Comunicación y Educación Ambiental

La educación ambiental formal ayuda a desarrollar un sentido de responsabilidad y solidaridad, difunde información y alternativas e induce cambios de valores y conductas. La educación ambiental extracurricular permite que individuos de cualquier edad y formación educativa se involucren en actividades y adquieran compromisos con el objetivo de capacitar y concientizar. En este sentido, los medios de comunicación masiva ofrecen un gran poder de llegar a todos los sectores de la población promoviendo la cooperación social.

La educación ambiental es materia reciente en la revisión de los planes de estudio en los diferentes niveles educativos. Sin embargo es necesario crear mecanismos de cooperación con las autoridades correspondientes para crear una estructura sólida y completa en esta materia. El Gobierno del Estado, a través de las autoridades competentes, participa activamente impartiendo charlas y conferencias en centros de educación para la difusión de temas en materia ecológica.

Actualmente las actividades de capacitación y fomento de la cultura ecológica se enfocan en la atención a estudiantes, responsables de establecimientos comerciales, industriales o de servicios, consultores y público en general que por alguna causa o situación particular solicitan información o asesoría en algún tema o aspecto en materia ambiental.

Sin embargo, el esfuerzo no es suficiente y se requieren mecanismos innovadores que permitan generar un cambio de cultura ambiental que garantice la sustentabilidad que el desarrollo de la comunidad nuevoleonesa requiere.

Manejo de residuos

En el Estado, de forma semejante a lo que ocurre en otras entidades de un nivel de desarrollo humano similar, el principal problema de contaminación del suelo lo constituyen los residuos que provienen tanto de casas habitación como de actividades industriales, comerciales y de servicio.

Mediante el manejo integral de los residuos, que abarca el proceso que inicia desde su generación hasta su disposición final pasando por las fases o etapas intermedias de recolección, transporte, acopio, reciclaje, transferencia y tratamiento, puede lograrse disminuir la implicación negativa que su existencia genera en el ambiente.

En la actualidad representa un gran avance en la política en materia de residuos, la publicación de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, ordenamiento federal que entró en vigor en enero de 2004. Esta ley establece, por un lado, una distribución precisa de competencias entre los tres órdenes de gobierno y por otro, diversos lineamientos que permiten contar con procedimientos certeros para el manejo de estos materiales.

Es menester señalar que el tema del manejo de residuos en el Estado, no puede abordarse sin hacer referencia previa a las labores y objetivos del Sistema Metropolitano de Procesamiento de Desechos Sólidos (SIMEPRODESO).

Sistema Metropolitano de Procesamiento de Desechos Sólidos (SIMEPRODESO)

Como parte de la administración pública paraestatal, SIMEPRODESO, cuya ley orgánica se publicó en 1987, y cuyo inicio formal de operaciones data de 1991, tiene por objeto prestar el servicio de acopio, recepción, transporte, depósito, almacenaje, aprovechamiento, reciclaje, transformación y procesamiento de todo tipo de desechos sólidos y sus subproductos a cualquier municipio de la entidad, y a cualquier persona física o moral, pública o privada. Queda excluido el servicio público de recolección directa de basura doméstica, que es el que prestan los municipios del Estado.

Este organismo fue creado con el objeto de solucionar el problema de los desechos sólidos que se producen en el área metropolitana, evitando de esta forma la alteración del orden ecológico y propiciando, a su vez, la oportunidad de que un gran número de familias de pepenadores cuenten con un empleo permanente en mejores condiciones. SIMEPRODESO recibe parte de los desechos sólidos del área metropolitana en las estaciones de transferencia9 y procede a su procesamiento, cuyos sobrantes se envían a los rellenos sanitarios10 que opera la empresa, para su disposición final.

Hoy, SIMEPRODESO es una empresa que opera bajo altos estándares de calidad, lo que le ha valido la certificación bajo la norma ISO 9001:2000. Un estudio de manejo de residuos elaborado por la Agencia de Cooperación Técnica Alemana en 2003, concluyó que el manejo de residuos en el AMM se considera de “éxito evidente”, fundamentalmente por la contribución de este organismo.

En la actualidad, fue electo por el Banco Mundial para iniciar un proyecto, único en América Latina, para la recuperación de biogás11, lo que permite la generación de 7 megawatts de energía eléctrica, que se suministra con fines de servicio público a los municipios de Monterrey, Guadalupe, San Pedro, Santa Catarina, San Nicolás de los Garza, General Escobedo y Apodaca.

Para reforzar el cumplimiento de su objeto y coadyuvar en los esfuerzos para la conservación del ambiente, SIMEPRODESO construyó una planta clasificadora, en la que se recupera plástico, vidrio, cartón, aluminio y papel, entre otros residuos, los cuales son aprovechados por empresas de la región en sus procesos productivos.

En el Plan Estatal de Desarrollo 2004-2009, se ha propuesto vigorizar la labor de SIMEPRODESO, promoviendo la ampliación de sus servicios, la cobertura de los mismos en todo el Estado y avanzar en su modernización tecnológica.