CULTURA POLÍTICA Y PARTICIPACIÓN ELECTORAL EN ELECCIONES LOCALES DE LA CIUDAD DE TEPIC, NAYARIT

CULTURA POLÍTICA Y PARTICIPACIÓN ELECTORAL EN ELECCIONES LOCALES DE LA CIUDAD DE TEPIC, NAYARIT

Lucina Aguilar Orejel (CV)
Universidad Autónoma de Nayarit

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3.2 El fraude electoral y los procesos electorales de 1993 a 2008

          El fraude electoral, al ser común en las elecciones que se llevaban a cabo en México, terminó por hacer de los procesos electorales rituales del sistema político en que se vivía. A decir de Espinosa (2004), la participación ciudadana fue transformada en un mero recurso instrumental, carente de toda significatividad política y ajena al quehacer cotidiano de los actores sociales, ya que se confina su manifestación a los vaivenes de las leyes de la oferta y la demanda de lo político, antes que a la necesidad, demanda, esfuerzo o iniciativa cívica para la planeación, diseño o implementación de políticas públicas. Esto trajo como consecuencia que las necesidades e intereses de la ciudadanía fueran desacreditados y manejados como una circunstancia aparte y no medular de de los proyectos de gobierno a tal grado que se puede hablar de una desarticulación de la ciudadanía de la clase política.
          Por otra parte, el fraude y los 70 años del PRI en el gobierno no se pueden explicar sin una cultura política que tolerara dichos acontecimiento, por lo que se puede decir que había una cultura política propia del régimen priista que le permitió al partido gobernante desplegar su dominación y fraudes sucesivos aunque no sin dificultades. Al respecto, Crespo (1995:77) dice que usualmente se habla de una cultura de la sumisión, resignación ante el poder, impotencia, ignorancia y apatía, lo cual se traduce en una especie de inmovilismo frente al abuso del poder y a las estructuras políticas autoritarias, pero que es más adecuado explicar el comportamiento político de los mexicanos a través del enfoque racionalista, a partir de las instituciones políticas del régimen político, que hacen más costoso la lucha frontal en su contra, más tolerable la dominación autoritaria, menos urgente la instauración de una democracia real y más atractivo el cambio pacífico mediante las instituciones vigentes, para así evitar riesgos innecesarios.
          En Nayarit los procesos electorales, usualmente, presentan una serie de irregularidades, unas más graves que otras, sin embargo uno de los peores acontecimientos que pueden pasar es que las irregularidades sean tan importantes y numerosas como para hablarse de fraude electoral. Históricamente hablando, un fraude que fue muy evidente para la sociedad de su tiempo fue el que se dio en las elecciones para gobernador de 1975, en la que el Partido Popular Socialista encabezado por Alejandro Gascón Mercado ganó las elecciones, a decir de Pacheco (2002),  asimismo la autora dice que el triunfo no fue reconocido por el sistema oficial ya que el centro del sistema canceló las posibilidades de una democracia a partir de las regiones, el ritmo lo tenía que marcar la centralidad.
          En la década de los 80’s las irregularidades en Nayarit eran comunes. Algunas se han documentado muy bien, por ejemplo, en la década de los 80 el padrón estuvo inmerso dentro de un proceso errático, toda vez que había experimentado ascensos y descensos a lo largo de esos años. Uno de los ascensos y descensos más enigmáticos es el que se da de 1990 a 1993; en 1990 el padrón era de 407,978 electores, en 1991 desciende en 58,046 electores llegando a componerse de 349,932 y en 1993 vuelve a ascender a 424,497, por lo que aumenta en 74,565 electores (1982: 336378, 1987: 372406, 1988: 403856, 1990: 407978, 1991: 349932, 1993: 424497) (Pacheco, 1993). Asimismo es bien conocido que inclusive personas muertas estaban registradas en el padrón electoral.
