SUJETOS SOCIALES, CONFLICTOS Y GESTIÓN DE LOS SERVICIOS DE AGUA POTABLE, ALCANTARILLADO Y SANEAMIENTO EN EL

SUJETOS SOCIALES, CONFLICTOS Y GESTIÓN DE LOS SERVICIOS DE AGUA POTABLE, ALCANTARILLADO Y SANEAMIENTO EN EL "ESPACIO SOCIAL-NATURAL" DE LA CIUDAD DE PUEBLA 1984-2010

Rafael de Jesús López Zamora (CV)
Benemérita Universidad Autónoma de Puebla

2.4.-Indicadores de gestión de los servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento

En México la Comisión Nacional del Agua  (CNA) y los demás Organismos  que norman el subsector agua potable, alcantarillado y saneamiento, pero también organismos internacionales, reconocen una serie  de índices o indicadores a través de los cuales  evalúan el desempeño de los Organismos Operadores de los SAPAS del país, ya sea con el propósito de captar información estadística, ejercer cierto control u otorgar recursos financieros a través de los programas federales y estatales de manera selectiva, dependiendo del cumplimiento de ciertos requisitos que se imponen.
A continuación y para el propósito que nos ocupa se expone el comportamiento de los indicadores que tienen que ver con la gestión y desempeño del SOAPAP en dos momentos, 2005 y 2010, años para los que se cuenta con información confiable al respecto. Para realizar el ejercicio, se seleccionó una muestra de operadores de ciudades capitales mexicanas, con características similares, con información de sus indicadores de desempeño para los años 2005 y 2010 que nos permite hacer un análisis que muestra el desempeño del SOAPAP en la ciudad de puebla en ese período y al mismo tiempo permite realizar un análisis comparativo entre organismos operadores de las ciudades consideradas respecto al de la ciudad de Puebla, a fin de referenciar su desempeño. Para tales efectos abordamos el análisis en dos partes: a) los indicadores de gestión propiamente dichos (Tabla IV.14), y b) los indicadores de eficiencia financiera (Tabla IV.15).

2.4.1.-Indicadores de gestión

Los indicadores de gestión están relacionados con la medición y el desempeño de los principales procesos de extracción, conducción, distribución, pérdidas, tratamiento de aguas residuales, de comercialización, de cobranza y tarifario, entre otros, en el transcurso de un año. En éste apartado, además de un referente a nivel de América Latina y del promedio nacional, las ciudades consideradas son: Puebla, Oaxaca, Distrito Federal, León, Veracruz, Monterrey, Guadalajara, Aguascalientes, San Luís Potosí Saltillo, Torreón y Tijuana (Tabla IV.14). Los indicadores que se consideran son: agua no contabilizada, eficiencia física, eficiencia de cobro, micro medición, índice laboral y eficiencia global.

Agua no contabilizada (ANC)

El agua no contabilizada corresponde al volumen de agua potable distribuida por el organismo operador (OO) que no se factura  y se expresa como porcentaje del agua que es extraída de las fuentes, para el caso que nos ocupa, de acuerdo con la información observamos que para Puebla, el ANC pasa de representar el 37.3 por ciento en el año 2005 a un 41.6 por ciento en el año 2010. Éste aumento considerable reflejado en el índice obedece a la reducción de los volúmenes de agua facturada derivada de los errores que ocasiona el subestimar  los volúmenes distribuidos en cuota fija y que se manifiestan a partir de que se transita hacia el tipo de servicio medido, lo que significa que los datos se vuelven más reales y por lo tanto dejan ver más claramente las ineficiencias; significa que actualmente por ese concepto se pierde el 41.6 por ciento del agua que se extrae, lo que equivale a 47.4 Mm3 aproximadamente, principalmente por pérdidas en las redes de conducción y distribución y por tomas clandestinas.
De acuerdo con la información del comparativo con el resto de las ciudades consideradas (Tabla IV.14), se observa que el índice más bajo fue el de Tijuana con el 19 por ciento en 2005 y 2010; seguido por Saltillo con el  28 por ciento en 2005 y 25 por ciento en el año 2010; Monterrey con el 33 y el 29 por ciento respectivamente; Guadalajara con el 32 y el 34 por ciento y Veracruz con el 33.5 y el 24 por ciento. El índice más alto lo registran Torreón con el 54 en 2005 y el 48 por ciento en 2010; el Distrito Federal con 52.8 y 43 por ciento respectivamente. Así mismo se observa que la ciudad de Puebla alcanzo el 41.6 por ciento en 2010, encontrándose aún ligeramente por debajo del promedio nacional (CNA, 2011)y de la media estimada para América Latina, pero por encima del promedio de la muestra del comparativo.

