Contribuciones a las Ciencias Sociales
Febrero 2014

EL DESTINO MANIFIESTO Y LA DOCTRINA MONROE: TEORIAS QUE INFLUYERON EN LA PÉRDIDA DE INFLUENCIA DE LA POLÍTICA NORTEAMERICANA EN LOS PAÍSES DE AMERICA LATINA EN EL SIGLO 21



Marcos Moreira Argudo (CV)
Carlos Alcívar Trejo (CV)
Juan T. Calderón Cisneros (CV)
mmoreira@universidadecotec.edu.ec
Universidad Tecnológica ECOTEC





RESUMEN
El siguiente ensayo trata sobre todo lo relacionado a la doctrina del DESTINO MANIFIESTO y la DOCTRINA MONROE y su influencia en las democracias sudamericanas en el siglo que recién empieza. Es imposible negar los méritos de una nación que basa su crecimiento en el desarrollo de su pueblo, en la búsqueda innegable de encontrar su propio destino a través de beneficiar a su gente con políticas que busquen en todo momento su bienestar integral en base a un proceso, ya que los cambios en una sociedad no se dan de un momento a otro, respetando siempre el desarrollo de otros pueblos o de ser posible desarrollar en conjunto estrategias de crecimiento mutuo con otras naciones y no buscar el divorcio de ellas, bajo creencias individualistas y de superioridad, tratando de mantener un status dominante con otros pueblos.
PALABRAS CLAVES: Doctrina, Naciones, Pueblos, Congreso, Gobierno, Integración, Dominio.

ABSTRACT:
The following essay is about everything related to the doctrine of Manifest Destiny and the Monroe Doctrine and its influence on the South American democracies in the century that has just begun. It is impossible to deny the merits of a nation that bases its growth on the development of its people, in the undeniable quest to find his own destiny through benefit its people with policies that seek at all times comprehensive wellness based on a process because changes in a society do not occur at any moment, always respecting the development of other peoples or, if possible jointly develop mutual growth strategies with other nations and not seek divorce them under individualistic beliefs and superiority, trying to maintain a dominant status with other peoples.
KEY words: Doctrine, Nations, peoples, Congress, Government, integration, domain.

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Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:
Moreira Argudo, M., Alcívar Trejo, C. y Calderón Cisneros, J.: "El Destino Manifiesto y la Doctrina Monroe: teorías que influyeron en la pérdida de influencia de la política norteamericana en los países de América Latina en el siglo 21", en Contribuciones a las Ciencias Sociales, Febrero 2014, www.eumed.net/rev/cccss/27/doctrina-moroe.html
  • Introducción:

El presente análisis abarcará desde los antecedentes de la nacientes naciones de América Latina de los años 1820 y siguientes, época en la que se consolidaban las respectivas revoluciones de nuestros países buscando librarse del yugo español intentando desde ya, comportarse de manera independiente, hasta la actualidad, donde la nación norteamericana reconoce que su influencia impuesta a través de sus doctrinas ha terminado, ya que los procesos de Integración que se han dado en Latinoamérica han logrado de manera diplomática y con mucha determinación romper esos conceptos.
¿Han sido estas doctrinas las que han predominado a lo largo de las decisiones gubernamentales norteamericanas para influir en nuestros pueblos y cuales han sido sus efectos en la realidad de América Latina aún antes y después de la consolidación como  estados?

  • Antecedentes:

