CALIDAD DE LA GESTIÓN ADMINISTRATIVA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y ADMINISTRATIVAS DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE ITAPÚA

CALIDAD DE LA GESTIÓN ADMINISTRATIVA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y ADMINISTRATIVAS DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE ITAPÚA

Enrique René Velázquez (CV)
Universidad Nacional de Itapúa

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CAPÍTULO 4

ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS

4.1 Diagnóstico Situacional de la FaCEA UNI
Proponer una herramienta administrativa que permita optimizar la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA, elaborando un Cuadro de Mando Integral con base en las Variables Administrativas Básicas señaladas por Idalberto Chiavenato (2 006)  partió de un diagnóstico situacional.
Dado que este diagnóstico situacional, constituyó sólo una primera etapa del trabajo, y la siguiente fue proponer una herramienta que contribuya a optimizar la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA y considerando las Variables Administrativas Básicas más problemáticas, el análisis se inició puntualizando esta perspectiva.
El análisis de los datos obtenidos, -en función a los objetivos de esta investigación-, llevó a un primer momento de precisión de valoraciones cuantitativas referidas a la Misión, Visión y Valores institucionales; así como las VAB definidas y desagregadas en el presente estudio. Luego, estas valoraciones fueron comparadas con los resultados globales referentes a fortalezas y debilidades. De esa manera, se pudo esbozar un Diagnóstico Situacional de la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA.
Este análisis se presenta a continuación:
Con respecto al conocimiento de la Misión de la FaCEA UNI, pudo observarse que la disminución del mismo estuvo en estrecha relación con la cantidad de integrantes por estamento, sintiéndose con mucha fuerza en aquellos con mayor cantidad de integrantes. Esta misma relación; pero con menor fuerza, se observó en la cantidad de encuestados que no respondieron a la pregunta formulada (docentes, 16,00 %; y alumnos, 18,85 %).
Teniendo en cuenta los criterios de esta investigación y atendiendo lo que representa el conocimiento de la razón de ser institucional; y, más aún por el hecho de que la calificación corresponde a una institución educativa, se constituyó en una información muy significativa, en el estamento docente. Puesto que señaló una falencia conectada con la comunicación al interior de la institución y las estrategias utilizadas para ello, relacionadas con las condiciones del ambiente y las técnicas administrativas apropiadas para lograr los objetivos de la organización en constante cambio.
En el contexto de lo expresado por Martín Flor Romero (2 006), en cuanto a que un diagnóstico debe ser integral y sistémico, se puede señalar que este desconocimiento, sobre todo por parte de los docentes, pudo haber disminuido las fortalezas y oportunidades vinculadas con el logro de objetivos institucionales.
Otro dato significativo tuvo que ver con lo que señaló Enrique Benjamín Franklin (2 000) en que un diagnóstico situacional debe considerar la trayectoria histórica de la organización. En este sentido, debe mencionarse lo siguiente: la FaCEA tiene 10 años de funcionamiento, en los últimos cuatro se habilitaron tres nuevas sedes en el interior del departamento de Itapúa, lo que ha significado un incremento importante en la incorporación de nuevos docentes, alumnos y funcionarios, que no tuvieron tiempo suficiente para internalizar este conocimiento; la necesidad de formar parte del proceso de evaluación y acreditación de carreras universitarias llevó a replantear la misión institucional y que el mismo no ha finalizado.
De modo que, puede afirmarse que las condiciones del ambiente pudieron contribuir a este desconocimiento de la misión de la FaCEA por parte de la mayoría de los docentes y alumnos, así como algunos funcionarios.
Consecuentemente, al considerar las variables administrativas básicas, puede afirmarse que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA fue afectada negativamente por este hecho.
En relación a las respuestas vertidas por los encuestados, se presume que las personas que no respondieron la pregunta, no quisieron responderla o no la interpretaron (por desconocimiento del significado Misión o conocen la Misión de la FaCEA a medias). En los dos casos citados, el no proporcionar ninguna respuesta pudo entenderse más bien como el desconocimiento antes que el conocimiento de la Misión institucional.
Se optó por reconocer que el conocimiento de la Misión de la FaCEA UNI, incluyendo los distintos estamentos, obtuvo la calificación 3 (tres), lo que significa que se encuentra debajo del mínimo requerido para contribuir en optimizar la calidad de la gestión administrativa de la misma.
Con todo lo expuesto, se evidenció el desconocimiento de la Misión de la FaCEA UNI por un grupo significativo de integrantes, lo que demuestra que no se encuentra internalizada de manera efectiva; y principalmente, en los estamentos de docentes y de alumnos.
El análisis de los datos recogidos con referencia a la disminución del conocimiento de la Visión de la FaCEA UNI fue en estrecha relación con la cantidad de integrantes por estamento, sintiéndose con mucha fuerza aquel con mayor cantidad de integrantes. Esta misma relación, pero con mayor fuerza que en el caso de la Misión institucional, se observó en la cantidad de encuestados que no respondieron a la pregunta formulada (funcionarios, 4,00 %; docentes, 24,00 %; y alumnos, 21,24 %).
Teniendo en cuenta los criterios de esta investigación y atendiendo lo que representa saber el futuro deseado institucional; y, más aún por el hecho de que la calificación corresponde a una institución educativa, todo resultado menor a una calificación de 4 (cuatro) no pudo ser considerado aceptable. En este sentido, si se califica tomando en cuenta el total de los encuestados sin diferenciación de los estamentos como referencia, el porcentaje alcanzado es de 46,03 % y con este porcentaje se obtuvo la calificación 1 (uno).
Pero, al promediar los porcentajes obtenidos por cada estamento los valores llegaron al 74,066 %, resultando como calificación 3 (tres). Al promediar las calificaciones obtenidas por cada estamento también se obtuvo la calificación 3 (tres). En todos los casos, pudo concluirse que correspondieron a calificaciones por debajo de lo aceptable para optimizar la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA.
Al igual que en el caso del conocimiento de la Misión, pudo suponerse que las personas que no respondieron la pregunta no desearon responderla o no la interpretaron (por desconocimiento del significado Visión o conocen la Visión de la FaCEA a medias). Por ello, en los dos casos, el no proporcionar ninguna respuesta dio a entender más bien el desconocimiento antes que el conocimiento de la Visión institucional.
Finalmente, se concluyó que el conocimiento de la Visión de la Facea UNI por sus integrantes, correspondía a la calificación 3(tres) y se encuentra muy por debajo de lo requerido para considerarlo como un elemento que permita optimizar la calidad de la gestión administrativa de la institución.
Con todo lo expuesto, se evidenció el desconocimiento de la Visión de la FaCEA UNI por un grupo bastante numeroso de integrantes (inclusive mayor a los resultados obtenidos sobre la Misión institucional), lo que demostró que tampoco la Visión se encontraba internalizada de manera efectiva; y de un modo importante, en el estamento de alumnos y de forma relevante en el estamento docente.
Este desconocimiento por un grupo significativo, tanto de algunos integrantes de los diferentes estamentos, -excepto el de directivos y egresados-, y teniendo en cuenta lo expresado por Martín Flor Romero (2 006) con respecto a la Visión institucional, en el sentido de que guarda relación con el deseo futuro de transformar la realidad, determinó, -en términos de calidad de gestión-, que la construcción de esta nueva realidad se vio como difícil en un corto plazo.
Se decidió no repetir lo ya expresado con respecto al desconocimiento de la Misión y sus causas y efectos vinculados con la calidad de gestión administrativa de la FaCEA UNI.
No obstante, se consideró pertinente insistir en que, al igual que en el caso de la Misión, la determinación y expresión de la Visión de la FaCEA fue debatida y aún no ha finalizado el replanteo de la misma. De ahí que, este cambio inconcluso aún, pudo haber sido una de las causas de este desconocimiento.
Los Valores declarados con mayor frecuencia por los 10 directivos y 25 funcionarios de la FaCEA UNI, fueron los siguientes: En el estamento directivo se repitieron HONESTIDAD (4 veces); SOLIDARIDAD (2 veces) y RESPETO (2 veces). Entre los funcionarios de la sede Encarnación se repitieron RESPETO (8 veces); RESPONSABILIDAD (5 veces); HONESTIDAD (3 veces) y COOPERACIÓN (3 veces). Entre los funcionarios de María Auxiliadora se repitió PARTICIPACIÓN (2 veces). Entre los funcionarios de la sede Natalio y los funcionarios de la sede Coronel no se encontraron repeticiones.
Hubiese sido imprudente afirmar de un modo categórico que éstos son los Valores que se manejan en la FaCEA UNI. Asimismo, debe señalarse que no fueron expuestos en forma explícita en un documento oficial, lo que no permite una comparación. No obstante, estas manifestaciones expresaron una intención en la gestión individual, por lo que habría menor resistencia para su aceptación y difusión.
Con relación al Análisis de cada una de las seis Variables Administrativas Básicas (VAB) consideradas, pudo observarse cuanto sigue: 
Se ha coincidido con Idalberto Chiavenato (2 006) ,-e independientemente del énfasis dado por los diferentes enfoques teóricos de la Administración-, en que el comportamiento de las VAB es sistémico, complejo y  no puede considerarse como una simple sumatoria de todos los componentes. De ahí que estas valoraciones cuantitativas, -en un diagnóstico situacional-, necesariamente requirieron ser leídas y vinculadas con la situación actual y la trayectoria histórica de la FaCEA como organización de educación universitaria de carácter público, en el contexto local, departamental, nacional y regional.
Consecuentemente, analizar los datos recogidos e interpretarlos en este marco teórico y de investigación, hizo posible un diagnóstico situacional de la FaCEA, en una primera etapa de la elaboración de una herramienta administrativa, que si se diesen las condiciones –enmarcada en la Teoría Contingencial - contribuiría a optimizar la calidad de la gestión administrativa de la misma.  
El proceso reveló que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA, atendiendo el valor promedio general por sedes y/o variables, fue 3,42 (tres enteros con cuarenta y dos centésimas). Este promedio fue inferior a 4 (cuatro); valor definido como satisfactorio en esta investigación.
De singular importancia, en este análisis e interpretación, ha sido el considerar la interdependencia entre las seis VAB. Pero, a los fines de este estudio se las individualizó y desagregó; lo que no implica dejar de señalar dicha interrelación entre las mismas.
Desagregar las VAB permitió realizar un análisis y una interpretación más apropiada y puntual de la situación. Por lo tanto, se presentan a continuación la diferenciación por sedes y por VAB desagregada.
El promedio por cada sede no presentó diferencias significativas, aunque Coronel Bogado y Encarnación (en ese orden) mostraron valores más cercanos al satisfactorio. En cambio, Natalio y Maria Auxiliadora se alejaron de ese resultado. Véase Cuadro Nº 8.
Estas diferencias en los promedios por cada sede, pudieron vincularse con la posibilidad de acceso por su ubicación geográfica, la distancia entre la sede central (Encarnación) y las situadas en el interior del Departamento de Itapúa; así como los años de funcionamiento de las mismas como institución educativa.
Analizar de un modo más detallado y ahondando la interpretación de la situación actual de la FaCEA y su trayectoria histórica como institución, implicó ir desglosando los aspectos particulares, -siempre en términos de valores promedios-, desde la perspectiva de cada una de las seis VAB y su desagregación, vinculando la información más pertinente con el ámbito de las sedes y estamentos.
Al analizar las seis variables consideradas se ordenaron según el criterio de su mayor y menor distancia del valor cuatro (establecido como satisfactorio). De ahí que la amplitud de la brecha correspondió al siguiente orden: Estructura (0,89), Competitividad (0,69), Tarea (0,69), Tecnología (0,50), Persona (0,34) y Ambiente (0,33).
La VAB Estructura fue identificada con el menor valor promedio (3,12) en relación al valor definido como satisfactoria para la calidad de la gestión administrativa. Véase Cuadro Nº 9.
De modo que, en términos globales la calidad vinculada con la forma, el estilo de la organización, es básica; pero, que reúne solamente una parte de los elementos que permitan lograr los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo y darse una mejoría de la misma. Consecuentemente, esta VAB constituye una dimensión que debe ser atendida en forma prioritaria. Cabe señalar que esta situación coincide con el énfasis dada por esta variable por la teoría clásica de la Administración.
Si bien el promedio general de la VAB Estructura se valoró como básica, se requirió una profundización del análisis de los datos obtenidos, considerando las sedes, la desagregación de la VAB y los estamentos consultados.
Al desagregar la VAB Estructura, el análisis cuantitativo mostró (véase Cuadro Nº 9), que los valores promedios en todas ellas no alcanzaron a satisfactorio, variando entre escasa en tres de ellas y básica en dos. Esta desagregación reveló cuanto sigue:

    • El valor promedio más bajo guardó relación con la Infraestructura (2,89), definida como relación existente entre el espacio físico ocupado y la necesidad real de espacio. También, se evidenció que la actual Estructura organizacional -en relación al tamaño de la facultad- y la Seguridad de los dispositivos para proteger los bienes y documentos, desde la perspectiva de la calidad de la gestión administrativa, fueron valoradas como escasa en función de la calidad de la gestión administrativa de la institución. De modo que, en estos aspectos existen muy pocos elementos que permitan acrecentar la calidad de esta gestión en un mediano plazo. Consiguientemente, debe intervenirse sobre ellos con precedencia.
    • Con respecto a la cantidad de máquinas e insumos así como el aprovechamiento del espacio físico en la distribución de oficinas, aulas, muebles y equipos (layout) se valoró como básica.

El análisis por sede y VAB también mostró una diferencia entre Coronel Bogado y Encarnación por una parte, Natalio y María Auxiliadora por otra; aunque ninguna de ellas pudo valorarse como satisfactoria. Puesto que, con relación a la calidad de la gestión administrativa, en las dos primeras se valoraron como básica y en las dos últimas como escasa. Véase Figura Nº 5.
En este sentido, los valores inferiores más alejados del cuatro, -considerado como satisfactorio-, correspondieron a Infraestructura en María Auxiliadora y Estructura Organizacional en Natalio.  Y aquellos que se aproximaron en mayor grado al cuatro fueron Layout en Coronel Bogado, Encarnación y Natalio; Seguridad e Infraestructura en Coronel Bogado.
Desde la perspectiva de los estamentos consultados pudo observarse que las tendencias en las respuestas de los directivos y docentes, comparadas con las de los funcionarios de cada sede, no fueron similares. Estas situaciones particulares de diferenciación se detallan a continuación:

    • Los directivos como estamento, opinaron que la VAB Estructura, con relación a la calidad de la gestión administrativa, como promedio general es escasa. Puesto que la Estructura organizacional, la Infraestructura y la Seguridad se valoraron como escasa aunque los aspectos Layout, Maquinarias y herramientas fueron valoradas como básica.
    • Los funcionarios mostraron diferencias al considerar las sedes de las que forman parte. Las valoraciones de los funcionarios de las sedes María Auxiliadora y Natalio fueron inferiores a las de Encarnación y particularmente a las de Coronel Bogado.

Consecuentemente, si bien existieron diferencias entre las valoraciones por sedes y al interior de la VAB Estructura, ésta es la que presentó un menor valor respecto a la situación considerada como satisfactoria.  Puesto que en opinión de los consultados, el espacio físico adolecía de una deficiente distribución, atendiendo lo necesitado y lo utilizado.  Asimismo, al analizar las debilidades señaladas particularmente por los estudiantes y los funcionarios de las sedes del interior del departamento éste fue uno de los aspectos señalados como deficitario.
La VAB Tarea mostró uno de los valores más bajos en relación al definido como satisfactorio. Véase Cuadro Nº 9. De modo que, las características de la actividad desarrollada por las personas en un tiempo determinado, afectan de un modo significativo la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA en general.
Al ser desagregada esta VAB Tarea en Acción, Secuencia, Efectividad, Supervisión y Tiempo, se observó que la calidad de la gestión desde esta perspectiva, es Básica. Es decir, que reúne sólo una parte de los elementos que permiten lograr los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo. Puesto que existe una brecha entre la realidad y el valor definido como satisfactorio.  Véase Figura Nº 8. No obstante, es susceptible de darse una mejoría de la situación en un corto y mediano plazo.
Sin embargo, al diferenciar los promedios de la VAB Tarea en las sedes, se pudo notar que el valor de la calidad de la gestión administrativa correspondiente fue inferior a la definida como Básica en María Auxiliadora. Es decir, que en esta sede la calidad se consideró como Escasa. Al profundizar el análisis, desagregando la VAB Tarea y diferenciando las sedes, se pudo detectar que los valores más bajos correspondieron a Supervisión, Acción y Secuencia, de un modo particular en la sede María Auxiliadora.
Puntualizando esta situación, desde el contexto de cada sede y los estamentos consultados, se percibieron muchos aspectos coincidentes y unos pocos divergentes. En la mayoría de los casos, excepto en María Auxiliadora, fueron los directivos quienes percibieron con mayor fuerza la falta de calidad en la VAB Tarea con relación a Tiempo, Acción y Efectividad. Sin embargo, en María Auxiliadora, los funcionarios fueron quienes señalaron falencias en la Secuencia y Supervisión.
Por lo tanto, existe dificultad para comprender los pasos, de un modo ordenado, de la realización de las actividades y que algunos niveles de dirección de la estructura organizacional han percibido que no se ejerce el control necesario de las tareas y responsabilidades de otros.
Una gestión administrativa con escaso control requiere una toma de decisiones a partir de los directivos y movilizar a los funcionarios y docentes para una tarea de mayor calidad. Considerando, la misión, visión y valores institucionales afecta el cumplimiento, no sólo al desempeño de funcionarios y docentes, sino el de los planes y programas de estudios de las carreras habilitadas.
