Economía como poder

La formula es: (riqueza) poder productivo + dominium (cosas).

La cosa es más que clara, en cualquier circunstancia aquel que posee los medios de producción obtiene un poder de subordinación para con sus trabajadores. Este poder de dominación se remarca en un estado mínimo en donde la libertad del mercado, de la oferta y de la demanda regula las relaciones sociales, y por lo tanto no debe existir carencia en cuanto que el mercado es competitivo y de calidad, donde los ciudadanos obtienen productos a bajo costo y satisfacen sus necesidades mínimas. Claro todo esto en un estado ideal, demasiado determinista por la precisión de cuanto necesito para mi consumo y cuanto hay que producir, mi población, mi tipo de población, etc.

Hasta cierto punto considero que el poder económico o de propiedad ha dado origen al estado moderno, cuando Engels explica que la propiedad privada genera desigualdad, donde existen dominantes y dominados. Los que dominan crean el estado para mantener legítima su dominio sin necesidad de coacción hacia los dominados pues es legal el dominio.

Política como poder

La formula es: (fuerza) poder coactivo + imperium (personas)

El poder coactivo se resume en el poder soberano, el leviatán en sentido más clásico para la autoridad que puede ejecutar la coacción directa a los súbditos por el solo hecho de tener el poder soberano. El imperio sobre las personas en cuanto resalta un temor mítico que el leviatán provoca por el poder de coacción, así el estado en un sentido organicista es un sistema orgánico el cual no se puede hacer daño a si mismo. Por tal motivo no debe existir aquel que esté en contra del Estado.

El resguardo del poder político es el ideal para con la sociedad, siempre y cuando dicho Estado (leviatán) garantice los derechos y obligaciones de la sociedad civil. Subordinando el poder económico que ve por intereses particulares y monopólicas; aún subordinando al poder ideológico que esta en contra del desarrollo espiritual y verdadero de la formación de la razón en el hombre.

Por todas las cuestiones anteriores se afirma concretamente, de cualquier manera los poderes tienen un mismo fin:

“El fin instituir y Mantener Sociedades de desiguales: superiores e inferiores”.

Reforma o revolución: opción para la sociedad civil

Hasta para la interpretación de la reivindicación los intereses o desorden en el sistema productivo existe una clasificación de dominación; para los ricos se le denomina guerra civil, tanto para los marginados es la revolución.

La gran cuestión de la eterna diferencia social es ¿qué es mejor para la estabilidad del sistema político? La solución utópica donde se conjugue la mayor extensión de libertad más la mayor extensión de igualdad. Tanto que una restringe a otra por su misma naturaleza, se podría decir que se debe conjugar el sentido capitalista de libertad más el sentido igualitario del comunismo. Para así alcanzar un equilibrio (no en el sentido del neomarxismo, que solo venden al comunismo al liberalismo sin más ni más; o en el caso del neoliberalismo, que busca la legitimidad ayudando a los pobres con teorías de desarrollo material de su autor mas legitimo Amartya Sen, todo para seguir con el yugo burgués y proletariado en los dos sentidos).