PLANEACIÓN Y REFORMAS ECONÓMICAS EN EL MÉXICO POSTMODERNO

PLANEACIÓN Y REFORMAS ECONÓMICAS EN EL MÉXICO POSTMODERNO

Jorge Isauro Rionda Ramírez (CV)

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SOBERANÍA Y DESARROLLO

De los sectores económicos existen aquellos considerados estratégicos ¿Por qué? Porque de ellos depende el futuro de la nación en cuanto la estabilidad, la probidad (abasto) y el crecimiento. La energía es básica en este sentido. Debe ser propiedad de la nación por cuestiones obvias: el desarrollo económico del país sería frenado si un particular lo controla. Como monopolio (o cártel) sube el costo de este insumo y paraliza o al menos desacelera el crecimiento. Si el mismo está en manos de extranjeros, cuando ellos quieran boicotean la economía mexicana, por completo.
Lo primero que se compromete es la soberanía nacional. Se pasaría a ser dependientes de los dueños de la infraestructura con que se explotan los recursos estratégicos. Y de tratarse de extranjeros, el destino de la nación quedaría en manos de naciones extrañas. Las dependencias no solo son con base a las fuentes de energía, derivarían en nuevas dependencias de todo tipo, de manera concadenada. Vendría la dependencia tecnológica, alimentaria, comercial, financiera, fiscal, en general de toda la industria nacional.
Durante el tiempo que se establezcan las concesiones, los dueños de las mismas explotarían intensivamente los recursos para tratar de terminárselos en el lapso que establezcan las mismas, o antes de que cambien la política institucional al respecto de las propias concesiones.
Los recursos privatizados de inmediato se incrementarían, en especial las fuentes de energía como son los combustóleos, gasolinas, gas, energía eléctrica, creando un efecto multiplicador en el resto de las mercancías, las cuales observarían de inmediato inflación y carestía, desabasto, cuestión altamente dañina para el crecimiento de la economía mexicana.
Como las ventas de petróleo representan el 40% de los ingresos fiscales, Hacienda tendrá que compensar la pérdida de este ingreso fiscal, por su privatización, ampliando la base gravable y aumentando los impuestos (reforma laboral, legalizando el trabajo informal). El gasto de gobierno a su vez, tendría que reducirse. El principal rubro del gasto fiscal es el social, y del social, en lo más significativo, el de educación. De ahí la necesidad de reformar las leyes en materia educativa del país. Las relaciones con los trabajadores del Estado adscritos a las paraestatales que se privatizan, deben cambiar desde antes de su propia venta. Los sindicatos son la fórmula corporativa de defensa de las organizaciones obreras. Necesariamente serían golpeadas y boicoteadas, sus líderes sindicales encarcelados (la Quina, Elba Esther…), y el contrato social mismo cambiado y llevado a una fórmula que permita desmembrar el aparato de gobierno, para venderle en partes.
Finalmente, las reformas traen consigo más inseguridad, injusticia, violencia, malestar. Se precarizaría el salario como el empleo (flexibilidad laboral) y se perdería inminentemente seguridad social (IMSS).