EL LADO OCULTO DEL DESARROLLO<br>REFLEXIONES DESDE LA REGIÓN PARA TODOS

EL LADO OCULTO DEL DESARROLLO
REFLEXIONES DESDE LA REGIÓN PARA TODOS

Andrés E. Miguel
Julio C. Torres
Instituto Tecnológico de Oaxaca

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23. EL DESARROLLO Y LOS PROYECTOS

--Lo que viene es una carreta que está levantando mucho polvo, dijo el Señor Desarrollo.
--¡Uf!, va a ensuciar mi vestido, argumentó La Catrina.
--Ya quiero que llegue, me parece que subirme a ese adefesio me dará la posibilidad de conocer un nuevo proyecto para mi vida, dijo alegremente Brujilda, quien agregó:
--A propósito mi profe, como se hace realidad todo esa palabrería del desarrollo.
--A lo que el profesor, inspirado, respondió:
--Pienso que el siguiente ejemplo puede ayudar a entender la forma de aterrizar el desarrollo:

--“Hubo una vez un poblado lleno de riqueza producto del trabajo del campo realizado en un terreno fértil y florido. Pero sucedió que la lluvia se alejó, pues una sequía de varios años dañó la fertilidad del suelo y la economía del poblado.

En la comunidad existían cuatro personajes que se vieron afectados por esta situación, y que enfrentaron de diversa manera el suceso.

El primero de ellos, el único que contaba con recursos para viajar, llamado MigrAcción, optó por abandonar la comunidad migrando hacia otras regiones más prósperas, esa fue su solución.

El segundo, llamado InAcción, decidió poner en manos de un Ser Superior su situación, y se dijo:
--Mi Ser Supremo es Todopoderoso, por lo tanto, aunque yo esté con las manos cruzadas, él resolverá mi situación. Y así se quedó dispuesto a sufrir.

El tercero de los personajes, llamado PolitizAcción, consideró que lo que le sucedía era producto de la mala actuación de su Gobierno, así que todas las tardes iba a la oficina de quienes gobernaban para exigirles que corrigieran, a como diera lugar, lo que le sucedía. Así estuvo mucho tiempo, sin que nunca su gobierno le resolviera su situación, pues solo le ponía a dar vueltas y más vueltas.

El cuarto personaje, llamado EmprendAcción, decidió afrontar la nueva situación con una mejor organización y planeación, así que emprendió un proyecto de inversión utilizando su experiencia y conocimientos.

Cuando lo inició, los otros personajes se burlaban de él diciendo:
--Estás luchando contra los mandatos divinos, te va a ir mal.
--¿No te das cuenta que le estás haciendo juego al mal gobierno?, deja que los burócratas resuelvan este problema.

Pero EmprendAcción, con esfuerzo, desvelos e incluso preocupaciones, logró levantar la producción de su campo, el cual nuevamente floreció.

Poco tiempo después, quienes se burlaban de él, recibieron como apoyo un empleo y un ingreso de quien había decidido emprender, y quien gracias a su empreño, después de un tiempo recuperó la prosperidad y riqueza de la población.

Esta es la función de los proyectos de inversión, que son los que materializan, los que dan forma y hacen posible el desarrollo: son las decisiones encaminadas a materializar las metas a través del diseño de futuras empresas y consolidación de actividades, las que hacen realidad el desarrollo.” 

El profesor no bien había acabado de decir lo anterior, cuando la carreta que veían venir se frenó frente a ellos: era tenebrosamente oscura, tirada por cuatro caballos de negro color, pero sin cabeza. Tampoco había jinete alguno conduciéndola:

--Un desarrollo sin proyectos es como esta carreta que no tiene quien la guíe, se expresó burlonamente Brujilda, quien inmediatamente saltó a la carreta para tomar las riendas:
--¡Vamos, ustedes también súbanse!, gritó a La Catrina y al Señor Desarrollo, quienes estaban mirando con la boca abierta lo que veían venir tras la carreta, y que en realidad había provocado la estampida de los caballos:
--Yo si me subo, dijo La Catrina.
--Yo también, eso que viene no me gusta, dijo el Señor Desarrollo.
--Y ahora qué les pasa, si ustedes son los que deben asustar, no están para que los asusten, dijo Brujilda, quien al voltear y ver la razón de la preocupación de sus colegas, jaló las riendas de los caballos y apresuradamente dijo.
--¡Tienen razón, más vale que digan aquí corrió que aquí quedó, vámonos, arre, arre!, gritó, atropellando en su recorrido a los fantasmas, diablillos, y demás comparsas, que también, con desesperación emprendían la huida.
--¡No sean malos, no me dejen!, gritó el profesor.
--¡No me dejen ni que nada!, ¡tú te quedas a especular sobre tu desarrollo!, ¡nos vemos!
--¡No seas mala Brujilda!, tan siquiera devuélveme a mi forma original, no te vayas así..¡Hey, Señor Desarrollo!, por lo menos usted quédese, pues estamos hablando de usted…suplicó el profesor.
--¡Adiós, hasta nunca!, fue el último grito que oyó.

