ECONOMÍA POLÍTICA DE LA GLOBALIZACIÓN

ECONOMÍA POLÍTICA DE LA GLOBALIZACIÓN

Mario González Arencibia (CV)
Universidad de las Ciencias Informáticas

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Globalización e internacionalización: ¿una unidad dialéctica?

Otro de los aspectos del debate conceptual sobre la globalización, es que en su tratamiento conceptual se tiende a identificar con el fenómeno de la internacionalización, sin embargo, si se consideran algunos supuestos metodológicos se podría percibir que son dos momentos de distinto orden, que se complementan y se excluyen generando una unidad dialéctica. Esto es de particular importancia metodológica, con vistas a definir los parámetros del desarrollo.
El primer supuesto que se asume es que la internacionalización es reflejo de partes separadas entre sí, la que en su dinámica capitalista genera interconexiones segmentadas, manifestándose como sometimiento a la autoridad de una o varias naciones o de un organismo que las represente. Por otra parte, habría que señalar que el fenómeno mismo de la internacionalización, no es un todo homogéneo, pues este se conforma en dos momentos: hacia adentro y hacia afuera.1 La primera forma de internacionalización devino con la conformación del Estado-Nación, siendo el Estado el que crea la nación, la cual es anterior al capitalismo pero inseparable de sus relaciones sociales de producción.
Desde el punto de vista espacial y temporal, la internacionalización se produce hacia fuera con el surgimiento y desarrollo de las relaciones capitalistas de producción, lo cual esta ligado al advenimiento del mercado mundial. Es decir, surge con la producción mercantil simple, pero no es hasta la aparición del capitalismo que ocupa un carácter necesario2 en estrecha intervinculación con los mecanismos de funcionamiento del sistema, y en particular con las leyes que rigen su movimiento, las cuales, tienen su base en el desenvolvimiento de la producción.
Por consiguiente, las relaciones económicas internacionales del capitalismo surgieron históricamente más tarde que las nacionales, las primarias y básicas. Su nivel y orientación dependían en grado decisivo de hasta qué punto cada nación había desarrollado sus fuerzas productivas, la división del trabajo y los contactos externos e internos. El reconocimiento de la nación como el fenómeno genérico de la internacionalización, permite comprender el lugar del espacio nacional, como motor de los impulsos externos, ello indica la unidad de acción de lo nacional y lo internacional para la toma de decisiones en términos de elaboración de estrategias de desarrollo.
Desde sus inicios la economía capitalista integró los diversos capitalismos nacionales en un mercado mundial, pero aunque la tendencia histórica haya sido de una integración creciente, su intensidad ha variado en las diversas épocas, ello ha estado en dependencia del grado de desarrollo alcanzados por las fuerzas productivas de cada país. De ello se deriva, que la internacionalización está referida a la extensión geográfica de actividades económicas más allá de las fronteras nacionales, implicando cierto grado de integración funcional de actividades económicas dispersas. El concepto se aplica, por tanto, a la producción, distribución, cambio y consumo de bienes y servicios organizados a partir de una estrategia nacional dirigida hacia un mercado mundial.
La forma original del proceso de internacionalización hacia fuera lo fue el desenvolvimiento de las relaciones comerciales, vistas por Adam Smith, David Ricardo y Carlos Marx, cuando analizaron la teoría del libre comercio. A finales del siglo XIX y principios del siglo XX tuvo lugar la continuidad de estos análisis en autores como Hobson, Bujarin, Rosa Luxemburgo, Lenin y Kautsky, quienes estudiaron con distintos fines los movimientos concernientes a este proceso.
Aquí habría que destacar que el análisis realizado por los autores señalados se ubica en un marco de relaciones sociales directamente asociado a la nación, definida con bases geográficas y políticas (una moneda, un espacio territorial, y un conjunto de reglas e instituciones), por lo que esta constituye el sujeto de análisis pertinente en este contexto. En términos metodológicos, es la Economía Internacional la disciplina que tiene por objeto estudiar las relaciones entre naciones. 3
En cambio cuando se habla de globalización, este proceso se ubica en una perspectiva mundial que tiende a cuestionar las bases nacionales, donde el reto consiste, en que las fronteras políticas ya no corresponden a las económicas y los mercados desbordan las naciones. 4  Ello supera la internacionalización a partir de que la relaciones sociales se despliegan a través del movimiento de fenómenos de conjunto, que implican procesos de integración y compactación unificando territorios, monedas, definiéndose reglas de actuación que abarcan el plano económico e institucional, que se concretan en mecanismos de carácter supranacional.
