RETOS EN LA FORMACIÓN DE PROFESIONALES LOGÍSTICOS: SERVICIO Y COMPETITIVIDAD

RETOS EN LA FORMACIÓN DE PROFESIONALES LOGÍSTICOS: SERVICIO Y COMPETITIVIDAD

Mauricio Igor Pecina Rivas (Compilador) (CV)
Universidad Autónoma del Estado de México

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LA INTELIGENCIA EMOCIONAL Y LA LOGÍSTICA

Mtra. Ana Luisa Flores Torres

 

“Las emociones descontroladas pueden hacer estúpido al inteligente”
Doug Lennick


INTRODUCCIÓN
Aparentemente la inteligencia emocional, nuevo enfoque dado a la inteligencia humana, no tiene mucho que ver con el mundo empresarial, principalmente con el ámbito de la Logística, pues de manera equivocada consideramos que tiene  una connotación fría y hasta cierto punto “masculina”, así que es importante analizar ¿Qué es y cómo funciona la inteligencia emocional en la vida de las personas? Y ¿Qué aplicación puede tener esta nueva disciplina inserta en el mundo competitivo y agresivo de los negocios, específicamente de la Logística?

ANTECEDENTES DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
Con el afán de darle a la Psicología la categoría de ciencia, se buscaron características o habilidades que pudieran ser medidas, pesadas o demostradas, según los rígidos cánones del más recalcitrante Positivismo commtiano del siglo XIX y en este caso se eligió buscar la manera de calcular la inteligencia que pueda tener cada persona, esto se da en el marco de la eterna lucha y contraste entre lo que es la esfera de las Ciencias exactas (medibles y comprobables) contra  las ciencias humanas (inciertas y cambiantes) en las cuáles es muy difícil establecer experimentos controlados que nos puedan indicar o validar teorías o parámetros teóricos que estén a la altura de los resultados que arrojan las ciencias exactas.
Las pruebas de inteligencia se iniciaron en 1918 y se aplicaron a los reclutas estadounidenses con el fin de hacer más efectivas las estrategias de guerra, pues del desarrollo de esta habilidad dependía literalmente su sobrevivencia y la de sus compañeros de comando. De este ámbito surgió la legendaria medida IQ, con la que se clasificaban a las personas de acuerdo a su “índice de inteligencia”, esto ha provocado una pérdida irreparable de talento humano en todos los ámbitos.
Es por ello que durante mucho tiempo el parámetro de la inteligencia estuvo sometido a la dictadura del famoso “I Q” (Intelligent Qualificated) desde el cual se etiquetaba y clasificaba a las personas “inteligentes” en detrimento de las demás habilidades humanas y autoestima de las personas.
Bajo este tipo de parámetros radicales, genios como Albert Einstein pudieron haber sido considerados retrasados mentales, pues no veían el mundo como se supone que tenía que ser percibido.
Al romper este tipo de parámetros con descubrimientos cada vez más sorprendentes de las Neurociencias, muchos conceptos y realidades han cambiado, pues resulta que con aquél parámetro del “IQ”, sólo se medía una de tantas inteligencias (van apenas 8) y se ampliaba el espectro de posibilidades de calcular las potencialidades casi ilimitadas de los seres humanos.
El paradigma de sólo medir un tipo de inteligencia (la intelectual), ha sido modificado desde 1983, cuando Howard Gardner, propone su “Teoría de las Inteligencias Múltiples” , donde  toma en cuenta otro tipo de habilidades a las cuales eleva a la categoría de “inteligencias”, que al igual que la primera (IQ), pueden ser observables y medibles.
Tales inteligencias componen una gama de posibilidades, donde Albert Einstein y Michael Jordan son igual de inteligentes, cada quien en su rama o en su inteligencia. Gardner define la inteligencia como la “habilidad para resolver problemas o elaborar productos”.
Por lo tanto los seres humanos tienen la capacidad de conocer al mundo de nueve diferentes maneras: lenguaje, análisis lógico-matemático, representación espacial,  pensamiento musical,  kinestésico o el uso del cuerpo,  habilidades sociales, relaciones interpersonales y la inteligencia emocional, para conocer al mundo y resolver problemas.
Por supuesto que la inteligencia emocional es tan antigua como la humanidad misma, lo mismo se puede decir de la Logística, que se fue desarrollando de acuerdo a los nuevos paradigmas y tecnologías que se fueron desarrollando con el transcurrir de la historia de la humanidad.