          En la década de los 90´s, gracias a la labor del IFE y su independencia del ejecutivo, los procesos electorales en Nayarit se dieron con una mayor transparencia en relación a décadas pasadas. No obstante, Pacheco (1993) dice que se caracterizó por elecciones altamente cuestionadas, donde usualmente el proceso electoral se prolongaba hasta el momento de la calificación de la elección, o en un caso extremo, hasta el momento en la toma de posesión de los nuevos representantes. En Nayarit en 1993, ello se prolongó más allá del periodo denominado de “negociación”, entre las dos fuerzas políticas principales de Nayarit (PRI y PRD).
          En dicho año se implementó el conteo rápido para tener un punto de contraste para los resultados electorales y resultó que los votos para el PRD de ése conteo no coincidieron con los resultados electorales, esto dio pie a impugnaciones y con esta situación se comienza el proceso poselectoral. La cantidad de casillas impugnadas por el PRD fue de 305, suficientes para anular la elección. Por lo que el PRD, dada la circunstancia, hizo un mitin y una marcha en la que estuvo presente Cuauhtémoc Cárdenas, quién exigió limpiar las elecciones, a través de abrir los paquetes de las boletas electorales. Al final esto no se realizó ya que el tribunal electoral consideró improcedentes el mayor número de impugnaciones por ser entregadas extemporáneamente y, las que se entregaron a tiempo, no fueron suficientemente fundamentadas. Por ello el tribunal ratificó el triunfo de los candidatos priístas, tal como la había determinado con antelación la Comisión Estatal Electoral (Pacheco, 1993).
Respecto a los recursos interpuestos por el PRD, ninguno fue solucionado favorablemente. Además, no sólo no procedieron las impugnaciones, sino que, el día en que se daría respuesta por parte del Tribunal Federal Electoral, el PRD organizó una manifestación calculada en cinco mil personas que fue mitigada mediante un operativo que incluyó a policías antimotines, los cuales estuvieron armados con granadas de gas. Aunado, hay otro evento importante en el que interviene la policía y se confronta con los manifestantes (Pacheco, 1993).
          Dentro de todo éste conflicto poselectoral, existía un pacto político entre el PRD y el candidato a la gubernatura Rigoberto Ochoa, donde éste no debía de entrar a palacio de gobierno mientras no terminara el proceso poselectoral. No obstante, Rigoberto Ochoa entra a palacio de gobierno. Ante la ruptura del pacto, los perredistas se manifestaron en las cercanías de palacio de gobierno, pero penosamente fueron repelidos con gases lacrimógenos y golpes de macana. En esta trifulca los agentes judiciales persiguieron a los perredistas hasta dónde los alcanzaron y golpearon. El argumento de las autoridades para su accionar fue impedir la toma de palacio por parte del PRD (Pacheco, 1993).
La asociación Pro Derechos Humanos1 A.C. se manifestó ante lo sucedido, dijo que era una agresión contra la “sociedad civil”.  Las autoridades ante esto dieron sus argumentos pero intentaron hacer ver a los perredistas como “violentos y drogadictos”, por lo que la ciudadanía se molestó y se manifestó de nuevo, ahora simultáneamente lo hicieron otros agentes del gobierno (Pacheco, 1993). Estos eventos probablemente desincentivan a la ciudadanía a organizarse y protestar ante las inconformidades que tienen, dada la exposición de la integridad física a la que se sometieron los manifestantes agredidos.
          Aproximadamente a la semana siguiente, la iglesia llevó a cabo otra manifestación por las principales calles de la ciudad, la cual fue silenciosa y  en la que se demandó respeto a los derechos humanos, al voto y se pidió el retorno de la tranquilidad en el Estado (Pacheco, 1993).
          Al final de éste proceso los funcionarios gubernamentales negaron la existencia de problemas poselectorales en Nayarit y aseguraron la conclusión del proceso poselectoral, basados en la resolución del Tribunal Electoral, pero los plantones, las marchas, los mítines y las protestas continuaban. No obstante quedaron relegados una vez que se anunció la precandidatura de Luis Conaldo Colosio para presidente de la república (Pacheco, 1993).