En Lima, el 7 de diciembre de 1824, Simón Bolívar propone a toda Hispanoamérica una unión que consolide los intereses mutuos bajo el concepto de una confederación antes conocida como reinos castellanos de las Indias.
A esta reunión posteriormente se lo denominó como el Congreso de Panamá o Congreso Anfictiónico en recuerdo de la Liga Anfictiónica de Grecia antigua. Pero para concretar una definición a este término “Anfictiónico” que significa "fundación conjunta". Este es el nombre que le dio Bolívar al Congreso que convocó en Panamá con el objeto de fundar una Liga o Confederación con los países recientemente independizados de España. El nombre viene de la antigua Grecia, ya que nuestro Libertador era un gran admirador de esta cultura.
Simón Bolívar tenía la perspectiva de crear una gran nación que abarcará lo que hoy es Hispanoamérica compartía esta idea con Francisco de Miranda, quien en su momento mentalizó también el nombre de Colombia para esta posible nación.
No podemos olvidar la frase de Simón Bolívar, en la Carta de Jamaica realizada el 6 de septiembre de 1815 en Kingston donde expresa desde ya su interés por culminar este sueño: "Es una idea grandiosa pretender formar de todo el Mundo Nuevo una sola nación con un solo vinculo que ligue sus partes entre sí y con el todo. Ya que tiene un origen, una lengua, unas costumbres y una religión, debería, por consiguiente, tener un solo gobierno que confederase los diferentes estados que hayan de formarse; ¡Qué bello sería que el Istmo de Panamá fuese para nosotros lo que el de Corinto para los griegos! Ojalá que algún día tengamos la fortuna de instalar allí un augusto congreso de los representantes de las repúblicas, reinos e imperios a tratar y discutir sobre los altos intereses de la paz y de la guerra, con las naciones de las otras partes del mundo. Esta especie de corporación podrá tener lugar en alguna época dichosa de nuestra regeneración”
El 9 de diciembre de 1824, el Libertador  Simón Bolívar invitó a los gobiernos de la entonces República de Colombia, México, Río de la Plata, Chile y Guatemala (que abarcaba toda la región de Centroamérica). Con el único fin de  lograr la unión o confederación de Hispanoamérica, conformada por lo que fueron antes los virreinatos españoles en América.
La idea era de reunir a representantes de países de habla hispana, sin quitar la posibilidad de que asistan otros países, pero en calidad de observadores. El éxito fue relativo, porque hubo la repercusión de otros países que prefirieron cobijarse bajo el patrocinio de otras naciones y no participar de esta idea.

Y es así que el 22 de junio de 1826 tuvo lugar uno de los acontecimientos más relevantes de la historia americana: el Congreso Anfictiónico de Panamá.

A pesar de que (Bolívar) no había considerado la participación de Estados Unidos a petición expresa del presidente de la Gran Colombia, el general Francisco de Paula Santander, quien remitió la invitación al presidente estadounidense de ese entonces John (Quincy Adams a inicios de 1825). La participación de Estados Unidos en el Congreso fue apoyada por los demás participantes Bolívar, entonces presidente de Perú y residente en Lima, aceptó el hecho, aunque no estaba de acuerdo.
Esta participación en el Congreso de Panamá no fue del agrado de todos, ya que por ese entonces, esa nación estaba dividida ya que los estados del sur -esclavistas- quienes aconsejaron no enviar representantes porque era conocida la posición de Bolívar sobre su falta de aceptación de la esclavitud, bloqueando al gobierno norteamericano el financiamiento del viaje de diplomáticos estadounidenses; en cambio, los estados del norte -abolicionistas- estaban interesados en el Congreso de Panamá pero sólo con fines comerciales y no de integración, que era el cometido de los países convocados.
Sin embargo el gobierno norteamericano envió solo a dos representantes: (Richard C. Anderson y John Sergeant), seleccionados a buscar solamente acuerdos de comercio, evitando establecer acuerdos políticos que comprometan a Estados Unidos, sobre todo en no apoyar cualquier pedido de ayuda en contra de España. Ante tantas dificultades la presencia de estos delegados no se concretó nunca ya que ambos nunca asistieron, por diferentes motivos, demostrando de esta forma el desinterés desde ya, de esta nación de no apoyar cualquier iniciativa de integración latinoamericana.
(En agosto de 1826) los delegados de México, la Gran Colombia y Centroamérica (José Domínguez, Pedro Gual, y Antonio Larrazábal), respectivamente se reunieron finalmente en Tacubaya para continuar deliberando, en esa ocasión sí estuvo presente el observador estadounidense (John Sergeant).
(John Sergeant), manifestaba en el congreso realizado en México, que sus funciones se limitaban a negociar acuerdos de comercio con las repúblicas hispanoamericanas. Informó también que los Estados Unidos rechazaban integrarse en una confederación continental y que también negaban su apoyo a toda acción de guerra contra España en la región caribeña tal como fue aleccionado. Nótese que desde ya Estados Unidos había comenzado su estrategia de posicionamiento de poder, estas circunstancias terminaron por frustrar la agenda del Congreso.

