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UNA CONTRIBUCIÓN A LA SEXUALIDAD RESPONSABLE EN ADOLESCENTES DE SECUNDARIA BÁSICA

Carmen Salazar Díaz




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CAPÍTULO II. ACTIVIDADES PARA FORTALECER LA RESPONSABILIDAD SEXUAL EN LOS ESTUDIANTES DE SÉPTIMO GRADO DE LA SECUNDARIA BÁSICA.

El presente capítulo recoge los elementos fundamentales, a tener en cuenta para elaborar las actividades y fortalecer la sexualidad responsable en los estudiantes del séptimo grado de la Secundaria Básica. Se ofrece una caracterización de los estudiantes de la enseñanza media y de la muestra en particular, así como los resultados de los instrumentos aplicados, que determinan la necesidad de esta investigación, las relaciones entre los componentes que la conforman y se hace el análisis de la estructura, las orientaciones y las recomendaciones para la aplicación de la propuesta.

2.1.- Caracterización de los estudiantes de la enseñanza media.

A la edad escolar le sigue la adolescencia la cual constituye un período decisivo en el desarrollo escolar del niño. Se entiende desde los once o doce años hasta los 15 aproximadamente.

La situación de la adolescencia en el ciclo del desarrollo infantil está reflejada en otra de sus denominaciones. Período de transición, difícil y crítico para que se registra de la complejidad e importancia de los procesos de desarrollo que se operan en esta edad, vinculado al paso de una época o de una vida a otra. El paso de la infancia a la edad adulta constituyó el contenido fundamental y la diferencia específica en todos los aspectos del desarrollo en este período, o sea, físico, mental, moral y social.

El primer factor de desarrollo de la personalidad del adolescente es su propia actividad social, intensa, orientada, a asimilar determinados modelos y valores, a construir relación satisfactoria con los adultos y con sus padres, por eso así mismo hace proyectos sobre su personalidad y su futuro, con intentos de realizar planes y tareas.

La adolescencia es un período de elaboración y restauración de diferentes aspectos y esferas de la personalidad que alcanzan durante esta etapa un matiz personal. También tienen lugar numerosos cambios cualitativos que se producen en corto tiempo. Los cuales en ocasiones tiene un carácter de ruptura radical con las particularidades, interese y relaciones que tenía el niño anteriormente, es un momento de desarrollo en que prima la necesidad de autoafirmación de la personalidad.

El adolescente aunque vive el presente ya comienza a soñar con el futuro, ocupa gran parte de su tiempo en las actividades escolares y el estudio pero siente la necesidad de otros aspectos de la vida, sobre todo de relaciones con sus compañeros de su edad. Aprecia como se producen en su cuerpo una serie de transformaciones anatómicas y fisiológicas, arriban a nuevas cualidades de sus procesos cognoscitivos, a una mayor definición y estabilidad de los componentes de su esfera moral y a un nivel superior en el desarrollo de la autoconciencia; formación psicológica central en esta edad.

A la adolescencia se le ha denominado período de tránsito; pues el adolescente si bien no es un niño tampoco es un adulto, por lo que algunos presentan características y conductas de una y otra forma un tanto inestable. Adolescente de la misma edad cronológica muestran diferencias esenciales en los niveles de desarrollo de diferentes aspectos de la personalidad.

Esta particularidad de los adolescentes, está sometida a diferentes tipos de exigencias, dichas exigencias en unos casos acentúan su condición infantil frenan su desarrollo hacia la juventud, lo cual por ejemplo, se observa en caso en que los padres solo exigen al adolescente que se dediquen a estudiar y a las tareas propias de la escuela, liberándolos de otras labores cotidianas o le den una ayuda al tutelaje excesivo, señalándole cada paso que debe realizar.

En otros casos estas exigencias acentúan su condición de adulto, aceleración del desarrollo físico y de la maduración sexual, recargo de ocupaciones de muchos padres, lo que provoca la temprana independencia de los hijos, las altas exigencias y el gran volumen de información que les llega.

Todo desarrollo ocasiona una amplia diversidad de factores que determinan el desarrollo del adolescente, el cual no tiene lugar independientemente de la sociedad y la época en que se desenvuelven ni de las condiciones particulares de su vida personal, familiar y escolar. El contacto con los demás refuerza su necesidad de autorreflexión de conservarse, valorarse y dirigir en cierta forma su propia personalidad.

