3. La noticia como proceso y como representación de un proceso histórico

Cada medio de comunicación elige qué hecho resulta relevante para ser publicado. De este modo, es posible que un mismo acontecimiento no aparezca publicado en todos los medios. Así, tal como explica Van Dijk, la propia selección de un hecho, la propia descripción, inclusión y omisión de detalles de ese hecho ya implica una posible interpretación y valoración del mismo (Van Dijk, 1983, 88).
Para Borrat, “el periódico pone en acción su capacidad para afectar el comportamiento de ciertos actores en un sentido favorable a sus propios intereses: influye sobre el gobierno, pero también sobre los partidos políticos, los grupos de interés, los movimientos sociales, los componentes de su audiencia”. Y al mismo tiempo es objeto de la influencia de los otros, influencia que adquiere una carga de dominación cuando se trata del poder político (Borrat, 1989; 67). En este sentido resulta interesante la perspectiva de Fairclough, que propone al discurso como una práctica discursiva centrada en los procesos de producción, distribución y consumo del texto, en donde los procesos de producción y consumo poseen una naturaleza parcialmente sociocognitiva y se basan en la internalización de estructuras y convenciones sociales, ya que no es posible interpretar por referencia exclusiva a un texto, sino que es necesario poner al texto en conexión con el proceso en el cual se desarrolla (Fairclough, 1992)
Por otra parte, Borrat expresa que “las actuaciones públicas del periódico son el resultado o producto de una serie de actuaciones no públicas, que se concentran el proceso de producción de la actualidad periodística para su publicación periódica”, siendo que tal como se puede conocer por medio de la lectura del periódico de manera inmediata las actuaciones públicas, las actuaciones no públicas pueden inferirse al menos de manera parcial y tentativa a partir de las actuaciones públicas (Borrat, 1989; 68 y 69). A partir de sus propios intereses, se puede decir que cada medio intenta hacer visibles los acontecimientos que pueden intervenir en el comportamiento de determinados actores sociales. De esta misma forma, procurarían hacer invisibles otros acontecimientos o detalles del mismo que podrían influir en los comportamientos, con el objeto de que esto no ocurra.
                       

3.1. Construcción significativa acerca de la propiedad de la tierra en los medios de circulación nacional: las representaciones en La Nacióny La Opinión

Durante 1973 ocurrieron diversos acontecimientos relacionados con las políticas agrarias, las cuales estaban contenidas en la idea de promover una reforma agraria. En el siguiente cuadro se comparan que noticias, en que días y en que meses se publicaron durante el año estudiado, con el objeto de comparar la presencia / ausencia de temas en relación a la postura ideológica, ya analizada, de cada medio.

Mediante el cuadro N° 2 puede observarse que durante el mes de febrero las noticias relacionadas con una reforma agraria tuvieron presencia en La Nación, mientras que en La Opinión estuvieron ausentes. Así, son publicadas en La Nación cuatro noticias.
En la primera, se explican dos puntos en contra de una reforma agraria: el primero se relaciona con las falsas promesas ofrecidas durante las campañas políticas y recupera tópicos clásicos del liberalismo:

en el calor de las campañas políticas y con el afán de conquistar votos para las próximas elecciones, numerosos partidos han incluido en su plataforma la promesa de una reforma agraria en cuanto suban al poder. “Entendemos que en este país lo que todo gobierno puede cuidar es su producción; el productor consciente y progresista es la base de la economía del país. Lo que se puede reformar es la tierra que no produce lo que tendría que producir, cualquiera sea su tamaño. El latifundista más grande es el Estado y ya sabemos lo poco que producen las tierras fiscales”.

En el segundo punto, se ejemplifica también en contra de una reforma, exponiendo la mala experiencia ocurrida con el caso de chileno:

“En cuanto a la reforma agraria, desgraciadamente tenemos muy cerca –dijo aludiendo a Chile- un ejemplo desastroso. En pocos meses ha llevado a un país a una baja de producción tan tremenda que se ha llegado al hambre y al racionamiento de los elementos más elementales”.

Luego, contrariamente al ejemplo chileno, se publica una noticia referida a una reforma agraria natural ocurrida en Alemania, que ha tendido a la unificación de parcelas, con la subsiguiente eliminación de los minifundios improductivos. Las dos últimas noticias, hacen referencia al debate preelectoral, en el cual algunos partidos políticos incluyen el tema de la reforma agraria en sus plataformas.
En el mes de marzo, las noticias publicadas en La Nación son dos, y operan en el mismo sentido que las noticias publicadas en febrero, ejemplificando nuevamente con los aspectos negativos surgidos de la reforma agraria chilena. Por su parte, La Opiniónpublica la noticia de que en Uruguay se ensayaría una reforma.
Mientras que en La Opiniónno se registran durante abril noticias que incluyan una reforma agraria, en La Nación, y como parte de una serie de notas respecto del pensamiento del partido radical sobre el agro argentino, se publica una noticia en donde se expresa el pensamiento de dicho partido en relación a una reforma:

Explica entonces que “debemos establecer nuestra propia reforma agraria, con sentido pragmático, considerando que la extensión de nuestro territorio y su baja población relativa permite realizar el cambio de estructura conveniente, dentro del cual la tenencia de la tierra es uno de los elementos por considerar y en el cual no solo se centra la subdivisión o el reagrupamiento, sino que es necesario encauzar el proceso sin destruir la estructura productiva.