  • LA DOCTRINA MONROE Y SU RELACIÓN AL DESTINO MANIFIESTO

La doctrina Monroe fue advertida en el mensaje anual del presidente norteamericano James Monroe al Congreso de los Estados Unidos del 2 de diciembre de 1823; con el tiempo se la promociono de manera estratégica de tal forma que paso a ser parte fundamental de la política exterior norteamericana. En ella, los EEUU señalaban que no admitirían la intromisión europea alguna en todo el continente americano, y que cualquier propósito de ocupar o invadir a estos  países sería calificado como un acto de guerra, sobre todo si son departe de Inglaterra y Francia, naciones que despuntaban por sus políticas de expansión imperialista.
La doctrina del “Destino Manifiesto“ fue creada también por los Estados Unidos desde el siglo XIX para evidenciar su intervención o lo que ellos creían como protección, en los países del continente americano, bajo el pretexto de resolver de una manera eficaz los conflictos hemisféricos.
¿Dónde surge por primera vez la expresión Destino Manifiesto?
Pero empezaríamos a  definir que es una doctrina:
«Enseñanza que se da para instrucción de alguien.» (RAE)
«Conjunto de ideas u opiniones religiosas, filosóficas, políticas, etc., sustentadas por una persona o grupo.» (RAE)
Anders Stephanson, Manifest Destiny. American Expansion and the Empire of Right (New York: Hill and Wang, 1995), pág. xii.
Estas definiciones son muy necesarias tenerlas en cuenta para desarrollar adecuadamente los razonamientos que se exponen al respecto en la presente investigación
El “destino manifiesto“ es una frase que se acuña por primera vez en 1845 donde el periodista (John O´Sullivan, 1845) en un artículo publicado en la revista Democratic Review de Nueva York, donde publicó un artículo en el que apoyaba que Texas pasase a formar parte de los Estados Unidos".
La mayoría de los conceptos ligados con la frase ‘destino manifiesto’ fue creada por (O'Sullivan) en un lenguaje distinto antes de sus otros escritos de 1845 y 1846; que sus argumentos fueron inspirados en la ideología de anteriores expansionistas como John Quincy Adams; aquel que en algún momento boicoteo de alguna forma el Congreso de Panamá mencionado anteriormente.
(O’Sullivan) descendía de aventureros y mercenarios de origen irlandés, que a pesar de tener una participación muy activa en la política a favor de la expansión territorial de los Estados Unidos, así como también en fomentar esta forma de pensar, nunca se le hizo un reconocimiento al respecto mientras duro su existencia.
El destino manifiesto, como (O'Sullivan) lo recalca, describía en ese entonces a la misión divina de los Estados Unidos de propagar su sistema de democracia, federalismo y libertad personal, así como también promover el pensamiento de su nación en rápido crecimiento, que consistía en tomar en posesión a todo el continente norteamericano. O'Sullivan argumentaba que este "auténtico título" de Estados Unidos dejaba sin piso cualquier posición e intenciones con respecto al continente americano que otros estados en especial los europeos, pudieran tener sobre la colonización previa de nuestra América. Además, señalaba que la vía hacia la superioridad continental sería pacífica y que se lograría a través del trabajo de la "emigración anglosajona", quien llevaría estos conceptos a las demás personas. A diferencia de las naciones europeas que conquistaron sus imperios, Estados Unidos esperaría a que los pueblos que vivieran en otros lugares comprendieran las ventajas de la anexión y buscaran voluntariamente la incorporación a la Unión.
 (John L. O'Sullivan 1845), manifestaba textualmente también en su publicación mencionada anteriormente lo siguiente:
 “El cumplimiento de nuestro destino manifiesto es extendernos por todo el continente que nos ha sido asignado por la Providencia, para el desarrollo del gran experimento de libertad y autogobierno. Es un derecho como el que tiene un árbol de obtener el aire y la tierra necesarios para el desarrollo pleno de sus capacidades y el crecimiento que tiene como destino.”
(O´Sullivan) expresaba también que el gobierno de los Estados Unidos y el Ejército, jugarían un papel de testigo mudo en la expansión por todo el continente por lo que la difusión de dicho precepto iba a ser pacífica a pesar de eso..
Después de esto el término “destino manifiesto” y sus argumentos, se lo volvió a escuchar otra vez en la década de 1890, porque fue usada frecuentemente por los Republicanos, para justificar de una manera conceptual la expansión estadounidense fuera de América del Norte. También lo utilizaron los diplomáticos encargados de la política exterior de EE. UU, para conseguir los fines establecidos en sus argumentos.  