El adolescente necesita ayuda, comprensión; pero también busca autonomía, decisión propia debe permitírsele, que lo haga, necesita apoyo emocional y dirección hacia el futuro.

La importancia de la adolescencia está determinada porque en ella se forman las bases y se esboza la orientación general en la formación de las aptitudes morales y sociales de la personalidad, que se siguen desarrollando en la edad juvenil.

Es por eso que el papel fundamental en el desarrollo del escolar lo tiene, en conjunto con la familia y la comunidad, la escuela, eslabón fundamental en la formación de los nuevas y futuras generaciones con el nivel deseado de desarrollo de su cultural general integral, en el objetivo de prepararlo para el futuro y lograr convertirlos en hombres de bien, al servicio de la humanidad.

En el actual proceso de transformaciones en que se aspira a lograr la cultura general integral para lograr una mayor eficiencia en el aprendizaje de los estudiantes, la aplicación del diagnóstico inicial (ANEXO I), se convierte en elemento clave para detectar insuficiencias, marcar potencialidades y diseñar estrategias en el logro de los objetivos planteados.

Utilizado con frecuencia en otros campos no pedagógicos, el diagnóstico adquiere en este un espacio de vital importancia. Al respecto varios autores han brindado su definición:

Diagnóstico: proceso de carácter instrumental, que permite recopilar información para la evaluación, intervención en función de transformar algo de un estadio inicial hacia otro potencial teniendo en cuenta la atención diferenciada (José Zilberstein: 1998).

Diagnóstico: proceso sistemático en espiral continuo que con métodos apropiados permite la caracterización del estado pedagógico, la partida y la predicción del posible desarrollo, lo que determina las acciones de intervención transformadoras cuya efectividad se valida mediante un sistema de control que influye en la toma de nuestras decisiones. (Víctor Cortina, 2005).

Ambos autores señalan elementos esenciales para el buen desempeño de este proceso que no debe orientarse unilateralmente a la persona, sino a la actividad de forma continua con retroalimentación para indicar directrices y poder diseñar planes de intervención para transformar el objeto deseado.

En el diagnóstico un elemento importante a tener en cuenta es conocer cómo se comporta el problema que es objeto de diagnóstico, en el momento en que se indaga, para qué se precisa diagnosticar, con la finalidad de lograr transformaciones que permitan logros superiores en el objetivo que se profundiza. Abordar el diagnóstico del alumno de forma integral se convierte en elemento esencial, dado el estrecho vínculo e interdependencia entre factores cognitivos, afectivos, motivacionales y volitivos.

A partir de las dimensiones (ANEXO I – A), se logra concebir la estructura organizativa de esta investigación, donde se asume la dimensión psicosocial, pues al considerar que la actividad está ligada con la conciencia y la voluntad, se apoya en esta y no es posible sin proceso volitivo y consciente (Petrovski, A. 1976), la actividad es entonces actuación interna o psíquica y externa o motríz, regulada por el individuo mediante un fin conciente.

La actividad humana se puede producir en dos planos: en el plano externo, práctico, y en el plano interno, psíquico. La asimilación de la actividad puede ocurrir en cualquiera de ellos (Rios Mendoza, Raida: 2001, p. 21).

La esfera interna brinda la posibilidad de medir el desarrollo de las acciones y operaciones, que en el plano psíquico es capaz de realizar el estudiante, sin embargo esto no es posible si no se realiza su control a partir de la esfera externa que está subordinada a la primera.

Para realizar este diagnóstico fue preciso determinar los indicadores, que se ajustaran a las necesidades investigativas. Para determinar los indicadores se hizo un estudio y análisis de literatura referente a aspectos esenciales sobre la sexualidad responsable, se consultaron libros de textos, trabajos de diploma, de maestría y de doctorado, además, se consultó la opinión de otros colegas de la disciplina para determinar los indicadores (ANEXO I – A), seleccionando aquellos, que se ajustaran a las características y propósitos para ser aplicados durante la investigación, que permitieran medir el nivel de desarrollo y facilitara la lectura de los resultados alcanzados con la propuesta.

El indicador se define: como una variable que permite indicar valores de otra variable, o sea sus valores indican los valores de otra variable. (Campistrous, Luis: 1998).

El análisis del nivel de desarrollo alcanzado por los estudiantes a partir de la aplicación del diagnóstico inicial se realiza a partir de los siguientes indicadores:

1.- Dominio de los conceptos básicos: este posibilita medir el nivel de preparación teórica que tiene el estudiante sobre los aspectos relacionados con la responsabilidad en las relaciones sexuales y las consecuencias de un modo de actuación que no esté acorde con los principios básicos.

