María de Lourdes Hernández Rodríguez
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3.2. Diferencia entre agua superficial y agua subterránea
Fuente: Servicio Geológico de los EUA, 2004
Figura 1 El Ciclo Hidrológico del Agua
En la actualidad se sabe que tanto el agua superficial como el agua subterránea forman parte del Ciclo Hidrológico, el cual, es un término descriptivo aplicable a la circulación general del agua en la tierra que inicia con la evaporación del agua en los océanos propiciada por la energía solar y concluye con la precipitación y escurrimiento del agua por efecto de la gravedad terrestre hasta que una parte de ella penetra bajo la superficie del terreno (infiltración) llenando los poros y fisuras del suelo, misma que cuando es abundante desciende hasta recargar y ubicarse en un acuífero (Campos, 1992 y US Environment Proyect Agency, 2003).
Las aguas superficiales, exceptuando el aguamarina, son aquellas que se originan a partir del agua de precipitación atmosférica, de afloraciones de agua subterránea o bien de la fusión de masas de hielo. Se pueden distinguir tres tipos de agua superficial: el agua de escorrentía, la retenida en reservorios naturales o artificiales y el agua de estuarios. En cuanto al agua de escorrentía, específicamente la de los ríos, puede ser el resultado de la interacción entre el agua de precipitación, del suelo y rocas, a lo cual hay que añadir los aportes antropogénicos (Diccionario aguamarket, 2001).
Fuente: Servicio Geológico de los EUA, 2004
Figura 2 Ubicación del agua subterránea
Zora (1991), Del Valle (1991) y Hornsby (2000) coinciden en señalar que el agua subterránea o freática forma parte del agua del subsuelo, encontrándose en los vacíos que existen entre las partículas del suelo y las rocas o entre las grietas del lecho rocoso, siendo a su vez la primera fuente hídrica en regiones áridas y semiáridas
Adicionalmente Aboites (1998), destaca al referirse a aguas subterráneas la necesidad de distinguir entre agua somera o freática y artesiana, la primera es aquella que se halla a menor profundidad pero por encima de la primera capa impermeable del subsuelo; la segunda, es aquella que se encuentra cubierta o encerrada entre capas impermeables y por lo que genera una presión diferente a la del acuífero libre lo que la hace subir a la superficie. Las áreas donde existen grandes cantidades de aguas subterráneas que pueden abastecer pozos o manantiales se llaman acuíferos, palabra que significa "portador de agua".
Un acuífero es una formación geológica subterránea que se ha creado a lo largo de varios años como resultado de la infiltración del agua de lluvia o del agua de los ríos, lagos y deshielos. A la infiltración que ocurre en los acuíferos se le conoce como recarga y esta puede ser natural, inducida, incidental o artificial (Chávez,2004)
El agua que existe en los acuíferos se conoce como agua subterránea y su extracción se realiza normalmente a través de pozos y/o manantiales (CNA, 2004d).
A nivel mundial el agua subterránea es la principal fuente hídrica para 2,000 millones de personas que habitan en regiones áridas o semiáridas quienes en su conjunto consumen 20% del agua total del planeta –entre 600 y 700 km3 al año- y de ella depende la tercera parte de la población mundial (PNUMA, 2002).
