3.3. Categoría de la igualdad

La igualdad es una situación social según la cual las personas tienen las mismas oportunidades o derechos en algún aspecto. Existen diferentes formas de igualdad, dependiendo de las personas y de la situación social particular. Por ejemplo, la igualdad entre personas de diferente sexo, igualdad entre personas de distintas razas, igualdad entre personas discriminadas o de distintos países con respecto a las oportunidades de empleo o la igualdad de diferentes razas respecto a derechos de tránsito, de uso de transportes públicos o de acceso a la educación.

El diccionario de Brugger, menciona que la igualdad es la correspondencia y proposición que resulta de muchas partes que uniformemente componen un todo (BRUGGER, 1983, Pág. 843).

En este sentido, es importante que analicemos el término de la igualdad, no sólo entre los diferentes sexos, sino entre las oportunidades que se puedan presentar entre los seres humanos.

En esta categoría, el 23% representa a los jóvenes de 15 años de edad, el 24% a los de 16 años, el 26% al de 17 años y el 27% a los que tienen 18 años.

Como podemos observar en la mayoría de las categorías hemos mantenido un rango similar, en relación a los alumnos que han respondido al instrumento de investigación. Esto nos garantiza argumentar que a lo largo de la misma hemos tenido una misma frecuencia, con diferentes variables a investigar.

Iniciemos el análisis de esta categoría. En la primera pregunta, se pretendió indagar sobre lo que los padres, generalmente les han dicho a sus hijos sobre este concepto de la igualdad.

La pregunta fue la siguiente: Tus papás frecuentemente te dicen…, los resultados son como sigue:

Estos datos nos revelan, que la conciencia de la igualdad ha crecido en nuestro medio ambiente, por lo que es posible, que esta categoría sea fundamental para ampliar la visión antropológica de la educación integral.

Las respuestas de los alumnos coinciden en determinar que al menos la mitad dice que somos diferentes, pero iguales a la vez. Este es un dato importante, lo incluimos en el instrumento de investigación, porque consideramos que efectivamente, la realidad humana, está cimentada bajo los parámetros de igualdad y diferencia. Igualdad desde la perspectiva humana, todos, hombres y mujeres, por nuestra condición humana somos iguales, pero somos diferentes porque nuestras características como personas, son distintas entre ambos sexos.

El 32%, coincide que somos diferentes, esto nos da a comprender, que entre los alumnos de preparatoria, se tiene conciencia de que el hombre y la mujer son distintos, no por discriminación de género, sino desde la realidad substancial de cada género. Al igual que el 9%, que dice que ninguno es igual, que de alguna forma coincide el contenido de la información, con el dato anterior, y se complementan entre ambos.

Ciertamente, la mujer hoy en día ha tomado una relevancia en México y en el mundo, como durante mucho tiempo en la historia, no había sido protagonista. Hoy el hombre comprende que la mujer tiene las mismas oportunidades, y en algunas áreas son mejores, porque no están limitadas a desarrollar todo el potencial humano, que llevan consigo.

El periódico Milenio, en su edición digital, describe la siguiente noticia, hablando de la igualdad de género: El secretario general de la Comisión Mexicana de Cooperación con la Unesco, Carlos García de Alba, manifestó que 25 por ciento de los investigadores de todo el mundo son mujeres. En México, abundó en entrevista, lo son apenas 30.5 por ciento de los 10 mil 904 miembros del Sistema Nacional de Investigadores.

La proporción de las mujeres en las licenciaturas de ciencias naturales y exactas, creció de 39.8 por ciento en 1990 a 48.9 en 2004 y en el posgrado de 31.6 por ciento a 41.9 por ciento.

Este es un elemento fundamental para ampliar la visión de la antropología desde la educación integral. No es una moda, sino una realidad que hay que ir desarrollando en el ámbito educativo cada vez con mayor fuerza, sin debilitar o limitar al género masculino.