En efecto, la globalización como fenómeno presupone una ruptura con respecto al movimiento de la internacionalización y al mismo tiempo presenta puntos de contacto. La principal ruptura está en que esta significa la desaparición de la economía internacional como el principio de organización del Sistema Mundo. Tal ruptura ha sido posible por el despliegue de una infraestructura proporcionada por las tecnologías de información y la comunicación. Ello conduce al cuestionamiento parcial o total de los factores que fundamentan la existencia de las economías nacionales.5   Claro que en esta aseveración habría que matizar, planteando que la globalización hasta el momento sólo se presenta como una tendencia hacia un estado de cosas que hasta ahora resulta ser hipotético.
Por consiguiente, es posible señalar que la globalización y la internacionalización coexisten, de una parte, las formas específicas de internacionalización se constituyen en factores que aceleran la evolución de la  globalización, y al mismo tiempo se contraponen. En ello es destacado el lugar que ha ocupa el paso de la internacionalización a la transnacionalización. 6  Esto se identifica con lo que se denomina como mundialización del capital, sintetizado entre otras cosas, en el “advenimiento de grandes empresas transnacionales con libertad de implantarse donde quieran, cuando quieran, para producir lo que quieran, comprando y vendiendo donde quieran, sufriendo lo menos posible las restricciones en materia de derecho del trabajo y de convenciones sociales”. 7 Claro que este fenómeno se despliega bajo la contraposición de las naciones las que no dejan de estar apegadas a sus principios de soberanía económica.
En la situación actual, el Sistema Mundial se encuentra en un punto intermedio entre la economía mundo y la economía internacional, 8 el cual deja ver distintos vínculos entre ellos, las interconexiones derivadas de procesos reales, fuera de fenómenos impositivos, y que actúan en un contexto de interdependencia objetiva, promoviendo la unidad de lo diverso.
Por otra parte, es posible identificar interconexiones segmentadas las cuales se despliegan a través de los mecanismos de la internacionalización. Aceptando este supuesto, se podría identificar la unidad dialéctica entre globalización e internacionalización, lo cual se concreta en el concepto de globalización segmentada. 9 Este es un concepto que  sintetiza lo que ocurre en el mecanismo de funcionamiento actual referido a las intermediaciones entre la economía internacional y  la economía mundo en su estado actual.
El criterio de globalización segmentada concibe la sociedad global en formación como un ente estratificado y segmentado, teniendo en cuenta las tendencias actuales de la producción, distribución, cambio y consumo relacionadas con los mercados y otros fenómenos sociales.
Este criterio destaca cinco aspectos centrales, referidos a una: 1) Economía de mercado de alcance global, tanto en la producción como en el consumo, en el cual está emergiendo un patrón de homogeneización de formas productivas y de calidad y la unificación de un mercado universal. 2) Compactación comercial con tendencia a la circunscripción y selectividad geográfica, produciéndose una concentración de las actividades más dinámicas de producción, inversión y comercio en los polos más avanzados; en este marco los procesos de universalización, se han conformado mediante una compactación  regional. Esta vertiente destaca, que estos son procesos selectivos y excluyentes, implicando que importantes áreas del sur estén siendo marginadas. 3) Integración financiera global, donde la competencia por los recursos produce una expansión transnacional que puede llegar a todas las áreas geográficas. 4) Alta movilidad de capital de una zona a otra: dada la competencia por el capital  este busca rentabilidad. 5) Movilidad relativa del trabajo en lo global, pero con presiones geográficas específicas.
Sintéticamente se pudiera señalar, que la globalización en el plano productivo y financiero, 10  sugiere en términos de producto un carácter global, es decir debe tratarse de un producto con un sentido universal, capaz de ser identificado y demandado a escala global por los consumidores. Ello significa, que este producto haga escala en los cinco continentes. Para lo cual, es indispensable que la posición del competidor en el mercado nacional, sea afectada por la posición global, y que al mismo tiempo, esta sea afectada por el competidor. Por lo que su capacidad de penetración dependerá de los resultados globales en la medida en que se valoricen en escala local las ventajas obtenidas en el mundo entero
Atendiendo a lo anterior existen autores,11 que al evaluar el peso de la globalización en uno u otro sector de la economía plantean que esta se impone con mayor fuerza en el plano de las finanzas que en la industria. A partir del hecho, de que en esta rama, el producto es por su naturaleza más móvil y más ubicuo, desplazándose con costos de transferencia baratos, estandarizados e identificados por los inversionistas de todo el mundo. Tomando en cuenta estas características, en el debate conceptual del fenómeno que estudiamos, es frecuente encontrar el concepto de globalización financiera, considerado además, como la dimensión más importante del proceso de globalización.
