ESBOZO DE LA HISTORIA DE ISRAEL

ESBOZO DE LA HISTORIA DE ISRAEL

Carlos Ruz Saldívar (CV)
Universidad Veracruzana

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Langostas.

La última de las plagas que nos falta explicar es la de las langostas, la invasión de este insecto en la zona de Egipto no es algo por demás sobrenatural, de hecho ocurre con cierta frecuencia, la langosta del desierto se encuentra en África, Medio Oriente y Asia, afecta unos 60 países y puede cubrir una quinta parte de la superficie de la tierra. Un enjambre puede llegar a medir hasta 1,200 kilómetros cuadrados y contener entre 40 y 80 millones de langostas, cada langosta puede comer diariamente su peso en plantas por lo que la devastación que provoca es notoria y mayúscula. Puede también llegar de sitios por demás apartados, se tienen registros de que en 1954 un enjambre voló desde el noroeste de África hasta la Gran Bretaña, en 1988 se registró un viaje desde el África occidental hasta el Caribe (National Geographic), para que ello ocurra, se deben dar las condiciones climáticas propicias que generen su desplazamiento. Según el Centro de Información de la Langosta, de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) (Loayza Silva, 2006), la migración de la langosta del desierto obedece a condiciones meteorológicas y ambientales. La primera de las condiciones que favorece la migración es el viento, la lluvia es la segunda de las condiciones que propicia la proliferación de las langostas. LaMoreaux explica que derivado de la erupción, se generaron cambios climáticos y que la nube atmosférica iba a afectar finalmente el pino erizo de California, los robles del pantano de Irlanda, Inglaterra y Alemania, así como los cultivos de cereales de China. Erupciones históricas en Krakatoa, Tambora, el Vesubio, han hecho un daño ambiental masivo, pero ninguno se compara con el sociológico, el impacto religioso, económico, agrícola y política de Thera o Santorini (LaMoreaux, 1995). El impacto que ocasionó la erupción, repercutió en el clima de toda la región de su influencia, y facilitó que se diera una fuerte tormenta con muy probablemente la caída de granizo y lluvia que la acompaña, lo anterior es por demás interesante, ya que según la narrativa de la Torah, la plaga de langosta llegó justo después de la tormenta de granizo, con lo que se daban las dos condiciones que la FAO, hoy señala como indispensables para que ocurra esta migración masiva, fuertes vientos y lluvia, por lo que parece que dadas las condiciones climatológicas, la plaga de langostas es la más fácil de comprender como ocurrió. Al margen de la explicación anterior, Jacobovici sugiere en su documental (Cameron, 2006), que las altas temperaturas al ser inusuales, detonaron la emigración masiva de langostas, al parecer esta explicación también tiene sustento científico. Peter J. Simmons del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Newcastle, nos explica en relación a las langostas lo siguiente: … La función de su sistema nervioso y su comportamiento se ven afectados por la temperatura en los rangos en que una langosta normalmente se encuentra … El aumento de la temperatura por lo general provoca respuestas de las neuronas y los sistemas sensoriales de los insectos.  (Simmons, 2011). Como podemos apreciar, los vulcanólogos coinciden que la erupción del Thera produjo cambios ambientales severos, el incremento de la temperatura como uno de ellos, así que insectos presentes en el norte de África, bien pudieron verse afectados tanto por la lluvia, los vientos y una temperatura inusual, por lo que bien se puede explicar este fenómeno, justo posteriormente después de la tormenta de granizo, al parecer el momento en que ocurrieron es importante para entenderlo, y la Torah nos las presenta en un orden lógico.