EL TURISMO COMO FACTOR DE TRANSFORMACIÓN DEL SECTOR AGRÍCOLA DE BAHÍA DE BANDERAS, NAYARIT

EL TURISMO COMO FACTOR DE TRANSFORMACIÓN DEL SECTOR AGRÍCOLA DE BAHÍA DE BANDERAS, NAYARIT

Candelario Fernández Agraz
Universidad de Guadalajara

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1. INTRODUCCIÓN  

La crisis mundial acaecida en 1929 puso de manifiesto las fallas, carencias y omisiones del capitalismo industrial y de la economía internacional debido a la contracción y debilitamiento del patrón oro como base del sistema financiero mundial. Al mismo tiempo, la llegada al poder de los Bolcheviques en Rusia alertó a los ideólogos del liberalismo económico sobre posibles cambios y adecuaciones al sistema de producción de occidente. En respuesta, John Maynard Keynes introduce la idea de otorgar mayor participación al Estado en el ramo de la economía y erigir a éste como el eje rector de la vida económica y partícipe en las decisiones transcendentales en esta materia.
Nace así en el seno de la mayor crisis económica del siglo XX el modelo del Estado Benefactor que funge como réplica al modelo socialista llevado a la práctica por Lenin, Trosky y los ideólogos del comunismo en el llamado bloque oriental. Ambos sistemas se enfrascan en una abierta y franca competencia ideológica a lo largo del siglo XX que en la práctica se basaba en los beneficios y ventajas económicas y sociales que los ciudadanos de ambos bandos obtenían del sistema económico imperante en cada bloque.
La Segunda Guerra Mundial beneficia tanto a la economía norteamericana e inglesa como a la economía soviética debido al impulso que reciben éstas del financiamiento de la guerra. Al terminar este conflicto armado, los ingleses y los norteamericanos entretejen el modelo económico neoliberal diseñado para los países de América Latina, África y Asia con economías subdesarrolladas, pero con potencial industrial debido a la tenencia de recursos naturales poco explotados o vírgenes en especial de las industrias del petróleo, mineral, gas, explotación forestal y además de la inversión privada en el campo de los servicios y la industria del turismo para su comercialización y capitalización (Saxe-Fernández, 2006; Getino, 2007).
Aparejado a este nuevo sistema económico como herramienta para la dilatación y reproducción del capital, aparece el turismo, que se infiere no solo como un medio que aporta empleos, inversiones directas, divisas y liquidez, sino también como un modelo de sociedad importada a raíz del desarrollo de ésta como actividad económica y que paulatinamente va adquiriendo peso e importancia en la balanza de pagos y la contabilidad nacional (Lanfant, 1980).
De ésta manera, el modelo económico neoliberal no solo se aboca a determinar las prácticas económicas, sino que también influye en la organización del trabajo, las prácticas sociales, los modelos de formación profesional y trastoca hasta lo más profundo a la división y estructura social y económica. La industria del turismo, es en síntesis un modelo cultural que se adopta, se desarrolla y se arraiga en el país periférico como medio de expansión del neocapitalismo.
Durante la década de los ochenta y a finales de ésta, el modelo neocapitalista es finalmente implantado en la economía mexicana y sus consecuentes medidas económicas se manifestaron a través de políticas de liberalización de mercados, tasas de interés, mercado cambiario, eliminación de subsidios y control extenuante de salarios, políticas de liberalización del comercio exterior (exención arancelaria y no arancelaria) a las importaciones y políticas de contracción de la demanda agregada.
Consecuentemente, para la materialización del sistema neoliberal a través de la expansión de la industria del turismo en el caso de México, se abrió la puerta a la reforma del Artículo 27 constitucional que permite privatizar la propiedad ejidal y comunal (Morales & García, 2002), y asiente la entrada del capital privado doméstico y trasnacional para la explotación del territorio sobre todo en proyectos y megaproyectos de turismo de sol y playa y que generan gran cantidad de turistas, así como el crecimiento demográfico de los polos de desarrollo turístico. Por otra parte, se modificaron las leyes referentes a la inversión extranjera directa y propiedad empresarial, lo que permite a los inversionistas extranjeros ser dueños absolutos de sus inversiones tanto en el mercado financiero como en las inversiones fijas.
El neoliberalismo a través del turismo y la apertura del mercado nacional han provisto de empleos y divisas a la economía mexicana, sin embargo, la desigualdad en el desarrollo social y económico se ha profundizado en aquellas comunidades y grupos sociales en el ámbito rural donde se ha establecido el turismo como modo de producción. Éste ha generado cambios en la estructura socioeconómica cuyas acciones resaltan la importancia de esta actividad para el neocapitalismo como factor de reproducción del capital.
Los impactos de la industria turística en México se han producido básicamente por la ocupación del espacio, del uso de los recursos naturales y humanos, la generación de desechos y la alteración de la vida económica y social. Contrariamente, una de las grandes simplificaciones  y omisiones que se han hecho al analizar los impactos del turismo en zonas rurales es poner en un mismo rango los económicos con los sociales, cuando el primero corresponde a la estructura macroeconómica del país y el segundo corresponde no sólo al turismo sino al proceso de modernización coercitiva que éste genera, de allí que al dejar de ser campesino se genera un ciudadano urbano que puede estar en peores condiciones de calidad de vida que en el campo.
Los cambios en el rubro primario son visibles en la concepción de los hechos que derivan de lo social, es decir, el visitante viene a admirar y a aportar tanto en la cultura como en la conducta a través de la interacción interpersonal. El nativo adapta su cosmogonía e idiosincrasia mientras que el extranjero proviene de países donde el rubro social se exporta y modifica la conducta en aquellos países y regiones donde la actividad turística es dominante económicamente.
El medio ambiente natural generalmente se convierte en la base y atracción de los polos de desarrollo turístico, aunque son también ambientes frágiles y vulnerables a la presión humana lo que conlleva a su degradación progresiva y disminuir consecuentemente los recursos (Orozco et. al., 2008). La contaminación de los mantos acuíferos, el oprobio de los espacios naturales, el desarrollo urbano descontrolado y la eliminación de la flora y fauna endémica por la acción directa de la expansión de la actividad turística son las expresiones y costos de largo plazo que el turismo ejerce sobre el territorio local.
El turismo se ha constituido como el motor de la economía regional en las zonas turísticas del país debido a la generación de empleos y la entrada de divisas, sin embargo, la balanza comercial presenta saldo negativo dado el cúmulo de importaciones para ésta industria. Además, genera una distensión laboral lo que forja crecimientos pírricos de sectores como el primario en el área de alimentos lo que aumenta las importaciones agrícolas e inflación local.
México captó en 2004, 10,700 mdd por concepto de turismo internacional. Los ingresos de este rubro estuvieron a la par de los ingresos petroleros y las remesas enviadas por los connacionales radicados en los E.E.U.U., Secretaría de Economía, (SEC, 2009).  A nivel local, en el municipio de Bahía de Banderas, el crecimiento económico ejercido por la economía de servicios ha sido ligeramente superior al 7% a tasa anual y ha superado por mucho la media nacional que rebasa ligeramente el 3%. 
Según cifras del INEGI, de 2001 a 2007 la industria turística local se ha acrecentado. En 2001 la oferta hotelera en cuartos era de 4,725 unidades, y en 2007 la cifra creció a 15,181 1 cuartos lo que representa un crecimiento porcentual a tasa anual de 51%2 para el periodo (INEGI, 2008).
En comparación con el sector primario y en el mismo periodo, la agricultura paradójicamente, registró un decremento bastante significativo en el mismo periodo,  en 2001 la superficie sembrada por disponibilidad de riego sobrepasó las diez mil hectáreas, y  para 2007 la cantidad de hectáreas sembradas bajo esta misma categoría apenas si sobrepasó las 7000 unidades.
Para 2008, el INEGI registró algunos cultivos tradicionales tales como el mango, el tabaco y el sorgo bajo el rubro de “otros cultivos” al ser estas producciones ínfimas o apenas perceptibles. La baja en la superficie sembrada por disponibilidad de riego fue del 30% de 2001 a 2007 (INEGI, 2008).
Estas cifras comprueban el dinamismo y la contribución del turismo en la economía nacional y local comparados con otros sectores de la economía, en particular con el sector primario, cuyo crecimiento se ha visto limitado comparado con la diligencia del sector terciario en el caso de Bahía de Banderas.
El INEGI, efectúa bienalmente los censos económicos a nivel nacional; en el municipio de Bahía de Banderas estos estudios regionales cuantitativos no relatan ni correlacionan el descenso de las actividades agrícolas con alguna causa u origen, aunque aparentemente pueden provenir o son provocadas por el turismo. Sin embargo, evaluando las cifras ambos sectores, existe un efecto poco estudiado localmente, que relaciona el auge de la actividad turística y la decadencia de las actividades agrícolas.
En los últimos 40 años, el turismo ha contribuido en los cambios en el paisaje agrícola de Bahía de Banderas a través de la expansión económica del sistema de producción neoliberal y teniendo como consecuencia la modificación del entorno social, ambiental, y cultural en el sector primario. Ha facilitado la transición de una economía sustentada en la producción agrícola a una de producción de servicios, lo que ha ocasionado la modificación del entorno agrícola de manera tosca y abrupta, sin una planeación integral.  

2. OBJETIVOS

2.1 Objetivo general

Por tal razón, esta investigación pretende Analizar y valorar los cambios producidos por el desarrollo y crecimiento turístico en el sector agrícola de la zona de litoral y de riego del municipio de Bahía de Banderas, Nayarit, durante el periodo 1990-2010. Para ello, se llevará a cabo:

2.2 Objetivos específicos

  1. Documentar la evolución histórica socioeconómica de la zona del valle y del litoral del municipio de Bahía de Banderas, de inicios del siglo XX hasta 1990.
  2. Describir y registrar el desarrollo del turismo en la región que comprende la zona del litoral del municipio de Bahía de Banderas desde 1990 hasta antes de 2010.
  3. Describir y registrar del desarrollo de las actividades agrícolas en la región que comprende la zona de litoral y de riego del municipio de Bahía de Banderas desde 1990 hasta 2010.
  4. Identificar y describir los indicadores socioeconómicos del sector agrícola de la zona del litoral y de riego del municipio de Bahía de Banderas, Nayarit.
  5. Determinar y describir la forma en la que el turismo ha influenciado y propiciado la transformación del sector agrícola de la zona del litoral y de riego de Bahía de Banderas, Nayarit.

3. HIPÓTESIS

De lo esbozado previamente se desprende  el supuesto que: si el turismo en la zona del litoral y del valle del municipio de Bahía de Banderas, Nayarit, se comporta como mecanismo de expansión capitalista, entonces transforma contradictoriamente al sector tradicional (producción, campesinos y paisaje) de dicha región.

1 Éste dato incluye todos los cuartos construidos en todas las categorías, desde 1 estrella hasta gran turismo y diamante. La cifra en cuartos construidos se eleva drásticamente debido a que en las categorías de 1 a 4 estrellas fue donde se creció tanto en establecimientos como en cuartos construidos.

2 Datos obtenidos a partir de la correlación de datos del INEGI.