COMPETITIVIDAD REGIONAL DE LAS EMPRESAS MANUFACTURERAS DE MÉXICO

COMPETITIVIDAD REGIONAL DE LAS EMPRESAS MANUFACTURERAS DE MÉXICO

Genaro Sanchez Barajas (CV)

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II.1.2..-Basada en el enfoque del desarrollo socio-económico territorialmente

Competitividad espacial
Para entender mejor  este enfoque, con ánimos de estructurarlo y determinar con propiedad  su alcance  es conveniente empezar  por definir lo que históricamente se ha entendido en palabras llanas por competitividad espacial diciendo que “es la capacidad que tiene una región para enfrentar la competencia”; ahora bien, como se puede inferir esta capacidad la determinan en general  las actividades económicas, los recursos naturales y la población asentada en un territorio y tiempo determinados. De ello se desprende la idea de que la  competitividad, la  capacidad de un espacio geográfico determinado emana de la competitividad de sus empresas, de la disponibilidad y calidad de sus recursos humanos y naturales, así como del entorno institucional que se les brinde. A lo anterior en la actualidad se debe agregar el apoyo que existe para la conservación del medio ambiente en que operan las empresas y actúa la sociedad. En ese contexto es obligatorio establecer una definición más amplia de la competitividad territorial diciendo que “ es la capacidad que tiene un espacio geográfico  para hacer frente a la competencia en el mercado, en condiciones de sustentabilidad.”
Con ese enfoque aseguramos:
1.- El uso,  reposición y conservación  de los recursos que integran la biodiversidad del territorio en pleno equilibrio con el crecimiento que tengan  la economía y la sociedad.
2.-  El involucramiento de los agentes económicos y sociales, individual e institucionalmente;
3.- Trabajar con procesos establecidos y con innovaciones expresadas por medio de cambios y manipulaciones no realizados antes,  que permitan obtener mejores resultados: productividad y rentabilidad, con  viabilidad ecológica; y
4.- Insertar y vincular los esfuerzos del territorio a las políticas  empresariales al igual que  a las públicas regionales, federales  e internacionales.    
Así, con este enfoque  garantizamos que los agentes económicos adquieran conciencia de lo importante  que es cuidar el medio ambiente, atender y trabajar con  las organizaciones empresariales, así como con las   instituciones  públicas puestas a su disposición por el Estado mexicano.
Al respecto, es interesante mencionar  que para obtener la competitividad regional  el Observatorio Europeo  (Fascículo 4, LEADER, 2000:3) es necesario trabajar  “la capacidad” en cuatro dimensiones, mismas que una vez conformadas sugiere que se fusionen en una estrategia  única; ellas son:
1.- La competitividad social, que se visualiza como la capacidad que despliegan  los agentes económicos para trabajar unidos con eficacia en un proyecto consensuado, aprovechando el apoyo institucional;
2.- La competitividad  medio ambiental: es la capacidad que tienen los agentes productivos para usar,  reponer y conservar oportunamente los recursos naturales, humanos y materiales que usan en sus procesos de fabricación, en un entorno físico institucional determinado;
3.- La competitividad económica. Es la capacidad de estos agentes “para producir y mantener el máximo de valor añadido en el territorio mediante el refuerzo de los vínculos entre sectores y haciendo que la combinación de recursos  constituya un activo para valorizar el carácter específico de los productos y servicios locales (ídem);
4.- La localización en el contexto global, la cual entiende como la capacidad de los agentes económicos para ubicarse y actuar en los demás espacios local y externamente; ello, con el fin de que su proyecto gane importancia y se posesione globalmente.
Yo considero que este enfoque integral  para obtener la competitividad o  capacidades básicas  es conveniente instrumentarlo y que el reto es pugnar porque se aplique y mantenga en el largo plazo con su estrategia propia de desarrollo socio-económico.
Competitividad económica
Comenta el Observatorio Europeo (ídem, LEADER:6) que es fundamentar construir las cuatro capacidades descritas en el inciso anterior puesto que con ello es posible superar problemas en:  
1.- La etapa previa al inicio de la producción, los cuales suelen ser: la disponibilidad inadecuada de “infraestructuras  y servicios apropiados a la producción local,  así como sobre la disponibilidad de insumos, de bienes intermedios y de tecnologías para abastecer las distintas sucursales.”      
2.- Durante la etapa de la producción, en la cual destacan los problemas de calidad de los productos y de los servicios, que en mucho provienen del tipo de materias primas e insumos que se utilizan, de los procesos productivos, de la maquinaria y de los materiales y equipos auxiliares con los que elabora sus productos.
3.- En la etapa posterior a la producción. Aquí pueden ser los problemas de distribución y de comercialización rentables derivados de desplazamientos inoportunos e inadecuados de los productos como de la mercadotecnia y publicidad  inapropiados, así como los problemas relacionados con la falta de visión para realizar ajustes oportunos en los volúmenes de producción en los siguientes ciclos a consecuencia de cambios en la demanda, al igual que en la falta   de previsión para introducir nuevos productos o servicios al mercado.
4.- Los problemas de organización y administración de las políticas públicas formuladas para el apoyo de la región, los que surgen de las buenas o malas relaciones con los tres órdenes de gobierno, de manera que  sus programas se instrumentan con lentitud o pueden ser insuficientes.
Competitividad territorial y competitividad de la empresa
Cuando dichos problemas  se resuelven se dice que se ha dotado a la región de competitividad económica, tal que por consiguiente, a ésta última la definen como “ La capacidad de los agentes para  generar y mantener el valor añadido a través de la integración de los recursos locales en productos y servicios que responden a las nuevas expectativas de los consumidores ya la evolución de los mercados ”(idem, LEADER: 15).
Así para alcanzar la competitividad económica territorial se deben diseñar e implementar políticas públicas apropiadas   y modalidades de organización y administración, de los procesos productivos, de comercialización y de servicios que acerquen al productor con el consumidor final, ello, en otras palabras, significa que se crean ventajas competitivas idóneas y congruentes con las   características geoeconómicas de cada región.
 Con este marco de referencia ahora  podemos decir que la competitividad de una empresa es su capacidad para enfrentar la competencia, en tanto que la competitividad de una región es su capacidad para crear y mantener el valor agregado que generan las empresas manufactureras.

