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ANÁLISIS DE SENSIBILIDAD DE LOS DETERMINANTES DEL TIPO DE CAMBIO PESO MEXICANO - DÓLAR ESTADOUNIDENSE

Arturo Morales Castro




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III.2.1 Periodo de observación

El periodo de observación seleccionado es de enero de 1986 a diciembre de 2000. En el inicio de éste se da, como en otros anteriores, una devaluación significativa, como se puede apreciar en el cuadro 3.1 de las fechas significativas de las devaluaciones.

Además, esta situación está relacionada con modificaciones en el sistema de tipo de cambio, como se puede apreciar en el cuadro 3.2.

En diciembre de 1986, el dólar cerró en $922 ó $.922 31 en el mercado libre, y el tipo de cambio fix, en $915 ó $.915. Sin embargo, tal cotización, al parecer, respondía más a una inercia defensiva que a una estrategia: al margen de cualquier teoría, la realidad señalaba ya el desbordamiento de la inflación y del tipo de cambio.

Faltando un año para terminar el sexenio del presidente Miguel de la Madrid, el precio del dólar libre ya había rebasado el nivel de los dos mil pesos: el billete verde costaba $2,278 en las casas de cambio privadas.

Comparando el precio anual promedio del dólar libre durante 1982 –que según cifras del Banco de México, se situó en $57.17– con la cotización de $2,278 por unidad registrada al 31 de diciembre de 1987, observamos que el precio del dólar aumentó 3,884.6%. En otras palabras, el valor promedio del dólar durante 1982 se había multiplicado por 39.8 veces al terminar 1987.

Efectuando una comparación similar con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) apreciamos resultados interesantes. El índice de precios promedio de 1982 se situó en 303.6, mientras que el correspondiente al 31 de diciembre de 1987, ascendió a 10,647.20, lo que indica que la inflación en ese periodo fue de 3,406.9%. Dicho de otra forma, el nivel general de precios al 31 de diciembre de 1987 estaba indicando que los precios se habían multiplicado 35 veces respecto al promedio registrado en 1982.

La comparación de cifras permite observar que, mientras los precios en general –durante el periodo anotado–- aumentaron 35 veces, el precio de la divisa americana creció más rápidamente y se registró una ventaja de 13.7% respecto de la inflación.

A partir del 15 de diciembre de 1987, con la entrada en vigor del Pacto de Solidaridad Económica (PSE), la inflación se contuvo un poco, pero no terminó. Al finalizar 1988, el dólar libre se cotizaba en las casas de cambio a $2,285.25 ó $2.2852 por unidad (venta al público), es decir, 0.32% más que 12 meses antes. Sin embargo, la inflación al consumidor, durante 1988, fue de 57.7%.

En lo referente al tipo de cambio, Carlos Salinas de Gortari (CSG) dijo que trataría de hacerlo evolucionar de manera ordenada y previsible, sin ajustes bruscos y en magnitudes que pudieran ser absorbidas por la mayoría de las empresas. La nueva política cambiaría 32 entró en vigor el primero de enero de 1989 y consistió en dejar deslizar el peso frente al dólar una unidad diaria. Por otro lado, se congelaron los precios de la gasolina, el gas y la electricidad, y se modificó también la estructura arancelaria, concediéndose un modesto ajuste salarial.

Durante 1989, primer año de gobierno de CSG, la inflación al consumidor en México fue de 19.7%, en tanto que la de EE.UU., de 4.8%, lo que estableció una brecha de 14.9 puntos porcentuales. En el mismo periodo, la cotización del dólar controlado de ventanilla (venta al público) pasó de $2,273 ó $2.273, el último día hábil de 1988, a $2,647 ó $2.647 el último día hábil de 1989. Con esa apreciación, el precio del dólar en el mercado controlado aumentó 16.45% contra una brecha inflacionaria (o inflación neta) México-EE.UU. de 14.9%.

