BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

INTEGRACIÓN. TEORÍA Y PROCESOS. BOLIVIA Y LA INTEGRACIÓN

Alberto Solares Gaite




Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (344 páginas, 955 kb) pulsando aquí

 

 

3.4. Deficiencias políticas

Los factores políticos, constituyen un elemento decisivo para el desempeño de un país en la integración, no sólo en relación a su voluntad soberana de participación sino a la calidad de la misma y al logro de los objetivos que se pretenden conseguir en cada proceso concreto.

La presencia de Bolivia en los diferentes procesos de integración de la región, se caracteriza por la ausencia de objetivos y metas de participación. El ingreso o adhesión a procesos de esta naturaleza se decide más en función de no quedar fuera de los mismos, antes que en la reflexión nacional de los beneficios y costos que impliqua esta decisión. Algunos analistas se han llegado a preguntar si Bolivia es sujeto u objeto de la integración.

La participación boliviana siempre ha estado carente de una política nacional de integración que establezca el costo/beneficio de cada proceso, los intereses y objetivos que se pretenden satisfacer o alcanzar, las estrategias internas y externas que hagan posible aquello, así como los esfuerzos que debe asumir el país para cumplir los compromisos asumidos.

Todo ello ha determinado una evidente falta de voluntad política de participación, la integración siempre ha tenido una atención marginal de los gobiernos, tanto en el aprovechamiento de sus ventajas y en la preparación del país para ello, como una debil voluntad de cumplimiento de los compromisos adquiridos, Bolivia ha estado entre los países miembros con mayor incidencia de incumplimientos de los compromisos comunitarios.

Quizá el telón de fondo de esta ausencia de una política nacional de integración, como una variable importante para el desarrollo nacional, esté constituido por la crónica inestabilidad política que vive el país. La política boliviana está caracterizada por una pendularidad ciclica que oscila de extremo a extremo y que acompaña pasivamenye las mismas oscilaciones del sistema internacional.

3.5. Deficiencias institucionales

Sector Público

Con pocas excepciones y periodos, ha existido siempre un desconocimiento general sobre los temas de integración en los niveles de gobierno y administración, que ha determinado que las decisiones en este campo se las tomé con frecuencia con improvisación y guiados únicamente por la circunstancialidad.

Empezando por la ubicación institucional del tema, se ha confrontado una inestabilidad evidente en la asignación de competencias a los órganos nacionales. Existió un momento en que se convirtió una simple Secretaría General, anexa al Ministerio de Relaciones Exteriores, en todo un Ministerio de Integración, para volver poco después a la condición de una Dirección de la Cancillería con competencias compartidas con muchas otras instituciones públicas. Llegó otro momento de una total confusión institucional, cuando a pesar de existir una Ley de Organización del Poder Ejecutivo que delimitaba muy claramente las competencias, por factores políticos se dio lugar al enfrentamiento institucional entre la Cancillería y el entoncés Ministerio de Comercio Exterior e Inversión, confundiendo la acción diplomática de negociación externa con la ejecutoria interna de los acuerdos y el potenciamiento técnico y productivo para concretarlos.

En materia de negociaciónes, en las primeras etapas de la integración era notoria la falta de capacidad negociadora del país. Los negociadores bolivianos vivieron el drama de enfrentarse a equipos de hábiles negociadores de los otros países, con una gran experiencia derivada de su estabilidad funcionaria en los temas sujetos a negociación. Además, los bolivianos tenían que actuar huerfanos de directrices políticas y técnicas, improvisando posiciones para superar el momento pero con el riesgo de afectar el interés nacional. En algunos temas era anecdótica la presentación del nuevo negociador boliviano en cada reunión, demostrando una gran inestabilidad funcionaria y una improvisación crónica.

Posteriormente, a partir de los últimos años de la década de los 90, fueron evidentes los esfuerzos para una mejor institucionalización de los temas de integración, mediante la creación de un Viceministerio de Relaciones Económicas e Integración dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores, así como el mejoramiento de la calidad de gestión y negociación en esta materia. En esta etapa se dieron importantes acontecimientos internacionales como la iniciación de actividades de la OMC y el ajuste de muchos de los procesos de integración en la región.

Al presente, si bien se mantiene el nivel institucional para los temas de integración, a partir del cambio político registrado el año 2006, se ha retrocedido a los niveles más agudos de improvisación funcionaria y de desconocimiento de estos temas; situación agravada por una visión casi hostil a la integración confundiéndola con sólo el libre comercio, satanizado por el socialismo del siglo XXI. Actualmente la política exterior y de integración en Bolivia se digitan desde Venezuela y se instrumentan a través de operadores de ONGs antiglobalización que tienen una fuerte presencia en el gobierno.

Sector Privado

En el marco de las deficiencias que aquejan al sector privado nacional – ya comentadas - , en el caso de la integración se ha observado una evolución muy importante de las actitudes del empresariado. En las primeras etapas de la integración, el empresariado boliviano se caracterizó por un total rechazo a la participación nacional en estos procesos, especialmente en el caso de la integración andina, considerada de orientación izquierdista por sus planteamientos en relación al capital y tecnología extranjeros (Decisión 24), situación que no fue exclusiva del empresariado boliviano, sino común al empresariado subregional que temia los efectos de la apertura de los mercados nacionales como efecto de los programas de liberación del comercio.

La tradición no productiva, mayormente comercialista y de importación del empresario nacional, así como la fácil posición de agentes o representantes de empresas extranjeras, ofuscaron la comprensión de la necesidad de fortalecer los factores nacionales en la producción y el intercambio dentro de un proceso integrador. Mas nefastos para la empresa boliviana, irónicamente, resultaron los efectos de la nueva política económica llegada con el neoliberalismo, que desestabilizó su tradicional acogimiento a la protección del Estado y lanzó a las unidades económicas nacionales a un duro proceso de apertura indiscriminada, unilateral y sin compensaciones – caso boliviano – que determinó niveles de competencia severa con factores externos y una subsistencia selectiva para la cual no estaban preparadas, socavandose de esta manera todo el sistema productivo nacional.

Tuvo que pasar mucho tiempo, para que el sector empresarial comprendiera que un proceso de integración les abría un horizonte de ventajas y nuevas oportunidades, en un marco de tratamiento preferencial y fortalecimiento del capital nacional especialmente productivo, pero que tenía como contraparte la necesidad de cualificar el esfuerzo productivo y lograr niveles de competitividad que les permitieran minimizar las desventajas y optimizar los efectos positivos de una participación activa.

Cuando las oportunidades de la integración se fueron concretando en realidades tangibles y algunos empresarios pudieron constatar los beneficios reales de exportar particularmente al mercado andino, la actitud cambio y se proyectó a una plena identificación y defensa de la participación boliviana en este proceso. Actualmente son los sectores inicialmente más desafectos al proceso andino, como los agroindustriales del oriente boliviano, los que ya no pueden concebir su viabilidad sino sobre la base de los mercados subregionales. Ahí está, como ejemplo, el sector de las oleaginosas, que pese a sus problemas recientes, proyectó su desarrollo por muchos años en base al mercado andino.

En general, el todavía precario desarrollo empresarial boliviano, constituye uno de los factores que han impedido una mayor y más efectiva participación nacional en el aprovechamiento de las ven


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles