BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

SISTEMA DE ACCIONES PARA CONSOLIDAR LA EDUCACIÓN AMBIENTAL DE LOS PROFESORES EN FORMACIÓN DE LA CARRERA DE ECONOMÍA EN EL IPE MARIO DOMÍNGUEZ REGALADO

Yamila Santana Esponda



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2.2.2 La Educación Ambiental en el contexto educativo

La problemática ambiental que hoy vive nuestro mundo ha llegado a ser un tema de interés y preocupación, tanto en el conjunto de la sociedad como por parte de organismos internacionales, nacionales y locales.

Aspectos relacionados con el crecimiento demográfico, la desaparición de grandes zonas boscosas, la progresiva desertificación, el agotamiento de los combustibles fósiles, el fenómeno de las lluvias ácidas y la disminución de la capa de ozono son fenómenos de gran preocupación para un porciento considerable de la opinión pública internacional, y en todos los casos pueden tener repercusiones decisivas sobre la supervivencia y existencia de la propia humanidad.

Las primeras iniciativas para darle solución a esta situación comprometedora no surgen en el contexto de la escuela, sino en otros ámbitos sociales, siendo recogidos y difundidos sobre todo en organismos internacionales adscriptos a las Naciones Unidas. Entre estas organizaciones se destacan la FAO, la UNESCO y la OMS, las cuales en su conjunto aprobaron y pusieron en práctica a partir del año 1971 el programa denominado Hombre y Biosfera.

Este programa, con un carácter instructivo, tenía el propósito de proporcionar conocimientos de Ciencias Naturales y Sociales necesarios para la utilización racional y la conservación de los recursos naturales presentes en la biosfera.

Sin embargo, se ha demostrado históricamente que la escuela tiene las potencialidades necesarias para desarrollar simultáneamente la labor instructiva y la educativa, principio muy importante de la pedagogía cubana actual. También es necesario tener en cuenta las potencialidades que brinda la familia y la comunidad para el desarrollo de estas tareas.

La educación ambiental en el contexto de la escuela debe propiciar un cambio de actitud y una participación más responsable en la gestión del medio ambiente. De aquí la importancia de desarrollar en nuestros educandos una adecuada toma de conciencia que no se limite al simple respaldo de una consigna y que habría que desarrollar a partir del análisis de los valores que subyacen en la toma de decisiones por parte de ellos. Es importante además que nuestros estudiantes desarrollen actitudes de responsabilidad con respecto a las consecuencias de nuestras formas de vidas y de nuestras actuaciones diarias en relación con el medio ambiente, y en último término su capacidad de tomar decisiones con respecto a la problemática ambiental.

Estas ideas están en correspondencia con lo planteado por el investigador Ismael Santos Abreu, al plantear que la educación ambiental como estrategia para el desarrollo tiene la misión de contribuir a elevar la calidad de vida de los seres humanos en la medida que alcanza el desarrollo de valores, modos y estilos de vida más compatibles con la realidad ecológica de cada entorno y del planeta en general.

En esta dinámica habrá que buscar la compatibilización entre la necesidad de mejorar la calidad de vida y el respeto a la conservación del medio, desde una perspectiva que contemple la solidaridad global en el planeta. Estos propósitos de la educación ambiental transferidos sistemáticamente a actitudes y comportamientos ambientales positivos no pueden desarrollarse sin tener en cuenta el carácter conceptual de este proceso. Es por ello que la educación ambiental en la escuela debe también favorecer el conocimiento y la comprensión del medio ambiente.

Para el logro de este anhelo es necesario que en las acciones educativas diseñadas se tengan en cuenta tanto la estructura de los elementos del medio, como su dinámica. Un aspecto esencial para la valoración de las interacciones en el medio es sin dudas la interdependencia existente en nuestro mundo, de forma que las actuaciones de los grupos sociales en un determinado medio no tengan repercusiones negativas sobre otros medios.

Analizando el concepto anterior nos damos cuenta que la educación ambiental en la escuela debe ser también un proceso continuo que contribuya a la formación integral de nuestros estudiantes, orientada de forma tal que durante el proceso de asimilación de conocimientos y desarrollo de hábitos, habilidades, capacidades y actitudes; se armonicen las relaciones afectivas entre los hombres y de estos con el resto de la sociedad y la naturaleza, para lograr una correcta orientación de los procesos económicos y sociales.

Estas ideas están en plena correspondencia con la concepción de que la educación ambiental en el contexto educativo se enfoque como un proceso permanente donde los estudiantes tomen conciencia de su medio y adquieran los conocimientos, los valores, las competencias, las experiencias y la voluntad capaces de hacerlos actuar individual y colectivamente para resolver los problemas actuales y futuros del medio ambiente.

Como hemos visto en los conceptos anteriores existen puntos comunes. Tal es así que existe consenso en que la educación ambiental en la escuela debe entenderse como un proceso educativo integral, que le permita al individuo comprender las relaciones de interdependencia con su medio circundante a partir del conocimiento reflexivo y crítico de su realidad biológica, social, política, económica y cultural.

Esta integralidad implica también, que el maestro posea una formación política, moral, estética, ética, laboral, científica y cultural general, que propicie en sus estudiantes conocimientos, modos de actuación consecuentes, un nivel cultural adecuado y hábitos saludables de convivencia, en esencia, que trabaje estableciendo el sistemático nexo entre lo cognitivo y lo afectivo.

Por esta razón consideramos que el personal docente debe ser formado con un perfil amplio que le posibilite llevar adelante las exigencias actuales de la educación cubana, lo que posibilitará.

 Contribuir a la formación ideo política y en valores ambientales de sus alumnos.

 Reflexionar y valorar los principales problemas ambientales y de salud que enfrenta la humanidad, y en particular sus estudiantes.

 Producir transformaciones científicas y actualizar el conocimiento básico general sobre el medio ambiente y el desarrollo sostenible.

 Evaluar estrategias encaminadas a la solución de problemas relacionados con el medio ambiente.

La comunidad abarca todas las potencialidades educativas para la transformación del modo de actuación del individuo y los grupos sociales. Por tal razón la escuela, la familia, las instituciones especializadas, entre otras son parte de la comunidad; y por tanto es importante tenerla en cuenta en cualquier estrategia educativa.

La comunidad como espacio educativo representa una fuente generadora para el establecimiento del vínculo escuela- familia- comunidad, lo cual puede fortalecer el desarrollo de la educación ambiental a partir de los elementos siguientes:

 Posibilidades que presenta al estar integrada por un conglomerado humano que se inserta a los grupos sociales y forma parte de organismos, organizaciones e instituciones en su condición de sujeto y de personalidad, lo que determina la participación y aporte a la vida comunitaria e influyen o conforman las cualidades de la comunidad y transmisión de la experiencia histórico social.

 Funciones que puede cumplir desde la posición del vínculo por la diversidad de dimensiones que contempla, que hacen de la comunidad un espacio socio educativo integrado, cuando a través de un proceso de orientación y coordinación se involucran a los actores y agentes socializadores en función de educar hacia:

 El amor a las tradiciones y costumbres socioculturales del entorno y el país.

 El desarrollo de una cultura ambiental y económica valiosas.

 La correlación entre lo individual y lo social en la determinación de la salud física, mental y social.

 El fortalecimiento político ideológico, la convivencia social y la defensa del patrimonio local y nacional.

 La formación de un ciudadano donde primen los valores éticos, estéticos, culturales, ambientales, entre otros.

Las actividades extradocentes aportan un potencial importante para desarrollar la educación ambiental en nuestros estudiantes, a partir de las potencialidades que presentan los contenidos de cada asignatura.

Estas actividades, especialmente organizadas en el sistema del proceso docente educativo proporcionan a los escolares las más diversas vías para satisfacer sus intereses, desarrollando en ellos una actitud positiva hacia las investigaciones, la lectura, la protección del medio ambiente, la toma de conciencia y otras manifestaciones de la cultura.

En su concepción se debe tener en cuenta el carácter activo y dinámico que las caracteriza, lo cual puede repercutir directamente en la formación de sentimientos colectivistas y al enriquecimiento de las relaciones morales y de trabajo en grupo.

También somos del criterio que para el desarrollo de acciones ambientales se deben tener en cuenta los lugares de la comunidad que potencian el trabajo ambiental. En este sentido nos hemos preguntado ¿Cuáles son estos lugares en mi localidad? ¿Qué posibilidades nos brindan para la educación ambiental? Entre los lugares que potencian este trabajo se encuentran la propia escuela, una fábrica, el Jardín Botánico, una finca o cooperativa, etc.

Es decir que para el logro de una adecuada educación ambiental en los profesores en formación debemos explotar todas las posibilidades que nos brinda la escuela en actividades curriculares extracurriculares en unión a la comunidad y las familias.

Para el logro de una adecuada educación ambiental en los profesores en formación de nuestro centro politécnico se propone un sistema de acciones que se aborda a continuación.


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