Eficiencia física (EFIS)

Este indicador expresa en términos porcentuales el volumen facturado sobre el volumen extraído de agua  y como su nombre lo dice, mide la eficiencia del organismo prestador del servicio, para nuestro caso observamos que dicho índice paso del 62.7 por ciento en 2005 a un 58.4 por ciento en el 2010. Como se puede apreciar, dicho resultado confirma el comportamiento inverso del indicador anterior ya que los dos indicadores están ligados y su comportamiento es inversamente proporcional el uno respecto al otro.
El comparativo del índice de eficiencia física para el año 2005 y 2010 con los demás organismos operadores refleja que el más alto y por lo tanto más eficiente fue el de Tijuana con el 81%; seguido por Saltillo (72 y 75 por ciento); Veracruz con el 76 por ciento en 2010 y Monterrey con el 71 por ciento en 2010. El índice más bajo lo registran  Torreón, San Luís Potosí, D.F. y Puebla que registra una fuerte caída de 2005 a 2010. En este indicador, para el año 2010, Puebla se ubicó por encima de la media estimada para América Latina y del promedio nacional, pero muy por debajo del promedio de la muestra (Tabla IV.14).

Eficiencia de cobro (EC)

Expresa la eficiencia en la recaudación por concepto de los servicios que presta el operador, expresa en porcentaje el monto de los ingresos recaudados por la prestación de los servicios respecto al monto total facturado en el año. De acuerdo con la información se observa que los índices más elevados los registran Saltillo, Tijuana, Aguascalientes y León. Los índices más bajos de cobro se registran en Oaxaca y Puebla.  En este indicador, para los años 2005 y 2010, Puebla se ubicó muy por debajo del promedio nacional y del promedio de la muestra sólo con el 53 por ciento (Tabla IV.14).

Cobertura de micromedición (MIC)

Expresa el avance en términos porcentuales de tomas domiciliarias incorporadas al servicio medido respecto al total de tomas, en términos globales la información refleja que en puebla de contar con el 36.8 por ciento en servicio medido en 2005 en 2010 el índice cayó al 27 por ciento. Los índices más elevados los alcanzaron León, Saltillo, Tijuana y Monterrey, los índices más bajos fueron de Veracruz y Puebla. Esta última se ubicó muy por debajo de la media de América Latina y de los promedios nacionales (Tabla IV.14).

Índice laboral (IL)

Este indicador expresa el número de empleados en el Sistema Operador por cada mil tomas activas, mismo que pasó para Puebla de 3.9 empleados por cada mil tomas en 2005 a 2.6 en 2010, este comportamiento obedece al aumento del número de tomas durante el período y no tanto a la disminución de la nómina, medida que se toma hasta el 2011 (Tabla IV.14).

 

Del análisis comparativo resulta en primer lugar Saltillo con 1.8 empleados por cada mil tomas, seguido por San Luís Potosí con 2.5, Puebla (2.6) y Aguascalientes con 2.7. Puebla se ubica en este indicador por debajo de la media para América Latina y muy por debajo del promedio nacional y del promedio de la muestra (Tabla IV.14).

Eficiencia global (EG)

Este indicador nos da una medición global de la eficiencia del sistema y resulta del producto de la eficiencia física con la eficiencia comercial o de cobranza, mismo que resulta muy bajo para nuestro caso y paso del 42 por ciento en 2005 a un 31 por ciento en 2010. El comparativo del índice de eficiencia global para el año 2005 y 2010 con los demás organismos operadores refleja que los más altos y por lo tanto más eficientes fueron solo Tijuana que pasó del 63 por ciento en 2005  al 74.8 por ciento en 2010 y Saltillo (62 y 75 por ciento). El índice más bajo lo registran, en primer lugar Puebla con solo el 31 por ciento, seguido por Oaxaca (33) y San Luís Potosí (35) en 2010.  En este indicador tan importante y significativo, Puebla se ubicó para el año 2010 muy por debajo del promedio nacional y del promedio de la muestra (Tabla IV.14).

2.4.2.- Indicadores de eficiencia financiera

Los indicadores de eficiencia financiera se refieren y relacionan los egresos totales con el número de tomas domiciliarias, volúmenes de agua extraída y recaudada, así como los ingresos por prestación de servicios con número de tomas y volúmenes de agua extraída y recaudada  y nos proporcionan la medición de los costos e ingresos unitarios del sistema operador de los servicios de agua potable. En éste apartado, además de hacer referencia a un promedio nacional, las ciudades consideradas y de las que se contó con información fueron: Puebla, Veracruz, Torreón y Tijuana (Tabla IV.15). La información se refiere al comportamiento de los siguientes  indicadores para  los años 2005 y 2010: costo unitario por toma, costo unitario de producción, ingreso unitario por toma, ingreso unitario de producción promedio y eficiencia financiera.

