3.5.1. La escuela, ámbito de construcción de su proyecto

Hace pocos meses, en la escuela en donde se realizó la investigación, organizaron lo que llaman “Semana Cultural”, existieron varios concursos entre los alumnos, uno de ellos era el concurso de canto. Nunca imaginaron que la joven que ganaría la competencia, fuera la que ganó el concurso. Tiene una voz extraordinaria, que a partir de este evento fue descubierta por la mayoría de la personas, entre ellos los maestros.

Con este ejemplo, quiero introducir a un tema que por demás, es importante en la educación, sobre todo en el ámbito de la escuela. La escuela puede descubrir, desarrollar e impulsar habilidades, que en casa quizá nunca sean descubiertas ni valoradas; o bien, puede inhibir, enterrar y hacer desaparecer, muchas de las habilidades que el joven tiene por desarrollar, sino se les da el espacio para realizarlo.

La escuela garantiza que el proyecto de vida, sea la construcción de la realidad, que se da a partir de la socialización entre diversos actores educativos.

Para esto les preguntamos a los jóvenes lo siguiente: ¿Cuál crees que fue el principal criterio que tus papás tomaron en cuenta para inscribirte en la escuela en donde estudias?... la respuesta fue la siguiente:

La respuesta es muy interesante, porque quizá echa a la borda la hipótesis que se ha planteado anteriormente, de convertir la escuela en un ámbito de socialización y no únicamente de conocimiento.

Sin embargo, lo que sustenta nuestra hipótesis, no es que no haya conocimientos, sino que los conocimientos no son el fin último de la escuela, sino que únicamente son un medio para socializar con los alumnos, en un ambiente educativo.

Por lo anterior, los alumnos piensan que sus padres los metieron a esta institución por el nivel académico, pero no tanto por los valores que imparte la institución. Otro de los factores importantes era la cuestión económica, que es un factor social, que determinada la posibilidad del nivel académico al cual se puede acceder y no tanto el prestigio de la misma institución.

En este punto habremos de manejar varios puntos importantes. Quiere decir entonces, que los valores en la escuela pueden ser o no importantes, aunque de entrada hay que practicarlos, sin embargo, se tiene todavía la consigna de que la escuela tiene que ser un ámbito meramente educativo y de conocimiento. La pregunta es ¿Qué tanto el conocimiento, puede ser una variable para que los alumnos puedan socializar con ella? ¿Por qué habrá que aprenderse fórmulas, conceptos, teorías, etc., si éstos no tienen una transferencia clara a la realidad cotidiana, ni a una actitud axiológica?

Ahora bien es importante preguntarles sobre lo que piensan realizar en el futuro, no inmediato quizá, pero si cercano a una realidad que pueden ellos considerar muy relevante en su proyecto de vida. De esta manera, les preguntamos:

El criterio más importante para elegir tu profesión será… las respuestas son:

La mayoría dice estar conciente de que la profesión que elegirá será aquella que más le llame la atención y le guste. En este sentido, consideramos que es muy importante que la institución tenga un buen proyecto de orientación vocacional, que impulse a los jóvenes a elegir la mejor carrera a partir de sus habilidades y destrezas. Es importante que descubran que habilidades tienen, que tipo de inteligencias han desarrollado y que carreras se adecuan a su realidad personal.

Por otro lado, nos damos cuenta que la carrera que reditúe más dinero tiene un 25% de las respuestas de los alumnos, sin embargo es importante que se den cuenta que la realización personal no dependerá de la cantidad de dinero que se obtenga, sino de la realización personal que ejerza a partir de su desarrollo profesional.

Nos damos cuenta de que los alumnos son concientes de no estudiar nada que pueda imponerse a su voluntad, ni tampoco que sea una opción porque era la última. Esto nos da la garantía de estimular el crecimiento integral del joven y llevarlo de la mano para que vaya superando todo aquello que le puede ayudar a ser mejor persona.