BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

DESARROLLO SOSTENIBLE EN ESPAÑA EN EL FINAL DEL SIGLO XX

Alfredo Cadenas Marín y otros




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4.2 EL BIENESTAR SOCIAL EN ESPAÑA: PILAR BÁSICO DE LA SOSTENIBILIDAD

Como ya hemos señalado antes, el empleo es la principal fuente de renta para la mayor parte de los españoles. En este sentido, de las características de ese empleo y de las posibilidades y condiciones que tienen los españoles para acceder a su principal fuente de riqueza, van a depender en gran medida los aspectos sociales y de equidad del desarrollo sostenible. Por ello es necesario, dado que pretendemos conocer los aspectos de la economía española que resultan clave a la hora de encaminarse hacia un desarrollo sostenible, que analicemos las principales tendencias del mercado de trabajo en España.

4.2.1 La Ocupación Laboral Y El Empleo Como Pilar Básico De Integración Social.

La población laboralmente ocupada en España ha sido tradicionalmente inferior a la de los principales países de nuestro entorno económico, no habiendo superado nunca la cota de los 14 millones de personas (el 35% del total de la población) hasta finales de la década de los noventa. Este reciente aumento se debe principalmente al acceso al mundo laboral de los nacidos a finales de los años sesenta y los primeros setenta, durante el denominado “baby-boom” demográfico, así como a la masiva incorporación al mundo laboral de las mujeres españolas. Esta última característica constituye una importante novedad en el mercado laboral español. Tanto es así, que, actualmente, la creación de empleo femenino supera a la de empleo masculino, la tasa de actividad femenina (incluyendo tanto ocupados como personas en disposición de trabajar) es, a día de hoy, del 56,6%, la más alta de la historia pero de las más bajas de la UE, después de Italia y Grecia (Eurostat, 2004). La incorporación femenina al trabajo, está marcando en España un estilo de vida muy distinto, en innumerables sentidos, al preexistente en décadas anteriores. Su efecto en cuanto al desarrollo sostenible y a los impactos ambientales, aun siendo deducibles en abstracto, necesita ser verificado empíricamente, lo que nos señala un posible objeto de análisis, o investigación, para el futuro.

En cualquier caso, el dato más significativo del mercado laboral español es la todavía alta tasa de desempleo. Esto no constituye una particularidad de la economía española (aunque si agudizada) pues todos los países de la UE, viven situaciones similares, en las que lo más llamativo no es el incremento del desempleo en épocas recesivas, sino el mantenimiento de las tasas de desempleo en niveles relativamente altos durante los períodos de fuerte crecimiento económico. Esta situación tiene importantes costes económicos y sociales: económicos debido a la pérdida de producción que ello supone y, sociales, por su negativa repercusión en la distribución de la renta, y a través de ello, sobre la integración y la cohesión social. Por lo tanto, es una lacra que hay que intentar superar si se pretende iniciar el camino hacia un desarrollo sostenible en la que se atribuya a la equidad una importancia similar a la dimensión ambiental y económica.

En este sentido, España se halla en una situación bastante desfavorable en relación a otros países europeos. Resulta procedente subrayar aquí que su tasa de paro se situó en el 2004 en el entorno del 10,3% y que, aún habiéndose reducido desde cotas superiores al 20% en los años, sigue siendo la más alta de la UE-15 y la tercera de la UE-25 después de Eslovaquia (16,5%) y Polonia (18,2%).Si el nivel de desempleo se ha mantenido en esos niveles elevados sin dar lugar simultáneamente a graves conflictos sociales, a nuestro parecer, puede deberse a varias causas pero fundamentalmente al grado de integración y solidaridad social existente en España, sobre todo, en el seno de las familias. Esto supone la existencia de un verdadero capital social del país, de relevancia tan grande para evaluar el estado del desarrollo sostenible en España como otro tipo de capital existente (natural, humano o construido por el hombre) . De otra parte, es necesario anotar aquí que seguramente la tasa de paro registrada por las fuentes estadísticas no representa fielmente la realidad ya que existe una amplia base de economía informal facilitada, entre otros, por el fenómeno del turismo, masivo hacia España, uno de los de mayor intensidad a escala mundial (más de 50 millones de visitantes anuales ).

Al respecto de la ocupación laboral también es preciso destacar que la población desempleada española está caracterizada por cuatro rasgos fundamentales: la elevada tasa de paro femenino, la relativamente elevada tasa de temporalidad en el empleo, la elevada proporción de jóvenes entre los desempleados y el gran porcentaje de parados de larga duración. Una de las razones que pueden explicar la masiva presencia de parados entre estos colectivos, es la inadecuada formación con que cuentan muchos miembros de los mismos siendo su nivel de cualificación profesional insuficiente para las actuales necesidades del mercado de trabajo español. En este sentido, el asunto de la formación de la población es un tema clave si se quiere promover la modernización de España, y encauzarla en una vía de desarrollo sostenible.


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