Si nos atenemos a las principales formas de acción, manifestaciones e impactos de la globalización financiera, esta podría situarse como una muestra de superación del fenómeno de la internacionalización, debido a que presenta evidencias de interconexiones que son notables y determinantes para los agregados de conjunto de la dinámica global.
Lo anterior se expresa en la tendencia a la interconexión de monedas nacionales, entre las bolsas de valores, lo cual se podría explicar por la regla de las tres D: 12 descompartimentalización de los mercados, desreglamentación, y desintermediación. La primera, se refiere a eliminar las fronteras que antes separaban a los mercados, básicamente, trata sobre la apertura al exterior de los mercados nacionales y de los internos. En este entorno se unifican los mercados monetarios, financiero de cambio y de futuro. La finalidad inmediata de ello es el rendimiento del capital.
La desreglamentación, se basa en la abolición de la reglamentación de cambios y tiene como finalidad facilitar la circulación internacional del capital. Este proceso forma parte de la tendencia a la liberación de los movimientos de capital iniciada en EEUU a finales de los setenta, y que se expandió luego al resto del mundo. El resultado de esto ha sido una aceleración de la movilidad geográfica del capital  En el caso de la desintermediación financiera esencialmente se asienta en una disminución de la parte de este que transita por los intermediarios en beneficio de las finanzas directas. Es decir, se trata de la posibilidad de tener acceso directo a diferentes mercados financieros, de cambio, de futuro, de obligaciones, para satisfacer sus propias necesidades sin pasar por los bancos o al margen de las instituciones y redes financieras tradicionales.
En términos de una globalización que supera la internacionalización, la integración financiera tiene variadas características: respecto de la unidad de tiempo (funciona las 24 horas del día) y de lugar (las plazas están cada vez más interconectadas), los mercados específicos (bolsa, cambios, opciones, futuros) se vuelven partes del mercado global e interdependientes. Otra de sus propiedades consiste en que funciona prácticamente en tiempo real, por lo que cualquier información se difunde de inmediato de un extremo a otro del planeta.13
Es importante reconocer las indudables ventajas del proceso de globalización financiera al viabilizar una reducción de los costos de intermediación, permitiendo además, el acceso a nuevas fuentes de ahorro. Sin embargo, habría que reconocer tres grandes desventajas que acompañan al proceso: 1) la desconexión de las finanzas con respecto a la economía real; 2) la financierización del tipo de cambio; 3) y el surgimiento de nuevos riesgos individuales.
Ello se explica por la naturaleza contradictoria y destructiva con que actúa el capital promoviendo elevados niveles de socialización de la actividad económica, por medio de la ambivalente relación entre los mercados financieros y la esfera productiva. De una parte, estos mercados son importantes para financiar empresas, al resolver compromisos financieros, pero por otra parte, su desarrollo origina incertidumbre a medida  que la inversión se desconecta de la producción y se desplaza a la actividad especulativa.
Todo ello, sin lugar a dudas contribuye a un incremento de los riesgos de volatilidad de las tasas de interés, los tipos de cambio y los precios de los activos financieros en la bolsa. Acompañado de estos riegos, están los de contrapartida vinculados a la falta de pago y la insolvencia de los prestatarios.
El elemento conclusivo podría ser, que la creación de mercados globales que operan a través de la globalización financiera, es una expresión de la crisis estructural14 por la que atraviesa el sistema, dando muestras, de la quiebra de su mecanismo de acumulación que antes permitía, ahora no, la valorización adecuada del capital en la esfera productiva. Esto es una manifestación de las limitaciones de la acumulación en esta esfera. En ello habría que reconocer la naturaleza adaptativa del capital en función de los mecanismos de despliegue del sistema. 
A modo de conclusiones parciales, conviene reiterar  que existen puntos de ruptura y continuidad en la realidad que analizaba Marx y la actual. En el pasado, la dinámica económica se explicaba básicamente por factores que colocaban la atención en el Estado-nación, en la actualidad estos cada vez más se concentran en una sinergia global. El punto de continuidad de estos periodos, es que continúan vigentes los mecanismos de obtención de plusvalía, mediante la explotación de fuerza de trabajo y un acelerado proceso de producción de mercancías. 
De Marx  a Lenin el acento de la discusión se traslada de la desigualdad entre clases, a la desigualdad entre naciones, cuya fractura hoy en la era de la globalización, es mucho más profunda de lo que señaló Lenin. Atendiendo a estas manifestaciones consideramos que un estudio más acabado de la base conceptual del proceso de globalización, debería incluir su vínculo con la naturaleza del capital y la plusvalía.

