BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

DIVERSIDAD CULTURAL, ARTE Y LITERATURA

Héctor Ruíz Rueda y otros




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La perspectiva de los personajes

En la perspectiva del narrador puede ser otro quien narre, sin embargo la perspectiva corresponde al personaje, o viceversa; una descripción puede provenir en apariencia, del personaje pero estar organizada desde la perspectiva del narrador, o bien información o juicios, aunque transmitidos en voz del personaje, corresponden a la perspectiva del narrador. De la misma manera, la perspectiva del personaje puede ubicarse tanto en el discurso narrativo como en el discurso directo (Pimentel, 2008[1998]:115).

Son distintos los puntos de vista de los personajes. Lucio cabañas quien era líder de los guerrilleros expresa que la guerrilla es un medio para reclamar los derechos del pueblo, que les han sido negados desde muchos años atrás.

Afirma que la pobreza y la marginación se han dado más en el pueblo de Guerrero, porque es un estado olvidado. El gobierno es el culpable de la miseria que ha padecido nuestro estado y de la pobreza extrema en la que se encuentra.

El general Cuenca Díaz define a los guerrilleros como delincuentes y no como personas que buscan el beneficio para la sociedad; por tal razón los llama bandoleros que perjudican a la sociedad con sus escándalos.

Al general quien es miembro del ejército, sólo le importa que no mueran más soldados a causa de los llamados bandoleros, es de esta manera como él llama a los guerrilleros.

Los militares atacan a los pueblos pobres, porque el gobierno les mete ideas malas en contra de los guerrilleros, diciéndoles que no son guerrilleros, sino bandidos. Los militares no quieren atacar a su propia gente, pero es algo que tienen que cumplir, porque son órdenes de los coroneles o generales y ellos tienen que obedecer al gobierno.

Lucio conversa con el senador Figueroa y éste da su punto de vista acerca del trabajo del ejército señala que es muy malo que está acabando con los campesinos y que no tienen compasión por su propia gente, acaban con estos de manera violenta, sin embargo ellos no son así con él, porque le dan el mejor trato; esto es algo que el gobierno jamás haría con los campesinos.

-A los campesinos que detiene el ejército los están matando. No los tratan como nosotros lo tratamos a usted. Los golpean, los torturan, luego los suben en helicópteros y los arrojan vivos al mar, o a los cerros, o los entierran vivos. Por eso dicen con burla que los mandan de marineros, de aviadores, de mineros. Eso dicen ahora (Montemayor, 1997: 242).

Lucio define al ejército mientras conversa con los campesinos, afirma: el ejército siempre va a hacer lo mismo, aprovecharse de las circunstancias, y lo hará sin piedad, porque así es el gobierno de cruel y despiadado; les expone a los campesinos que esto no parará hasta que ellos tomen nuevas alternativas como la de formar su propio ejército.

Lucio tiene razón cuando emite que el ejército siempre estará acabando con los campesinos, porque los ven tan desprotegidos. Es por eso que su propuesta es muy valiosa la de estar unidos y preparados para defenderse de la crueldad de los militares, pero sobre todo deben hacerlo porque al campesino es al que siempre han explotado, es por ello que deben de poner un alto, porque en todos los tiempos, al campesino nunca lo han dejado progresar.

Lucio cabañas aporta un punto de vista muy importante, porque habla acerca de la labor del ejército, la cual no es nada buena, porque el ejército es el enemigo del pueblo, no sólo del grupo guerrillero. Lucio era un hombre muy inteligente esto lo vemos cuando secuestra a Figueroa para conseguir un objetivo, el de conseguir la liberación de los presos.

-Si-confirmó Lucio-. El ejército siempre hará esas cosas. Saquear, violar mujeres, matar ancianos, niños, a todos. Si, eso hará siempre. Y no sólo en San Martín, sino aquí, en todas partes. Por eso, hasta que nosotros seamos nuestro propio ejército estaremos seguros. Mientras no seamos el ejército, mientras no nos preparamos para eso, nuestros pueblos van a ser perseguidos (Montemayor, 1997:206).

Los militares confunden a los guerrilleros con agentes de gobernación, esto molesta mucho a Solano Chagoya ve esto como algo imposible. Solano Chagoya trata a los guerrilleros como personas inferiores, esto lo podemos saber cuando los llama muertos de hambre.

Cuenca emite su punto de vista con respecto a la guerrilla y a los guerrilleros. Afirma que son personas insignificantes y que no son guerrilleros y que en Guerrero no ha habido ni habrá guerrillas, esto lo dice para que la gente no le tome importancia al movimiento del Partido de Los Pobres, porque el ejército le llegó a temer a Lucio, pues su lucha se escuchó en todo el país.

El general Cuenca afirma que los guerrilleros son unos delincuentes, les expresa a las personas de los pueblos que no tienen por qué temerle al ejército, que sólo cuida sus bienes y que esos delincuentes perjudican a los pueblos pobres, hace esto porque su intención es poner a la gente en contra del grupo guerrillero, para que estos se queden solos y posteriormente ellos los puedan capturar.

