próximas líneas.
En resumen, se podría indicar que, la evolución de las organizaciones y con ella la gerencia, han debido procurar y aplicar métodos y técnicas que le permitieran en primer lugar la subsistencia, como modo de adecuarse a las nuevas realidades, en su mayoría provenientes de su entorno, asunto inacabado, tocando ahora vislumbrar las nuevas realidades por afrontar.
En el caso de la realidad organizacional y gerencial del CULTCA y su tránsito a la UPTAMCA, preciso es destacar que tal transformación viene mediada por una decisión externa a la misma institución y enunciada por el expresidente Hugo Chávez (2008) en el marco de la misión alma mater, lo que impuso a las autoridades, en el caso del CULTCA y su comunidad universitaria, iniciar un tránsito desconocido o al menos no precisado, asunto medianamente aclarado con el decreto de creación de la UPTAMCA como será manifestado.
Esta institución universitaria, fundada en la década de los 70, bajo la tutela del Estado venezolano, que a partir de la reforma legal creo un sistema paralelo, por una parte las universidades (autónomas y experimentales) y por el otro, los institutos y colegios universitarios, aún forma parte del estamento estadal, aplicando como forma organizacional la estructura piramidal y la división del trabajo, en resumen, teoría de la burocracia, pues se siguen procesos estandarizados y aplicación formal de normas y control de decisiones y procedimientos, dando prioridad a la rutina administrativa sobre la académica, a pesar de ser ésta (la academia), su función principal.
La toma de decisiones, se encuentra concentrada en poca manos, adecuada y subordinada a los lineamientos del ente ministerial, a pesar que en su enuncio de transformación se plantean forma organizativa diferente, incluyendo lo atinente a instancias de participación de los miembros de la comunidad universitaria, patentándose si, consideraciones de orden político partidista de manera prioritaria, lo cual cercena posibilidades ciertas de involucramiento en su gestión de toda la comunidad universitaria.
Sin embargo, el ya considerado decreto de creación, estipula varios elementos a tener en cuenta y que posibilitan la transformación del modo de organización y de gestión, que necesario es potenciar.
Como objetivo, el Decreto de creación de la Universidad Politécnica Territorial de los Altos Mirandinos (UPTAMCA ob. cit.), la concibe como encargada de: “[...] la generación, sistematización y apropiación social del conocimiento y la innovación [...]”, lo que permite avizorar que la prioridad está en el desarrollo académico, es decir; la docencia, investigación y extensión, por encima de la administración, la cual debe apuntar lo académico.
Asimismo, contempla el referido decreto en sus considerandos, que la transformación pasa por la generación de novedosos modelos de gestión, lo que al ser concebida como una universidad de carácter experimental, da sustento al ensayo de innovadoras formas de gestión, pudiendo al mismo tiempo contemplar nuevas estructuras académicas y administrativas, para lo cual, como lo plantea uno de los considerandos de su creación oficial, se realice una profunda evaluación y discusión de su realidad interna y su vinculación con su territorio, debiendo tener en cuenta su patrimonio inmaterial como institución arraigada en su zona de influencia.
Continuando con el estudio de la norma de creación, se destaca lo referido a la elaboración, ejecución y control del presupuesto participativo, en donde se incluye la participación del equipo docente, además de poder generar sus propios reglamentos de organización y funcionamiento, empero, debe ser puesto al reparo o al reproche  de las autoridades ministeriales para su aprobación, es decir; que restringe la tantas veces enunciada participación, a la consideración de la superioridad, además de no contemplar, hasta ahora, formas para la elección de sus autoridades.
Esto atenta con lo que más adelante será considerado como la democracia institucional  -participación laboral-, que en el contexto venezolano de inicios del siglo XXI, se ha denominado como la participación protagónica que se incluye en la Constitución venezolana (Ob. cit.) y otros instrumentos legales.
El protagonismo a decir de (ANDER-EGG, Un puente entre la escuela y la vida, 2005): “[...] supone participar y participar implica tomar decisiones en aquellas cosas que son importantes y que nos conciernen [...]” (p. 74), lo que implica, asumir el destino que, como miembros de una comunidad universitaria corresponde en el caso de los docentes, para lo que se debe concordar el futuro a construir de manera prospectiva, lo que el mismo Ander-Egg (Ob. cit.), expone como la necesidad de “[...] salir a su encuentro haciéndolo” (p. 83).
Este es parte del reto que la comunidad universitaria (CULTCA–UPTAMCA) tiene planteado a la luz de su transformación, teniendo en cuenta el entorno y su contexto, de manera de propiciar una gestión democrática que permita evolucionar los modos de relacionamiento interno, abriendo espacios hacia el ensayo de un modelo de gestión participativa, que permita aprehender de sus propias experiencias (aprender descubriendo), teniendo en cuenta el entorno en el que se desenvuelve y perfeccionando cada vez más el modelo que desde dentro de ella misma se genera a partir de su historia, de los modos de ser, de pensar y actuar como expresión cultural, como lo plantea Lovera (1996) en Murillo (Ob. cit.)
La universidad tal como está no puede cumplir su misión de producción de conocimientos, de formación de profesionales de alto nivel y difusión del saber y la cultura, ya que para poder hacer bien lo que le toca, se requieren reformas radicales, pero que ellas no parten de cero, cuentan con logros y potencialidades, punto de partida para una universidad de nuevo tipo que dé respuesta a los retos del presente y del futuro. (p. 102)

Aunque será en las próximas líneas que se desarrolle a profundidad lo concerniente a la democracia institucional, aquí se enuncia como expresión plural y al mismo tiempo de cotidiano actuar, conforme al modelo de sociedad, que debe practicarse en todas sus organizaciones, y como forma de profundización e ir al génesis de la gestión pública y social que se materializa en la participación efectiva (protagónica), lo que permitiría el asumir responsabilidades individuales y colectivas, asunto que requiere ser tomado desde la cotidianidad por parte de las autoridades y la comunidad toda en su forma de relacionarse y comunicarse.
En resumen, cuando se conjuga la realidad descrita del CULTCA–UPTAMCA con el devenir de las organizaciones del siglo XX, permite ubicarle como una institución fundamentalmente burocrática que se destaca en la designación y gerencia de sus autoridades, en condición de delegados o representantes ministeriales que procuran la transformación desde su cosmovisión, sin muchas veces, socializar con la comunidad universitaria, con lo cual se resisten a una gestión humanista o neo-humanista centrada en el reconocimiento, la inclusión y la participación.
De ahí que, la transformación a un modelo de gestión participativo, amerita un gran esfuerzo cuali-cuantitativo para superar el arquetipo gerencial donde se concentra el poder en la gerencia. Afortunadamente, al ser una institución de educación superior, ella contiene entre sus haberes, un cuerpo docente con formación académica y experiencia profesional en modos gerenciales contemporáneos, siendo al mismo tiempo, un imperativo social, exigir la generación y socialización de nuevos conocimientos y experiencias enriquecedoras, lo que potencia su transformación.