1  Radoslav Stojanovic, "Interdependencia en las relaciones internacionales" En: Ciencias Sociales No. 2  vol. 2 UNESCO 1978 pp. 249-315.

2  Silvio Baró Herrera.”Globalización y exclusión: dos fenómenos en la economía mundial”. Mayo 1992 (inédito). Citado en Graciela Chailloux Laffita, Rosa Oceguera y Silvio Baró Herrera. “Globalización y conflicto Cuba-Estados Unidos”. Op. Cit. p. 11.

3  Héctor Guillen Romo. “Globalización financiera y riesgo sistémico”. En: Comercio Exterior No. 11, México 1997 pp. 870-871.

4  Jean Marc Siroên. L´économie mondiale, Armand Colin, París, 1994. P. 7.

5  Gérard Kébabdjian. Pour une économie politique des relations internationales: mondialisation, régionalisation, nation, mimeo., Paris, 1996 p. 12.  Citado por Héctor Guillen Romo. Op. Cit. P. 871.

6 Ver: Graciela Chailloux Laffita, Rosa López Oceguera, y silvio Baró Herrera. Globalización y conflicto Cuba- Estados Unidos. Editorial de Ciencias Sociales, La Habana 1997 pp. 9-30.

7  Formulación de un empresario europeo, citado por Francais Chenais En: “L´emergence d´ accumulation mondial á dominante financiére”. La Pensée No. 309 Paris 1997 p. 5.

8 Héctor Guillen Romo. Op. Cit. P. 871

9 Francisco Rojas Aravena. "América Latina, el difícil camino de la concertación y la integración". Nueva Sociedad, No. 125. Caracas, mayo-junio 1993, p. 62.

10 Arturo Guillen Romo. Op. Cit. pp. 871-872.

11 John Dunning. Globalization, Economic Restructuring and Development. UNCTAD, Geneva, 1994 p. 11.

12  Ver: Henri Bourguinat. Finance Internationale. Presses Universitaires de France. París, 1992 pp. 91-100. Citado por  Hector Guillen Romo. Op. Cit. pp. 871-873.

13 Según datos del Monthy Review en 1960 el volumen  de la bancarización internacional llegaba a un 1% del PIB de las economías combinadas en el mundo. Para mediados de los 80s este porcentaje alcanzó el 20%. Sin embargo, la comparación con el comercio mundial es aún más sorprendente a fines de los 60s, el volumen de la actividad bancaria entre países daba cuenta de alrededor del 10% del volumen del comercio mundial, a mediados de los 80s,este volumen excedía el del comercio. Y mientras el comercio mundial en relación con el PIB apenas se duplicó en 20 años, el mercado de productos derivados aumento un 1 329,4% en tan sólo 9 años, de 1986 a 1994 y el de swaps aumentó un 660,6% entre 1987 y 1993. Juan Chingo y Julio Sorel .op. cit.p. 11.

14  Esta investigación asume como crisis estructural:” aquella que por su amplitud desborda lo económico, por su duración y complejidad rebasa lo cíclico, y por tener profundas raíces en las contradicciones del sistema no puede –aún considerando la flexibilidad y adaptación del sistema- ser solucionada con la mera acción de instrumentos de política económica. Históricamente, la salida de las crisis estructurales del capitalismo se ha producido a través de un conjunto de modificaciones estructurales importantes que han incluido cambios en el paradigma tecnológico”. Pedro Monreal.  Tecnología flexible y crisis económica. El caso de la industria norteamericana en la década del ochenta. Tesis presentada en opción al grado científico de Doctor en Ciencias Económicas. CIEI, La Habana 1998 P. 20.