CONCEPCIONES ACERCA DE LA REGIÓN EN LA PROBLEMÁTICA ACTUAL DE LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA

CONCEPCIONES ACERCA DE LA REGIÓN EN LA PROBLEMÁTICA ACTUAL DE LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA

Leonid Elsido Hernández Sánchez (CV)

CAPÍTULO 3

LA REGIÓN Y EL PROCESO DE LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA.

3.1)- Las necesidades de la Integración Latinoamericana como problemática contemporánea.

El problema de la integración del subcontinente latinoamericano se remonta a  los padres fundadores de la independencia a fines del siglo XVIII y el XIX. Francisco de Miranda 1, Simón Bolívar2 , Antonio José de Sucre 3, Andrés Bello4 , José Martí5 , Eugenio María de Hostos 6, entre otros pensadores de la independencia latinoamericana 7 comprendieron la necesidad de la integración sobre todo por el hecho de la protección que la misma ofrecía frente a los intereses expansionistas europeos y norteamericanos. Desde el mismo año de  1826 durante la celebración del Congreso de Panamá quedó abiertamente declarado el conflicto entre los recién constituidos estados nacionales latinoamericanos y los Estados Unidos. Ante la declaración bolivariana de unidad de los pueblos de América Latina se oponía el pensamiento monroísta norteamericano que daba inicio a la confrontación entre las corrientes humanistas latinoamericanas y el panamericanismo imperialista estadounidense.

Tal y como se abunda en el Capítulo primero de la presente investigación, los estados nacionales latinoamericanos surgieron pletóricos de conflictos internos. Los principios de la independencia y la unidad fueron obviados por las elites dominantes exacerbando los nacionalismos reaccionarios y contribuyendo a la división social, política y territorial del subcontinente.

Durante todo el siglo XX y hasta la actualidad perviven los conflictos nacionales dentro de los estados y hacia la periferia. Los problemas fronterizos, la enajenación de grandes grupos sociales, sobre todo indígenas y afrodescendientes 8, la desigualdad económica y social y los males que conlleva la misma traducidas en el alto índice de  pobreza de gran parte de la población subcontinental acentúan las diferencias entre las naciones latinoamericanas.

Luego de la Segunda Guerra Mundial se acentúa la dependencia económica de los países latinoamericanos al capital estadounidense. La Guerra Fría y sus diferentes expresiones en América Latina actúan como freno al desarrollo económico y social de las naciones subcontinentales. Las oleadas de dictaduras militares y de movimientos revolucionarios  en las décadas siguientes de los años 50, 60 y 70 son expresión de la inestabilidad de los sistemas políticos latinoamericanos y de la sumisión económica de estas naciones a los centros del poder económico mundial.9

En estos años las visiones de la región en América Latina quedan prácticamente excluidas del panorama científico. La preocupación más importante de la intelectualidad latinoamericana radica en la búsqueda de nuevos paradigmas emancipatorios para la conservación de la soberanía de las naciones y de nuevas fórmulas económicas para contrarrestar el efecto de la deuda y por ende de la dependencia de los estados nacionales al capital foráneo. Es ese un momento de auge de los nacionalismos revolucionarios frente a las reacciones proimperiales. Dicho ciclo se repetirá en la década de los años 90 ante el fracaso del neoliberalismo y se extenderá hasta la actualidad.10

En los años trascurridos del siglo XXI la realidad latinoamericana abunda en conflictos de carácter histórico. El investigador Andrés Servin clasifica los mismos de la siguiente manera:

“Conflictos de legitimidad: vinculados a la fragilidad de los sistemas políticos, tanto con relación a  la participación política restringida o limitada como a una distribución desigual de las condiciones de bienestar.” En este caso las diferencias interregionales llevadas al territorio de los estados nacionales acentúan el conflicto en cuestión. Por lo general, las elites nacionales devienen del panorama regional, tanto rural como metropolitano, y tienden a fortalecer las regiones de procedencia en detrimento de de aquellas donde los grupos de poder son más débiles.  

“Conflictos de desarrollo: asociados a la distribución desigual de recursos que generan una brecha cada vez mayor entre ricos y pobres.” El conflicto comienza a acentuarse en la cúspide de la pirámide social en la diferencia entre los grupos vinculados a las economías foráneas y aquellos que apuestan por el desarrollo de las instituciones económicas nacionales y regionales.    

“Conflictos estructurales: como consecuencias de sistemas sociales que ofrecen oportunidades desiguales a sus miembros, con un acceso diferencial a los beneficios de desarrollo.”