¿Por qué se afirma que la Logística es tan antigua como la humanidad? Porque de su desarrollo dependía la preservación de la vida de las personas.  Recordemos que esta disciplina se encarga del almacenamiento, cuidado, preservación y distribución de productos, así que los habitantes de la época cavernaria, en la Prehistoria, dependían de estas habilidades para sobrevivir. Tuvieron que idear cómo almacenar o guardar su comida por largos periodos, incluso buscar cómo conservarla sin que descompusiera, esconderla o guardarla de tal manera que no la encontraran los depredadores.
Estas habilidades logísticas aunadas con el desarrollo de la inteligencia emocional proporcionaron grandes ventajas a las poblaciones humanas y de esta manera se fueron desarrollando civilizaciones tan sorprendentes como los fenicios, caldeos, asirios, hebreos, aztecas, mayas, incas, chinos, hindúes etcétera, todas ellas con avanzados sistemas de almacenamiento, preservación  y distribución no sólo de alimentos, sino de una gama muy diversa de productos.
Gracias al desarrollo de estos sistemas logísticos, pudieron florecer actividades tan antiguas como el comercio que fue determinante para el avance de la cultura humana. Así nos encontramos con diversos sistemas de almacenamiento y transportación, como el caso de las vasijas de barro, usadas por los comerciantes fenicios, quienes transportaban sus mercancías a través del rio Eúfrates.
A  estas alturas es conveniente analizar ¿Qué es la inteligencia emocional?
Se define en términos generales como la capacidad o habilidad que tienen o desarrollan las personas  de poder controlar sus emociones y reacciones y encontrar la manera u opción de solucionar los problemas que se le presenten de la manera más conveniente o “inteligente” que beneficien a todos los involucrados.
Involucra dos grandes habilidades: El Autoconocimiento y el Autocontrol, donde la habilidad de conocerse a uno mismo es el primer paso para desarrollar la Inteligencia emocional, y consiste en analizar nuestros sentimientos, emociones, ideas, pensamientos y recuerdos, con el fin de entender cómo y porqué reaccionamos como lo hacemos.  Además es importante darnos cuenta de las consecuencias de estas actitudes. 
Después de trabajar en esta primera etapa de la Inteligencia Emocional, donde empezamos a conocernos a nosotros mismos, estamos listos para emprender la segunda etapa: el  Autocontrol, pues si no sabemos quiénes somos y qué es lo que nos motiva a actuar como lo hacemos ¿Qué controlamos?
Esta etapa del Autocontrol requiere de disciplina interna, decisión, voluntad y valentía, pues enfrentarnos a nuestros fantasmas y/o demonios internos y  es una labor que sólo los intrépidos y aguerridos lograrán alcanzar.
Así tenemos que desde la antigüedad, pensadores como Sócrates ya intuía acerca de la importancia del autoconocimiento, y expresó muy acertadamente frases como “Hombre conócete a ti mismo” para representar esta tarea indispensable que todo ser humano requiere para obtener plenamente la calidad de Persona.
Guerreros como Gengis Khan, el gran conquistador mongol, expresaron con otras palabras y en otras circunstancias esta filosofía al decir: “Podré conquistar grandes territorios, someter a miles de hombres, pero si no me conozco a mí mismo y me domino de nada sirve”.
Es importante considerar que las reglas del trabajo están cambiando, pues ahora se evalúa bajo nuevos paradigmas: ya no importa sólo la preparación, experiencia y sagacidad, sino de manera importante cómo nos manejamos con nosotros mismos y con los demás, pues este aspecto de nuestras relaciones interpersonales y con nosotros (inteligencia emocional) llega a ser determinante para decidir a quién se le retiene y a quién se deja ir, a quién asciende y a quién se pasa por alto.
En la actualidad, aunque continúan las guerras, nuestras batallas están ubicadas en el mundo empresarial donde se ha desarrollado una  nueva visión empresarial que guarda poca relación con lo que en la escuela nos enseña o marca como importante, pues ahora además de  la preparación académica  se le da importancia a la iniciativa, empatía, adaptabilidad y persuasión.  Esta nueva concepción está basada  en estudios realizados  en miles de empleados de casi 500 organizaciones  empresariales.
Las nuevas reglas de negocios y empresas marcan que es indispensable desarrollar las habilidades mencionadas con anterioridad (inteligencia emocional).

