INTRODUCCIÓN
La  Dirección Integrada de Proyectos (DIP) ha sido asociada tradicionalmente con  empresas de producción, obras ingenieriles, industrias, proyectos de  telecomunicaciones e informática, de investigación y desarrollo, sociales e  incluso políticos. Sin embargo su aplicación no se ha extendido en los  servicios y en especial en la industria de la hospitalidad. (Zamora, 2009)
En  Cuba su aplicación al turismo se inicia bajo la asesoría del Ing. Ángel Gómez  Trueba y del profesor Rafael de Heredia, uno de los principales representantes en  el mundo europeo de la disciplina. Según los especialistas de la Dirección de  Desarrollo del MINTUR en la actualidad se están llevando a cabo numerosos  proyectos encaminados al desarrollo turístico de zonas con potencialidades lo  cual es coherente con la política económico-social que fomenta el desarrollo  local a partir de proyectos de inversión. Aunque también reconocen que en las  entidades que brindan servicios asociados a la hospitalidad no se implementa la  DIP para crear nuevos productos-servicios o mejorarlos, lo que constituye una  debilidad pues los proyectos se insertan en la planificación estratégica de las  empresas turísticas y son un instrumento que les permite adaptarse a las  condiciones cambiantes del entorno y a las nuevas tendencias de la demanda  turística internacional, incrementando así su posición competitiva.
Para  la gestión de proyectos turísticos se debe tener en cuenta que los mismos son muy trascendentales e implican grandes esfuerzos por  el costo de inversión, el capital humano que interviene y el tiempo que  consumen; es por esto que no se pueden gestionar con los métodos y técnicas  tradicionales de dirección de empresas sino que es necesario utilizar  herramientas específicas en función de los objetivos de los proyectos para  contribuir a su gestión exitosa. 
Es importante  garantizar en la enseñanza pre-grado y post-grado la formación de habilidades  para que los futuros profesionales y directivos de la industria de la  hospitalidad puedan emprender la gestión de proyectos turísticos. 
En este sentido se  propone una metodología que integra un conjunto de herramientas y técnicas que  guían la gestión de proyectos turísticos. En el diseño se tuvo en cuenta el mapa  curricular aprobado para el Plan de Estudio D de la modalidad presencial de la carrera  Licenciatura en Turismo; por lo que la mayoría de las herramientas y técnicas  propuestas ya han sido asimiladas por los estudiantes en asignaturas previas a Dirección Integrad y Evaluación de Proyectos  (DIEP), lo que contribuye al desarrollo del proceso de formación en espiral e integración de contenidos.
La asignatura DIEP se  imparte en el segundo semestre de tercer año en la modalidad presencial. Entre  las asignaturas de la carrera que tributan a la metodología se encuentran: Principios,  Organización y Práctica del Turismo de primer año; Gestión de Calidad, Contabilidad  y Finanzas, Gestión de Recursos Humanos; Modalidades Turísticas, Dirección y  Estrategia, Comercialización Turística así como Geografía Turística y Medio  Ambiente que se imparten en segundo año, mientras que del primer semestre de  tercer año son Gestión de Restauración y Gestión de Alojamiento. También se  incluyen elementos de Gestión de Entidades de Ocio y Recreación así como  Gestión de Agencias de Viajes y Transporte Turístico de cuarto año.
El objetivo general del presente trabajo  es:
La metodología propuesta se corresponde con el programa de la asignatura DIEP ya que se extiende secuencialmente a través de los cuatro temas que se imparten, contribuye a que los estudiantes sean capaces de cumplir con los objetivos y habilidades de la asignatura y motiva la integración de contenidos de otras materias de la carrera. En este sentido se podría expresar que contribuye a la formación profesional de los estudiantes de Licenciatura en Turismo y que los podría ayudar en su futuro desempeño profesional; incluso una vez que sea validada en la práctica podría llegar a convertirse en un instrumento útil que tribute al desarrollo de nuevos productos turísticos y a la mejora de los mismos en aras de elevar la posición competitiva de las entidades que brindan servicios asociados a la hospitalidad.
DESARROLLO
                1.1 Bases Conceptuales:
                Existen muchos  conceptos de proyecto, el más integral y acorde con el objetivo de este trabajo  es el que enuncia Heredia (1997): “Combinación de recursos humanos y no  humanos, reunidos en una organización temporal para alcanzar un propósito  determinado.”
                Partiendo de esa  definición se propone el siguiente concepto de proyecto turístico:
  “Combinación de  recursos humanos y no humanos, reunidos en una organización temporal para crear  de manera sostenible un nuevo producto turístico, rediseñarlo, agregarle valor  o mejorar su comercialización”. 
                La metodología propuesta guía la  configuración de proyectos turísticos. Según Zamora (2009), la configuración es  un proceso iterativo que se desarrolla fundamentalmente en las dos primeras  etapas del Ciclo de Vida del proyecto, es decir antes de la ejecución del  mismo.
                Para alcanzar el éxito de un proyecto  primero se debe realizar su configuración de la forma más completa y detallada  posible; y luego se debe garantizar la gestión continua de la misma durante la  etapa de ejecución; incluso en la etapa de desactivación la evaluación final se  realiza tomando como patrón de comparación lo que se estableció en la  configuración. 
  1.2 Bases Metodológicas: 
                En el diseño de la  metodología se tuvo en cuenta en primer lugar la adaptación que realiza Perelló  (2009) de la Cadena de Valor de Porter ajustándola al ámbito de la actividad  turística. El Soporte de la Cadena de  Valor incluye todas las actividades para el proceso de transformación y  creación de los productos-servicios sobre la base de que las actividades de  valor son las que determinan ventajas competitivas y son factores de  diferenciación que generan productos valiosos para el cliente y los procesos  que la forman.
                En la metodología  propuesta además de las herramientas y técnicas tradicionales para estudiar el  mercado se incluye la Segmentación por Beneficios que propone Gutiérrez (2004) para conocer la construcción de las expectativas  de los clientes que se concretan en los beneficios buscados por los mismos.  Esto permite incluir en el diseño de la configuración actividades que agregan  valor, de esta forma se implementa el soporte de la Cadena de Valor  introduciendo en el diseño elementos de diferenciación que se traducen en  ventajas competitivas.
                Se incluyen también las  técnicas de la Gestión de Experiencias que propone Ulacia (2007): Ciclo de Servicio y Promesa de Valor Experiencial  (PVE) pues en la medida que se conozca con mayor precisión la experiencia que  se quiere transmitir con el producto-servicio en función de las necesidades y  expectativas de los clientes, se podrá también incluir elementos de  diferenciación en el diseño de la configuración del proyecto que agreguen valor  y se conviertan en ventajas competitivas.
                La siguiente base  metodológica que se tuvo en cuenta fue la Clasificación  de Productos Turísticos que realiza Martín (2010) pues esto va a  condicionar la Finalidad, el Objetivo General del Proyecto y el Diseño de la  Configuración.
                Según Heredia (1997)  existe una relación estrecha entre el Ciclo de Vida de los Productos y el Ciclo  de Vida de los Proyectos. 
                En este sentido se  podría afirmar que generalmente los proyectos turísticos originan un nuevo  producto que será puesto en valor turístico por una organización determinada; y  a su vez dicho producto turístico durante su ciclo de vida puede requerir un  nuevo proyecto para rediseñarlo, agregarle valor o mejorar su comercialización. 
                Por tanto la  configuración de los proyectos va a depender del tipo de producto turístico que  se esté diseñando o mejorando. 
                Tomando como punto de  partida el concepto de proyecto turístico que proponen las autoras y los  diferentes niveles de productos que considera Martín (2010) en su clasificación,  pueden constituir proyectos turísticos aquellos que se originen para diseñar o mejorar  los siguientes productos en sus respectivos niveles de desarrollo: 
Incluso  mediante proyectos turísticos y a partir del análisis que se incluye en la  metodología diseñada se puede ir incrementando el nivel de desarrollo de estas  instalaciones pues les permite pasar del nivel más bajo “servicio simple” hasta  “servicios básicos”, “servicios agregados”, “producto integrado” y “resort”.
                Los  proyectos podrían elevar la posición competitiva del producto “Instalaciones”  al ser implementados en Entidades de Alojamiento, de Restauración, de Ocio y  Recreación, de Comercio de Productos para el Turista, de Información Turística,  Sitios de Interés, así como para organizar eventos.