“Conflictos de identidad: que afectan a grupos excluidos por sus diferencias étnicas, tribales o lingüísticas, y que buscan la protección de una identidad propia, frecuentemente asociada a la posesión de territorios ancestrales y patrimonios culturales distintivos.” Los conflictos de identidad están muy vinculados a los conflictos territoriales en el campo de las regiones histórica y culturalmente consolidadas, escindidas por fronteras político- administrativas a escala internacional o intranacional. Es común observar en América Latina que aquellas comunidades regionales que habitan el área de fronteras sean las desplazadas de los centros metropolitanos y de las áreas económicas más importantes. 11 El investigador Alejandro Días Quiroz argumenta dicha tesis partiendo del grado de discriminación que se observa en la actualidad en América Latina:    

Personas

( % )

Pobres

31

Indígenas

11

Negros

612  

“Conflictos de transición13 : referidos a la lucha de fuerzas rivales por el poder, con intereses divergentes, en momentos de transición o de cambio político.”14    

Hoy, en América Latina, la mayoría de los conflictos por efecto de guerras civiles, diferencias fronterizas, exclusión social, discriminación económica para el desarrollo desde las instituciones estatales y relaciones con otras naciones subcontinentales y foráneas se inscriben primeramente a escala regional y trascienden al plano de lo nacional. El extremo grado de centralización administrativa de las instituciones nacionales generalmente no observan esta problemática desde lo microterritorial sino que asumen los errores estructurales como fallas originadas desde el poder central, y no desde la relación que necesariamente debe establecerse entre el mismo y las estructuras a escala regional y local.


1 Ver referencias en: Bolívar, Simón. Obras Completas. Fundación para la Investigación y la Cultura. Tiempo Presente. Eco Ediciones. Bogotá. 1979. También en   Martí, José. Obras Completas. Centro de Estudios Martianos. Edición Digital. Ciudad de La Habana. 2001.

2 Bolívar, Simón. Obras Completas. Fundación para la Investigación y la Cultura. Tiempo Presente. Eco Ediciones. Bogotá, 1979.   

3 Ver referencias en: Bolívar, Simón. Obras Completas. Fundación para la Investigación y la Cultura. Tiempo Presente. Eco Ediciones. Bogotá. 1979.

4 Bello, Andrés. Selección de Escritos. II Tomos. Ed. Ánima. Bogotá. 1976

5 Martí, José. Obras Completas. Centro de Estudios Martianos. Edición Digital. Ciudad de La Habana. 2001.

6 Arpini, Adriana. Razón práctica y discursividad: una perspectiva latinoamericana. Razón práctica y discurso social latinoamericano. El “pensamiento fuerte” de Alberdi, Betances, Hostos, Martí y Ugarte. Buenos Aires. Biblos. 2000. pp.13-26

7 Es válido aclarar que el investigador no se propone realizar el recorrido del pensamiento integracionista latinoamericano en  el cuerpo de la investigación. Solo refiere exponentes indiscutibles del mismo con el fin de argumentar la tesis que refiere a continuación. Dicho recorrido es claramente observable en: C.A. Valores Fundacionales de la Integración Latinoamericana. Informe de Investigación. Cátedra Andrés Bello. Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas. Facultad de Ciencias Sociales. Santa Clara. 2004.

8 Ver con más detenimiento en: Gagliardi, José Mauro. Estado Nación y Nacionalidades Indígenas. Diálogos Revista Electrónica de História. Abril-Julio. Año-Vol. 2. No. 003. San Pedro de Montes de Oca. Costa Rica. 2001

9 Frank, André G. América Latina al margen del Sistema Mundial: Historia y Presente. Nueva Sociedad. No. 123. Enero-Febrero. 1993. pp. 23-34

10 Aunque el investigador contemporaniza el estado de los ciclos de izquierdización y derechización en el panorama político y social latinoamericano, estos no son asunto de la contemporaneidad subcontinental exclusivamente. Ya desde el siglo XIX apuntan a regularizarse, por lo general dichos ciclos son observables en períodos de entre 20 y 50 años, en la medida en que las crisis económicas capitalistas apuntan con marcada fuerza sobre el panorama latinoamericano. Tampoco es objeto de la presente investigación el análisis y la valoración de los mismos, aunque no dejan de ser fuente para futuros trabajos científicos.
 

11 C.A. Inclusión y exclusión social en América Latina. De la teoría incluyente a la práctica excluyente. Informe de Investigación. Cátedra Andrés Bello. Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas. Facultad de Ciencias Sociales. Santa Clara. 2006. 

12 Díaz Quiroz, Alejandro. La institucionalidad, la cohesión social y la democracia en la región en el contexto de la globalización. Razón y Palabra. “Relaciones Públicas”, No.70. www.razonypalabra.org.mx

13 Referidos a los ciclos antes relacionados por el investigador.

14 Servin, Andrés. La sociedad civil ante la violencia y los conflictos en América Latina y el Caribe. Revista de Pensamiento Iberoamericano No. 2. 2009. Pág. 145-146