¿Cómo caracterizar la competitividad económica o atractividad de una región, qué  indicadores debemos usar para diagnosticarla? 
Para contestar estas preguntas empecemos diciendo que en cualquier investigación los objetivos de la misma determinan la metodología e indicadores a utilizar. En consecuencia  si nuestro objetivo es que los agentes económicos creen y mantengan el valor agregado de una región y si sabemos que ello sólo se logra en las empresas manufactureras, entonces  conviene definir qué se entiende por  empresa manufacturera y por  desarrollo regional.
Empresa manufacturera 

Es la unidad de producción que cuenta con un organigrama, con un manual de funciones y que tiene como    objeto social el transformar con la mano de obra y cierto proceso de fabricación  las materias primas para convertirlas  en  productos finales;  al hacerlo les  agrega valor y vida de anaquel que le permiten distribuirlos y comercializarlos rentablemente en los mercados.  Esta mano de obra es especializada porque manipula con eficacia y oportunidad el proceso de fabricación en máquinas y equipos   sofisticados y por ello su  remuneración suele ser mejor y permanente, situación que en turno fortalece e incrementa  la demanda  regionalmente.   
Desarrollo regional
Considero que está en función de la naturaleza, de la sociedad y de la economía. La naturaleza aporta la extensión territorial, los recursos naturales, su cantidad  y  calidad de los mismos, entre otros elementos. Su conocimiento da lineamientos para construir los indicadores que permitan la reposición y mantenimiento de los recursos naturales tomados y usados en los procesos productivos de las empresas manufactureras.
 La sociedad. Ella proporciona por un lado la demanda de los productos y los ingresos  para adquirirlos. Por el  lado de la oferta la sociedad  suministra la PEA: Población Económicamente Activa, cuyas características de edad, nivel educativo, etc. son básicas para seleccionar el  tipo de  trabajadores que requiere la empresa para operar productiva y rentablemente con sustentabilidad.
Derivado de lo anterior se infiere que la triada naturaleza, sociedad y economía fundamentan su definición, de manera que para mi el concepto de desarrollo regional es la consecución del crecimiento equilibrado de la economía con la sociedad, en un espacio y tiempo determinados. 
Aquí está implícito el uso eficaz y oportuno de las innovaciones que aprovecho para definirlas  como los cambios o modificaciones que se hacen para aumentar la productividad en las empresas. Las innovaciones pueden ser tecnológicas o de otra índole, de manera que están insertas en los procesos de fabricación, en la maquinaria y equipo auxiliares, así como en la PEA, tanto del personal calificado como de los otros trabajadores y para  la formación de  empresarios, cuya visión, actitud y aptitud hacen posible el equilibrio  en forma sostenida y sustentable.

