BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

VÍA DE ADQUISICIÓN DE LOS ELEMENTOS DE LA CULTURA ANGLOCARIBEÑA DESDE CON UN ENFOQUE HISTÓRICO SOCIAL

Yaima García Salazar




Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (73 páginas, 248 kb) pulsando aquí

 


 

1.2 - El fenómeno migratorio y la inmigración Caribe-Cuba. Orígenes.

El Caribe anglófono es un grupo de islas en el Caribe que su idioma nativo es el inglés. Son islas que quedan entre el Norte y el Sur de América bordeando el Caribe y comprende: Bahamas, Antillas Mayores (Jamaica), Antillas Menores (Trinidad y Tobago, Barbados) y las Islas de Leward (Antigua y Barbuda, St Kitts y Nevis, Monserrat) y (St Lucia, St Vicent, Granadinas y Granada) también está integrado por Guyana.

Todos estos países tienen una historia similar basada en un pasado colonial común con su sistema de explotación del esclavo y la incorporación de tradiciones africanas en su cultura: música, folklore, religión e idioma.

Desde sus orígenes, el hombre se ha desplazado de un lugar a otro - grupos grandes - tribus, familias huyendo casi por instinto de las desgracias naturales o de los desastres de la guerra, encontraban siempre en algún lugar el alimento, el abrigo o la paz que ellos habían perdido, verdaderos aluviones humanos, al principio, las inmigraciones fueron confiriendo sus rasgos distintivos a continentes enteros, regiones y países. Así los esclavos que los conquistadores llevaban consigo, empobrecidos por la mala suerte o el sistema, estaban amenazados y el temor los obligaba a buscar refugio, ellos contribuyeron a engrandecer la cultura universal, precisamente inagotable porque está hecha de porciones y en este caso es mayor que la suma de las partes.

El fenómeno migratorio y las causas que lo produjeron no pueden desvincularse del interés del imperialismo norteamericano. Desde la instauración de la República de Neocolonial, los americanos se pronunciaron por convertir a Cuba en su almacén azucarero, y estos deseos fueron denunciados por Juan Walberto Gómez y Manuel Sanguily.

El proceso migratorio en el Caribe tiene como han señalado varios investigadores una complejidad extraordinaria. Rolando Álvarez Estévez analiza la inmigración en el área y señala:

La importancia económica- social de la inmigración caribeña del principio del siglo se puede valorar desde dos puntos diferentes.

1. La inmigración respondió el mecanismo de la expansión azucarera.

2. Pudo ser una forma de contribuir a la maduración social de Cuba.

La activa penetración del capitalismo norteamericano en Cuba y las grandes inversiones en los sectores agrícolas, transporte por ferrocarril, de servicios públicos y en particular hacia la industria l azucarera. Algunos consideraban normal el interés en la introducción de inmigrantes a toda la costa, debido al déficit enorme de mano de obra en algunas regiones de Cuba.

La causa fue la existencia de gran cantidad de tierras sin cultivar en esta zona. Desde la colonia se importaba mano de obra de diferentes procedencias y las primeras décadas del siglo 20 muestran la existencia de colonias pequeñas de trabajadores en oriente, entre ellos los antillanos.

"No hay un sólo día ellos no quieren otros, el dominio de extensas zonas. Constantemente levantan fábricas, establecen ingenios de azúcar, poseen ya los diez mejores del país, entre ellos el Chaparra y el Boston que a lo que se dice acaso son superiores al Caracas y en todo caso , de los mayores entre nosotros y el mejores o más grande del mundo."

(Manuel Sanguily, 1901).

Este proceso tuvo gran importancia según Rolando Estévez.

• Fue una respuesta a las necesidades de los mecanismos de expansión de la producción de azúcar.

• La inmigración pudo ser el camino que contribuyó al desarrollo social de la industria de azúcar en Cuba.

• La construcción de nuevas industrias azucareras estuvo vinculada al proceso de inmigración.

