EL COLEGIO ELIZA BOWMAN DE CIENFUEGOS (1907-1940)

EL COLEGIO ELIZA BOWMAN DE CIENFUEGOS (1907-1940)

José Antonio Ramírez Jiménez (CV)
Zusana Carrillo Vidal

Universidad de Cienfuegos

Volver al índice

2.3 Estructura interna, actividades y organizaciones escolares

Cada departamento estaba bien organizado. La facultad contaba, al inicio, de once maestros cubanos quienes impartíanlas clases del Departamento de Español y de seis maestras americanas quienes lo hacían el Departamento de Inglés. Estas maestras americanas habían recibido su educación universitaria en los EE.UU. Se destaca la participación a través de los años de mayor cantidad de maestros cubanos con respecto a los del Departamento de Inglés. El número de profesores oscilaba entre 9 y 11, lo que los sobrecargaba de grupos para impartir las clases. 1
Las profesoras norteamericanas siempre se encargaron del Departamento de Inglés. Cabe destacar que ningún profesor del sexo masculino formó parte de este departamento. Siempre fueron muy estrictas las directoras en cuanto a esto. El departamento de inglés también ofrecía una hora de clases  en el departamento de español, para dar a los alumnos más ventaja de adquirir ese idioma. Había clases de ciencias, educación física, corte y costura, trabajo manual, la banda rítmica infantil y contaba con el kindergarten 2 bien apropiado y con maestra graduada de la Normal de La Habana. 3Se daba instrucción de la Biblia como la palabra de Dios y no con énfasis doctrinal. Se celebraban programas tres veces a la semana en el salón de actos. Además se admitían pupilas 4 , medias pupilas y externas.

Un testimonio de una de sus estudiantes nos daría la medida de la importancia que se le concedía a la enseñanza del idioma inglés. Éste sería, sin lugar a dudas, un mecanismo acertado. “Los programas educativos que seguíamos en el Departamento de Español eran los mismos de las escuelas públicas, excepto la asignatura Inglés, que a partir del Kindergarten no como asignatura era más bien mediante cantos, juegos e historietas. Así nos preparaban para esta asignatura que comenzaba desde primer grado hasta el sexto, y para ingresar más tarde, en los grados posteriores en el Departamento de Inglés.” 5 Aún en nuestros días se oye hablar de la excelente preparación de los alumnos de Eliza Bowman por su buena dicción del inglés.

Este colegio para niños de ambos sexos ofrecía, como lo refiere La Correspondencia en junio de 1910, como principal ventaja para la enseñanza primaria elemental y de idiomas, el contar con un claustro de profesores idóneo donde cada uno impartía una sola asignatura de acuerdo a su especialidad. Este sin dudas era un mecanismo de propaganda para el ingreso en el plantel dándoles seguridad a los padres en la buena educación que podrían recibir sus hijos. Es interesante como solo admitían niños hasta la edad de 12 años. Tenía además grandes habitaciones para niños internos.

En cuanto al cuadro de profesores se aprecia que hasta la directora impartía alguna materia. El caso de Aritmética y algebra (en Inglés) y gimnastica la comienza la Srta. H.B. Carson, directora; Clase de Inglés, Srtas. María M. Marvin y M.A. Duff; Piano y canto, la Srta. E.S. Ellis; Historia, Aritmética, Geografía y Gramática (en Español), la Srta. Josefina Sotolongo; Aritmética y Gramática, el sr Francisco Sotolongo; Dibujo, el Sr. Román Alfonso; Bordado y Costura la Srta. Amelia Truel. Como Auxiliares, estaban las Srtas. Vélez y Nonell. Además el Sr. Luis Ruíz y Porras impartía francés, que también complementaba la enseñanza de Lenguas Extranjeras. 6
Esta distribución sería al comienzo. Luego sucederían una serie de profesores en ambos departamentos a medida que culminaba el contrato de trabajo de algún otro. 7 Con el decurso de los años el Departamento de Español se haría más grande y sus letrados serían formados en el propio Cienfuegos, al lograr la apertura de una Escuela Normal para maestros.