Costo unitario por toma (CUT)

Relaciona los egresos totales con el número de tomas activas, se expresa en pesos y nos muestra el costo unitario por toma para el Sistema Operador, los resultados fueron: para el 2005 el costo de la toma para el SOAPAP  (Puebla), fue de 3,398 pesos y para el año 2010 pasa a ser de 2,245 pesos. Este dato resulta interesante cuando lo comparamos mas adelante con el ingreso unitario por toma, por lo pronto veamos nuestras el comportamiento de los operadores en las tres ciudades seleccionadas donde el CUT fue, de menor a mayor el siguiente: Veracruz 1,724 pesos en 2005 y 2,118 pesos en 2010; Torreón 1,911 pesos en 2005 y 2,352 pesos en 2010 y Tijuana con 2,946 y 3,196 pesos en el primero y segundo años considerados, respectivamente. Como se puede apreciar en la Tabla IV.15 el CUT de la ciudad de Puebla para los dos años se encontraba por encima del promedio nacional, aunque en 2010 se ubica por debajo del promedio de la muestra.

Costo unitario de producción (CUP)

Relaciona los egresos totales con el volumen de agua extraída en metros cúbicos, se expresa en pesos y nos muestra el costo unitario de producción por m3 para el Sistema Operador en el período. Los datos nos muestran que para el 2005 el costo por metro cúbico fue de 10.5 pesos y en 2010 se ubico en 10.8 pesos. Veamos nuestro punto de referencia: el SOAPAP que en 2005 registró un costo unitario de producción por m3  de 10.5 pesos  sólo es superado por el Organismo Operador de la ciudad de Tijuana que registró un costo de 11.9 pesos por m3 ya que el de las demás ciudades están por debajo. El CUT de Puebla está muy por encima del promedio de la muestra y más aún del promedio nacional que fue de 3.7 pesos en 2005 y de 5.5 pesos en 2010 (Tabla IV.15).

 

Ingreso unitario por toma (IUT)

Este indicador relaciona los ingresos obtenidos por la prestación de los servicios con el número de tomas activas del Sistema, se expresa en pesos por toma y para el 2005 fue de 1,815 pesos y para el 2010 bajo a de 1,466 pesos por toma, lo que comparado con el costo unitario por toma en los dos años refleja una gran diferencia. Comparativamente observamos que el IUT de la ciudad de Puebla estuvo por encima del promedio nacional pero por debajo del promedio de la muestra y por debajo de las tres ciudades consideradas (Tabla IV.15).

Ingreso unitario de producción promedio (IUP)

Este indicador relaciona los ingresos obtenidos por la prestación de los servicios con el volumen total de agua extraída del Sistema, se expresa en pesos por m3  y para el 2005 fue de 5.3 pesos y pasa a ser de 7 pesos por m3 en 2010. Comparativamente vemos que nuestro indicador aunque estuvo por encima del promedio nacional, de Veracruz y de Torreón, fue rebasado sólo por Tijuana, no obstante si lo comparamos con el costo unitario de producción antes analizado, vemos que el ingreso unitario en Puebla aún no cubre el costo de 10.8 pesos por m3 de 2010; lo que denota un grave descontrol y total desfase de los ingresos respecto a los costos (Tabla IV.15).

Eficiencia financiera (EF)

El índice de eficiencia financiera relaciona los ingresos netos con los egresos netos del sistema operador, se expresa en porcentaje y se refiere al nivel de eficiencia financiera en un año. El dato se calcula relacionando los ingresos unitarios con los costos unitarios arriba descritos (EF=IUT/CUT). Como se puede apreciar, en nuestro caso este indicador, en los dos años considerados, se ubico muy por debajo del promedio nacional, del promedio de la muestra y del resto de las ciudades consideradas en el análisis. Los datos reflejan en resumen el gran problema de autosuficiencia financiera del SOAPAP, ya que, aunque mejoró el indicador al pasar de 53.4 por ciento en 2005 a 65.3 por ciento en 2010 (Tabla IV.15), aún es insuficiente, los ingresos no cubren ni con mucho los costos.
Respecto al análisis de los principales  indicadores de gestión del SOAPAP se concluye que reflejan la situación de ineficiencia administrativa, financiera y operativa en que está sumido el sistema si se compara con el promedio nacional (cuya situación, no es tan buena y es el reflejo de las ineficiencias particulares a nivel nacional), pero más aún cuando se compara con los Sistemas Operadores de las principales ciudades del país y advertimos que en la mayoría de los indicadores ocupa los últimos lugares.
Actualmente el sistema deja de facturar el 41.6 por ciento del agua que se extrae, lo que equivale a 47.4 Mm3 en el año; la medición del servicio es insuficiente y se ha detenido abruptamente; las pérdidas físicas de agua son elevadas, actualmente se pierde el 40 por ciento del agua extraída; la cobertura de saneamiento de aguas residuales es insuficiente; los bajos niveles de cobranza de los servicios reflejan la ineficiencia comercial; el ingreso unitario promedio que se interpreta como un indicador de eficiencia financiera, solo cubre el 65 por ciento del costo unitario de producción y resume  el gran problema de autosuficiencia del SOAPAP.