PRODUCCIÓN DE PLANTAS

PRODUCCIÓN DE PLANTAS

Juan Carlos Pérez López

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TIPOS DE HORNOS:

Los hornos que se pueden emplear en los procesos de secado de las piñas pueden ser muy variados, siempre que reúnan las siguientes características:

• 1ª.- El aire residual, al salir del horno de secado, deberá utilizarse en una primera fase de desecación de la piña, haciéndolo pasar por unos depósitos donde se encuentra la piña que va a emplearse en la próximas cargas del horno. Con esto se conseguirá reducir el proceso de apertura, evitándose, en algunos, la resistencia a la apertura de determinadas piñas y también el daño que pueda sufrir la semilla dentro de la piña humedad.

• 2ª.- La duración del secado, propiamente dicho, debe ser tan corta como lo permita la apertura completa de la piña y el buen rendimiento en semilla de la operación. En ciertos modelos la piña es sacudida durante el secado, con lo cual se simplifican las operaciones de extracción y limpieza subsiguientes, al mismo tiempo que se consigue una mejor circulación de aire.

• 3ª.- El dispositivo del horno deberá permitir que piña encuentre un aumento progresivo de temperatura y descenso de humedad, para lograr un secado mas racional y técnicamente mas perfecto.

• 4ª.- El horno de secado deberá tener un dispositivo para que salga la semilla, según va cayendo de las piñas para evitar una exposición prolongada de la misma al calor. Una vez que la semilla ha alcanzado un grado de humedad adecuado para su conservación, deberá retirarse del horno de secado.

• 5ª.- Dentro del horno de secado deberá existir una buena corriente de aire que renueve el aire húmedo enfriado por el aire caliente y seco. Deberá evitarse cualquier posible estancamiento de aire en su interior, pues el aire húmedo y caliente puede dañar gravemente a la semilla.

• 6ª.- deberá disponer de los aparatos necesarios para conocer y regular la temperatura y la humedad en las distintas fases del secado.

• 7ª.- Disponer de los dispositivos adecuados para evitar toda posible mezcla de semilla de distinta especie o procedencia.

• 8ª.- La capacidad del horno de secado deberá estudiarse en función de las necesidades de semilla, pero nunca deberán montarse hornos demasiado grandes que encarezcan el secado o dificulten considerablemente la operación. En estos casos es preferible montar varios hornos de secado de pequeñas dimensiones en lugar de una instalación grande.

• 9ª.- El funcionamiento del sequero deberá disponer de las instalaciones adecuadas para ahorrar, en lo posible, la mano de obra necesaria. Asimismo, la caldera o calorífero que suministra el calor necesario para calentar el aire de secado deberá proyectarse de manera que este calor resulte lo más barato posible.

• 10ª.- deberán cuidarse, al máximo, las garantías necesarias para evitar en lo posible, los riesgos de fuego o explosión.

Todo horno de secado para piñas con circulación forzada de aire consta de tres partes esenciales: la caldera o calorífero, el grupo motor-ventilador y la cámara de secado, propiamente dicha.

El calorífero, en la mayoría de las instalaciones comerciales, se reduce a un hogar, alimentado de ordinario con la piña abierta y seca que sale del horno y que calienta por fuego directo un sistema tubular por el que circula aire, que entrando frío por un extremo sale caldeado por el opuesto. En algunas instalaciones modernas se emplea el fuel-oil como combustible y en los hornos pequeños, la calefacción eléctrica por ser mas limpia, aunque bastante más cara que las otras.

El grupo motor-ventilador, tiene por objeto producir una corriente de aire en el interior de la cámara de secado para así, evitar el estancamiento de aire húmedo. Este ventilador absorbe el aire caliente que hay en el calorífero y lo lanza dentro de la cámara de secado para que, pasando a través de las piñas en ella contenidas, salga al exterior cuando se ha enfriado y cargado de humedad. En el conducto que va a la cámara de secado se instala un termostato que actúa sobre una válvula que regula la entrada del aire caliente, procedente del calorífero y frío del exterior para que la temperatura no sobrepase los 50º C, que es la temperatura óptima de secado sin que dañen las semillas.

La cámara de secado puede ser de acero o de fábrica y en ella se ponen las piñas cerradas para que al actuar sobre ellas el aire caliente, procedente del calorífero se abran y dejen escapar los piñones. Las características de estas cámaras pueden ser muy variables, tanto en dimensiones, posición y sistema de funcionar. Los distintos modelos de las cámaras de secado dan lugar a los diferentes tipos de hornos, ya que estos son las piezas fundamentales de un sequero de calor artificial.