Los alumnos fueron distribuidos en tres variantes docentes diferentes establecidas en 1924, 1937 y 1944, respectivamente. En las dos primeras, el alumno haría sus estudios primarios según la preferencia e interés del padre por la enseñanza en idioma español o inglés, perteneciendo así a uno u otro Departamento. 8 En la tercera variante, el estudiante obligatoriamente comenzaría sus estudios elementales en el Departamento de Español y más tarde pasaría al Departamento de Inglés, según el interés y las posibilidades económicas de la familia. Luego de concluir sus estudios elementales el alumno podía o no continuar en el colegio en la segunda enseñanza, para de esta manera si decidían hacerlo entonces cursaría cuatro años en la misma.

De esta manera la graduación escolar se hacía corresponder con una orientación y sentido de acuerdo al funcionamiento del colegio. Se caracterizaría además el colegio por una rigurosa programación de la enseñanza, el llamado plan de estudios. El mismo incluía una determinación absoluta que precisó tanto de los contenidos educativos de cada nivel que quedaban encadenados progresivamente desde el Kindergarten hasta el Junior High School, como de los recursos y procedimientos utilizados por el profesorado para desarrollar y evaluar dicha enseñanza. 9
La máxima responsabilidad del colegio recaía sobre la Directora cuyas funciones eran múltiples y abarcaban varias esferas. Entre ellas se encontraba llevar la supervisión y coordinación de la enseñanza, la disciplina general de todos, toda la gestión económica, la representación ante el público, la atención del ingreso estudiantil. Así mismo debía visitar clases, en caso necesario, hacer observaciones a los maestros sin la presencia de los niños, entre otras muchas que llenaban su currículo más de funciones administrativas que de pedagógicas. El Colegio Eliza Bowman al ser propiedad de la División de Señoras del Servicio Cristiano siempre contó con personal del sexo femenino para esta función.

Como rigor de este cargo se había establecido que la directora tenía la tarea de redactar el informe final y dar cuentas a la Junta de Educación Municipal y a la Conferencia Anual de la Iglesia Metodista. Esta última era la encargada de recepcionar los informes docentes del curso escolar de todos los colegios de su tipo establecidos por todo el mundo. Era importante para la mencionada Junta que sus planteles siguieran a cabalidad sus enseñanzas.

Otro cargo, el segundo en importancia, en esta escuela era la de Secretaria Ejecutiva, la cual se encargaba junto a la directora del ingreso estudiantil, además de redactar las actas, extender los certificados de graduación, custodiar el archivo, la recepción de la correspondencia, así como impartir el curso de Mecanografía, entre otras muchas cuestiones más bien de índole burocrático. Ésta secretaria bien podía funcionar como directora en el caso de la ausencia de esta. Quedando establecido la dirección del plantel.

El rigor y la ejemplaridad profesional de las directivas constituían un elemento notable para garantizar la organización y el buen funcionamiento del colegio. La definición clara de las funciones y tareas y el control permanente a todos aquellos aspectos que podían afectar la excelencia eran factores claves del éxito lo que les permitía mantenerse en el cargo por mucho tiempo pudiendo conocer bien su labor y llegar a establecer vínculos muy personales con padres, instituciones y asociaciones locales.

Al finalizar el curso el profesor debía redactar el informe promocional de sus grupos y entregarlo a la directora. El maestro además, debía prestar atención a las dificultades y necesidades que surgían en la dinámica del proceso docente -educativo de cada curso escolar, exponiendo cuantas observaciones juzgara oportunas para obtener mejores resultados el curso siguiente. De su labor se evaluaría, en el orden pedagógico, los adelantos de sus alumnos, su comportamiento, así como por la disciplina laboral y su conducta para con sus educandos. (González, V. Op. Cit.: 25) Como es de suponer este resultaba uno de los aspectos claves de la excelencia que se ofrecía como garantía para quienes estudiaran en el colegio y ciertamente funcionaba en la práctica al punto de ser reconocido entre padres y escolares. Elia Rodríguez, una de sus profesoras desde 1957, así lo recordaría en la tesis de V. González.