2.- Adecuadas manifestaciones sexuales: permite comprobar como incorpora los conocimientos teóricos relacionados con la responsabilidad en las relaciones sexuales y las consecuencias de un modo de actuación que no esté acorde con los principios básicos a la práctica social y personal.

3.- Condiciones de vida y ambiente familiar: contribuye a precisar la influencia de las condiciones de vida, así como la efectividad del trabajo de los entes socializadores en su modo de enfrentar su responsabilidad en las relaciones sexuales en el contexto de su vida cotidiana.

La matriz (ANEXO I – B), que relaciona los indicadores con los métodos del empírico empleados en la investigación, contribuye a estructurar desde el punto de vista organizativo el uso de estos instrumentos para el análisis cualitativo y cuantitativo de sus resultados.

La medición del primer indicador se efectúa a través de:

• Observación.

• Encuesta.

• Entrevista.

• Experimento pedagógico.

El segundo indicador, a partir de:

• Observación.

• Encuesta.

• Entrevista.

• Estudio de los productos del proceso pedagógico.

• Experimento pedagógico.

El tercer indicador, con la aplicación de:

• Observación.

• Encuesta.

• Entrevista.

• Estudio de los productos del proceso pedagógico.

La escala evaluativa de los indicadores (ANEXO I – C), parte de las categorías bien regular y mal:

1.- Dominio de los conceptos básicos:

Bien: Si al menos 12 estudiantes (80 %), dominan los conceptos Básicos.

Regular: Si al menos 9 estudiantes (60 %), dominan los conceptos Básicos.

Mal: Si menos de 9 estudiantes (- 60 %), dominan los conceptos Básicos.

2.- Adecuadas manifestaciones sexuales.

Bien: Si al menos 12 estudiantes (80 %), tienen adecuadas manifestaciones sexuales.

Regular: Si al menos 9 estudiantes (60 %), tienen adecuadas manifestaciones sexuales.

Mal: Si menos de 9 estudiantes (- 60 %), tienen adecuadas manifestaciones sexuales.

3.- Condiciones de vida y ambiente familiar.

Bien: Si al menos 12 estudiantes (80 %), mantienen buenas condiciones de vida y ambiente familiar.

Regular: Si al menos 9 estudiantes (60 %), mantienen buenas condiciones de vida y ambiente familiar.

Mal: Si menos de 9 estudiantes (- 60 %), mantienen buenas condiciones de vida y ambiente familiar.

Esta investigación se realizó en el centro de referencia ESBU Gerardo Rodríguez Arias, del municipio Amancio, ubicada en el consejo popular 01, que limita al norte con un parque infantil, al este con un complejo deportivo, al oeste con una tienda recaudadora de divisas y un cabaret, al sur con la calle Darío Guevara donde radica la comunidad más cercana a la escuela.

El centro cuenta con 53 trabajadores, de estos 39 son docentes, 21 son licenciados, 14 docentes en formación, 2 bibliotecarias, 2 técnicos de informática y el resto son trabajadores de apoyo a la docencia. En la escuela hay 11 grupos de 30 estudiantes, y 2 de 15 estudiantes, el consejo popular tiene 17 circunscripciones que tributan estudiantes a la escuela.

Hay instituciones sociales cercanas a la institución tales como: cabaret, correo, tiendas recaudadoras de divisas, farmacia, mercados, banco, restaurante; entre los organismos sobresalen, el Poder Popular Municipal, la CTC, la industria alimenticia, Empresa de Telecomunicaciones S.A. (ETECSA), en el campo de la salud, el hospital municipal Luis Aldana Palomino, sala de rehabilitación y hogar de ancianos.

La adolescencia constituye un período decisivo en el desarrollo del estudiante. Este esquema de desarrollo está sujeto a variaciones individuales, en que no todos los estudiantes arriban a la adolescencia a una misma edad, unos se adelantan notablemente, mientras que otros, retardan las edades entre los 10 y 14 años, en correspondencia con la edad temprana.

Se puede comprender perfectamente la necesidad de que los educadores de este nivel conozcan profundamente las características de la adolescencia y sepan reconocer en ella a los estudiantes, con sus particularidades individuales y con sus rasgos comunes. Esto es sin dudas una premisa para la elevación de la calidad del trabajo docente-educativo.