ALGUNOS CONCEPTOS ERRÓNEOS DE LO QUE NO ES LA INTELIGENCIA EMOCIONAL:
1.- La inteligencia emocional no es ser “simpáticos”
2.- No es dar salida a todos nuestros sentimientos y que se trabaje en equipo sin que existan roces o desacuerdos.
3.- Tampoco que las mujeres son superiores a los hombres y viceversa.
      En este punto se considera que los hombres y las mujeres en realidad son iguales, pero al mismo tiempo diferentes, se escucha confuso y hasta contradictorio, pero como personas hay igualdad de derechos, pero como seres biológicos somos diferentes, esto establece las principales diferencias, sin que esto signifique ser mejor o peor que el otro.
LA INTELIGENCIA EMOCIONAL: UNA FORMA DIFERENTE DE SER INTELIGENTE:
Para llevar esto a cabo es importante, desafiar el paradigma de Coeficiente Intelectual (C.I.) con el cual se medía en anteriores décadas la inteligencia y se etiquetaba e incluso clasificaban a las personas.
De acuerdo a los últimos descubrimientos de las neurociencias, se descubrió que los antiguos centros cerebrales de la emoción albergan las habilidades necesarias para las relaciones sociales, por lo tanto, estas habilidades se basan en nuestra herencia evolutiva destinada a la supervivencia y adaptación.
También se llegó a la conclusión de que esta parte emocional del cerebro aprende de manera diferentes de las del cerebro pensante, por lo que se necesita una manera nueva de pensar y por lo tanto de aprender,.

INTELIGENCIA EMOCIONAL: ELEMENTO FALTANTE DEL MUNDO EMPRESARIAL:
Cada vez más empresas consideran que la inteligencia emocional es un componente vital para las actividades del gerenciamiento.  Según investigaciones de 1997, efectuada por la Sociedad Americana para la Capacitación y Desarrollo, se concluyó que cuatro de cada cinco empresas intentan promover la inteligencia emocional en sus empleados.
Hay otra situación que hace más importante el desarrollo de la inteligencia emocional, tomando en cuenta la crisis mundial y local de nuestro país, el personal que sobrevive a los diversos recortes de personal e incluso quiebras de empresas, asumen  cargas de trabajo y responsabilidades excesivas, en estas situaciones es importante  desarrollar el control de emociones, manejo de conflictos, trabajo en equipo, empatía, liderazgo  y asertividad.
La globalización de la fuerza laboral estimula muy especialmente la inteligencia emocional en los países más ricos, pues en estas naciones el mantenimiento de salarios elevados  dependerá de un nuevo tipo de productividad.  A medida que cambian las empresas, también lo hacen los rasgos necesarios para destacarse principalmente la formación de equipos y la adaptación al cambio.
En este contexto de esquema económico de Neoliberalismo donde en México existe una Reforma Laboral, que al parecer impulsa o incrementa la inseguridad en el empleo, provocando una etapa problemática para los trabajadores, está llevando a las personas a estados de angustia y confusión y a los estudiantes de licenciatura y egresados a sensaciones de incertidumbre e inseguridad, donde el encontrar trabajo y permanecer en él es equivalente a una zona de guerra silenciosa, es importante aprender a desarrollar la inteligencia emocional principalmente al controlar, canalizar y manejar este tipo de emociones, que incluso pueden enfermar física, emocional y espiritualmente a las personas.
En países “prósperos” no existe garantía de empleo, los despidos continúan aún en medio de una economía floreciente.   Según el experto del MIT (Massachusets Institute Tecnologíc) Paull Krugman, esta situación es “el infortunado precio que debemos pagar por una economía tan dinámica como la que tenemos”
A estas alturas se empieza a comprender que para alcanzar el éxito no basta la excelencia intelectual ni la capacidad técnica, se requiere de otro tipo de habilidades para sobrevivir, desarrollarnos y prosperar, que son: flexibilidad, la iniciativa, optimismo y adaptabilidad.
Estudios recientes indican que existe una paradoja: al mismo tiempo que los niños mejoran su cociente intelectual, su inteligencia emocional está declinando.  Según una investigación reciente la presente generación de niños tiene más problemas emocionales que la anterior, pues se ha encontrado que los niños de esta generación se han vuelto más solitarios, depresivos, coléricos, rebeldes y nerviosos, incluso los jóvenes muestran desesperación alienación, abuso de drogas, crimen, violencia, depresiones o trastornos alimenticios, embarazos no deseados y deserción escolar. ¡Qué panorama!