II.1.2.1.- Indicadores básicos para determinar la competitividad económica o atractividad de una región para invertir en ella.

I.-Indicadores humanos, económicos y territoriales
Por la importancia que revela tener la economía en la determinación de la atractividad de un espacio para invertir en él, y dentro de ella la simbiosis que existe entre  la PEA y los activos fijos de la empresa para satisfacer las necesidades, empezaré describiendo los  indicadores que permiten tipificar    los agentes económicos y de ellos derivar la  calificación que tenga  la competitividad de una región.
Al respecto, dichos indicadores de la PEA están contenidos en los censos de población y vivienda, en los censos económicos en lo que atañe al número de trabajadores y  a sus retribuciones dentro del sector manufacturero, al igual que en la Encuesta Nacional de Micronegocios, porque en ella se tipifican los empresarios de estas escalas de producción, en particular se describen los principales problemas que tienen para trabajar y satisfacer los mercados internos y externos.
En este contexto se sugiere utilizar  indicadores federales, estatales y municipales  como los siguientes:
1.- Superficie, clima, disponibilidad de recursos naturales;
2.- Población, PEA, personal ocupado y remunerado, los propietarios, familiares y otros trabajadores no remunerados, etc.
3.- Nivel educativo e ingresos de los recursos humanos.
4.- Número de empresas por sector económico y tamaño de las unidades de producción.
5.- La capacidad de planta instalada y utilizada.
6.- Total de gastos que hacen las empresas por consumo de bienes y servicios.
7.- Total de ingresos que obtienen las empresas por suministro de bienes y servicios.
8.- Producción bruta total. 
9.- Consumo intermedio.
10.- Valor agregado censal bruto.
11.- Formación bruta de capital fijo.
12.- Variación total de existencias.
13.- Total de activos fijos.
14.- Depreciación  total de activos fijos.
15.- Principales problemas de producción, distribución y comercialización de las empresas.
16.- Exportaciones por tipo de bienes y de escalas de fabricación.
17.- Características financieras de las empresas.
17.1- Estructura financiera consolidada.
17.2.- Estructura financiera por empresa y grupo/clase industrial
17.3.- Incluir otros indicadores financieros disponibles.
II.- Indicadores técnicos
1.-Infraestructura física, social y productiva disponibles.
2.- Disponibilidad y localización de materias primas, bienes intermedios, insumos estratégicos, maquinaria y equipos auxiliares.
3.-  Disponibilidad y descripción de procesos  de fabricación para estimar contaminación, productividad con mano de obra, materias primas e insumos locales.
4.-   Disponibilidad y descripción de maquinaria y equipo con los mismos propósitos del numeral anterior.
5.- Diagnosticar el grado de contaminación que genera la producción de bienes de capital, de consumo duradero y no duradero, la industria terminal.
6.- Conocer los programas de apoyo institucional para la industria manufacturera.

Con estas referencias a continuación se plantean las hipótesis cuya verificación dará elementos para formular la teoría de la competitividad económica territorialmente de las empresas manufactureras.