A decir de Pacheco (1993) ése proceso electoral mostró que la Iglesia es un actor social capaz de movilizar a la gente, ya que fue capaz de iniciar un periodo de interlocución con la sociedad y con el Estado con su propia propuesta de democracia, libertad y participación. Otro protagonista destacado fue los medios de comunicación, los cuales jugaron un papel destacado en la sucesión de los acontecimientos, tanto en las elecciones nacionales como locales.
          Las elecciones federales de 1994 en Nayarit también son ejemplificadoras de las irregularidades que se suelen cometer en las jornadas electorales. En estas elecciones  acudieron a votar personas que ya tenían entintado el pulgar izquierdo o que contaban con la credencial de electoral pero no se encontraban en la lista nominal, también se registro la apertura de casillas sin los funcionarios designados (Pacheco, 1997).
          Un elemento importante que se destacará es que, en ese año, la reforma al artículo 130 constitucional permitió a los miembros de la iglesia ejercer el derecho ciudadano al voto, pero también ejerció una fuerte influencia para que la iglesia participara desde diversos lugares en el proceso electoral. En éste sentido se puede acentuar que la curia diocesana de Tepic realizó una reunión de Zona Tepic los días 6 y 7 de junio de 1994, con el propósito de “conocer a fondo el ambiente de sicosis que vivimos, frente a los hechos negativos sucedidos para que, como iglesia profética, se ilumine el acontecimiento elecciones, en orden de formar: 1) una auténtica conciencia cívica, 2) un clima de paz y armonía y 3) una sana democracia” (Pacheco, 1997).
          En cuanto a la distribución del voto, el cambio más relevante corresponde a que el PAN se ubicó en el segundo lugar en la votación correspondiente a presidente de la república. El segundo lugar tradicionalmente era obtenido por el PRD, pero ésta vez el PAN lo ganó y en lo referente a senador, el PRD obtuvo el segundo lugar, con apenas dos décimas de porcentaje de ventaja, por lo el segundo lugar estuvo muy competido (Pacheco, 1997).
          En las elecciones locales de 1996 se esperaba un fraude electoral típico, al estilo robo de urnas, desaparición de actas, falsificación de resultados, debido al avance de la oposición en la capital estatal; no obstante, el PRI puso en marcha una nueva estrategia para detener ese avance: la operación alcancía, que significó asegurar el voto de los simpatizantes priístas en cada casilla electoral. Para ello, después de las dos de la tarde, el personal integrante del operativo se dirigió a cada casilla electoral a recoger los listados de electores de los representantes priístas quienes previamente habían tachado a los simpatizantes priístas que habían acudido a votar. Con el listado en mano, se cruzó la información con el censo partidista y se acudió a los domicilios de quienes faltaban por emitir el voto. De ésta manera, en el lapso de las tres últimas horas los priístas aseguraron  el mayor número de votos, haciendo uso de vehículos de transporte público como los taxistas y algunos sectores magisteriales (Pacheco, 1999).
          Dada las irregularidades descritas, en el periodo poselectoral el PRD se inconformó. También anunció la impugnación de al menos 10 casillas en Tecuala e impugnó el conteo de votos en Tuxpan, pero no tuvieron éxito ya que el reconocimiento inmediato del triunfo panista en Ixtlán del Río, sin mediar conflicto ni negocaición alguna, desarticuló las demandas perredistas sobre el supuesto fraude en Tecuala. El PAN no interpuso demandas electorales en algunos casos en que estaba en condiciones de interponer como San Blas y Xalisco. Con esto se evitó entrar en un periodo de conflictos poselectorales, y se terminó rápidamente el proceso electoral. Pacheco (1999) dice que los triunfos del PAN sí son reconocidos, en tanto no lo son los triunfos de la oposición perredista.