¿QUÉ DESEAN LOS EMPLEADORES?
Cada vez más empresarios se quejan por la falta de habilidades sociales de sus trabajadores.   Comentaba un ejecutivo: “muchos jóvenes no pueden aceptar una crítica  constructiva, pues se ponen a la defensiva o se muestran agresivos.  Reaccionan a la retroalimentación  como si fuera un ataque personal”.
Actualmente se requieren empleados que:
1.- Sepan escuchar y comunicarse
2.- Se adapten y respondan de manera positiva a los obstáculos y reveses
3.- Que tengan dominio personal, confianza en uno mismo y motivación  para trabajar persiguiendo un objetivo determinado.
4.- Desarrollar la efectividad grupal e interpersonal, con espíritu  de colaboración y de equipo y un buen manejo de habilidades para negociar desacuerdos.
5.- Lograr efectividad en la organización, deseo de contribuir y potencial para el liderazgo.

APTITUDES MÁS DESEADAS:
Aptitud característica de las personas o conjunto de hábitos que lleva a un desempeño laboral superior o más efectivo.
1.- Habilidad para la comunicación
2.- Habilidad para las relaciones interpersonales y
3.- Iniciativa.
Además de esto destaca la capacidad de conectarse con las necesidades de los demás y atenderlas. Se trata de una nueva Ética Laboral, que se inicia con el desarrollo de aptitudes emocionales, como las capacidades aprendidas, basadas en la inteligencia emocional que no sólo origina un desempeño laboral sobresaliente sino intachable en cuanto a honestidad, trabajo en equipo e integridad.
Así mismo, la inteligencia emocional determina nuestro potencial para aprender las habilidades prácticas que se basan en sus cinco elementos indispensables:
1.- Conocimiento de uno mismo
2.- Motivación
3.- Autorregulación
4.- Empatía
5.- Destreza para las relaciones

CARACERÍSTICAS DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL:
1.- Independencia
2.- Interdependencia
3.- Jerárquicas
4.- Necesarias pero  no suficientes y
5.- Genéricas

APTITUDES PERSONALES (determinan el dominio de uno mismo)
1.- Conciencia emocional
2.- Autoevaluación precisa
3.- Confianza en uno mismo

AUTORREGULACIÓN  (manejo de emociones)
1.- Autocontrol
2.- Confiabilidad
3.- Escrupulosidad o ser cuidadoso
4.- Adaptabilidad
5.- Innovación

MOTIVACIÓN (guían o facilitan la obtención de metas y trabajo colaborativo)
1.- Afán de triunfo
2.- compromiso
3.- Iniciativa
4.- Optimismo

