EL SECTOR DEL TRANSPORTE DE CARGA INTERNACIONAL DE CUBA Y SU INFLUENCIA EN EL COMERCIO EXTERIOR: PRINCIPALES PROBLEMAS Y PERSPECTIVAS

EL SECTOR DEL TRANSPORTE DE CARGA INTERNACIONAL DE CUBA Y SU INFLUENCIA EN EL COMERCIO EXTERIOR: PRINCIPALES PROBLEMAS Y PERSPECTIVAS

Zulma Ramírez Cruz y otros

Volver al índice

 

 

 

 

1.3.1 Región caribeña

Sea tanto por líneas directas, servicios con trasbordo o servicios tramp (charter), cualquier puerto del Caribe está de alguna forma conectado con cualquier otro puerto del mundo. Gracias a la elevada competencia en el sector y la posibilidad de hacer uso de diferentes servicios de trasbordo, en la gran mayoría de las transacciones comerciales el usuario tiene más de una opción para transportar sus bienes de importación o exportación.

Casi todos los servicios interregionales hacen escala en más de un puerto caribeño por lo que también proveen servicios intrarregionales.

Para las economías del Caribe, que son relativamente pequeñas y abiertas, cualquier ahorro que se logre en el costo del transporte, se transformará en un beneficio propio, sin embargo los países del Caribe están pagando más por el transporte de sus importaciones que la mayoría de los demás países del mundo. Medido como porcentaje del valor de la mercancía, los fletes y seguros de los países de la Comunidad Caribeña (CARICOM) representan el doble del promedio mundial. En general, los principales factores que determinan el costo del transporte marítimo son el tipo de carga, por ejemplo a granel, contenedorizada o refrigerada, el volumen (economías de escala), y el valor de la mercancía (la prima del seguro y la calidad del servicio aumentan con el valor del bien transportado), estos factores, aplicados al Caribe, explican en gran medida el elevado costo del transporte en esta región, se importan bajos volúmenes de carga contenedorizada de bienes de consumo con un elevado valor unitario. Además, en el caso de los países del Caribe, los desequilibrios comerciales influyen directamente sobre el nivel de los fletes. Los servicios de transportación marítima en el Caribe son insuficientes y cuando existen, dependen en gran medida de las multinacionales extranjeras, Cuba es una excepción pues en la actualidad se prestan servicios de transportación y auxiliares en el área. Estos servicios se ven completados por las vinculaciones creadas con navieras internacionales que arriban a puertos cubanos o realizan transbordos en puertos de la región.

En cuanto al comercio contenedorizado, en promedio, las importaciones son tres veces mayores que las exportaciones, influyen también los costos y la eficiencia portuaria, la mayoría de los puertos del Caribe no cuentan con equipamiento especializado y son sus administraciones públicas las que están a cargo de las operaciones e inversiones. Los procedimientos aduanales, de inmigración, de salud y seguridad en muchos casos se demoran más de lo que deberían. Entre la llegada del buque y la liberalización de la mercancía de importación suelen pasar dos o tres días, mientras que en puertos y administraciones más modernas la entrega puede ser inmediata.

Para las exportaciones de los países del Caribe, los fletes de carga contenedorizada son mucho más bajos que los fletes de importación. Los buques casi siempre zarpan del puerto caribeño con capacidad ociosa. Las exportaciones de otra carga, no contenedorizada, como por ejemplo bauxita, petróleo, gas natural, o materiales de construcción (piedras), se tienden a transportar en buques especializados de chárter.

Es poco lo que el sector público hace para reducir los costos de fletes marítimos, en el Caribe son altos a causa del tipo de productos transportados, la falta de economías de escala, y los desequilibrios comerciales. Aún existe una elevada intensidad de competencia entre las empresas navieras; sin embargo, a nivel internacional, es importante observar el proceso de concentración en este sector.

La situación es diferente en el caso de los puertos. Allí son sobre todo los propios países que deberían avanzar más con la introducción de tecnologías de telecomunicación e informática (telemática). Una herramienta fundamental para lograrse mayores eficiencias sería la introducción de portales verticales de sistemas de telemática, una tarea pendiente en prácticamente todos los puertos del Caribe. La modernización se dificulta en parte a causa de la situación monopolística de la cual gozan los puertos en la mayoría de las islas.

Organizaciones subregionales deben seguir cooperando con los gobiernes miembros, proveyendo servicios públicos como bases de datos, estudios, y la organización de eventos y cursos. Estas propuestas pueden parecer poco en vista de los desafíos que se enfrentan, pero por lo menos constituyen un comienzo realista que promete mayores resultados de lo que se lograría con metas más ambiciosas pero inalcanzables.