A principios del siglo XX, algunos comentaristas consideran que los aspectos de la Doctrina del Destino manifiesto, en especial el concepto de la «misión» norteamericana para dar a conocer y defender la democracia en todos los países del mundo, sigue influyendo en la ideología política estadounidense, posición que se contradice, ya que recordemos la influencia norteamericana para fomentar las dictaduras en América Latina que sucedió por las décadas del 60, 70 y parte del 80, en la denominada “Operación Cóndor”, como parte su estrategia de dominio continental sin democracia.

Según el historiador (Armando de Ramón 2003), la expansión imperialista norteamericana fue un proceso que se cumplió a un largo plazo, el mismo que fue bien detallado y que se perfeccionó gradualmente hasta abarcar toda Latinoamérica a mediados del siglo XX.

Para cumplir con sus fines los gobiernos norteamericanos usaron diferentes estrategias como lo son: la diplomacia, la política de buena voluntad, la agresividad directa y la aplicación del poder blando (Ideologías, tecnología y cultura).

Como ejemplo podremos decir que utilizaron métodos diplomáticos dentro de los cuales se destaca la creación de la Unión Panamericana, que consistía en reunir los países del continente para enfrentar problemas comunes, luego en la Primera Conferencia Panamericana (1888), se creó la Unión Internacional de Repúblicas Americanas, que en 1948 se transformó en la Organización de Estados Americanos (OEA), cuya sede se encuentra en la ciudad de Washington capital norteamericana.
Entre otros antecedentes que refuerzan lo expuesto dentro de la historia de Estados Unidos en la cual nos enseña algunos ejemplos donde a viva voz algunos representantes de esta doctrina se manifiestan:
La declaración del Presidente Theodore Roosevelt en su mensaje anual de 1904.
Si una nación demuestra que sabe actuar con una eficacia razonable y con el sentido de las conveniencias en materia social y política, si mantiene el orden y respeta sus obligaciones, no tiene por qué temer una intervención de los Estados Unidos. La injusticia crónica o la importancia que resultan de un relajamiento general de las reglas de una sociedad civilizada pueden exigir que, en consecuencia, en América o fuera de ella, la intervención de una nación civilizada y, en el hemisferio occidental, la adhesión de los Estados Unidos a la Doctrina Monroe (basada en la frase «América para los americanos») puede obligar a los Estados Unidos, aunque en contra de sus deseos, en casos flagrantes de injusticia o de impotencia, a ejercer un poder de policía internacional.

Para cumplir con sus objetivos Roosevelt planteó políticas mucho más ofensivas.
La primera se la denominó la “política del garrote”, la misma que consistía en que Norteamérica podía intervenir militarmente en cualquier país de la zona, esto estaba justificado obviamente a intervenir en los asuntos internos de otros países en defensa de sus ciudadanos estadunidenses residentes en ellos.

También tuvo como política dentro de su gobierno apoyar también a las grandes empresas norteamericanas para que invirtieran en América Latina, y para ello influyó en los países de la región para que no firmaran contratos con empresas europeas, a esto se lo denomino la “diplomacia del dólar” donde Estados Unidos logró una supremacía por toda la región a través del control económico.

Otro caso tenemos el del presidente (Woodrow Wilson 1913) quien fue Presidente de Estados unidos desde 4 de marzo de 1913 al 4 de marzo de 1921 el mismo que  continuó con la política de intervencionismo de EE.UU. en América, e intentó redefinir el Destino Manifiesto con una configuración mundial. Wilson condujo a los Estados Unidos a la Primera Guerra Mundial con la tesis de que «El mundo debe hacerse seguro para la democracia». En 1920 en su mensaje al Congreso, después de la guerra, Wilson declaró:
    ... Yo pienso que todos nosotros comprendemos que ha llegado el día en que la Democracia está sufriendo su última prueba. El Viejo Mundo simplemente está sufriendo ahora un rechazo obsceno del principio de democracia (...). Éste es un tiempo en el que la Democracia debe demostrar su pureza y su poder espiritual para prevalecer. Es ciertamente el destino manifiesto de los Estados Unidos, realizar el esfuerzo por hacer que este espíritu prevalezca.