          En las elecciones para gobernador, presidente municipal y diputados locales de 1999 se da la primera victoria de la oposición reconocida por el sistema político. En relación a la gubernatura ganó la “Alianza por el cambio” con el contador Antonio Echeverría formada por los partidos PRD-PAN-PT-PRS. A decir de Pacheco (2002) el peso correspondió al candidato, ya que independientemente del partido que lo postulara, su capital político y económico le permitían tener altas posibilidades de triunfo. Ante esto, la autora habla de una democracia basada en personas y no en partidos políticos, donde el candidato antepone el perfil personal a la plataforma electoral. Dice que no fueron los partidos quienes se unieron para proponer a un candidato en común, sino que, fue el candidato quien pudo unificar a los partidos políticos en torno a su candidatura. Asimismo, marca que los paradigmas fundacionales de las posturas clásicas de los partidos de izquierda y derecha son revalorados por los partidos en aras de lograr una alianza capaz de instalar la alternancia política como premisa de cambio (sobre todo porque el PAN, un partido de derecha, se une con el PRD un partido que tiende a la izquierda).      
          En este primer triunfo reconocido de la oposición, existían condiciones que favorecieron a la “Alianza por el cambio” como que el PRI en ese momento estaba fragmentado y debilitado (Antonio Echeverría previamente se separó del PRI), el gobernador saliente Rigoberto Ochoa tenía una gran  impopularidad, en la república se venían dando triunfos de partidos de oposición y en Nayarit en 1994 Ernesto Navarro triunfó en las elecciones y ganó el puesto de senador por el PRD; asimismo, la oposición contaba con un porcentaje importante de votos (ibid). En cuanto a la campaña, además del uso de la mercadotecnia, la “Alianza para el Cambio” basó su estructura en las redes de amigos del contador Antonio Echeverría y en las estructuras locales del PRD, PAN, PT y PRS.
          La fuerza económica del contador Antonio Echeverría procedía sobre todo de su pertenencia a los grupos empresariales locales, sus empresas generaban 1800 empleos formales. Otra fuerza importante del candidato fue la fundación Álica de Nayarit, A.C.2 , creada en 1996, la cual es una organización de la familia Echeverría  que permitió  ampliar las acciones del grupo empresarial Álica de manera horizontal a la sociedad y desde el año de su fundación le dio experiencia para participar en la política. El Grupo Álica, por su parte, era parte fundamental de la COPARMEX local, la cual tuvo una participación central en las elecciones al organizar la observación ciudadana y coordinar la estancia de los visitadores nacionales y extranjeros (Pacheco, 2002).
          Otro grupo importante que apoyo al contador Antonio Echeverría fue el grupo: Mujeres Ciudadanas en Pro de Nayarit, dirigido por su esposa Martha Elena García. El grupo logró mover a su favor el voto de las mujeres que no habían sido tomadas en cuenta por candidatos anteriores. Uno de los mayores logros fue cohesionar a la clase media y la clase media alta en torno a una campaña que prometía ser mayormente inclusiva (ibid).
          En cuanto a las irregularidades cometidas el día de la jornada electoral, Pacheco (2002) afirma que se robaron las urnas en dos casillas, hubo “secuestrós” de credenciales de elector durante 24 horas a cambio de 500 pesos, se compraron credenciales de elector al ingresar a la casilla por 700 pesos, hubo acarreo hormiga de votantes  desde sus domicilio hasta la casilla electoral, se utilizó tinta no autorizada, se usaron casas de reconocidos priístas para acarrear votantes, entre otros.
          También hubo intervención por parte de la iglesia católica. El obispo Alfonso Humberto Robles Cota exhortó a los feligreses a razonar y emitir libremente el voto. Aseguró que si llegaran a asentir que no se respeta el sentido de su elección tienen todo el derecho a defenderlo por los medios que establece la ley, pero nunca por la violencia ni con la aniquilación del adversario. (Ibid).
          En el 2002 las elecciones locales se enrarecieron dado que, cuatro días antes de celebrarse las elecciones en Nayarit, hubo cinco muertos y seis heridos tras una emboscada contra militantes panistas cuando regresaban del municipio de Huajicori y se dirigían al poblado de San Francisco del Caimán, después del cierre de campaña del candidato a la presidencia, Salvador Aguilar (Lopez, 2002).