Este es un período de elaboración y reestructuración de diferentes aspectos y esferas de la personalidad, que alcanzan durante esta etapa un matiz personal. Es un momento del desarrollo en que prima la necesidad de autoafirmación de la personalidad. El adolescente es un ser en duelo por la pérdida de su cuerpo infantil, de los idealizados padres de la infancia y de su propia niñez, a la que siente como un refugio seguro del que es desterrado.

También se presentan en esta etapa variaciones del sistema de glándulas de secreción interna, lo que da lugar, por una parte, al aumento brusco de la energía y por otra, a una elevada sensibilidad ante diversos factores que actúan en forma negativa.

Además, como consecuencia del desarrollo del aparato reproductivo, surge la posibilidad de tener un embarazo en las del sexo femenino. Todos estos cambios físicos tienen su correlación a nivel psicológico debido a que el cuerpo, al agrandarse, cambiar y realizar nuevas demandas se transforma en un verdadero desconocido.

La escuela y el estudio ocupan un lugar importante en la vida de los adolescentes, sin desconocer el papel que desempeñan otros factores que también forman parte del proceso de asimilación de la experiencia en estas edades.

Este período marca el momento en el cual el adolescente tiene la capacidad de combinar relaciones, precisamente esta capacidad le permite tener en cuenta, simultáneamente, varias hipótesis, a pesar de las consecuencias de las acciones, valorar sus productos, con una visión más crítica y relativamente más ajustada a la realidad.

Existen grupos con los cuales interactúa el adolescente y cuya influencia es importante para él; entre estos se encuentran la familia y el grupo de profesores de la escuela a que asisten, como factores importantes de su educación. Es necesario analizar la actividad que realiza en cada uno de estos grupos, las exigencias que se les plantean y el tipo de relación que caracteriza su vida en ellos. Es preciso cuidar que no se rompa el vínculo afectivo y la confianza entre ambos, porque en estos grupos el adolescente necesita encontrar afecto, comprensión, orientación y ayuda.

Caracterización de la muestra

La situación económica es favorable, todos provienen de la zona urbana, la relación de estos estudiantes dentro y fuera del grupo son buenas, se ayudan mutuamente y tienen establecida las parejas de equilibrio, sus hábitos higiénicos son buenos, así como su desarrollo motriz y físico, el grado de escolaridad de sus padres es aceptable, existen 14 estudiantes hijos de padres universitarios, 16 hijos de técnicos. En cuanto al estado de salud hay un estudiante que padece de asma y uno con problemas visuales, este es un grupo donde no existen problemas educativos especiales.

El universo lo conforman 30 estudiantes, de los cuales se tomó una muestra de 15 del grupo 7mo 3 del centro de referencia ESBU Gerardo Rodríguez Arias, de ellos 9 son hembras y 6 varones, la edad promedio es de 11 años. Siete estudiantes son hijos de padres divorciados, aunque predomina la familia funcional, ya que esta juega un papel importante en el desarrollo de sus hijos y se encuentran comprometidos con su educación: su rendimiento académico es promedio, 4 estudiantes se encuentran en el primer nivel, 6 en segundo y 5 en tercer nivel.

Resultados del diagnóstico inicial (ANEXO I – D).

La aplicación del diagnóstico inicial permitió comprobar que en el indicador 1, relacionado con el dominio de los Conceptos Básicos; 7 estudiantes, que representa 46,6 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que solo 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 2, relacionado con las adecuadas manifestaciones sexuales; 9 estudiantes, que representa 60 % se encuentra en la categoría de mal, otros 2, para el 13,3 % en la de regular, mientras que solo 4, para el 26,7 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 3, relacionado con las condiciones de vida y ambiente familiar; 9 estudiantes, que representa 60 % se encuentra en la categoría de mal, otros 2, para el 13,3 % en la de regular, mientras que solo 4, para el 26,7 % resultó evaluado de bien.

• Resultados del los instrumentos aplicados.

• Encuestas a estudiantes (ANEXO II).