Esta versión de (Wilson1913 ) con respecto a lo que expresa el Destino Manifiesto, da énfasis una vez más a la creencia norteamericana de creer en su “divina” misión” de ser un líder mundial para la defensa de las causa en pro de la democracia. Esta perspectiva estadounidense de considerarse como el líder del mundo libre aumentaría con más fuerza en el siglo XX después de la Segunda Guerra Mundial.

En lo posterior durante la Guerra Fría, América Latina se convirtió en el área de gran influencia norteamericana, a pesar del juego bipolar existente en la zona, se esforzó en fomentar la ideología capitalista estableciendo de alguna forma la dependencia económica, para ello fue parte fundamental de esta aparataje maquiavélicamente creado, junto con el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, los mismos que ayudaron de gran forma a la influencia norteamericana fortalecida ya después de la segunda guerra mundial, porque se había convertido en la mayor potencia del mundo, a todo ello ayudo de gran forma a que las empresas norteamericanas crecieran de tal manera que de a poco se convirtieran en las grandes multinacionales, que influyeron sobre manera en los gobiernos sudamericanos en su política interna. Como ocurrió en Cuba, este fue uno de los detonantes de la Revolución cubana (1959), por lo que después de este hecho histórico Estados Unidos fortaleció sus estrategias para el control de América Latina. Por este motivo sin perder el tiempo alguno empezó a intervenir militarmente en los países que se veían influenciados por los soviéticos. (Cuba y Chile), por ejemplo.

  • LA DOCTRINA MONROE Y SU RELACIÓN ACTUAL

El doctor  (Néstor Kirchner 2005), Presidente de Argentina pronuncia un sabio discurso donde desde ya marca el nuevo rumbo de los países de América Latina en cuanto a los procesos de integración que se ejecutaban entonces y la visión norteamericana de organizar nuestros gobiernos. Esta alocución se dio durante la inauguración de la IV Cumbre de las Américas, en Mar del Plata el 4 de noviembre de 2005: Situación que posteriormente es reconocida por el Gobierno norteamericano.  

“Existe hoy un claro consenso internacional en torno a la necesidad de reformar y actualizar los organismos surgidos de Breton Wood, así como respecto a la necesidad de introducir mejoras en el funcionamiento del sistema financiero para una economía globalizada. No es capricho, es simplemente aceptar una nueva realidad mundial.”
“Creo que su rol de primera potencia mundial es insoslayable. No se trata de un juicio de valor, sino de un dato de la realidad. Creemos que el ejercicio responsable de ese liderazgo en relación a la región, debe considerar necesariamente que las políticas que se aplicaron no sólo provocaron miseria y pobreza, en síntesis la gran tragedia social, sino que agregaron inestabilidad institucional regional que provocaron la caída de gobiernos democráticamente elegidos en medio de violentas reacciones populares, inestabilidad que aún transitan países hermanos.”
“Nuestros pobres, nuestros excluidos, nuestros países, nuestras democracias, ya no soportan más que sigamos hablando en voz baja; es fundamental hablar con mucho respeto y en voz alta, para construir un sistema que nos vuelva a contener a todos en un marco de igualdad y nos vuelva a devolver la esperanza y la posibilidad de construir obviamente un mundo distinto y una región que esté a la altura de las circunstancias que sé que los presidentes desean y quieren.”