          Por otra parte se presentaron irregularidades típicas (compra de votos, acarreo, etc.) el día de la jornada electoral; al respecto el presidente nacional del PAN en el 2002, Luis Felipe Bravo Mena, dijo que hubo compra de votos promovida por el PRI (Villegas, 2002).
          En cuanto a los resultados de estas elecciones, el PRI ganó la mayoría de las diputaciones y presidencias. Al hacer su propia evaluación, el gobernador Echevarría opinó que la falta de una alianza partidista y una mejor oferta política permitieron al PRI ganar (Ibid). Al respecto se ha de destacar el hecho de que no hubo ninguna alianza entre los partidos. En éste orden de ideas Javier Castellón, ex rector de la UAN, dijo que en términos administrativos, el gobernador Echevarría cumplió; pero en términos políticos falló: desmanteló a los otros partidos y fortaleció al PRI. (Molina, 2005).     
          Después de las elecciones en agosto del 2002, la dirigencia nacional del PRD públicamente dio a conocer la solicitud de renuncia del gobernador de Nayarit, Antonio Echevarría, por haber incurrido en numerosas anomalías 3 durante los casi tres años de su administración. El secretario general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD dijo que el contado Antonio Echeverría traicionó a todos los partidos de la Alianza que lo llevó al poder (Villegas, sin año). Asimismo al apoyar abiertamente al presidente de la república Vicente Fox y al haberse afiliado al PAN a un año de su mandato incumplió un compromiso con sus aliados (Molina, 2005). Al respecto Pacheco (2002) dice que se dio una carencia de fuerza real que les permitiera a los partidos de la Alianza: a) lograr que el contador Antonio Echeverría cumpliera los acuerdos establecidos y b) establecer acuerdos reales capaces de convertirse en algo más que promesas incumplidas.
          Un evento a destacar es que en el gabinete del gobernador Antonio Echeverría, estaba Guadalupe Acosta Naranjo, un reconocido perredista, como subsecretario de Gobernación, quién fue expulsado del Estado cuando el PRD rompió sus relaciones con el gobernador. Por su parte Guadalupe Acosta fue detenido por supuestos delitos electorales denunciados en 1996. Su detención no fue fortuita y menos tratándose de un integrante del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD. El PRD ante esto exigió su inmediata liberación e inició acciones legales para lograr la excarcelación; dada la movilización de las bases del PRD en la entidad, Acosta quedó libre. (Villegas, sin año).
          Cuando fue el día del tercer informe de gobierno del contador Antonio Echeverría en el 2002, militantes del PRD y del PAN pretendieron impedir el paso del contador a la sede del poder legislativo y le gritaban que renunciara por el bien de Nayarit. Ante esto el contador Antonio Echeverría dijo que él ni se dobla ni se raja y que continuaría en el cargo haciendo lo que el pueblo quería que hiciera (Villegas, 2002).
          Las elecciones del 2005 de presidente, gobernador y diputados locales, fueron las más cerrada de la historia de Nayarit, según Reséndiz (2005). De hecho al final de la jornada electoral los candidatos para gobernadores del PRI, Ney González Sánchez, y de la coalición Juntos por Nayarit (PRD-PT-PRS), Miguel Ángel Navarro, se declararon triunfadores en la contienda por el gobierno del estado. Mientras que el PRI daba a su candidato la victoria con 46% de las preferencias por 42% de su oponente perredista, la coalición Juntos por Nayarit colocó 44% contra 42% a favor de Navarro. (Reséndiz, 2005).
          Según el fiscal especial para delitos electorales, Joel Rubén Cerón Palacios, en la jornada electoral en Tepic se presentaron más de 46 denuncias por delitos y otras más en los otros municipios de la entidad. Por ejemplo: a lo largo del día se atendieron unas 450 llamadas telefónicas para denunciar presunta compra y coacción del voto, además hubo reportes de las autoridades estatales señalando que en la cabecera de Santiago Ixcuintla, elementos de la policía municipal, detuvieron a una persona que presumiblemente efectuaba la compra de votos (ibid).