“Los maestros no nos reunían mucho, nosotros teníamos sólo un claustro al mes pero era más bien de carácter administrativo, esto no quiere decir que no se trataran temas metodológicos. Allí todos estaban tan bien preparados y el trabajo docente marchaba tan bien, que cuando las rigurosas inspecciones de la Junta de Educación visitaban nuestro colegio, los excelentes resultados obtenidos, así lo demostraban (…) nuestro colegio tenía mucha reputación en toda la ciudad, recuerdo en una ocasión en que el superintendente de la Junta de Educación nos dijo que en su estimación nuestra escuela era la mejor de Cienfuegos.”(González, V. Op. Cit.: 27)
El colegio contó también con el reconocido y esforzado trabajo de otras personas que, aunque no fueran maestros, inspiraban respeto por su consagración a las disímiles actividades de servicio y mantenimiento que realizaban. Este personal auxiliar se caracterizaba por practicar el multi-oficio puesto que no eran muy numerosos en grupo. Un jardinero, un cocinero y dos choferes clasificaban en esta categoría. Ellos, aún cuando tenían un importante papel en la vida de la escuela no participaban del proceso docente-educativo y se les exigía el distanciamiento necesario propio de su labor. 10
Un aspecto significativo en este sentido se relaciona con la limpieza de los locales. Esta se les encargaba a madres y alumnos de pocos recursos económicos que retribuían sus estudios con estos trabajos de servicio, se podían encargar además de la custodia del ómnibus. Esto claro está respondía a una estrategia económica que además se relacionaba con la ayuda social, oportunidad que fue aprovechada por algunas familias que luchaban por mejorar su situación de clase y veían en la educación de sus hijos una importante oportunidad. (González, V. Op. Cit.: 27)
La celebración de las festividades estadounidenses no dejaron de efectuarse en el plantel, entre ellas el Día de Halloween que recuerda otra de las alumnas entrevistadas por Vladimir González:Aquí los maestros y la directora hervían muchos huevos de gallina, los pintaban y los escondían en el tercer patio”. (González, V. Op. Cit.: 40)
 Otras serían las Navidades que, no eran propias de la llegada estadounidense a la Isla,  incluía un Programa de Navidad que tenían su cúspide con una extens actividad donde eran representados por los alumnos diversas cantorías, poemas, así como representaciones teatrales del nacimiento del niño Jesús acompañados de la banda rítmica del Colegio varias en idioma inglés. (Ver anexo 4) Durante el mismo también se hacía entrega de la llamada “ofrenda blanca”. La misma consistió en la colocación de regalos para personas pobres y necesitadas de la ciudad que eran entregados el propio día 25 por parte de los niños y maestros bajo la cobija del árbol. Estos eventos navideños siempre formaron parte de los propósitos americanizantes neocoloniales. 11
“Por esta fecha toda la escuela se ponía en función de adornar todas sus áreas. Un gigante Árbol de Navidad se preparaba en la entrada del propio plantel, luciendo todo tipo de adornos, guirnaldas y una estrella en lo más alto. Además, cada aula confeccionaba su propio arbolito, en el que participaban todos los niños, cada cual traía de casa cuantos adornos quisiera y pudiera.” (González, V. Op. Cit.: 40)
Contó el Colegio con dos Asociaciones que complementaban el aparato organizativo, reconociéndose una de ellas por su proyección social que le brindaría a sus miembros la posibilidad de mantenerse conectados con el quehacer del Colegio. Ellas fueron la Asociación de Graduados y Antiguos Alumnos (AGAA) y dentro de esta el Club Martiano. La primera tendría su espacio de reunión dentro del propio Colegio y celebraría anualmente un acto de confraternidad donde profesores y ex-alumnos podían reencontrarse como lo refiere el periódico El Comercio en honor de celebrarse el aniversario 57 de la Institución. Contaba la AGAA con un riguroso reglamento que les servía de Constitución. El artículo 2 dejaba en claro la membresía en aquellos que hubieran terminado la primera enseñanza en inglés o español, los alumnos que concluyeran la segunda enseñanza y los antiguos alumnos que hubieran permanecido al menos  dos años en el plantel.