En la actualidad el secretario de Estado de Estados Unidos, (John Kerry, en su intervención en la OEA el 18 de noviembre del 2013) tuvo que reconocer que la política norteamericana destierra desde ya sus expectativas definitivamente de la Doctrina Monroe, y con ello la teoría del Destino Manifiesto ya que se ve vulnerado todo su esquema de influencia en nuestros países, obviamente los tiempos han cambiado y América Latina vive momentos históricos y de cambio consolidando de a poco los procesos de Integración que empezaron en (1969) con una estéril expectativa de lo que hoy es la Comunidad Andina de Naciones C.A.N. y que detienen cualquier aptitud dominante y da paso a la libre determinación de nuestros pueblos de seguir nuestro propio destino en base de nuestros errores. Ahora América Latina escribe su propia historia.
El secretario de Estado de EE.UU. dijo, en español, que "la unión hace la fuerza", y subrayó que la "era" en la que Estados Unidos actuaba como "protector" de América Latina ha terminado, para dar paso a una relación entre "iguales".
Desde que se creó esta doctrina, Estados Unidos se creó las ínfulas de imponer sus intereses por cualquier medio entre ellos la fuerza, violentando países, orquestando golpes de Estado, incriminando su voluntad en la OEA, sin que con el paso de los años se pronuncie con respecto a la situación cubana y su embargo económico, como también a su posición con respecto al conflicto de las Malvinas. Hasta que llegó el día en que los países de nuestro continente decidieron crear las instituciones que nos lleven a pensar en una integración y a la vez ser independientes de Norteamérica. Como son los casos del Mercosur, de la Unasur, el Alba, el Banco del Sur, del Consejo Sudamericano de Defensa y de la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe CELAC, la creación establecida por la creación y uso del Sistema Único de Compensación Regional de Pagos SUCRE y su expectativa de perfilarse como moneda de uso latinoamericano es una prueba de ello.
En la actualidad para que Estados Unidos influya nuevamente en países del continente americano debería crear también los entornos políticos y económicos adecuados para hacerlo, tomando como base el mutuo respeto a las formas de gobierno y a las culturas de los pueblos y no imponerlos. Donde las condiciones de comercio sean justas y que lleven la consecuencia del beneficio mutuo y no estrategias donde solo se beneficie Norteamérica, creando soluciones para un solo beneficio. Como en su momento lo intento cuando quiso imponer la alternativa del ALCA, concepto que se desbarato definitivamente para la mayoría de los países sudamericanos, en la Cumbre de las Américas en el 2005. A pesar de haber influido en las tentativas de golpe en varios de los países que tienen gobiernos progresistas –entre ellos, Venezuela, Argentina, Bolivia, Ecuador y del éxito obtenido en Honduras y Paraguay–, los Estados Unidos tienen que enfrentarse a nuestros procesos regionales que se han creado para ventilar los problemas, como es el caso del Consejo Sudamericano de Defensa, y la no afiliación a tratados como el Tratado Interamericano de Defensa Recíproca TIAR que fue firmado en septiembre de 1947 en Río de Janeiro tras la Segunda Guerra Mundial, supuestamente creado para “protegernos de intereses fuera del continente” y este documento se deshace ante la posición norteamericana frente a la solución del problema de las Islas Malvinas en 1982. Por ello los países que integran el Alba renunciaron a este tratado, como respuesta a lo absurdo planteado en este acuerdo.
Aunque el discurso de (Kerry 2013) está fuera de tiempo, porque el fin del poder norteamericano sucumbió  hace muchos años, es en estos momentos donde lo reconocen y es cuando la propia realidad y los gobiernos latinoamericanos sepultaron sus doctrinas y la marginada OEA se encuentran fuera de las cuerdas gracias a los procesos de integración regional que se han creado en nuestra América Latina. 
Las doctrinas sucumbieron al peso de la búsqueda de nuestros pueblos por conseguir la Justicia Social y al concientizarse en los bloques políticos y económicos que se han formado en nuestro continente en defensa de nuestros intereses.