En el mercado libre, la cotización del dólar pasó de $2,285.25 ($2.2852), al finalizar las operaciones de 1988, a $2,686 ($2.686) al cierre de 1989, mostrando un incremento de 17.5%, es decir, 2.6 puntos más que el 14.9% de brecha inflacionaria México-EE.UU.

Durante el año de 1989, el Pacto de Estabilidad y Crecimiento Económico (PECE) fue actualizado dos veces. Por segunda ocasión, en diciembre, su vigencia fue prolongada hasta el 31 de julio de 1990; pero se esperaba que antes de esa fecha se renovaría una vez más, cosa que efectivamente aconteció.

En 1990 –segundo año de gobierno de CSG– el PECE fue modificado en mayo, 64 días antes de lo programado, pero no se otorgó ningún aumento general de salarios. Más tarde, en el mes de noviembre, el PECE fue puesto al día una vez más, pero en esta ocasión sí se concertó un aumento general de 18% en los salarios mínimos (incremento que resultó inferior en 11.9 puntos porcentuales a la inflación de 29.9% registrada ese año).

En 1990, la inflación al consumidor en EE.UU. fue de 6.2%, lo que dejó una brecha de más de 23.7 puntos porcentuales en contra de México y del poder adquisitivo del peso contra el dólar. A pesar de la brecha inflacionaria de 189 y 1990, el peso casi no la resintió. En el mercado controlado, el dólar pasó de $2,647.00 ($2.647), al cierre de 1989, a $2,949.00 ($2.949) el 31 diciembre de 1990, lo que significa que, durante 1990, el dólar ascendió menos de un peso por día calendario. Al final de cuentas, la moneda americana incrementó su precio en sólo 11.4% respecto del peso.

En el mercado libre, el dólar se elevó aún menos: sólo 9.8%, al pasar de $2,686.00 ($2.686), al terminar 1989, a $2,949.50 ($2.9495) al finalizar 1990. Esos movimientos hicieron pensar que al año siguiente, 1991, tampoco habría ningún cambio brusco, sino que sería muy factible que las paridades se unificaran y, al terminar el año, el desliz fuera mínimo.

Al terminar 1991, esas predicciones se cumplieron. El 10 de noviembre de 1991, se abrogó el Decreto de Control de Cambios, por lo que dejó de haber dólar controlado. Al terminar el año, la paridad peso/dólar en el mercado libre cerró en $3,076.75 ($3.07675) por dólar, lo que implicó que, durante ese año, la cotización del dólar apenas se incrementara en 4.31%. Y el valor del peso, expresado en términos de dólares, disminuyó 4.28%. Así estaba el peso al terminar el tercer año de gobierno de CSG.

En 1992 –cuarto año de gobierno de CSG– la cotización del dólar alcanzó $3,114.50 ($3.11450) al cierre del año. Eso quiere decir que, en el año, el peso sólo se devaluó 1.22% respecto del dólar americano, prácticamente nada si se toma en cuenta lo sucedido el año anterior.

A partir del primero de enero de 1993, entró en vigor una reforma monetaria. Consistió en dividir entre 1,000 el valor de los pesos en circulación hasta el 31 de diciembre de 1992. En otras palabras, a los “pesos viejos” (en circulación hasta finalizar 1992) se les quitaron tres ceros. Así, mil pesos viejos pasaron a ser N$1.00 (un nuevo peso). De esa manera, el dólar, que cerró 1992 a $3,114.50 (tres mil ciento catorce viejos pesos con 50 viejos centavos), abrió a N$3,114 el 4 de enero de 1993.

A finales de 1993, el peso mexicano sufrió algunos ataques, ante la posibilidad de que el Tratado de Libre Comercio (TLC) no fuera aprobado. Así, el 12 de noviembre el dólar había subido hasta N$3.23, de N$3.095 que costaba el 20 de octubre. No obstante, una vez aprobado el TLC, el mercado se calmó y el dólar cerró el año a N$3.11, apenas un poco debajo de su cotización al cierre de 1992.