          Reséndiz (2005) asegura que el arzobispo Norberto Rivera llamó a respetar los resultados electorales, pues dijo que no se valía que después de una propaganda tan cara, que le cuesta tanto al pueblo, se siga con las disputas.
          Cuando se declaró ganador al candidato Ney González del PRI, el candidato a gobernador de la “Alianza por Nayarit”, Miguel Ángel Navarro, impugnó los resultados electorales y solicitó la nulidad de la elección y un recuento de votos en Tepic (Sánchez, 2005), asimismo los simpatizantes y él se manifestaron fuera del Consejo Estatal Electoral, donde invitaron a no desanimarse y no desistir además de exigir justicia a las autoridades electorales. Pero al final no precedieron sus peticiones (ibid).
          En las elecciones de 2008, se hicieron denuncias por compra de votos entre 500 y 1000 pesos, por condicionar programas sociales, intimidar a votantes y por rasurar el padrón4 . En cuanto a la compra de votos en San Blas acusaron al candidato triunfador de repartir cheques posfechados por mil pesos. Ahí mismo en San Blas, se detuvo a un activista del PRD, comprando votos (Chavez, 2008).
          En el municipio de Bahía de Banderas, efectivos de la Policía Estatal, armados y vestidos de civil, se encontraban en el exterior de las casillas, inhibiendo el voto y amenazando a las personas del Partido Acción Nacional. Además en ése municipio faltaron 200 boletas que la autoridad electoral reconoció que mandó por error a Ixtlán del Río, perjudicando a los electores tanto de uno como del otro municipio (ibid).

Por otra parte la ineficiencia del Programa Estatal de Resultado Preliminares (PREP) provocó que los resultados parciales no se conocieran a tiempo, lo cual levanto dudas, ya que no subieron a internet los resultados parciales de las votaciones desde temprana hora del domingo, como era su obligación, sino hasta las 2 de la mañana del lunes cuando empezaron a hacerlo. Esto impidió a la población interesada tener datos más precisos de la jornada. Al respecto, los funcionarios del Consejo Estatal Electoral del IFE en Nayarit y del Instituto Estatal Electoral reconocieron su responsabilidad en la marcha ineficiente de éste mecanismo de conteo electoral (ibid).

3.2.1 El corporativismo
El corporativismo se refiere al control de los sindicatos por medio de la intervención estatal o partidaria, elemento que sostuvo al sistema autoritario. A decir de Esparza (1999) fomentó las formas tradicionales de autoridad (caciquismo, clientelismo, autoritarismo) que representaban a sectores tradicionales y del campo; el sector obrero y los servicios públicos (no tradicionales) fueron sometidos en organizaciones sindicales y obligados a relacionarse dentro de las formas tradicionales de dominación. Alcántara (2001) dice que el corporativismo (fundado en el clientelismo y el reformismo social) aseguró la inmovilidad de las masas, su callada y pasiva aquiescencia y aseguró  la generación de una única legitimidad: la democrática que surge de las elecciones.
          Históricamente, las principales funciones del corporativismo para el sistema político han sido: la organización de las masas para alinearlas a las necesidades del sistema y el control y organización de las elecciones (Esparza, 1999).
          Al respecto en Nayarit, Pacheco (2002) dice que el PRI históricamente en el estado ha controlado el magisterio, las organizaciones tipo Confederación Nacional Campesina, Confederación de Trabajadores de México, Confederación Nacional de Organizaciones Populares; ha corporativizado a otros grupos como la Alianza de Camioneros y Autotransportistas del Servicio Público del Estado de Nayarit (ACASPEN) y la Universidad Autónoma de Nayarit: Federación de Estudiantes de la Universidad Autónoma de Nayarit (FEUAN), Sindicato de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Nayarit (SPAUAN), Sindicato de Empleados y Trabajadores de la Universidad Autónoma de Nayarit (SETUAN); ha incursionado en el movimiento urbano territorial y en la organización de los profesionales y técnicos. Asimismo en una entrevista al presidente nacional del PAN, en el 2002 Luis Felipe Bravo Mena, mencionó que hay un fuerte cacicazgo del Sindicato Nacional de Trabajadores del Estado (Villegas, 2002).