Otro de sus artículos, el número 10, ilustra el ideal de la Asociación con carácter educativo. Con este objetivo se seleccionaba un alumno de escasos recursos para pagar sus estudios. Dicha selección estaba a cargo de la directora del plantel y aprobado o no por la directiva de la Asociación. De acuerdo con su reglamento este niño no se daría a conocer dentro de la masa estudiantil. 12
Una de las actividades que promovía ésta era la coronación de los Reyes de la Clase donde se competía según los resultados académicos obtenidos en el curso. Durante la misma se hacía el llamado Desfile de los Reyes acompañados de la banda rítmica del colegio y por último una fiesta típica norteamericana: palo de mayo. Esta festividad consistía en un baile alrededor de un palo adornado con cintas multicolores entrelazadas por los bailadores hasta formar un arcoíris. 13
Por su parte el Club Martiano estaba constituido por la directora, maestros y el alumnado en general. Entre las actividades se encontraba la ayuda a los países devastados por las guerras, y a personas vinculadas estrechamente a esta Institución. También se ofrecía ayuda a los pobres durante la Navidad y llegó a sostener dos becas por cada curso. Los miembros de la misma prendían en sus pechos una pequeña insignia con la imagen del apóstol del cual llevaban el nombre. (González, V. Op. Cit.: 42)
De este plantel de reconocida excelencia el magisterio cienfueguero fue beneficiado con maestras como Elia Rodríguez y Ana Merci Pérez. Las mismas, quienes primeramente fueron alumnas del colegio, más tarde regresan al mismo a fungir como maestras. Ambas se incorporaron a las aulas cienfuegueras después del triunfo revolucionario de 1959 y estuvieron en ellas dando lo mejor de sí hasta que la salud se los permitió. Otras maestras, que aún hoy, imparten sus conocimientos en aulas de esta ciudad son: las MsC. Maricela Gessa y Raquel Rodríguez, profesoras de la Universidad y del Instituto Pedagógico de Cienfuegos, respectivamente.

El colegio Eliza Bowman cierra sus puertas en 1961 al igual que todos los colegios privados del país como parte de la nacionalización de la enseñanza siendo actualmente una escuela primaria de las tantas de la ciudad de Cienfuegos. No obstante, como todo colegio privado religioso, su camino estuvo marcado por la discriminación racial y de clase aun cuando su credoaludían a una enseñanza sin distinciones donde el niño tendría lo necesario para una educación de primer nivel.

1La Correspondencia, enero 5 de 1910, pág. 3. El Comercio, 20 de junio de 1924.

2 La Correspondencia, Cienfuegos, marzo 5, 1956.

3 Para este momento no existía en Cienfuegos una Escuela Normal para Maestros. En 1927 el presidente Gerardo Machado luego de una visita a Cienfuegos al presenciar las demandas hechas por estos  y después de reclamaciones y presiones a través de la prensa declara su intención de aprobar la creación de dicha institución. Todo sería pura demagogia del gobernante. Ante la desatención prestada se crea la  organización Pro-Escuela Normal, la cual se propuso intensificar sus esfuerzos hasta convertir su sueño realidad. No es hasta 1953 que, amparados por el Decreto 4417, un grupo gestor decide la creación de la Escuela. La misma sería legalmente oficializada el 3 de noviembre de 1953 por el Decreto Ley 1161. Alberto Valdés Guada. La educación en Cienfuegos durante la República (1902-1958).editado en UCF, 1997, pág.60.

4 Este era el término para nominar a las estudiantes que vivían en ciudades cercanas como: Aguada, Cruces, Sagua, Remedios, entre otras localidades; y que por ende necesitaban hacer de vida interna en el colegio. Las fuentes orales consultadas (V. González 1997) reflejan que habían estudiantes incluso de otras regiones como Camagüey. Nota de la autora.

5 Para más información  al respecto se puede consultar de Vladimir A. Gonzales Fernández. El Colegio Eliza Bowman: Modelo Pedagógico de la Educación en Cienfuegos (1907-1961) Tesis Presentada en opción al título académico de  Máster en Teoría y Práctica de la enseñanza del inglés contemporáneo, Cienfuegos, 2007, pág. 68.

6 La correspondencia, Cienfuegos, enero 5, 1910.

7 Se destacan nombres como el de Lolita y Margot Esquerra, las hijas del famoso general independentista y alcalde republicano Higinio Esquerra, e Idania Fernández Seco que, en 1960 pasaría a ser directora al ser llamados los profesores norteamericanos a su país después del triunfo revolucionario; Servando Villa Amil, entre otros.

8 Obra citada pág. 21 de Lic. Vladimir A. Gonzales.

9Ibídem pág. 22.

10 El jardinero era el señor Pérez, padre de una de las ex alumnas y ex maestra Ana Merci. Ella misma lo recuerda como el hombre de confianza de la directora. Nota de la autora.

11El Programa de Navidad puede consultarse en el Fondo Colegios Privados del Archivo Histórico de Cienfuegos.

12 Fondo de colegios privados del Archivo Histórico Provincial de Cienfuegos

13 Ibídem.