El tiempo, -definido en relación a la rapidez con que se obtiene respuesta a alguna inquietud académica o administrativa-, se valoró entre escasa y básica por parte de directivos y alumnos (especialmente los directivos). La dificultad referida al componente Tiempo también pudo relacionarse con que los canales y estrategias referidas a la comunicación son deficitarios. En relación a la perspectiva de los alumnos también pudo vincularse con la distancia de la sede a la central.
Por lo tanto, se necesitaría una mayor agilidad relacionada con el tiempo de las tareas, teniendo en cuenta que en una organización educativa existen plazos vinculados con los objetivos a cumplir en meses, semestres y años.
De modo que puede afirmarse que la FaCEA, tiene dificultades para detectar y satisfacer las demandas y expectativas de sus clientes y usuarios en un tiempo apropiado; y que los recursos empleados no contribuyen de un modo efectivo para lograr los objetivos de la misma.
Consiguientemente, la brecha entre la calidad satisfactoria y la situación actual, -desde la perspectiva de la Tarea-, puede considerarse como una de las más amplias. Una de las causas de esta situación, puede suponerse que se vincula con la falta de actualización del reglamento interno para responder efectivamente al crecimiento y la complejificación de la organización.
Por lo tanto, mejorar la calidad de la gestión, desde la perspectiva de la Tarea, en particular en la sede María Auxiliadora, es una cuestión prioritaria y se debe intervenir sobre todos los elementos de la misma en un corto plazo.
La VAB Competitividad, -entendida como la capacidad que tiene una organización en ofrecer servicios y/o productos en mejores condiciones, y de acuerdo a las exigencias y necesidades de las personas que requieren de estos servicios y/o productos-, es enfatizada por los teóricos que pertenecen al grupo denominados Nuevos enfoques en la Administración que surgen a partir de 1 990.
El análisis de esta variable, en esta investigación pretende diferenciar esta FaCEA UNI de otras organizaciones educativas del nivel universitario, atendiendo el costo de la matrícula, la cantidad de egresados y la calidad con relación a la conformidad con las exigencias, de directivos, funcionarios, docentes, alumnos, egresados, visitantes, empresarios y proveedores.
De las seis VAB analizadas, Competitividad fue la segunda con el menor valor (Véase Cuadro Nº 9), y por debajo del valor definido como satisfactorio.
La calidad de la gestión administrativa de la Facultad en esta variable Competitividad, -en los promedios desagregados y en cada sede-, fue valorada como básica. Es decir, que en promedio existió una brecha entre la situación actual y la deseable; lo que significó que la calidad de la gestión reunía sólo una parte de los elementos que permitan lograr los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo y darse una mejoría de la misma.
Al desagregar la VAB Competitividad se observó que los promedios generales en los tres componentes de la misma, respecto a la calidad de la gestión administrativa de la Facultad, fueron valoradas como básica. Es decir, inferiores al promedio de la VAB y por ende al valor definido como satisfactoria. Una excepción fue el caso específico de la calidad en la sede Encarnación, donde se alcanzó el valor cuatro o satisfactorio.
El análisis de la VAB Competitividad también reveló que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA, en los promedios generales por sede, fue considerada como básica. Por lo tanto no superaron el valor establecido como satisfactorio. (Véase Cuadro Nº 12).
Asimismo, al analizar la desagregación de la VAB Competitividad, se observó que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA va desde el menor valor en la cantidad de egresados en relación a la población de la FaCEA -, y de un modo particular de parte de los egresados en Encarnación -; aumentando en forma creciente hacia la calidad vinculada con la validez de lo aprendido para la práctica profesional -desde la perspectiva de los egresados-; la calidad de las instalaciones en tres de las sedes (María Auxiliadora, Natalio y Coronel Bogado); el costo de la matrícula; la calidad de los conocimientos recibidos por el profesional egresado; la calidad de la enseñanza; y el prestigio de la FaCEA. Véase Figuras Nº 10, Nº 13, Nº 14, Nº 15, Nº 16 y Nº 17.
Desde la perspectiva de los egresados, la calidad de la gestión administrativa de la Facultad es escasa en cuanto a la cantidad de egresados en relación a la población de la FaCEA. Véase Figura Nº 12.
De modo que la percepción referida a la Competitividad, aunque en general es considerada como básica difiere considerablemente en algunos componentes de la variable, especialmente en María Auxiliadora y Encarnación. Por ello, amerita intervenciones puntuales según el componente y la sede considerada.
La VAB Tecnología, según Flor Romero (2 006) guarda relación con el conjunto de conocimientos técnicos especializados que se aplican para satisfacer las necesidades humanas y empresariales; y es enfatizada por las teorías que consideran la Administración como una ciencia. El análisis de esta VAB, en este trabajo de investigación pretendió proporcionar la información para valorar los sistemas y herramientas utilizadas en la gestión administrativa. De las seis VAB consideradas, es la cuarta con el menor valor (Véase Cuadro Nº 9), y por debajo del valor definido como satisfactorio.
De modo que la calidad de la gestión administrativa de la Facultad mostró en esta variable Tecnología, -en los promedios desagregados y en cada sede-, ser valorada sólo como básica. Es decir, que en promedio existió una brecha de 0,50 entre la situación actual y la deseable. Esto significó que la calidad de la gestión reunía sólo una parte de los elementos que puedan permitir el logro de los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo.
Al analizar la desagregación de la VAB Tecnología, se observó que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA pudo valorarse desde el menor valor en la utilidad del hardware y software informático utilizado en las distintas dependencias -, y de un modo particular de parte de los directivos y los funcionarios en Encarnación y Natalio -, pasando en forma creciente por: la predisposición para la I+D de nuevas opciones académicas y administrativas; la practicidad de los métodos y técnicas de trabajo utilizados; la productividad en la gestión académica y administrativa; y la validez de los registros y el sistema de archivos. (Véase Figuras Nº 18, Nº 19, Nº 20, Nº 21, Nº 22, Nº 23 y Nº 24.)
Por lo tanto, al desagregar la VAB Tecnología se observó que todos los componentes de la misma se encontraban por debajo de la media general y por ende en relación a la situación establecida como deseable o satisfactoria.
El análisis desde la perspectiva de las cuatro sedes, reveló que los promedios generales no superaron el valor establecido como satisfactorio. Estos promedios variaron desde el menor valor en María Auxiliadora y en orden ascendente a Encarnación, Natalio y Coronel Bogado. En Encarnación y Natalio, -en ese orden-, la Tecnología fue valorada como escasa, con relación a la utilidad del hardware y software informático utilizado en las distintas dependencias. Todos los demás aspectos de esta VAB en las cuatro sedes fueron valorados como básica en el contexto de la calidad de la gestión administrativa. (Véase Cuadro Nº 12).
Desde la perspectiva de los directivos, se obtuvieron dos valores inferiores extremos, -señalando como escasa la calidad de la gestión administrativa de la Facultad-, con relación a los Medios informáticos así como en la Investigación y el desarrollo. Véase Figuras Nº 20 y 21.
Consiguientemente, pudo afirmarse que la situación de la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA vinculada con la Tecnología mostró una brecha entre la realidad y la situación deseable tanto en general como en algunos aspectos específicos para ser coherentes con la misión y visión institucionales.
La VAB Persona, que incluye los recursos humanos y sus talentos, cobra particular relevancia desde la perspectiva de las teorías de las Relaciones Humanas, del Comportamiento Organizacional y del Desarrollo Organizacional.
En esta investigación, realizada con el objetivo de un diagnóstico situacional de la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA, la VAB Persona fue identificada con un valor promedio inferior al definido como satisfactoria. De modo que, en términos globales la calidad vinculada con los integrantes de la organización, con sus talentos, comportamientos y características fue valorada como básica. Es decir, que reúne solamente una parte de los elementos que permitan lograr los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo. De modo que, esta VAB constituye una de las dimensiones que debe ser atendida en forma prioritaria; no obstante haberse encontrado algunos aspectos puntuales en que los valores alcanzaron el valor cuatro.
Si bien el promedio general de esta VAB pudo ser valorado como básico, se requirió una profundización del análisis de los datos obtenidos, considerando las sedes, la desagregación de la VAB y los estamentos consultados.
Al desagregar la VAB, el análisis cuantitativo mostró (véase Cuadro Nº 14), que los valores promedios en todas ellas no alcanzaron a satisfactorio, pero se mantuvieron en básica. Esta desagregación reveló que el valor promedio más bajo guardaba relación con la Comunicación e información, -definida como la calidad de la comunicación y el flujo de la información formal en la FaCEA-, y que fuera valorada como básica, en función de la calidad de la gestión administrativa de la institución. De modo que, en este aspecto la calidad de la gestión reúne sólo una parte de los elementos que permitan lograr los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo. Por lo tanto, se hace necesario implementar acciones que la mejoren.
Si bien el componente Comunicación e información fue el valor más bajo con relación a la media en esta variable, esto no significa que los demás componentes no deberían ser considerados como prioritarios. 
El análisis por sede y VAB no mostró una diferencia significativa entre las sedes, -excepto en alumnos y funcionarios en María Auxiliadora -, pero, en ninguna de ellas se valoró como satisfactoria. Pero, al igual que las VAB ya analizadas (Tarea y Estructura) el valor más bajo se dio en María Auxiliadora.
Los valores más alejados del cuatro, considerado como satisfactorio, correspondieron a Comunicación e información en tres de las sedes y en Actitud en Coronel Bogado.  En Encarnación la Aptitud alcanzó el valor establecido como satisfactorio.
El análisis por estamento, mostró que en la mayoría de ellos, -particularmente con relación a la opinión de directivos, alumnos, docentes y funcionarios-, la calidad de la comunicación e información como parte de la VAB Persona, constituye una deficiencia en función a la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA. Asimismo, al considerar el total de la muestra seleccionada para los seis estamentos, se demostró que menos del 80%, -establecido como porcentaje satisfactorio-, coincidió en que la calidad de la comunicación e información era satisfactoria.
De todo lo expuesto con relación a la VAB Persona, se pudo inferir que la mayoría de los directivos, docentes, funcionarios y alumnos coincidieron en que la Comunicación e información constituía uno de los componentes más deficitarios en la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA
El análisis de la VAB Ambiente, entendida como el conjunto de condiciones internas y el entorno inmediato que pueden influenciar en el comportamiento de la organización FaCEA, - enfatizada por las teorías Estructuralista y de la Contingencia-, ha mostrado que de las seis VAB seleccionadas en este trabajo es la variable que obtuvo el mejor promedio (Véase Cuadro Nº 9), aunque por debajo del valor definido como satisfactorio.
De modo que la calidad de la gestión administrativa de la Facultad mostró su cima en esta variable Ambiente. Pero, no obstante que la credibilidad de la FaCEA en relación a sus competidores directos haya resultado el valor establecido como satisfactorio, en los demás aspectos consultados, -con relación a esta variable-, se observó que fueron valorados, con respecto a esta calidad de la gestión administrativa, sólo como básica. Es decir, que en promedio existió una brecha entre la situación actual y la deseable; lo que significó que la calidad de la gestión reunía sólo una parte de los elementos que permitan lograr los objetivos de la institución en un corto y mediano plazo.
Al analizar la desagregación de la VAB Ambiente, se observó que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA respecto a esta variable mostró el menor valor en compromiso de los Proveedores en los servicios que prestan, y de un modo particular de parte de los directivos. Luego, en forma ascendente, los valores se refirieron al nivel de conocimientos, capacidades y predisposición de los alumnos para cumplir con sus tareas, -desde la perspectiva de los docentes-; la rapidez con que se aceptan y adaptan a los cambios incorporados; el comentario (positivo) que efectúan los estudiantes con relación  a la formación que reciben desde la mirada de los demás estamentos; la calidad de la atención que recibe el estudiante en las distintas dependencias, -según directivos, funcionarios, docentes, alumnos y visitantes-; la cantidad de tiempo que se destina al estudio -según los postulantes al ingreso; y la credibilidad de la institución en relación a sus competidores directos (alumnos). (Véase Figuras Nº 31, Nº 32, Nº 33, Nº 34, Nº 35 y Nº 36)
Al desagregar la VAB Ambiente se observó que excepto en Competidores y Servicios, los demás componentes se encontraban por debajo de la media general en esta variable y por ende de la situación establecida como deseable o satisfactoria.
El análisis desde la perspectiva de las cuatro sedes, reveló que los promedios generales por sede no superaron el valor establecido como satisfactorio, variando desde María Auxiliadora, y en orden ascendente, Encarnación, Coronel Bogado y Natalio. Al igual que en las tres variables ya analizadas, en María Auxiliadora, -excepto a la credibilidad de la FaCEA en relación a sus competidores directos-, fue considerada entre escasa (en el compromiso de los proveedores en los servicios que prestan) y básica en los demás aspectos consultados en esta VAB Ambiente. (Véase Figura Nº 32)
Otro valor inferior extremo se dio en María Auxiliadora, desde la perspectiva de sus funcionarios, con respecto a la escasa rapidez con que en la FaCEA se aceptan y adaptan a los cambios incorporados. Pero, los mismos señalaron que la calidad de la atención que recibe el estudiante en las distintas dependencias y la credibilidad de la FaCEA en relación a sus competidores directos eran satisfactorias. Al comparar estos resultados en María Auxiliadora, con los obtenidos en las otras tres sedes se notó que diferían con la valoración de escasa con relación a la Creatividad y la innovación; pero, que Natalio y Coronel Bogado coincidían en líneas generales con respecto a los Servicios y Competidores. En tanto, Encarnación como sede central coincidió con estas dos últimas sedes con relación a Competidores pero difirió con respecto a Servicios y Creatividad e innovación.
Consecuentemente, en la VAB Ambiente, desde la perspectiva de la situación en las distintas sedes, se notó que en todas ellas la situación con relación a la calidad de la gestión administrativa, es básica, pero que en María Auxiliadora es inferior a la media general de esta variable.
El análisis de los datos obtenidos en forma parcial, se resumió señalando que la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA, no alcanza el grado considerado como satisfactorio.
De ahí que, el replanteo de la misión y visión institucional, así como los valores que vertebran la gestión institucional, es una acción prioritaria y de fundamental trascendencia desde la perspectiva del mejoramiento continuo en un corto plazo. 
El desconocimiento y la no consolidación de las ideas referidas a la misión, visión y valores institucionales, -en el momento de recoger y analizar la información-, aunque es una situación negativa y que ejerce un impacto importante en relación a la determinación de metas y la competitividad de la institución, es propia de las organizaciones que necesariamente deben acompañar los cambios que se dan tanto en el interior como en el exterior de la misma. No obstante, este replanteo debe ser coherente y permanecer de tal manera que exista unidad en la toma de decisiones referidas a la acción institucional para lograr sus objetivos a corto, mediano y largo plazo y de esa manera optimizar la calidad de la gestión administrativa de la FaCEA, en todas las sedes y atendiendo la Misión y Visión institucionales así como todas las VAB consideradas.  Puesto que es evidente que debe concentrarse en el desarrollo de productos y servicios, cada vez con mayores atributos y a un precio más competitivo.  
Con relación al promedio de cada una de las VAB seleccionadas en esta investigación, ninguna de ellas reveló diferencias muy acusadas entre las mismas. Ambiente, Persona y Tecnología (en ese orden) fueron las que más se aproximaron al valor establecido como satisfactorio. En cambio, las que más se alejaron fueron Estructura, Tarea y Competitividad. (Véase Cuadro Nº 9).
Se reconoce que, -en términos de grado de calidad de la gestión administrativa de la FaCEA-, variables como Ambiente, Persona y Tecnología alcanzaron valores más cercanos al satisfactorio; indicando mayor calidad de la gestión en los aspectos relacionados con las mismas. Pero, el hecho de que el 50% de dichas variables, - Estructura, Tarea y Competitividad-, estén alejados de ese valor indicando menor calidad, pudo inferirse que las mismas constituyan debilidades y amenazas muy significativas. Esto conlleva que la gestión de la FaCEA, en un corto plazo debe ser optimizada, buscando herramientas y estrategias que hagan posible lograr los objetivos institucionales.

De modo que optimizar la calidad de la gestión implica lo siguiente:

  • el espacio físico resulta insuficiente por lo que amerita una redistribución para optimizar la utilización del lugar disponible, los recursos informáticos de la institución deben ser incrementados y manejados más efectivamente, así también se evidencia la necesidad de actualizar la estructura organizacional con una departamentalización acorde a las necesidades actuales;
  •  la actividad desarrollada, sobre todo en cuanto a la uniformidad de procedimientos debe ser actualizada y estandarizada, debe ser más efectiva y atendiendo el tiempo establecido para ello;
  • la capacidad para ofrecer servicios y/o productos debe estar en mejores condiciones y acorde a las exigencias y necesidades de las personas que requieran aquellos, incrementando la cantidad de egresados en relación a la población de la FaCEA vinculada con el aprendizaje de los alumnos.
  • La calidad de la comunicación y el flujo de la información debe ser mejorada utilizando canales efectivos y formales.
  • El compromiso de los proveedores debe ser incrementado exigiendo calidad de los insumos ofrecidos. 

Este Diagnóstico Situacional, permitió identificar los elementos pertinentes para elaborar o diseñar un Cuadro de Mando Integral que permita monitorear la calidad de la gestión administrativa pudiendo así efectuar las correcciones o innovaciones necesarias para optimización.
Se ha evidenciado que la calidad de la gestión de la institución debe propiciar un ambiente que potencie las habilidades y destrezas que favorezcan las orientaciones a un futuro deseado. Por lo que se requiere de una mayor claridad en relación a las necesidades de los actores para así convertir una ventaja comparativa en una ventaja competitiva en beneficio institucional.