Isabel María García Sánchez
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1.1. EVALUACIÓN DE APRENDIZAJES: CONCEPTUALIZACIÓN y TOPOLOGÍAS
La evaluación puede definirse como el proceso mediante el cual se elabora un juicio sobre el valor o mérito de algo mediante la recogida de evidencias sobre las que se aplicarán ciertos criterios de calidad previamente establecidos (Prado y García, 2008). Tal juicio de valor debe permitir al docente y al discente tomar las decisiones de mejora pertinentes respecto al proceso de aprendizaje (Ibarra y Rodríguez, 2008).
Los elementos más importantes del sistema de evaluación del aprendizaje se concretan en la observación, interpretación, juicio, acción y explicitación metacognitiva (Pellicer Iborra y Ortega Delgado, 2009, p. 4), representado todos ellos en la Figura 2.
Observación
Actuación destinada a conocer el estado y la evolución del aprendizaje del alumno
Interpretación
Analizar lo que hacen los alumnos y los motivos que subyacen (entender por qué hacen lo que hacen)
Juicio
Toma de decisiones orientadas a la mejora continua de los resultados
Acción
Modificación de la intervención educativa del docente con el fin de lograr un mayor grado de eficiencia y eficacia
Explicitación metacognitiva
Puesta a disposición del alumnado de sus propios itinerarios de aprendizaje con el fin de que se conozcan a sí mismos y modifiquen voluntariamente su comportamiento
De lo anteriormente expuesto, y de acuerdo con Bordas y Cabrera (2001), se puede afirmar que la evaluación ha dejado de ser considerada un elemento externo a la actividad de aprender, pasando a formar parte del contenido curricular del aprendizaje. Debiéndose tener presente que el aprendizaje y la evaluación deben tomar en consideración el desarrollo del propio estudiantes (expectativas, niveles iniciales, estilos de aprendizaje, sus ritmos e intereses, ……., sus necesidades y proyección futura). En este sentido, la evaluación se ve afectada por las teoría del aprendizaje, tal y como se expone en la tabla 1.
En función del criterio seleccionado pueden distinguirse diferentes tipologías de evaluación. Así, en la Tabla 2, se sintetizan distintas clasificaciones de acuerdo con: i) el objetivo perseguido por la evaluación, ii) su amplitud o extensión; iii) los impulsores o ejecutores de la misma, iv) su distribución temporal y v) los referentes utilizados en la comparación.
Tabla 2. Tipologías de evaluación de aprendizajes
Denominación
Características
Criterio: Según su finalidad y función
Función diagnostico
La evaluación tiene como objetivo adecuar la actuación docente a las características que presentan los estudiantes cuando acceden a un nuevo aprendizaje.
Función formativa
La evaluación se utiliza preferentemente como estrategia de mejora y para ajustar sobre la marcha, los procesos educativos de cara a conseguir las metas u objetivos previstos. Es la más apropiada para la evaluación de procesos, aunque también es formativa la evaluación de productos educativos, siempre que sus resultados se empleen para la mejor de los mismos. Suele identificarse con la evaluación continua.
Función sumativa
La evaluación suele aplicarse más en la evaluación de productos, es decir, de procesos terminados, con realizaciones precisas y valorables. Con la evaluación no se pretende modificar, ajustar o mejorar el objeto de la evaluación, sino simplemente determinar su valía, en función del empleo que se desea hacer del mismo posteriormente.
Función formadora
Entendiendo como tal aquella que arranque del mismo discente y se fundamente en el autoaprendizaje. Supondría una reflexión interna por parte del alumno de sus aciertos y errores en el proceso de aprendizaje, lo que le debe permitir fijar un nuevo punto de partida en su proceso de autoaprendizaje para mejorar sus resultados y habilidades cognitivas.
Criterio: Según su amplitud o extensión
Evaluación global
Se pretende abarcar todos los componentes o dimensiones de las características del alumno y del proceso de aprendizaje. Se considera el objeto de la evaluación de un modo holístico, como una totalidad interactuante, en la que cualquier modificación en uno de sus componentes o dimensiones tiene consecuencias en el resto. Con este tipo de evaluación, la comprensión de la realidad evaluada aumenta, pero no siempre es necesaria o posible.
Evaluación parcial
Pretende el estudio o valoración de determinados componentes o dimensiones de un programa educativo, del rendimiento de los alumnos, etc.
Criterio: Según los agentes evaluadores
Evaluación interna
Es aquella que es llevada a cabo y promovida por los propios integrantes de un programa educativo. A su vez, la evaluación interna ofrece diversas alternativas de realización: autoevaluación, heteroevaluación y coevaluación.
* Autoevaluación: Los roles de evaluador y evaluado coinciden en las mismas personas, es decir, el alumno interviene activamente en su evaluación.
* Heteroevaluación: La evaluación de una actividad, objeto o producto es realizada por evaluadores distintos a las personas evaluadas. El docente evalúa a sus alumnos.
* Coevaluación: Aquella en la que unos sujetos o grupos se evalúan mutuamente. Evaluadores y evaluados intercambian su papel alternativamente.
Evaluación externa
Se da cuando agentes no integrantes de un programa evalúan su funcionamiento. Suele ser el caso de la "evaluación de expertos". Estos evaluadores pueden ser inspectores de evaluación, miembros de la Administración, investigadores, equipos de apoyo a la escuela, etc.
Criterio: Según el momento de aplicación
Evaluación inicial
Se realiza al comienzo del curso académico, de la implantación de un programa educativo, del funcionamiento de una institución escolar, etc. Consiste en la recogida de datos en la situación de partida. Es imprescindible para iniciar cualquier cambio educativo, para decidir los objetivos que se pueden y deben conseguir y también para valorar si al final de un proceso, los resultados son satisfactorios o insatisfactorios.
Evaluación procesual o continua
Consiste en la valoración a través de la recogida continua y sistemática de datos del proceso de aprendizaje de un alumno a lo largo del periodo de tiempo fijado para la consecución de unas metas u objetivos. La evaluación procesual es de gran importancia dentro de una concepción formativa de la evaluación, debido a que permite tomar decisiones de mejora sobre la marcha.
Evaluación final
Consiste en la recogida y valoración de unos datos al finalizar un periodo de tiempo previsto para la realización de un aprendizaje con el fin de enjuiciar el nivel de consecución de los objetivos.
Criterio: Según el referente empleado en la comparación
Autoreferencia
La referencia es el propio sujeto, sus capacidades e intereses, las metas que se había propuesto alcanzar, considerando el tiempo y el esfuerzo invertidos por el sujeto, y teniendo en cuenta sus aprendizajes previos.
Heteroreferencia
Las referencias no sean el propio sujeto, encontrándonos con dos posibilidades:
* Referencia o evaluación criterial: Aquella en las que se comparan los resultados de un proceso educativo cualquiera con los objetivos previamente fijados, o bien con unos patrones de realización, con un conjunto de situaciones deseables y previamente establecidos. Es el caso en el que comparamos el rendimiento del alumno con los objetivos que debería haber alcanzado en un determinado plazo de tiempo.
* Referencia o evaluación normativa: El referente de comparación es el nivel general de un grupo normativo determinado por el resto de alumnos.