3.3 Conclusiones
          Las elecciones en México y en Nayarit en específico, desde 1929 a 1996, fueron poco competitivas y predecibles; en éste sentido, la cultura política del Estado se vio permeada por el corporativismo, clientelismo, caciquismo y el autoritarismo que controlaba y obligaba a relacionarse dentro de las formas tradicionales de dominación al sector obrero, campesino, las organizaciones sindicales e incluso a sectores sociales diversos según las necesidades que fueron surgiendo en el sistema político.
Lo anterior fomentó un tipo de cultura política que hizo que aumentara la abstención en dicho periodo, la lógica posible bajo la cual aumentó la abstención es: si los ciudadanos saben de antemano qué partido ganará, dado que las condiciones de competencia son favorables a un partido en especial, entonces para qué acudir a votar. Esto hizo de las elecciones un proceso meramente ritual, carente de contenido evaluativo o de una real representación de intereses y elección de proyectos de desarrollo para la nación, el estado o la localidad.
          Hasta el día de hoy el corporativismo y el clientelismo subsisten, no obstante las elecciones se han tornado más transparentes y fiables, sobre todo desde 1996 cuando el IFE alcanza su independencia del poder ejecutivo; es precisamente en ése año cuando comienza el proceso de pluralización de votos tanto para elecciones de presidentes municipales como de diputados locales en el municipio y en la ciudad de Tepic. Al respecto es la ciudad donde se da más pronto la pluralización, ya que a nivel estatal se da hasta 1999. En el caso de elecciones de gobernador la pluralización seda desde 1999 al mismo tiempo tanto a nivel de la ciudad, como a nivel municipal y estatal. Sin embargo hay que hacer notar que es la capital del Estado donde se obtienen los mayores porcentajes de votos para la oposición.
          En la ciudad de Tepic desde 1996 aunque el PRI dejó de tener la mayoría absoluta de los votos, continuó siendo el partido político que más votos obtuvo en las urnas en todas las elecciones en promedio desde 1996 a 2008 para casi todas las seccionales. La segunda fuerza política en términos de obtener votos en las elecciones de gobernador de la ciudad de Tepic es para el PRD; para las elecciones de presidentes municipales es el PAN con el 20.88% de los votos en promedio de 1996 a 2008, aunque el PRD le sigue de cerca con el 18.58% de los votos totales emitidos; algo similar, pero al revés, sucede en las elecciones de diputados locales donde el PRD tiene un promedio de votos de 18.97% y el PAN le sigue con el 17.78% de los votos totales emitidos en las ciudad capital.
          Como se ve, los resultados electorales son distintos a nivel elecciones de gobernador, presidentes municipales y diputados locales, aunque estos dos últimos tipos de elecciones tienen resultados más similares entre sí, se puede hablar de: a) un voto duro, sobre todo para el PRI y b) de un voto cruzado, en el que la gente vota por un partido para elegir gobernador, y por otro para elegir diputados y presidentes municipales. Ante esto es importante tener la certeza si la gente vota por el partido, por el candidato, por la oposición, etc.
          Por otra parte, existe una mayor abstención electoral en elecciones intermedias que sexenales tanto a nivel estatal como a nivel del municipio de Tepic.
          En cuanto a la abstención ha sido históricamente muy elevada, desde 1996 a 2008 en elecciones de presidentes municipales en la ciudad de Tepic fue de 46.77%; en el municipio de Tepic de 41.8% en promedio; y a nivel estatal de 40.55%. En las elecciones de diputados locales para el mismo periodo en la ciudad de Tepic fue de 43.66%; de 41.81% a nivel municipio; y de 43.03% a nivel estatal. En elecciones de gobernador (1999-2005) la abstención en promedio es de 38.09% en la ciudad; de 35.41% en el municipio de Tepic; y de 37.7% a nivel estatal. Lo que se denota es que la abstención es ligeramente mayor en la ciudad que a nivel municipal o estatal.
