Tesis doctorales de Economía


EL PROCESO DE ANALISIS JERARQUICO CON BASE EN FUNCIONES DE PRODUCCION PARA PLANEAR LA SIEMBRA DE MAIZ DE TEMPORAL

Andrés María Ramírez



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6.2 Los agrosistemas

La decisión de seleccionar al municipio de Huamantla como la región de estudio se tomó con base a que la mayor cantidad de información experimental usada para generar la función de producción que sirvió para determinar la importancia de los factores de suelo, clima y manejo en la producción de maíz se generó en el área del DDR 165 Huamantla, y que Huamantla es el único municipio de los que constituyen a éste que comprende los tres agrosistemas conocidos, a saber:

• Siembras de maíz en temporal con humedad residual sobre suelos arenosos en las Faldas de La Malinche, del 19 de febrero al 21 de marzo.

• Siembras de maíz en temporal con humedad residual sobre suelos arenosos del Valle de Huamantla, del 11 de marzo al 10 de abril.

• Siembras de maíz en temporal estricto sobre suelos arenosos delgados de Lomeríos, del 31 de marzo al 30 de abril (Aveldaño, 1979; María, 1997).

De acuerdo con María y Volke (1999), a las Faldas de La Malinche corresponden las siembras tempranas, al Valle de Huamantla conciernen las siembras intermedias, y a los Lomeríos las siembras tardías; el valor de clase (definido a través de la media aritmética) para la fecha de siembra en esos agrosistemas es 15 de marzo, 5 de abril y 25 de abril, para las siembras tempranas, intermedias y tardías, respectivamente. Cabe observar que en los tres agrosistemas se puede dar la condición de las siembras tardías.

6.2.1 Producción tradicional de maíz

En la región de estudio se distinguen tres condiciones de producción de maíz de temporal: siembras con punta de riego, siembras de temporal con humedad residual y siembras de temporal estricto. Las primeras se realizan generalmente en suelos profundos y semiplanos, principalmente en las faldas de La Malinche y el Valle de Huamantla, en tanto que las otras son más comunes en los suelos someros, con o sin pendiente considerable. En el desarrollo de la investigación se tomó en cuenta a las siembras de temporal, tanto con humedad residual en el suelo como de temporal estricto.

6.2.1.1 Siembras de humedad residual

De acuerdo con Turrent et al. (1992), la condición de siembra en temporal con humedad residual se desarrolló como una variante de manejo del suelo para adelantar la fecha de siembra en suelos profundos que cuentan con un horizonte superficial grueso y de textura ligera arenosa, areno migajosa o migajón arenoso. Según estos autores, la condición de humedad residual en el suelo es común en el eje neovolcánico, de ahí la persistencia de ella en el cultivo del maíz. Esta condición de humedad se mejora mediante prácticas de “arrope de la humedad” como son el barbecho y la rastra inmediatamente después de cortar y amogotar las plantas de maíz (las plantas se hacinan en manojos distribuidos a lo largo del surco para terminar su madurez y secado) o pizcar mecánicamente la mazorca (Velázquez, 1989).

Las siembras de humedad residual se localizan en las laderas de La Malinche y su característica principal es que se efectúan desde la última semana de febrero hasta fines de marzo, lo que da a los productores la oportunidad de sembrar dos meses antes del inicio de lluvias (Aveldaño, 1979). Estas siembras también se realizan, ocasionalmente, en el Valle de Huamantla, a partir de la segunda quincena de marzo hasta la penúltima semana de abril. En las faldas de La Malinche las siembras de humedad residual se hacen más temprano debido a que por su mayor altitud, las temperaturas son más bajas y alargan el ciclo del maíz.

Bajo esta condición de siembra, se corre el riesgo de que no se presenten lluvias durante el tiempo que transcurre entre la siembra y la germinación y emergencia de las plántulas, lo que puede provocar la muerte de ellas en etapas tempranas de desarrollo; por esta situación es común observar fallas en las densidades de población del cultivo.

Sin embargo, al parecer actualmente en la zona de estudio se está presentando un desfase en las fechas de siembras debido a un retraso de las lluvias por efectos del denominado cambio climático (Castillo, 2007), lo que ha provocado desconcierto tanto a productores como investigadores respecto a los cambios que deben introducirse en los sistemas de producción; por ejemplo, en la semilla a usar, las prácticas agrícolas para conservar humedad, fechas de las labores, cantidad y métodos de aplicación de los fertilizantes, etc.

6.2.1.2 Siembras de temporal estricto

Estas siembras se realizan a partir de la segunda quincena de abril hasta la primera semana de mayo, que es cuando se inician normalmente las lluvias. Según Villalpando (1975), los suelos delgados con horizonte B arcilloso y los suelos delgados de lomerío, cuya morfología no les permite conservar la humedad del perfil (debida a las escasas lluvias de fin del año anterior y los primeros meses del año en que se va a sembrar), se manejan bajo esta condición; sin embargo, en muchas de las ocasiones, éste tipo de siembras se efectúan en suelos profundos, aquellos que no fueron preparados con oportunidad y no conservaron la humedad.

En ambos tipos de siembras (temporal con humedad residual y temporal estricto) predominan las variedades criollas de color blanco o cremoso, fertilizadas con nitrógeno y fósforo en la primera escarda, y con nitrógeno en la segunda escarda, aplicando el fertilizante de forma mateada; comúnmente las fuentes de fertilizantes son urea, superfostato de calcio triple y fosfato diamónico. Es frecuente observar que el fertilizante se aplique cuando hay presencia de maleza en el cultivo y sin humedad en el suelo.

Cuando el grano de maíz está en estado lechoso-masoso, algunos productores acostumbran despuntar la planta; es decir, cortarla desde el nudo superior de la mazorca, hacia arriba, con el objeto de, por una parte, acelerar la madurez del grano y por la otra de aprovechar el forraje verde, sin que se tenga el antecedente de alguna disminución del rendimiento de grano por el uso de esta práctica.

Cuando el maíz llega a su madurez fisiológica, o pocos días antes, es costumbre cortar las plantas para hacinarlas en monos o mogotes; ésta práctica se hace para completar la madurez fisiológica del grano y protegerlo de las heladas tempranas, así como preparar el suelo para conservar la humedad. Actualmente se ha observado que algunos productores, con el fin de reducir la inversión o el pago por jornales extras por el amogotado de las plantas, esperan a que éstas se sequen en pie lo mayor posible y luego las cortan y tienden en el suelo y las pizcan directamente.


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