¿Cómo citar estas
tesis doctorales?

¿Cómo poner un
enlace a esta página?

 



 

La Empresa es su Resultado
El Beneficio editorial y la Contabilidad del Conocimiento.

Francisco Luis Sastre Peláez

 

II PARTE LA EDITORIAL DE REVISTAS

CAPÍTULO 8. LA EDITORIAL DE REVISTAS Y SUS DEPARTAMENTOS

Los Subsistemas Empresariales

Como sabemos, en la realización de sus funciones productivas, o de creación de valor, el grupo humano asume una forma de organización institucionalizada que denominamos “empresa” y que se define por dos notas características: la especialización en el trabajo(1) y la coordinación de sus actividades(2).

Nos referiremos ahora brevemente, y recordando siempre que hablamos de una empresa de negocio simple que se estructura según un modelo funcional(3), a las modalidades en que puede organizarse la producción editorial. Por otra parte, como nuestro objetivo final es apoyarnos en el análisis de la organización para desentrañar el Resultado empresarial, y al ser la medida de éste casi exclusivamente contable, el punto de vista que adoptaremos aquí deberá ser coherente con el desarrollado por la Contabilidad de Gestión.

El proceso productivo de la empresa de prensa, como se verá más tarde en detalle, consta de dos partes diferenciadas: Redacción (o producción de contenidos) e Impresión (o fabricación de los soportes). Pues bien, si el proceso de redacción se configura, en nuestra opinión, como una forma de fabricación “bajo pedido”, la fase de impresión adopta claramente las características de una producción en serie(4). Ello no obstante, y con el fin de no extendernos excesivamente en cuestiones de interés secundario para nuestro trabajo, consideraremos que el proceso de fabricación principal y característico de nuestra empresa editora es “en serie”.

Este sistema de fabricación, y su filosofía de compartimentación y especialización de actividades fue el causante, precisamente, del proceso de evolución desde formas simples y lineales de organización hacia ese modelo funcional que hemos asumido como propio y característico de nuestra empresa editorial(5).

Así pues, y recapitulando, en adelante consideraremos que nuestra empresa, representante del negocio de prensa no diaria, se ocupa de un producto-mercado único o simple (una o más cabeceras de las denominadas “revistas de masas”), estructurándose según un modelo funcional y de producción en serie(6).

En ella, y según un esquema ampliamente utilizado en el análisis empresarial, cada Subsistema (articulado en uno o más departamentos) tiene asignada una función particular y distintiva, que constituye su finalidad y que determina las peculiaridades de su particular organización(7).


1. Se sabe ya desde la época de los griegos, aunque la formalización de este pensamiento no llegaría hasta F.W.Taylor y los Gilbreth, que la uniformización y simplificación de una tarea acelera su realización. Ver: Castro y Redondo (1996): 50 y ss. El desarrollo de la eficiencia productiva es fundamental hasta el punto de que constituye la base de una de las dos estrategias fundamentales en la gestión empresarial: el “liderazgo en costes”.

2. Las formas de coordinación son diversas: adaptación mutua, supervisión directa, normalización (de procesos, de habilidades, de resultados), etc. Ver Mintzberg (1993): 35 y ss. Además, y aunque este importante autor no lo menciona expresamente, un mecanismo poderosísimo de coordinación lo constituye la propia función de planificación (a través de la fijación de objetivos, políticas, estrategias, etc., comunes a la organización y/o a algunas de sus unidades).

3. Las múltiples posibilidades que se presentan en la combinación de los factores “división de trabajo” y “coordinación” se concretan, mediante los principios de diseño vertical, horizontal y de equilibrio interno, en diversos modelos organizativos. No obstante, no es conveniente para nosotros penetrar en esta particular problemática, ya ampliamente desarrollada por otros, por lo que nos remitimos a la bibliografía ya señalada anteriormente, y especialmente: Bueno (1996): cap.6

4. Recordemos que nos referimos al negocio de la edición masiva de revistas, y no a la mera elaboración de artículos o contenidos, ni a la impresión o fotocomposición por encargo, actividades éstas que surgen también como posibles especializaciones productivas en ese proceso acelerado de fragmentación de la cadena de valor industrial que vivimos en nuestros días. El análisis de las distintas formas de producción, bajo la óptica de la Contabilidad de Costes, así como del significado y características de la producción en serie puede consultarse en: Furlán y Provenzali (1977) y Mallo (1979)

5. Sobre la preponderancia de esta forma de producción y sus consecuencias ver: Piore y Sabel (1990). Estos autores hablan de que nuestra sociedad está hoy abocada a una “segunda ruptura industrial”, similar a aquella primera que condujo a la adopción del modelo tecnológico de fabricación en serie. En esta “segunda ruptura” se cuestionaría, precisamente, la continuidad del mencionado modelo.

6. La organización funcional de la empresa fue descrita por primera vez por Gutenberg, que ya estableció las cuatro grandes funciones propias de la empresa: Aprovisionamiento, Fabricación, Comercial y Administración.

7. A su vez, cada función departamental es susceptible de ser descompuesta en actividades de menor nivel, de las que se responsabilizan otras unidades de rango inferior (secciones). La organización, entonces, puede considerarse como una jerarquía o sucesión de niveles ordenados en forma piramidal, en cuya base se localizarían los puestos de trabajo y en su cúspide la empresa como misión o propósito único del conjunto de los individuos que la constituyen.


Volver al índice de la tesis doctoral La Empresa es su Resultado

Volver al menú de Tesis Doctorales

Volver a la Enciclopedia y Biblioteca de Economía EMVI


Google

Web www.eumed.net