Cuenca emite su punto de vista cuando dialoga con Figueroa, llama bandido a Lucio y no guerrillero, pues para él Lucio es una persona que sólo ha dado problemas y le expresa a Figueroa que está mal querer dialogar con él y que además obedezca las condiciones que este le ha puesto; le advierte a Figueroa que no solucionará nada. Cuenca tenía razón en no dejar ir a Figueroa, porque desde el momento que el senador llega a la sierra queda como secuestrado por el grupo guerrillero, pero Lucio no hace esto por maldad, sino para conseguir la liberación de los campesinos.

Cuenca expresa que los guerrilleros acaban con los soldados, pero que lo hacen por la espalda, que no tienen el valor de hacerlo de frente, pero lo mismo hace el ejército cuando atacan a los guerrilleros, los segundos tienen mucha desventaja, porque el ejército conoce estrategias militares y además cuentan con mejores armas.

-¡Pero los riesgos los correré yo! -¡Los riesgos los hemos corrido todos! Y principalmente los soldados acribillados por esos forajidos traicioneros, que matan al acecho, como perros, que no se atreven a dar la cara. Que no se atreven a dar la cara ni contigo (Montemayor, 1997:223).

Cuenca emite a los periodistas que la gente en Guerrero no le teme al ejército, porque son un apoyo para la sociedad en general, pues ellos están presentes cuando ocurren destrozos naturales y que para eso están, no para atacar al pueblo como lo hace Lucio con ellos. Cuenca hace esto para conseguir el apoyo de la gente del pueblo, y posteriormente puedan aprehender a Lucio y también para que la gente piense que el ejército es bueno, pero la ciudadanía se da cuenta de los hechos que estos cometen, sobre todo cuando asesinan sin piedad.

Rangel Medina quien es miembro del ejército da su punto de vista acerca del papel que juega el ejército en la sociedad, el cual es positivo, porque opina que el ejército ayuda a la ciudadanía, mientras que los guerrilleros opinan que los militares acaban con los campesinos y que se aprovechan abusando de la gente pobre. Los puntos de vista son distintos de acuerdo a la perspectiva de cada grupo.

El presidente Echeverría da su punto de vista acerca de los guerrilleros, no los llama de esta manera, porque es presidente de la republica y se siente que todo lo puede resolver y que todo lo sabe. Supone por qué se comportan como revolucionarios, Lucio Cabañas y sus seguidores. El presidente finge no saber por qué el pueblo reacciona de esta manera. Él opina que los guerrilleros son personas inadaptadas que no saben lo que quieren y que se comportan de esta manera sólo para hacer escándalos y no para conseguir beneficios para el pueblo.

Es útil para todos-continuo segundos después-, que reflexionemos algo sobre estos pequeños grupos de cobardes terroristas. Surgidos de hogares generalmente en proceso de disolución; creados en un ambiente de irresponsabilidad familiar; víctimas de la falta de coordinación entre padres y maestros; mayoritariamente niños que fueron de lento aprendizaje; adolescentes con un mayor grado de inadaptación en la generalidad (Montemayor, 1997:307).

En Guerra en el paraíso aparece un estudiante que protesta en la amplia sala de conferencias, donde se encuentra el ministro y el gobernador. El estudiante emite un punto muy importante, cuando dice que Lucio Cabañas y Genaro Vázquez hasta dieron sus vidas para defender a su pueblo que era pisoteado por los poderosos, y no permitieron que su pueblo siguiera siendo explotado. (Montemayor, 1997:97). Gracias al punto de vista del estudiante podemos comprobar y valorar el sacrificio que hicieron por nosotros los dos maestros.

El punto de vista que emite un anciano del pueblo es muy valioso, porque él es un hombre maduro que conoce muy bien al gobierno. Es por ello que éste habla acerca del gobierno de cómo ha sido y cómo trata a la gente como Lucio. El anciano expresa que el gobierno nunca va a cambiar y que así ha sido en todos los tiempos.

En Guerra en el paraíso sólo aparece un punto de vista incidental aparece cuando se muestran pequeñas opiniones, en este caso es en contra de los guerrilleros. Este punto se puede apreciar cuando una mujer campesina expresa que le da lo mismo que lleguen a su casa militares o bandidos es así como llama a los guerrilleros. Dice esto porque cuando llegaban los guerrilleros a algún lugar, inmediatamente llegaba el ejército y estos si causaban destrozos en las casas de los campesinos, además asustaban a los niños, violaban y golpeaban a las mujeres. En toda la novela los campesinos hablan a favor de Lucio, porque los guerrilleros defienden una lucha social.

Bibliografía

Adams, Richard N. Etnias en evolución social. Estudios de Guatemala y Centroamérica, UAM-I, p. 74. 1995

Filinich, María Isabel. La voz y la mirada, Colección Meridiano, México, 1ª edición, 1997, 1ª reimpresión, 1999

Gilberto Giménez. “Identidad y memoria colectiva” en Teoría y análisis de la cultura, CONACULTA/ICOCULT, 2005

Montemayor, Carlos. Guerra en el paraíso, Planeta, México, 2007

Pimentel, Luz Aurora. El relato en perspectiva, siglo veintiuno editores, México, 2008


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