Con 1994 llegaron los problemas y el EZLN (Ejército Zapatista de Liberación Nacional) hizo aparición al mismo tiempo que sonaban las doce campanadas del Año Nuevo. El mercado de cambios, aparentemente durante todo enero y los primeros días de febrero, ignoró lo sucedido en Chiapas; a partir del 24 de febrero, reaccionó y la cotización del dólar comenzó a subir, cerrando el mes a N$3.21.

Al mes siguiente, ocurrió el asesinato de Luis Donaldo Colosio, quien fuera candidato a la presidencia para el periodo 1994–2000. Eso también puso nervioso al mercado, pero muy hábilmente las instituciones financieras, supieron controlar la situación y las cosas no pasaron a más.

Luego, en las elecciones de agosto, resultó electo para ocupar la presidencia de la República Ernesto Zedillo. Al finalizar septiembre, fue asesinado Francisco Ruiz Massieu, y el nerviosismo en los mercados financieros volvió a aparecer. Sin embargo, tampoco pasó algo. El 30 de noviembre de 1994, último día de la administración salinista, el dólar se cotizó a N$3.44.

Con la nueva administración del presidente Zedillo, luego de una nueva devaluación, el lunes 19 de diciembre de 1994, el dólar cerró a N$3.465. Pero, dado el nerviosismo observado en el mercado de la mañana, las autoridades decidieron ampliar la banda de flotación hasta cuatro pesos por dólar. No obstante, el mismo martes 20, el dólar se fue hasta el techo, a cuatro pesos.

El día 21, Banxico abandonó el mercado cambiario, el peso resbaló y el dólar cerró al año a N$5.00, esto es, 44.3% por arriba de su cotización del 19 diciembre de 1994. De esa forma, nuestra moneda perdió 30.7% de su valor en los últimos 11 días de 1994, y en seis años, entre el 1 de enero del 89 y el 31 diciembre del 94, pese a todas las promesas hechas, el peso dejaba en el camino el 46.28% de su valor.

El 9 de marzo del 95, después de casi haber tocado los N$8.00 por dólar, el billete verde cerró la jornada en N$7.55. Luego, una vez que el secretario de Hacienda, lograra el apoyo financiero de Washington y del Fondo Monetario Internacional (FMI), el mercado se calmó y el dólar cerró a N$ 5.97 en abril y en junio a N$6.24. Más tarde, en octubre, la cotización del dólar se disparó nuevamente, y el 14 de noviembre de 1995 llegó a N$8.05. Pero al terminar ese año, el dólar cerró en N$7.70, es decir, 54% arriba de su cotización al cierre de 1994, mientras el dólar avanzó un 122.2% frente al peso33.

1996, con la excepción de los sobresaltos de octubre, fue un año bastante tranquilo en cuanto al tipo de cambio. El dólar abrió a 7.70 y cerró a 7.87, perdiendo solamente un 2.2% de su valor frente al peso.

En 1997, los sobresaltos de octubre, ahora por la crisis de Asia, volvieron a repetirse y eso llevó al peso a cotizarse a $8.06 al finalizar el año. Perdió en ese lapso 2.4% de su valor expresado en centavos de dólar.

Después de la tormenta que se vivió en el otoño de 1997 –aunque aquel año terminó con una relativa calma en el mercado de cambios–, en 1998, el nerviosismo volvió a aparecer, y al terminar la primera mitad del año, el peso ya había retrocedido 9.59% frente al dólar, cerrando a $8.96.

Más tarde, durante julio, las cosas se calmaron un poco, pero en agosto el peso volvió a caer y, aunque se recuperó un poco a partir de octubre, al cerrar el año se cotizó en 9.91 por dólar. Ello significó una devaluación de 18.62% respecto de su cotización de 8.06 al cierre de 1997.

Durante 1999, aparte de algunos pequeños brincos en el primer trimestre del año, el tipo de cambio permaneció estable y finalmente cerró en $9.50 por dólar, esto es, 4.3% mejor que al cierre de 1998, cuando terminó en $9.91.

Así como se comportó el tipo de cambio en sus diferentes modalidades, lo hizo el tipo de cambio fix. Esto lo podemos confirmar en el siguiente análisis estadístico.


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