Los hornos modernos se pueden dividir en dos categorías principales: hornos progresivos y hornos cilíndricos rotatorios.

Hornos progresivos:

Las instalaciones modernas para el secado de piñas en cantidades comerciales suelen llevar siempre el tipo de hornos por ser los que dan mejor rendimiento a un costo mas bajo.

En los hornos progresivos las piñas se exponen a una corriente de aire cada vez más caliente y seco desde el comienzo hasta el final del periodo de desecación. Esquemáticamente, las piñas se colocan en una serie de bandejas o vagonetas, que se van aproximando al punto por donde entra el aire caliente. A medida que se abren las piñas se retiran, incorporándose una nueva bandeja o vagoneta en el extremo contrario, es decir, por el sitio donde sale el aire, después de haber recorrido toda la cámara de secado.

Desde el punto de vista de la construcción, los hornos progresivos de secado pueden ser verticales u horizontales, según que el eje de la

Hornos cilíndricos rotatorios:

En estos hornos las piñas que se quieren abrir se ponen en un cilíndrico de plancha de acero perforada, que gira accionado por un motor eléctrico, alrededor de su eje central. Este cilindro va encerrando en una caja de hierro laminado con placas aislantes de doble chapa, rellenas de vidrio, con lo cual se consigue un aislamiento térmico muy alto. Dentro de esta carcasa metálica se origina una corriente de aire caliente, debido a unos ventiladores que hacen que el aire procedente de la caldera actúe sobre las piñas que hay en el cilindro rotatorio y luego salga al exterior, no sin antes pasar entre las piñas que se encuentran en la cámara de presecado. Las piñas con que se carga el presecador van siguiendo un recorrido vertical descendiente hasta llegar a las portezuelas de carga del cilindro.

Durante la operación de secado, el cilindro gira lentamente haciendo que las piñas se golpeen constantemente unas contra otras o contra las paredes del cilindro. Este sacudimiento continuo, bajo una corriente de aire seco y cálido, acelera enormemente el proceso de secado hasta el punto de que las piñas se abren en muy poco tiempo.

Al abrirse las piñas y estas ser sacudidas, dejan escapar las semillas que pasan a través de los orificios que tiene el cilindro rotatorio a un depósito de semillas fuera del horno. Las piñas abiertas pasan, finalmente a una rejilla inclinada, que separa las piñas vacías de las semillas.

La operación de secado viene a durar en estos hornos de 3 a 4 horas y las temperaturas que se suelen alcanzar son de hasta 60 ºC. llevan un sistema automático para controlar la temperatura. Los hornos de este tipo tienen una capacidad de 4 a 5 Hl de piñas de pino, pudiéndose tratar de 20 a 30 Hl de piña por día y horno.

En las instalaciones comerciales se suelen montar series de 2 a 4 hornos, según las necesidades de los mismos.

Estos hornos presentan muchas ventajas sobre los hornos progresivos, pues el tiempo que se necesita para abrir las piñas es mucho mas corto y por consiguiente el daño que puedan sufrir las semillas por la acción prolongada del calor es mucho menor. Por otro lado, al ser sacudidas las piñas constantemente durante el proceso de secado, estas dejan escapar las semillas sin necesidad de un volteo posterior para extraerlas.

En las instalaciones modernas, especialmente cuando no se necesita extraer cantidades enormes de semilla, se prefieren estos hornos por el ahorro de tiempo y dinero que representan.

La calefacción de estos hornos puede ser por fuel-oil y quemando las piña abiertas, aunque algunos hornos de pequeño tamaño llevan calefacción eléctrica, que si bien resulta mas cara es mas limpia.

Otros tipos de hornos:

Además de los hornos descritos anteriormente, para secados ocasionales o para cantidades pequeñas de piñas, se pueden emplear instalaciones muy rusticas, que si bien pueden servir para resolver un problema ocasional, nunca deberán emplearse de un modo habitual.

En casos de necesidad se puede emplear, como solución más primitiva, una habitación con un dispositivo de calentamiento. Estas habitaciones deberán tener una buena ventilación para evitar el estancamiento de aire húmedo. Para ello, será preciso que se abran las ventanas para originar una corriente de aire. Las piñas que se quieren abrir deberán extenderse sobre el suelo o sobre unas bandejas en capas finas que faciliten la circulación del aire entre las piñas.

Para evitar daños por condensación del aire, deberán removerse repetidas veces las piñas hasta que estas se hayan abierto totalmente. Es de gran importancia que la temperatura no suba por encima de los 30-40º y esto únicamente si la renovación del aire es intensa. Contra menor sea la ventilación, mas baja deberá ser la temperatura de secado.