          Ésa abstención dibuja un panorama negativo para la democracia tanto en  Nayarit como en el municipio y en la ciudad de Tepic. Como se ha visto, la abstención es producto de toda una historia de los procesos electorales en los que se han sucedido múltiples irregularidades; desde 1996 a 2008 se presentaron una serie de irregularidades que a veces, como en las elecciones de 1993, terminaron en enfrentamientos entre: la policía y el estado, y la sociedad civil que se manifestaba y protesta. A pesar de todo, el hecho de que la gente se inconforme habla de una ciudadanía que trata de hacerse escuchar; no obstante, las agresiones o las represiones son definitivamente dañinas para la democracia y desincentivan a la ciudadanía a organizarse, dada la exposición de la integridad física que la ciudadanía vio a la que se vieron sometidos los manifestantes agredidos; asimismo, ello también pudo haber disminuido la credibilidad en los resultados electorales.
          Por otra parte se visualiza una democracia donde los partidos buscan ganar y se apoyan en el candidato y no en ideologías políticas, por lo que la alternancia política es la premisa del cambio, esto se demuestra en las coaliciones de partidos que fueron históricamente de izquierda con partidos de derecha.
          Algunas organizaciones de la sociedad civil se han destacado en éste periodo como lo es la Asociación Pro Derechos Humanos A.C., la fundación Álica de Nayarit A.C., Mujeres Ciudadanas en Pro de Nayarit, entre otras. Asimismo la iglesia también ha tenido posturas políticas relevantes y referentes al respeto de los derechos humanos y sobre todo el respeto de los resultados electorales.
          Los medios de comunicación han jugado un papel muy relevante y su imparcialidad es muy importante, no obstante no se ha dado en todas las elecciones, dado que en las elecciones estudiadas no hubo la misma cantidad de noticias para todos los partidos, ni el contenido era igual de positivo o negativo para todos.
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Reséndiz Francisco (2005). “En Nayarit, PRI y PRD proclaman su triunfo, pero PREP da ventaja al tricolor”. La crónica de hoy. (www.cronica.com.mx, consultado el 15 de junio 2010).
Villegas, Alvaro (2002). “La experiencia de la alianza opositora de Nayarit”. Instituto de Estudios de la Revolución Democrática (http://ierd.prd.org.mx/, consultado el 15 de junio 2010).

1 En Nayarit, en el ámbito de los derechos humanos sobresale el grupo Pro Derechos Humanos A.C. (PRODHAC, A. C.) que se fundó en 1989. Una de las razones de su fundación fue la muerte presos amotinados en el Centro de Rehabilitación Social Venustiano Carranza en 1988, a manos del grupo de los Zorros. También influyó en su creación la inoperancia de la Comisión Estatal de los Derechos Humano (Pacheco, 1993:31).

2 Creada en 1996 como una organización de la familia Echeverría destinada a convertirse en parte de la sociedad civil para fomentar la cultura, el deporte y la asistencia agropecuaria en la entidad, a través de la cual un grupo de empresarios locales canaliza recursos para actividades civiles, recursos cuyo destino sería la tesorería pública (Pacheco, 2002)

3 El secretario general del CEN del PRD, Carlos Navarrete Ruiz, destacó que el mandatario nayarita incurrió en por numerosas violaciones a la ley, como nombrar a parientes como funcionarios y beneficiar a sus propias empresas con recursos del erario sin licitaciones.

4 Rasurar significa que el padrón estaba incompleto, ya que hubo personas que no aparecieron en él teniendo la credencial vigente. En la jornada se registró el razuramiento del padrón electoral en la casilla 669 ubicada en la calle Morelia en pleno centro de la ciudad, sin que las autoridades del Instituto Estatal Electoral, dieran una respuesta válida a los electores afectados que molestos no pudieron emitir su sufragio (Chavez, 2008).