APTITUD SOCIAL (manejo de las relaciones)
EMPATÍA (comprender a los demás y ayudarlos a desarrollarse, orientación hacia el servicio, aprovechar la diversidad, conciencia política)
HABILIDADES SOCIALES: (Influencia, comunicación, manejo de conflictos, liderazgo, catalizador de cambio, establecer vínculos, colaboración y cooperación y habilidades para trabajar y dirigir trabajo en equipo).
Es claro que la importancia de la inteligencia emocional aumenta cuando más se asciende en la organización.  Para un desempeño estelar en todos los trabajos o especialidades, la aptitud emocional es dos veces más importante que las facultades puramente cognitivas.
En una investigación reciente se descubrió que quienes fracasaban tenían gran pericia y alto CI (Coeficiente intelectual) en todos los casos se descubrió que la debilidad fatal fue un bajo índice de inteligencia emocional, pues las personas se mostraban arrogantes, ponían demasiada fe en el potencial del cerebro, eran incapaces de adaptarse a los cambios y mostraban desdén por la colaboración o trabajo en equipo.
Se ha demostrado que la falta de Inteligencia Emocional…  es fracaso seguro, por lo que se ha observado que: “Las empresas que pasan por mayores cambios necesitan más inteligencia emocional”

¡ALERTA CON LAS PERSONAS DEMASIADOS “TECNOLOGIZADAS”!
Se ha demostrado que las personas que se dedican demasiado a la tecnología de la información son notorias por su alto nivel de habilidad técnica pero por no llevarse bien con las personas que los rodean.  Tienden a carecer de facultades como la empatía y la destreza social. Se trata de una “incapacidad capacitada” que empieza a extenderse entre las áreas técnicas de una empresa.

¿Y QUÉ HAY CON LA LOGÍSTICA?
Cómo se ha  desarrollado en el transcurso de este artículo, las habilidades de la inteligencia emocional sirven para todas las áreas del conocimiento y quehacer humano, por lo que lógicamente para los estudiantes y Licenciados en Logística es una habilidad fundamental en el desarrollo de su preparación y desempeño profesional, pues se han dado suficientes razones para cultivar esta gran capacidad, pero aquí hay otra habilidad importante que se encuentra entre las inteligencias espaciales, lógica y emocional:  La organización, suministro y distribución  de productos y servicios, además de  implementar técnicas administrativas, operación óptima de sistemas de compras y colaborar con los procesos de definición en los medios y recursos necesarios para fomentar el desarrollo de la logística empresarial.
Así que se convierte en un factor indispensable para cualquier profesional, principalmente de la Lic. De Logística desarrollar la inteligencia emocional en todo el proceso y tareas de su quehacer profesional, haciendo notar que además requieren desarrollar las inteligencias espaciales y lógica, (recuerden que ya hemos desarrollado varias inteligencias en nuestra preparación escolar), pero nos ha faltado el componente emocional.

CONCLUSIÓN:
Aunque este artículo es un primer acercamiento con el mundo de la inteligencia emocional, muy poco conocido por las áreas administrativas y técnicas, es importante empezar a conocer su importancia y utilidad, así que con esta “probadita” esperamos que sea un inicio para despertar su curiosidad e inquietud por mejorar en esta área tan importante no sólo en el aspecto profesional, sino principalmente en todas las áreas de nuestra vida.
Aunque nos enfocamos en el área laboral, el desarrollo de la Inteligencia Emocional abarca absolutamente todos los aspectos de nuestra vida:  Tomar decisiones, como lo es elegir pareja, seleccionar nuestra carrera, identificar las metas que deseamos lograr y sobre todo, independientemente de las circunstancias que nos rodeen, desarrollar aquellos recursos internos que nos puedan sostener en los peores momentos de crisis e incluso tragedias y salir adelante sin tener que caer en alguna adicción, agresión hacia nosotros mismos o a los demás e incluso violencia y medidas extremas.
REFERENCIAS:
Goleman D. (2008) Inteligencia Emocional. Paidós. México
Goleman D. (2010) La Inteligencia Emocional en la Empresa. Gedisa. México