Según  Perelló (2001), los dos principales tipos de proyecto para  desarrollar productos en los destinos son: 
                Planificación  física y proyectos de inversión: consiste en alterar aspectos físicos del destino para crear y mejorar  equipamientos y aumentar el atractivo de los lugares. 
                Proyectos  para el desarrollo de productos comerciales: consiste en identificar mercados a los cuales vender la oferta existente  ligeramente modificada u organizada de diferente manera. 
                Además según Martín (2006), el destino no vende sino  que su gestión se enfoca a la comunicación promocional de los productos que lo  integran, por lo que los proyectos también están encaminados a esta variable de  la comercialización.
                El siguiente aspecto  que se analizó para el diseño fue la Metodología  para el desarrollo de productos turísticos de Gómez (2009), que se sustenta  en la conceptualización del producto como una oferta integrada.
                Este enfoque  posibilitó desagregar secuencialmente los momentos de estudio, diseño y  evaluación que se incluyen en la metodología contribuyendo a su integralidad.
                El último aspecto que  guió metodológicamente el diseño por ser el más específico y adentrarse más en  el tema fueron las Etapas en la  Definición de la Configuración de Zamora (2009), que incluye herramientas  específicas de la DIP como la Matriz de Marco Lógico (MML) y la estructura de  Desagregación de Proyectos (EDP) así como los elementos del Sistema de  Objetivos de los proyectos y el Estudio de Factibilidad.
  1.3 Metodología Integral para la Gestión de Proyectos  Turísticos.
                Las bases  metodológicas expuestas anteriormente constituyen la base del diseño. Las  herramientas y técnicas propuestas, que se adaptaron a los objetivos de la DIP,  fueron estudiadas por las autoras cuando cursaban la carrera Licenciatura en  Turismo, lo que propicia un enfoque de integración del contenido desde la  perspectiva del estudiante.  Además las  investigaciones realizadas sobre el tema y las experiencias acumuladas por las  autoras durante 5 semestres impartiendo la asignatura DIEP en la carrera  Licenciatura en Turismo en la modalidad presencial y por encuentros, han contribuido  a la mejora paulatina de la propuesta metodológica que se presenta.
                Las experiencias  aportadas por los estudiantes de la modalidad por encuentros fueron  significativas ya que la mayoría son cuadros de entidades que brindan servicios  asociados a la hospitalidad. La retroalimentación con los mismos al finalizar  cada semestre y en el semestre siguiente después de haber cursado la asignatura  arrojó que aproximadamente el 60% de los que son directivos han comenzado a  emprender proyectos en sus entidades siguiendo la metodología estudiada en  clases y hasta el momento esperaban resultados satisfactorios.
                Dada la relevancia de la configuración  en el éxito del proyecto, la metodología consta de cuatro fases que constituyen  los cuatro momentos previos a la ejecución de un proyecto:
  Conceptualización: se determina para qué surge el proyecto y cómo se va a  materializar. Se recoge la información necesaria para realizar el estudio de  oportunidad y determinar si se procede al diseño de la configuración.
  Diseño de la Configuración: se describe detalladamente QUÉ se va a  hacer con el proyecto y CÓMO se va a lograr. Se realiza el estudio de  pre-factibilidad del diseño propuesto que además puede servir como mecanismo de  control por lo que posibilita la mejora del diseño. 
  Organización de la  Ejecución: a partir de la  desagregación en tareas se determinan  los tres elementos del Sistema de Objetivos del proyecto: Plazo, Costo y  Calidad. Se construye la MML para garantizar la gestión de la configuración  durante la ejecución.
  Evaluación de la  Factibilidad del Proyecto: se demuestra la  factibilidad de la configuración propuesta para que se apruebe la inversión y  comience la ejecución del proyecto.
  Figura  1: Esquema Metodológico.
CONCLUSIONES:
REFERENCIAS:
TURyDES es una revista acadmica iberoamericana, editada y mantenida por el Grupo eumed●net de la Universidad de Mlaga.
Para publicar un artculo en esta revista vea "Sobre TURyDES ".
Para cualquier comunicacin, enve un mensaje a turydes@eumed.net
						
							 
						
					 | 
                    
                    
						
						Ofertas especiales de  Paquetes por Europa con Paris y Londres para los subscriptores de la revista. Visita ya Europa y conoce nuevos lugares y culturas.  |