  • POSTURA DEL  ECUADOR CON RELACIÓN A LAS DOCTRINAS DE  EL DESTINO MANIFIESTO Y LA DOCTRINA MONROE

El Plan Colombia: fue una iniciativa lanzada por la Administración Clinton en agosto de 2000 para Colombia, aunque también se ofertó a otros países sudamericanos (Perú, Ecuador, Bolivia, Brasil y Venezuela, éstas últimas lo rechazaron de plano), con el objetivo principal de ayudar a estos gobiernos a combatir el narcotráfico para así poderlo combatir mejor EEUU, dado que el narcotráfico se había convertido en uno de los demonios de Washington desde la Administración Bush I  a comienzos de los 1990´s , coincidiendo con el fin de la Guerra Fría. El Plan Colombia fue concebido como una nueva política norteamericana para Sudamérica, pero desde el principio contó con críticas, sobre todo fuera de EEUU, ya que la mayor parte de la ayuda que se ofrecía (el programa fue provisto de 2.000 millones de $) que consistía en ayuda militar. Además se sospechó que no sólo se pretendía luchar contra el narcotráfico  sino también combatir a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), una guerrilla marxista que luchaba en la selva colombiana contra el Gobierno de Bogotá desde 1948´s , la guerrilla izquierdista más antigua de América Latina, y que mantenía a Colombia en constante guerra civil. El Plan fue anunciado en Bogotá por Clinton y el Presidente Colombiano Andrés Pastrana. Los recelos de los sudamericanos se apoyaban en la sospecha de que con este plan, EEUU pretendía involucrarse directamente en el conflicto colombiano  sin necesidad de la impopular medida de enviar tropas a Colombia, una intervención militar, interviniendo así solapadamente, de una forma similar a como la Administración Reagan lo hizo en los 1980´s en Centroamérica (apoyo al gobierno derechista de El Salvador, apoyó a la Dictadura de Guatemala, lucha contra el Régimen Sandinista de Nicaragua, etc...)
Observamos como Frente a la amenaza de ciertos sectores políticos, grupos mediáticos, Ecuador manifiesta que el país no acepta presiones ni amenazas de nadie, dijo Alvarado, quien agregó que el beneficio de la ATPDEA se había convertido en un chantaje.
Además, señaló que Ecuador ofrece a EE.UU. los 23 millones de dólares anuales de los que se beneficiaba con el ATPDEA para brindar capacitación en derechos humanos para ayudar a combatir la tortura. Debemos recordar que "Las preferencias fueron otorgadas a los países andinos como compensación a su lucha contra las drogas, pero pronto se volvieron un nuevo instrumento de chantaje. En consecuencia, Ecuador renuncia de manera unilateral e irrevocable a dichas preferencias", agregó Alvarado en conferencia de prensa.
Hace poco más de un mes, (27 de Junio, 2013) Ecuador, mediante la embajadora (Nathalie Cely 2013) inició en Estados Unidos la campaña ‘Mantengan el comercio en marcha’ (Keep Trade Going) para que los estadounidenses contacten al Congreso de su país para pedir la renovación de la Ley para la Promoción del Comercio Andino y la Erradicación de Drogas (ATPDEA).
(Diario El Universo)
Otro hecho trascendente que marca la distancia de la impetuosidad norteamericana con respecto a nuestro país se demuestra con la renuncia de Ecuador al TIAR, TRATADO INTERAMERICANO DE ASISTENCIA RECIPROCA, bajo las razones expuestas ya en la presente investigación.

CONCLUSIONES.

  • EE.UU. se mostró como una potencia solidaria, empática y fraterna, todo aquello no era más que una estrategia de expansión comercial, política y territorial, para asegurar un colonialismo frente a este gran pedazo de tierra llamado América Latina, con el fin de  asegurar productos, manufactura y por sobre todo poder. Los procesos de Integración han acabado de esa forma la doctrina del Destino Manifiesto.
  •  La libertad para muchos  ha servido para  cometer  crímenes atroces para sembrar el terror y con ello el sometimiento de nuestros pueblos como se lo demostró en la época de la Operación Cóndor.
  • El destino manifiesto y discurso de Monroe fue el detonante al expansionismo norteamericano que tuvo éxito y logró tener la hegemonía sobre toda América.
  • Sin embargo ciertos países Latinoamericanos han demostrado su desarrollo e independencia basados en la Integración Latinoamericana, en los últimos años a pesar de la hegemonía de los EE.UU.

RECOMENDACIONES.       

  • Fortalecimiento de los Procesos de Integración  en América Latina.
  • Fortalecimiento del Sistema Único de Compensación Regional SUCRE como alternativa de moneda Sudamericana (ALBA) y lograr de esta forma la independencia del Dólar.
  • Que los Estados Latinoamericanos sean corresponsables y adopten una verdadera, adecuada, actual y única filosofía de estado para lograr un bienestar común.
  • La no injerencia de las propuestas a los distintos tratados de TLC donde el beneficio no es mutuo y que Latinoamérica continúe su proceso independentista.
  • Fortalecer e incrementar las inversiones de las empresas Gran Nacionales en Latinoamérica.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:

  • Una abierta provocación a las masas...miércoles 8 de octubre de 2008,

Contra la tiranía del número, Una abierta provocación a las masas...miércoles 8 de octubre de 2008, Destino Manifiesto: concepto y orígenes.

  • http://contralatiraniadelnumero.blogspot.com/2008/10/destino-manifiesto-concepto-y orgenes.htm.
  • La Doctrina de Monroe, El Clamor Público, Los Ángeles, 29 de enero de 1859.
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  • http://www.eluniverso.com/noticias/2013/06/27/nota/1083461/ecuador-renuncia-unilateralmente-atpdea-eeuu
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