La aplicación de las encuestas a estudiantes, permitió comprobar que en el indicador 1, relacionado con el dominio de los Conceptos Básicos; 7 estudiantes, que representa el 46,6 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que solo 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 2, relacionado con las adecuadas manifestaciones sexuales; 8 estudiantes, que representa el 53,3 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que solo 2, para el 13,3 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 3, relacionado con las condiciones de vida y ambiente familiar; 9 estudiantes, para el 60 % se encuentra en la categoría de mal, otros 3, para el 20 % en la de regular y 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

La aplicación de este instrumento permitió constatar, que el 79,9 % de los estudiantes presentan dificultades en el indicador relacionado con la base conceptual, mientras que el 86,6 % las manifiesta, en las adecuadas manifestaciones sexuales y el 80 % en las condiciones de vida y ambiente familiar, lo que corrobora la existencia de un problema científico y la necesidad de transformar la situación existente a partir del diseño de actividades.

• Entrevistas a estudiantes (ANEXO III).

La aplicación de las entrevistas a estudiantes, permitió comprobar que en el indicador 1, relacionado con el dominio de los Conceptos Básicos; 8 estudiantes, que representa el 53,3 % se encuentra en la categoría de mal, otros 4, para el 26,6 % en la de regular, mientras que solo 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 2, relacionado con las adecuadas manifestaciones sexuales; 8 estudiantes, que representa el 53,3 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que solo 2, para el 13,3 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 3, relacionado con las condiciones de vida y ambiente familiar; 9 estudiantes, para el 60 % se encuentra en la categoría de mal, 4, para el 26,6 % en la de regular y 2, para el 13,3 % resultó evaluado de bien.

La aplicación de este instrumento permitió realizar un análisis cualitativo y cuantitativo de sus resultados; donde el 79,9 % de los estudiantes presentan dificultades en el indicador relacionado con la base conceptual, mientras que el 79,9 % las manifiesta en las adecuadas manifestaciones sexuales y el 86,6 % en las condiciones de vida y ambiente familiar, lo que corrobora la existencia de un problema científico y la necesidad de transformar esta situación.

• Entrevistas a padres y tutores (ANEXO IV).

La aplicación de las entrevistas a padres y tutores, permitió conocer, que en el indicador 1, relacionado con el dominio de los Conceptos Básicos; 5 de los estos, que representa el 33,3 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que otros 5, para el 33,3 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 2, relacionado con las adecuadas manifestaciones sexuales; 4 padres o tutores, que representa el 26,3 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que 6, para el 40 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 3, relacionado con las condiciones de vida y ambiente familiar; 5 padres o tutores, para el 33,3 % se encuentra en la categoría de mal, 5, para el 33,3 % en la de regular y 5, para el 33,3 % resultó evaluado de bien.

La aplicación de este instrumento permitió comprobar, que el 66,6 % de los padres o tutores presentan dificultades en el indicador relacionado con la base conceptual, mientras que el 60 % las manifiesta en las adecuadas manifestaciones sexuales y el 66,6 % en las condiciones de vida y ambiente familiar, lo que corrobora la existencia de un problema científico y la necesidad de transformar esta situación pues como entes socializadores tienen que tener conocimientos sobre esta problemática.

Observación de actividades (ANEXO V).

La observación de actividades, permitió conocer, que en el indicador 1, relacionado con el dominio de los Conceptos Básicos; 8 de los estudiantes, que representa el 53,3 % se encuentra en la categoría de mal, otros 4, para el 26,6 % en la de regular, mientras que otros 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 2, relacionado con las adecuadas manifestaciones sexuales; 7 de estos, que representa el 46,6 % se encuentra en la categoría de mal, otros 5, para el 33,3 % en la de regular, mientras que 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

En el indicador 3, relacionado con las condiciones de vida y ambiente familiar; 5 estudiantes, para el 53,3 % se encuentra en la categoría de mal, 4, para el 26,6 % en la de regular y 3, para el 20 % resultó evaluado de bien.

La aplicación de este instrumento permitió comprobar en la práctica, que el 80 % de los estudiantes presentan dificultades en el indicador relacionado con la base conceptual, mientras que el 80 % las manifiesta en las adecuadas manifestaciones sexuales y el 80 % en las condiciones de vida y ambiente familiar, lo que corrobora la existencia de un problema científico y la necesidad de transformar este panorama.

Los resultados del diagnóstico inicial, así como de los instrumentos aplicados demuestran la existencia de un problema, que requiere de una rápida intervención; con el propósito de transformarlo desde el punto de vista cualitativo y cuantitativo, para lo cual, la autora propone actividades para cambiar el modo de pensar y actuar de los estudiantes de séptimo grado de la secundaria básica para fortalecer la responsabilidad sexual.


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