Por otra parte, La Naciónpublica también en abril la noticia de la posibilidad de una reforma en Uruguay. Mientras que en el mes de marzo La Opiniónpublicaba esta noticia en términos informativos relativos a la modalidad del ensayo, La Naciónestablece las contras de este plan:

De prórroga en prórroga, la marcha hacia atrás de los más audaces hasta los más tímidos planes de reforma agraria han dejado un surco tan fecundo como peligroso, según cual sea la semilla que se deje caer.

Durante mayo, en La Nación también son publicadas una serie de notas evaluando las cuestiones que llevaron al fracaso a la riforma italiana. Luego, en el mismo mes, se publica otra noticia referida a la política de tierras en Francia, la cual se califica como “antirreforma”, ya que se ha tendido allí a aumentar las superficies de las unidades de producción. Esta tendencia a reducir los minifundios es bien vista por el periódico:

En síntesis, que esta reforma agraria natural –utilizamos el término en su acepción tradicional- obligó al gobierno francés a adoptar medidas para comenzar a revertir la tendencia minifundista, orientar y abaratar los costos de la producción y el precio de los alientos, disminuir los subsidios, facilitar las exportaciones y favorecer las finanzas del Estado.

Respecto de La Opinión, durante mayo publicó cinco noticias con registros de reforma agraria. La primera corresponde las declaraciones de un experto francés respecto de la política agrícola latinoamericana frente al MCE, en donde se manifiesta en contra de una reforma agraria, y propone buscar nuevas soluciones adaptadas a cada realidad nacional. Las dos siguientes, dan cuenta de que las entidades agrarias son parte también del debate en cuanto a la política de tierras.
Luego, la noticia publicada el 26 de mayo en La Opinión da cuenta del acuerdo del periódico con la política oficial, calificando desde el título como coherente al planteo económico:

Finalmente, compartiendo características de ambas categorías está la legislación que establece el impuesto a la renta normal potencial de la tierra, que conjuga el objetivo político de reforma agraria con una más árida –pero fundamental- reforma del régimen impositivo agrario, atendiendo tanto a la meta de mayor producción como a la de asegurar que no se repitan las clásicas redistribuciones regresivas de ingresos con la excusa de incentivar al agro.

La última noticia publicada por La Opinión en el mes de mayo opera en el mismo sentido que la noticia anterior, es decir valorando positivamente la posibilidad de una reforma agraria:

Leyes de Tierras Ociosas, Colonización, Reforma a la ley e Arrendamientos y suspensión de desalojos rurales, que tenderán a un uso social y productivo de la tierra. Aunque el presidente no lo dice, es claro que el objetivo de estas medidas concurrentes es llegar a una reforma agraria pacífica y ordenada, que elimine latifundios privados y fiscales, y dé la tierra a quién la trabaja, pero evitando criterios reñidos con la productividad y minifundios empobrecedores.

Mientras que durante julio en La Nación no aparecen registros de reforma agraria, en La Opiniónse publican dos noticias que incluyen a la reforma en sus contenidos. La primera da cuenta de los debates motivados por la política agraria propuesta. En la segunda, se anuncia la publicación del libro “La verdad sobre la propiedad de la tierra” editado por la SRA.
En agosto, cada periódico publica dos noticias. Mientras que durante la primera quincena del mes La Naciónse ocupa de informar la aprobación del impuesto a la tierra y de exponer los argumentos expresados por la FAA respecto de una reforma agraria, durante la segunda quincena en La Opinión se ocupa de reproducir los reclamos de las Ligas Agrarias, arrendatarios y trabajadores de campo.
Durante septiembre, La Naciónno posee publicaciones relacionadas con el tema investigado. Por su parte, La Opinión muestra un mapa de la ubicación ideológica de cada entidad agraria.
En octubre, solo en La Nación se encuentran noticias relacionadas con la reforma, en una de las cuales se informa de la finalización y las conclusiones del congreso de la FAA, y en la otra se informa también respecto de un proyecto de reforma agraria presentado por el Partido Revolucionario Cristiano, noticia en la cual se incluyen los rasgos principales de la propuesta, sin valoraciones.
En cambio en noviembre, solo en La Opinión se publican noticias relacionadas con una reforma agraria: son dos y corresponden a notas de opinión, en la cual el autor reflexiona respecto del concepto clásico de reforma.
Por último, en diciembre se registra una sola noticia publicada relacionada con el tema de estudio, la cual se encuentra en La Nación, y se informa que la reforma agraria llevada a cabo en Chile no sería suspendida.
Los medios en general aparecen como centrales en la producción simbólica de las sociedades contemporáneas, ofreciendo pautas y modelos de comportamiento, y cubriendo cinco necesidades básicas que se encuentran en la base del consumo de los mensajes: necesidades cognitivas, afectivas, de integración personal, de integración social y de entretenimiento (Borrat y de Foncuberta, 2006; 20). En los casos observados en este apartado, y en relación a las noticias con contenido agrario, se puede decir que las necesidades que se cubren son las cognitivas y de integración social, ya que el lector pretendería informarse, conocer y entender los hechos que suceden y compartir esta información en la interacción social, a la vez que desde la prensa se prendía instruir al lector en relación a la temática aquí estudiada. En términos de Voloshinov (2009; 31), la conciencia se forma en la interacción social al llenarse de contenido sígnico y para ello es necesario que los individuos se encuentren socialmente organizados.

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