La inmigración hacia Cuba constituyó un elemento de importancia en la búsqueda o conformación de una verdadera identidad entre los pueblos, independientemente de las barreras idiomáticas, todos tenían un factor común: haber sufrido un régimen de relaciones de producción esclavista. Esta inmigración tuvo influencia etnosocial que se hizo presente en la estructura institucional de nuestro país con creación de loggias, iglesias, sociedades de instrucción, recreo y otros, así como a lo largo de las 3 primeras décadas del siglo XX se desarrollaron en Oriente y Camaguey, las zonas muy bien definidas de inmigrantes Anglo y Francocaribeños de Banes.

En Oriente, como bien refiere Ysalgue de Massip, la influencia caribeña pudo sintetizarse en las primeras décadas en la influencia de la lengua, la alimentación y la religión.

Los jamaicanos según la apreciación de Carlos Martí poseían cuentas en el Banco Español o de Canadá y ellos enviaban la mayoría del dinero ganado en el país, quedándose con miserables centavos y comida frugal: ñame, bacalao. Entre los cálculos de los inmigrantes, estaba trabajar dos o tres zafras, obtener ahorros y regresar.

La discriminación racial fue otro fenómeno que enfrentó el inmigrante o jornalero, jamaicanos o de otras islas británicas o Caribeñas.

Si la inmigración anglocaribeña fue sumamente provechosa para la economía cubana en la pseudo república, su contribución a la cultura del municipio tampoco es desdeñable, así podemos ver tradiciones familiares.

¿Cómo ha sido la pertinencia y la integración a la cultura cubana de las comunidades de inmigrantes provenientes del Caribe?

Sobre este aspecto Balaguer Ramón, José señaló:

... miles de caribeños, haitianos, dominicanos y de otros países encontraron patria y casa y se establecieron uniendo sus raíces con las nuestras mezclándose así nuestros empeños de independencia. Debemos recordar que de Santo Domingo, llegaron los padres de nuestro José María Heredia. Otro ejemplo interesante está que en Jamaica vivió durante muchos años nuestro Titán de Bronce, Antonio Maceo, para el retornar más tarde para continuar la guerra.

Los inmigrantes compartieron las penurias y miserias con los cubanos humildes, que también vendieron su fuerza para subsistir bajo el régimen de explotación, su condición de extranjero los conducía a vivir en barracones insalubres enfermos por salarios bajos a pesar de utilizarse por el idioma en los trabajos de la industria para facilitar la comunicación con los jefes.

Durante 1920 nuestra historia muestra un incremento del movimiento huelguístico. Por este año, se produjeron varios movimientos que denunciaron la crisis del sistema neocolonial y sin lugar de dudas, el relevo generacional de los caudillos mambises.

Al tener lugar el Congreso Obrero de 1925 los obreros tenían una representación: Enrique Shakleton, para la Unión de obreros antillanos de Santiago de Cuba,: rectora del proyecto del C.N.O.C. al lado de Alfredo López y José García, en el Tercer Congreso celebrado en Camagüey, la delegación de obreros antillanos estaría presente, es decir, que desde que se organizan las agrupaciones en Cuba se les brinda una atención directa a los obreros, se eliminó la carrera discriminatoria y sectoríos en aras de fortalecer el movimiento obrero cubano.

El Segundo Congreso aprobó el movimiento presentando en apoyo a la clase antillana que tenía una representación mayor cuando el delegado Enrique Shakleton; al hablar en la última sección del congreso hizo patente la situación crítica de la masa obrera que él representaba.

La inmigración Anglo-Caribeña poseía una cultura superior en relación con la haitiana, por ello desempeñaban ocupaciones con eficacia y técnica como albañiles, carpinteros, herreros, cerrajeros, maestros de inglés, músicos, jardineros, estas habilidades y destrezas les permitieron componer la población cubana con una facilidad mayor. De esta integración con la población nativa se fundaron familias mixtas, cubano caribeñas o entre los inmigrantes de varias islas, haitianos con jamaicanos, lo que contribuyó al desarrollo de la sociedad cubana. En la actualidad, Cuba cuenta entre sus habitantes, personas que llevan raíces caribeñas.

Resulta clara la declaración de José Ignacio Pérez cuando al hablar sobre el Caribe dice": La diáspora caribeña significa paradójicamente unión de culturas."


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles