PLANEACIÓN Y REFORMAS ECONÓMICAS EN EL MÉXICO POSTMODERNO

PLANEACIÓN Y REFORMAS ECONÓMICAS EN EL MÉXICO POSTMODERNO

Jorge Isauro Rionda Ramírez (CV)

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FUNDAMENTOS POSMODERNOS DEL PENSAMIENTO NEOLIBERAL

El liberalismo es el fundamento filosófico y político del  capitalismo. Adam Smith (escocés, 1723 – 1790), en su principal obra "La riqueza de las naciones" (1776) sostiene que el individualismo en su expresión de que toda persona debe ser libre para perseguir lograr sus propios intereses, inconscientemente y de manera indirecta causa la mejora en la calidad de vida de los demás, contribuye al bienestar social. El egoísmo es el fundamento del bienestar social. Cuestión curiosa de la historia económica pero el año en que se publica su máxima obra, coincide con el año en que se declaran independientes las 13 colonias inglesas en América del norte dando pie a la formación de los Estados Unidos de América.
Lo más destacable de esta corriente es que los liberales creen en la capacidad el mercado en auto regularse, por ello el Estado que sugieren es un Estado nulo. El capitalismo como esquema económico basado en la libre empresa, es un orden natural de inspiración divina. Por ello, “la mano invisible” de Dios auto regula el mercado. De ahí la sentencia que es ahora el eslogan de esta corriente de pensamiento que sostiene “laissez faire, laissez passer”, dejar hacer, dejar pasar, no entorpecer la obra de Dios porque lo que haga el Hombre no es mejor que la obra de Dios.
Por ello el Estado no debe intervenir en el mercado, solo entorpece las libres fuerzas del mismo para su homeóstasis. Según lo liberales el papel del Estado parte de tres funciones fundamentales: ser juez (que emite leyes), ser policía (que vigila se cumplan las layes) y ser gendarme (quien resguarda a la nación).
La experiencia del siglo XIX demuestra que el sistema no es tan perfecto como lo suponen los liberales. La experiencia histórica de las economías capitalistas es cuestionable no solo por las disrupciones que crea (como la revolución mexicana de 1910 – 1917 y la revolución bolchevique rusa, 1917), sino por el propio esquema que quiebra en 1929 (la llamada Gran Depresión). El resultado es el arribo de las teorías económicas cientistas y laicas de las que destacan la Teoría general del inglés John Maynard Keynes y las del polaco Michal Kalecki (1956). Tesis que son fundamentales para el periodo del desarrollismo propio de la entreguerra (1918 – 1939) en América donde destaca la administración del gobierno estadounidense de Franklin Delano Roosevelt (1882 - 1945), que desde la corriente demócrata norteamericana fortalece los movimientos y gobiernos de corte social demócratas en América latina de las que destaca en México la del Gral. Lázaro Cárdenas del Río (1891 – 1970).
El álgido intervencionismo estatal que tienen las administraciones socialdemócratas desde los años 30 del siglo XX a inicios de los años 80 de la misma centuria y su agotamiento ante su incapacidad de proveer a la población de bienes, servicios e infraestructura abren un espacio a la reflexión de la ventaja de incorporar a la iniciativa privada como asistente de las demandas sociales. Se admite que el mercado no opera en condiciones de competencia pura y perfecta por lo que más allá de las tres funciones fundamentales del papel económico del estado, antes citadas por lo liberales, se admiten otras tres que son: la competencia económica o normas contra las formulaciones monopolísticas, la eficiencia económica y las externalidades negativas de la producción (las dos últimas tienen que ver con el tema de la sustentabilidad). Pero la orientación es normativo – indicativa, el Estado no debe participar sino orientar. La planeación económica es por ello sugestiva e indicativa, de corte institucional.
El neoliberalismo parte en gran medida del pensamiento de Friedrich Hayek (1899 – 1992), pensamiento que se expone en su principal obra: Camino de servidumbre (1976). Hayek considera que el keynesianismo y el llamado Estado de bienestar crean tal tutela del ciudadano que lo acompaña desde la cuna hasta la tumba, mitigando la iniciativa y el emprendimiento de las personas que son el fundamento del capitalismo exitoso del mundo anglosajón. Este pensador ataca la planificación central por considerarla que encamina a la degeneración, al envilecimiento y a la esclavitud de los Hombres, sujetos de las directrices del Estado planificador.
Según Hayek en un sistema sin planificación los hombres son libres, por tanto son los responsables de su propio destino y tienen lo que se merecen. En un sistema bajo planificación el Hombre es esclavo y vive bajo el yugo del Estado. Por ello descalifica al Estado social (de carácter social demócrata), al socialismo y al fascismo.
Hayek no está solo en este tipo de posturas ante el papel económico del Estado como sujeto económico. Otros dos teóricos son importantes en la tesis neoliberal: Milton (1912 – 2006) y Rose Friedman (1910 – 2009), el matrimonio Friedman. La obra clave de estos dos autores estadounidenses se llama: Libertad de elegir (2008). Ambos autores rescatan el pensamiento filosófico y ético de Hayek pero lo llevan a un planteamiento de corte funcionalista para sustentar la necesidad de reconsiderar el papel económico del Estado como sujeto económico y dan pie a los principios de los que parte la teoría neoliberal donde la intervención estatal supone ser la mínima necesaria, considerándose ante todo la planeación económica como un mal necesario.
La corriente neoliberal en América latina no es tan reciente. Ya hay algunas iniciativas destacables como las inspiradas por las tesis del premio Nobel (1979) estadounidense Arthur Lewis (1915 -1991), quien sostiene que una economía con abundante mano de obra subempleada puede lograr tasas de crecimiento económico sistemáticamente altas si congela su salario real lo que permite una dinámica de acumulación sostenida a mediano y largo plazo. La tesis es esbozada desde los años 60 del siglo pasado. En México la suspensión del Programa bracero (1942 – 1964) obedece a la implementación de otro programa inspirado en el modelo económico de A. Lewis, el Programa de la industria maquiladora de exportación (PIME, 1965 – 2001) que da pie a la indización de los incrementos del salario mínimo a la inflación nominal, lo que significa el congelamiento del salario real del país, en pro de mejorar las tasas de acumulación capitalista.
Otro antecedente del neoliberalismo en la región latinoamericana es la administración que implementa el Gral. Augusto José Ramón Pinochet Ugarte (1915 – 2006), donde el corte de la política económica es abiertamente neoliberal inspirada en la escuela de Chicago que encabeza Milton Friedman: los llamados monetaristas. Los resultados en el estricto sentido económico son plausibles, solo que se implementan bajo el rigor de una dictadura militar lo que implica que la rigidez cívica o sujeción ciudadana sobre derecho, fuera del derecho, o supra derecho, (exo jure, intra jure o supra jure), hace que la llamada “Ley de Herodes” explique en mucho los aciertos del sistema, cuestionables en otras latitudes con mayor libertad democrática como es el caso de México.
En estricto la tesis neoliberal no es mala, dolo que las “holguras” en que se viene a aplicar en muchas de las economías latinoamericanas, incluso norteamericana, explican en gran medida las crisis a las que lleva. Por decir, en América latina, en especial para el caso de México, la “corrupción” en la que se aplican las regulaciones neoliberales explican su inoperancia y controversias que abre por su experiencia histórica, socialmente tan cuestionable. En América del norte, en especial a partir de la llamada crisis subprime iniciada en 2008, se vela que los “abusos” de libertad en materia normativa conjugado con el subempleo creciente que abre exportar las fuentes de trabajo a otras latitudes transnacionales del aparato productivo norteamericano, son el fundamento principal para cuestionar la legitimidad del neoliberalismo que ni a sus propios creadores les ha resultado del todo beneficioso (iatrogenia en la teoría económica). En razón de ello el neoliberalismo actualmente ve su ocaso como tesis pertinente.