LA DESFOCALIZACIÓN DEL CENTRO DEÍCTICO A TRAVÉS DE LA SEGUNDA PERSONA DEL SINGULAR

LA DESFOCALIZACIÓN DEL CENTRO DEÍCTICO A TRAVÉS DE LA SEGUNDA PERSONA DEL SINGULAR

Hyagna Cabello Peña (CV)
Hermes Infante Miguel
(CV)
Universidad de Oriente

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2.2.5 Tiempo, aspecto y clase semántica de la forma verbal en segunda persona del singular desfocalizadora.

En este subacápite analizamos factores sintácticos que, junto a la presencia de la  segunda persona del singular, determinan la lectura indefinida del enunciado. Estos elementos son abordados en la GDLE (2000: 1734-1637) y explicados en el primer capítulo (Vid supra Capítulo 1, subacápite 1.2.1.3). Con el propósito de profundizar más en la descripción del uso lingüístico que estudiamos, analizamos estos elementos por separado.

2.2.5.1 El tiempo1
En las entrevistas realizadas apreciamos la preponderancia del copretérito (Vea Anexo 7 Tabla 5.1), lo cual se debe a que los informantes se desinhibieron más lingüísticamente en los temas referidos al pasado. Por esto, la segunda persona del singular desfocalizadora aparece mayormente en enunciados donde se narran sucesos ya ocurridos.
Ej.: Ahora la gente ostenta un poquito más de las cosas, no es como antes, que si tenías un pulovercito, una camisita, te conformabas con eso e ibasdondequiera, y ahora si no tienes un pulóver elegante nos sentimos menos que otro. (Inf.16)
Este informante compara el “antes” con el “ahora”, marcando el primero con el copretérito; y el segundo, con el adverbio ahora y el presente de indicativo.
El hecho de que en  todas las entrevistas  los informantes se valieran de comparaciones entre el pasado y los momentos actuales, justifica la poca diferencia existente entre los porcentajes del copretérito y el presente de indicativo. Les siguen por orden porcentual,  y con gran diferencia cuantitativa, el presente del subjuntivo, el futuro perifrástico, el pretérito del subjuntivo, el imperativo (Vid infra acápite 2.3) y el pospretérito, todos en contextos de desfocalización (Vea Anexo 7 Tabla 5.1).
 Ej.: Bueno, si es así te vas para una casa de renta, porque un hotel no hay. Tendrías que pagar una casa de renta si tienes dinero para pagarla. (Inf. 9)
Ej.: En divisa podríassentarte en La Reforma, perovasa comer productos preelaborados... (Inf. 6)
En el primer caso el pospretérito se manifiesta a través del verbo de una perífrasis y convive en el enunciado  con el  presente de indicativo; en el segundo, lo encontramos en la desinencia de un verbo modal que comparte el cotexto con el futuro perifrástico.
Como se habrá observado, la variación temporal de las formas verbales abarca los tres modos y un gran número de tiempos. En cuanto al sexo, apreciamos mayor diversidad en los hombres (Vea Anexo 7 Tabla 5.1); mientras que en lo relativo al grupo de edades, es el tercero -es aquí donde se emplea más el copretérito debido a la tendencia de sus representantes a narrar sus experiencias- el que más variación posee en oposición al primero y al segundo (Vea Anexo 7 Tabla 5.2). De los tres niveles de instrucción, son el medio y el superior los que mayores posibilidades combinatorias presentan, debido a que sus representantes poseen una mayor competencia lingüística con respecto al nivel bajo (Vea Anexo 7 Tabla 5.3).

2. 2. 5. 2 El aspecto
El aspecto, morfema verbal estrechamente vinculado al tiempo y al modo, es otro de los elementos que en muchas ocasiones aclara el significado de la expresión. En el Capítulo I hicimos referencia a la necesidad de un aspecto siempre imperfectivo que sitúe la acción verbal en un punto de indeterminación (Vid supra Capítulo 1, subacápite 1.2.1.3). En las entrevistas, como representante típico del aspecto imperfectivo, encontramos el copretérito, utilizado mayormente por los miembros del tercer grupo etario debido a razones ya mencionadas (Vid supra subacápite anterior).
El pretérito no fue empleado por ninguno de los informantes; sin embargo, encontramos el aspecto progresivo, o sea, la acción del verbo en un estado de desarrollo, que según la GDLE (2000: 1735), también atenta contra la lectura genérica del enunciado a menos que el verbo esté en presente y aparezca acompañada por constituyentes adverbiales que provoquen la indefinición (Vid supra Capítulo 1, subacápite 1.2.1.3). Esto último lo observamos en las perífrasis durativas:
Ej.: Si te pones a pensar lo que pueda favorecer al municipio, porque aun recibiendo remesas esperasalgo mejor, esperas un lugar donde sentarte, sentirte bien, una buena atención porque supuestamente estaspagando con la moneda dura. (Inf.6)
En este caso la perífrasis durativa (estás pagando), registrada en el presente de indicativo y ubicada en una oración subordinada causal, aparece acompañada del adverbio supuestamente. No  obstruye, por tanto, la lectura indefinida, insertándose en ella además por la inercia desfocalizadora que implican el resto de los verbos en tiempo también presente.