Rápidamente volteó para ver qué era lo que venía.

Lo que había asustado a “sus colegas nocturnos” era nada menos que la luz del amanecer: se sabe que la luz a los espíritus de la oscuridad les causa malestar, por eso el terror del Señor Desarrollo, la Catrina, Brujilda y los integrantes de la comparsa, cuando vieron aparecer la luz del alba en el horizonte.

24. EL DESPERTAR: CONCLUSIONES

El joven investigador despertó sobresaltado. Se había quedado dormido momentáneamente, pero a él le pareció que había dormido toda la noche:

--¡Santo cielo!, ¿qué sucedió?...Sólo me dormí tres minutos, y me parece que fue toda la noche…A ver, primero voy a apagar este radio, creo que la canción que está terminando me provocó el sueño que acabo de tener..

Se estiró para apagar el radio, pero dejó que terminara la canción con mariachi que decía:

Ay que bonito es volar
A las once de la noche,
A las once de la noche
Ay que bonito es volar ay mamá,
Para venir a quedar en los tirantes de un coche,
En los tirantes de un coche
Hasta quisiera llorar ay mamá,
Me agarra la bruja y me lleva al cuartel,
Me vuelve maceta 
Y me da de comer,
 Me agarra la bruja y me lleva a su casa,
Me vuelve maceta 
Y me da calabaza,
Y dígame dígame usted
Cuantas criaturitas se ha chupado usted,
Ninguna, ninguna, ninguna lo sé
Yo ando en pretensiones de chuparme a usted.

Esta era la letra, que en un abrir y cerrar de ojos, había causado el susto del profesor, quien inmediatamente revisó sus piernas, y fue corriendo a un espejo para ver si había recuperado su forma original, no la que había soñado.

--¡Uf! Respiró profundo cuando comprobó que nada le había sucedido, y entonces se llenó de felicidad.

Rápidamente fue a la computadora, y con un clic envió su informe que acababa de terminar. Tomó rumbo a casa, pero en su camino escuchó una voz que le preguntó a lo lejos:

--¿Qué es la región para usted?

El joven profesor respondió lleno de confianza:

--“Para mí la región es el espacio que me regala:
Mis mañanas frescas con frescura de cenzontles cantando.
Las sonrisas francas que me animan con la franqueza de una mano buena hacia ti.
Las rosa rosas que exhalan el perfume con frutos maduros que irradian el verdor de una verde rama.
Las miradas esperanzadas de los niños con la ilusión del suspiro de un adulto.
Los colores vivos de peces que se mueven con la amistad que se estremece en la cola de mi mascota.
La región es mi gran hogar, y es el lugar donde puedo realizar mis cosas más íntimas, y la más íntima es el lugar donde puedes descansar, morar, dormir, morir para siempre: la región es nuestro gran hogar...”

La voz insistió:

--¿Es la región nuestra alegría de vivir?

Y el profesor respondió:

--Sólo sé que de lo que ella contiene emana el calor de esa llamarada llamada amor, que te hace amar la vida que fluye en ti y que viene de tu alrededor.”

Entonces la voz se perdió en las sombras, y solo se escuchó su risa:

--¡Ji, ji, ji!

El profesor también sonrió, la sonrisa le era conocida ya…
Por cierto, ese día que iniciaba era el 2 de Noviembre, fecha en que se celebra a los difuntos en Oaxaca.

BIBLIOGRAFÍA: PARA SABER MÁS…

Amin, Samir. (1994). El fracaso del desarrollo. Madrid: IEPALA.
Balandier, George. (1996). El desorden. La teoría del caos y las ciencias sociales. Elogio a la fecundidad del movimiento. España: Gedisa, Editorial.
Barkin, David. (1995). Riqueza, pobreza y Desarrollo Sostenible, grupo Interamericano para el Desarrollo Sostenible Editor. Oaxaca: DPITO, mimeo.
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Boisier, Sergio. (1992). El difícil arte de hacer región. Perú: Centro de Estudios Andinos Bartolomé de las Casas.
Boudeville, Jacques. (1968). Los Espacios Económicos. Buenos Aires: Eudeva.
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