LA EDUCACIÓN AMBIENTAL DESDE LA PERSPECTIVA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NAYARIT

LA EDUCACIÓN AMBIENTAL DESDE LA PERSPECTIVA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NAYARIT

Hermilio Hernández Ayón (CV)

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2.2. La educación ambiental desde las políticas públicas.

La planeación del desarrollo en México, como política pública, puede considerarse como el mayor escaparate que tienen los gobiernos para justificar su actuación ante los diversos sectores de la población y, sobre todo, respecto al uso de recursos financieros requeridos para el cumplimiento de metas orientadas hacia una visión de futuro. Los Planes de Desarrollo Nacionales (PDN) y los sectoriales, como se les conoce, se diseñan cada sexenio (al cambio de gobierno) y afortunadamente han evolucionado, es decir, su confiabilidad ha aumentado, lo que no ocurría hace treinta años donde se carecía de diagnósticos que reflejaran la verdadera realidad y el estado del país en ese momento. Esto ha cambiado y cada vez se tiene un mayor acercamiento con la realidad, sobre todo a partir del gobierno de Zedillo, en el que se dan los primeros esfuerzos por introducir el concepto sustentable dentro de planeación de actividades económicas y sociales de la población.

En este marco, el PND que más atención específica ha brindado al asunto de la educación ambiental es el vigente 2007-2012, que contempla cinco ejes rectores y, donde uno de ellos, se le dedica a la sustentabilidad ambiental. Este cuarto eje plantea el uso eficiente y racional de los recursos naturales para lograr el bienestar de la población, pero sin comprometer la calidad de vida de las generaciones futuras. Se propone incluir al medio ambiente como uno de los elementos de la competitividad y el desarrollo social y económico, pero también convertir la sustentabilidad ambiental en un eje transversal de las políticas públicas que permita lograr un “desarrollo humano sustentable”, como una aspiración a la que es posible acceder si se mejoran las condiciones de pobreza y equidad. Este plan se propuso conciliar dos aspectos prioritarios para el país: la protección del medio ambiente (agua, bosques, selvas, clima, biodiversidad, etc.) y la competitividad de los sectores productivos. Para lograrlo se diseñaron tres líneas de acción: el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, la protección del medio ambiente y mejora de la educación, así como el conocimiento para la sustentabilidad ambiental.

Dentro de los objetivos específicos de este eje rector, se propuso promover una cultura de aprecio y respeto por los recursos naturales entre toda la población capaz de romper la relación de dependencia entre pobreza, agotamiento de recursos naturales y deterioro ambiental; esto a través de mejorar la educación ambiental, la información y la capacitación entre la población. Específicamente se propuso que se revisaran y/o actualizaran los programas de EA, pero además que se incluyera la EDS, con enfoque transversal, en todos los niveles y modalidades del Sistema Educativo Nacional. Al respecto, sorpresivamente se apuntó en el tercer informe de labores del gobierno federal en el 2008, que la meta se había cumplido al 100%, esto es tres años antes de lo previsto, lo que sin duda habla de la efectividad del plan. También se inició en este año, según se afirma, una prueba piloto del proyecto de cambio climático para la red escolar; esto entre otras muchas estrategias que se cumplieron (libros, carteles, concursos, etc.) para que en las escuelas incrementaran las actividades de fomento sobre los asuntos ambientales (PND, 2007).

Por otra parte, el gobierno de México, a través de la SEMARNAT y la SEP, presentó la “Estrategia de Educación Ambiental para la Sustentabilidad”, en el marco de la Década de la Educación para el Desarrollo Sustentable 2005-2014 de las Naciones Unidas. El documento hace un diagnóstico del estado de la Educación Ambiental en el país y propone algunas líneas de acción de cara al desarrollo sustentable, en temas como legislación y financiamiento, educación y formación, fortalecimiento institucional y lineamientos estratégicos de EA para el desarrollo sustentable de áreas naturales protegidas. En las propuestas de operación de la estrategia se incluyeron planes de responsabilidades, de evaluación, de seguimiento y financiero (Boletín PNUMA, 2006).

Habría que señalar, sin embargo, que la SEMARNAT es de las pocas que cuenta con una estructura de consejos consultivos nacionales, temáticos y regionales como el Consejo Consultivo Nacional para el Desarrollo Sustentable, cuyo objetivo se fincó en promover la participación de la sociedad en la política ambiental. Los resultados no han sido los esperados por la diversidad misma de los grupos sociales (empresarios, organizaciones civiles, instituciones educativas, líderes de opinión, indígenas, perspectiva de género, grupos ambientalistas, cámaras, etc.), lo que dificulta sustancialmente la creación de políticas públicas en materia ambiental, es decir, no se han levantado los consenso necesarios para determinar los sectores y grupos que debieran participar como representantes de la sociedad (Vásquez, 2011).