2. 2. 5. 3 La clase semántica del verbo.
En la lectura indefinida del enunciado incide también la clase semántica del verbo. A esto hicimos referencia ya en el capítulo anterior (Vid supra Capítulo 1, subacápite 1.2.1.3), donde aludimos a la consideración por la GDLE (2000: 1736) de los modales como los verbos que mejor posibilitan el alcance universal de la segunda persona del singular. De ellos, poder y querer son los más utilizados, aunque no están en la cúspide del conjunto de verbos con mayor frecuencia en los enunciados de desfocalización (Vea  Anexo 7 Tabla 5.4).
Ej.: Se hacía mucho jaibol, una bebida fuerte con refresco. Entonces podíastomar, porque eso te alegraba un poquito, pero no te emborrachaba. (Inf.13)
Ej.: Fíjate que te gustaba ir a u lugar, regalar 3 ó 4 pesos de propina por la atención que te daban. querías una cerveza, no se te había acabado y ya te ponían otra. (Inf.14)
En estos ejemplos se observa la capacidad de los verbos modales poder y querer  de trasladar la realización del evento expresado en la oración a momentos distintos del de la enunciación (Cfr. GDLE, 2000: 1736). Ambos verbos coinciden a veces en un mismo enunciado, sobre todo en los referidos al pasado, en los que los entrevistados aluden a la posibilidad de satisfacción de sus necesidades:
Ej.: Antes, a la hora que querías ir a un hotel, podías ir. Y un trato maravilloso, te trataban como si ese hotel fuera de ellos particular. (Inf. 7)
De forma general, el verbo ir es el que más aparece - conjugado en distintos modos y tiempos - debido a su dinamismo, además de ser la forma verbal auxiliar de la perífrasis de futuro, que tuvo gran utilización.
Ej.: Se ve la diferencia entre las ofertas en divisa y las ofertas en monda nacional. Muchas veces vas a establecimientos aquí y te maltratan; sin embargo, vas a una diplo o algo así y ves la diferencia. La gente, llegas a una diplo y tratan de atenderte rápido, y aquí tú llegas al bar que está frente al pedriático y se dan la patá del siglo. (Inf. 7)
En esta intervención la informante reitera la forma vas en presente del indicativo para subrayar la posibilidad de realización de la acción en momentos no específicos, lo cual sirve de base a la comparación que realiza. Nótese cómo emplea el verbo llegas en un mismo modo y tiempo para sustituir la forma ya repetida vas e ilustrar lo que ya había mencionado.
En varias ocasiones encontramos el verbo ir como auxiliar en la perífrasis de futuro.
Ej.: Aquí no existe la gastronomía. dices voy a comer un día y te dicen pollo, vas a comer otro día y te dicen bisté de puerco… (Inf. 14)
También advertimos la presencia del verbo tener, que tuvo una alta frecuencia de uso como auxiliar en las perífrasis obligativas y como verbo dinámico. De esta última manera lo encontramos, por ejemplo, en la siguiente intervención:
Antes todo el mundo era igual. No había esa lucha con las marcas. Antes tenías tu pantaloncito, tu pulovercito, tu camisita; todo el mundo era igual. (Inf. 10)
Después de este verbo, el más utilizado fue ver, debido a su relación con la vista como órgano sensorial que implica un mayor comprometimiento del receptor con lo que se expresa:
Ej.: En los años 66 y 70 se era más maduro, porque nuestros padres nos ponían las cosas menos al alcance de la mano. Los tiempos son diferentes. Es verdad que ves una pérdida un tanto de los valores, debido a los lugares a donde van… (Inf. 9)
Como sinónimo de ver encontramos los verbos notar y mirar:
Ej.: vas hacia delante y tal vez hasta un poco no razonas bien, y notas que puedes correr hasta un riesgo; después miras hacia atrás y dices “pero yo hice esto”. (Inf. 9)
El resto de los verbos más empleados, junto a los mencionados anteriormente, aparecen por orden de frecuencia de uso en la Tabla 5.4 (Vea Anexo 7). No podemos dejar de destacar la variedad de formas verbales recogidas, todas en contextos de evidente desfocalización.
Hasta aquí hemos analizado los elementos relacionados con las formas verbales (tiempo, aspecto y clase semántica), con lo cual nos ha quedado demostrada la relevancia  de la misma en la lectura indefinida del enunciado, aunque no restamos importancia a otros factores que, en conjunto, la determinan, y que serán abordados en el siguiente subacápite.

1 Las perífrasis, a excepción del futuro perifrástico, no han sido concebidas en esta investigación como tiempos [Cfr Y. Iranzo (2003) e I. Bidot (2007)], sino incluidas en el tiempo al que corresponde el verbo conjugado.