INFLACIÓN POPULAR: EL IMPACTO DE LA DINAMICA DE PRECIOS EN LAS FAMILIAS POBRES URBANAS DE GUATEMALA

SERGIO A. ROSALES MAZARIEGOS
sergio1982arm@gmail.com

El enfoque utilizado en la presente tesis: Inflación Popular

El cálculo de la inflación subyacente deja fuera de escena los cambios coyunturales y abruptos en los precios. Por otro lado, afirma Cuadrado Roura, “sería una percepción errónea pensar que existe inflación porque observemos que algunos precios han subido a lo largo del tiempo”.
En la presente tesis, la medición del indicador mencionado así como el postulado anterior no se consideran como completamente ciertos o satisfactorios. La razón radica en que, en primera instancia, no es errónea la percepción de inflación por parte de los grupos de población más vulnerables, si los precios de algunos artículos básicos, primordiales en su consumo se elevan a lo largo del tiempo, aún si el incremento en el nivel de precios no es generalizado a todas las divisiones y grupos de gasto, y aún más si dichos artículos son eliminados de ciertas estimaciones para políticas de forma continuada. Puede ejemplificarse, el caso del maíz y sus derivados, destacado en el Perfil Nutricional para Guatemala del año 2003, identificado como el fundamento de la dieta de los guatemaltecos, en el cual se destacan varias deficiencias en su disponibilidad . En este caso, la escasez local del grano y la consecuente alza en su precio, no está explicada por efectos exclusivos de variables monetarias locales, sino por trasfondos en el mercado real, específicamente por insuficiencias en la producción del grano, entre otros factores vinculados a los mercados internacionales.
Ante el déficit en la disponibilidad de alimentos, estos son adquiridos primero por aquellos segmentos de la población que tienen poder de compra para cubrir su consumo, y frente a la escasez, pueden costear precios más elevados. Este tipo de situaciones conllevan un incremento en el precio, lo cual perjudica en mayor medida a aquellas personas de menores ingresos que aquellas con mayores ingresos, por el peso que dicho gasto tiene en el bolsillo de los primeros.*
La percepción de inflación, aún cuando sea sólo de algunos artículos básicos, no es errónea, al menos no entre aquellos estratos de la población para quienes éstos son significativos. Por ejemplo, el alza en el precio de sólo ciertos artículos, principalmente alimentos básicos, para un grupo de población que no tiene un amplio consumo será más significativa y de mayor impacto que para aquellos que tienen una capacidad de consumo mayor, y en consecuencia, el impacto de la inflación a este nivel será mayor que para el resto de la economía. De esta cuenta, toma forma el postulado generalmente aceptado sobre el hecho que la inflación tiende a favorecer a los deudores y a los perceptores de beneficios a expensas de los acreedores y perceptores de rentas fijas, como los salarios, no sólo por la rigidez de contratos y precios relativos , sino por su mayor vulnerabilidad.
En concreto, el incremento en los precios de algunos alimentos, que pueda percibirse como inflación en los segmentos más pobres de la población, no puede considerarse como una afirmación errónea. Si en el contexto mundial actual se considera además, que ciertos productos como el maíz y la caña de azúcar son utilizados para la producción de agro-combustibles, el asunto se complica aún más. Estas fluctuaciones no pueden ser dejadas de lado al medir la inflación para proyectar tendencias (como la inflación subyacente) que sustenten las políticas que debieran frenar el incremento de los precios, pues pierde efecto en el logro de su objetivo principal, en este caso el de proteger a los desprotegidos que “no tienen los medios para defenderse”, pero en la coyuntura económica vivida en el año 2008, no es defenderse del Estado, sino de la voracidad de los mercados internacionales.
En concordancia con lo anterior, queda sentado un precedente para la medición de otro tipo de índices inflacionarios que busquen dar seguimiento al comportamiento de ciertos precios que, por medio del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y sus diferentes grupos, podrían ser utilizados con ciertas exclusiones y determinados criterios, para estimar índices inflacionarios, tal como se mide una inflación subyacente, para delinear acciones de política económica que mitiguen posibles perjuicios a los más vulnerables. Por ejemplo, el Banguat presentó ante el Congreso de la República el comportamiento de la llamada Inflación de Alimentos . Esto abre la posibilidad de estimar una Inflación Popular*, propuesta medular de la presente tesis, que se define así:
Inflación Popular: es una medida del alza en el nivel general de precios, que considera aquellos gastos de consumo efectuados por familias consideradas como pobres por medio del método de líneas de pobreza. Constituye una medida del alza en el costo de la vida desde la perspectiva de la población menos favorecida. Su cálculo proviene de la variación porcentual interanual de una Canasta Básica de consumo popular.
Canasta Básica Popular –CBP–: consiste en el conjunto de gastos de consumo efectivamente realizados por familias consideradas como pobres. A partir del levantamiento de información sobre ingresos y gastos de las familias, que incluya el consumo detallado de bienes y servicios (en valores, cantidades, frecuencia de consumo, etc.), pueden estimarse líneas de pobreza para categorizar a la población como pobre, no pobre o pobre extrema. Identificadas las familias pobres y su consumo, se procede a elaborar las ponderaciones correspondientes por cada uno de los gastos básicos. Con estas ponderaciones, y a partir de los índices por gasto básico utilizados en el Índice de Precios al Consumidor, puede calcularse el número índice correspondiente a la CBP.

Definición del Índice de Precios al Consumidor

“Medida de la evolución en el tiempo de los precios de un conjunto de bienes y servicios, clasificados por sectores, que consume una unidad familiar media representativa de los hábitos de consumo del conjunto de una sociedad. Es el índice utilizado para cuantificar la inflación, y sirve de referencia en las negociaciones salariales, en la revisión de los contratos de arrendamientos inmobiliarios, en la fijación de las pensiones, en la actualización de primas de seguro, etc.”
Desde un punto de vista estadístico, el IPC es un índice Laspeyres**, cuyos pesos o ponderaciones por división son calculadas en Guatemala según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos Familiares –ENIGFAM– de marzo 1998 a abril 1999. Los índices como el IPC, constituyen una media ponderada de índices relativos***, es decir, es una media aritmética de varios índices relativos. Como es sabido, la media aritmética puede estar sesgada por los valores extremos o atípicos.


Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. Perfiles Nutricionales por Países. Guatemala. FAO 2003, Guatemala. Págs. 15-16. Versión digital obtenida en ftp://ftp.fao.org/es/esn/nutrition/ncp/gua.pdf, descarga efectuada el 7 de enero de 2008.

* Este aspecto está fundamentado, además, en el hecho que la satisfacción obtenida de necesidades básicas cubiertas (vitales-fisiológicas) es mayor que la satisfacción obtenida con los lujos (suntuarias-autorrealización) [jerarquizadas en la conocida pirámide de Maslow], tal es el caso de la ingesta mínima de alimentos producto del maíz, frente a otros artículos no indispensables para preservar y reproducir la vida. Cuadrado, op. Cit. Pág. 78.

Samuelson, op. Cit. Pág. 309.

“… más maíz para motores, más altos sus precios y menos alimento para los pobres”. Escobar Sarti, Carolina. [Prensa Libre, 8 de mayo de 2008].

Banguat. Informe de la Presidenta del Banguat ante el Congreso de la República. 23 julio 2008. Pág. 11.

* En esta definición, se utiliza la palabra “popular” como aquel adjetivo que define lo que es “propio de las clases sociales menos favorecidas.” Real Academia de la Lengua Española, en www.rae.es.

Espasa Calpe, op. Cit.

**  Índice  de  precios  agregativo  ponderado  que  usa las cantidades vendidas en el período base como factor de  ponderación. Webster, op. Cit. Pág. 440.

*** Un índice relativo, por ejemplo, en el caso de los precios para cierto producto, es el cociente entre el precio en un determinado momento y el precio en otro período, que se toma como base. Espasa, op. Cit.

Webster,  op. Cit. Págs. 79, 976-981.

Volver al índice

Enciclopedia Virtual
Tienda
Libros Recomendados


1647 - Investigaciones socioambientales, educativas y humanísticas para el medio rural
Por: Miguel Ángel Sámano Rentería y Ramón Rivera Espinosa. (Coordinadores)

Este libro es producto del trabajo desarrollado por un grupo interdisciplinario de investigadores integrantes del Instituto de Investigaciones Socioambientales, Educativas y Humanísticas para el Medio Rural (IISEHMER).
Libro gratis
Congresos

15 al 28 de febrero
III Congreso Virtual Internacional sobre

Desafíos de las empresas del siglo XXI

15 al 29 de marzo
III Congreso Virtual Internacional sobre

La Educación en el siglo XXI

Enlaces Rápidos

Fundación Inca Garcilaso
Enciclopedia y Biblioteca virtual sobre economía
Universidad de Málaga