BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

IMPACTO DE UNA TRANSFERENCIA CONDICIONAL EN EFECTIVO SOBRE LAS DECISIONES LABORALES DE LOS BENEFICIADOS: UN ANÁLISIS DEL BONO DE DESARROLLO HUMANO DEL ECUADOR AÑOS 2005 - 2006

Santiago Israel Rivera Pazmiño



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3.3.2. Argumentos a favor

A pesar de que el crecimiento económico es un factor importante en la superación de la pobreza, es evidente y comprobado que los mercados no pueden por sí mismos mejorar las condiciones de vida de la población. Es entonces que las políticas públicas juegan un rol fundamental en la estabilización y provisión de las bases institucionales para su funcionamiento y regulación. Además, en este contexto es necesaria su intervención para dotar de bienes y servicios públicos a la colectividad. Entre los principales instrumentos de política de los Estados, están la distribución directa y focalizada de los recursos a los hogares pobres. Pues, según Fizbein & Schady (2009) en gran parte de los países en vías de desarrollo, el gasto público en infraestructura y servicios públicos no llega a los pobres.

Entonces, las transferencias monetarias de efectivo serían un mecanismo de política con mayor focalización y destinado exclusivamente a los pobres. (Villatoro, 2005) muestra que los programas de TCE alcanzan altos grados de focalización y que los problemas están en la exclusión de algunos hogares que deberían acceder a las transferencias. Una transferencia de dinero a las familias pobres les permitirá llevar a cabo sus proyectos de modo más eficiente y además éstas pueden ser instrumentos adecuados para compensar a las familias que tienen desventajas heredadas como la raza, el género o antecedentes familiares (Fizbein & Schady, 2009).

Asimismo, las TCE son adecuadas si la inversión privada en el capital humano de los niños es demasiado baja, es decir, la inversión puede estar por debajo del nivel óptimo privado a causa, por ejemplo, que los padres consideren equivocadamente que la inversión en educación y salud de los niños no son la mejor opción para el hogar o no generan los retornos económicos que ellos esperan. Evidencia de ello se ha encontrado en varios países en vías de desarrollo. Attanasio & Kaufmann (2008) encontraron que en México el retorno a la escuela es sustancialmente inferior a la realidad, especialmente entre los niños de padres con bajos niveles de educación.

Adicionalmente, la baja inversión privada en los niños puede vislumbrarse cuando el nivel óptimo privado sea inferior al nivel óptimo social. Fizbein & Schady (2009) mencionan al respecto que esta situación podría producirse si hay externalidades positivas de la educación y la salud de los hogares. Empíricamente, gran parte de la inversión en salud genera importantes beneficios. En el caso de la educación, las externalidades pueden surgir si hay rendimientos crecientes de mano de obra calificada en la producción, a nivel agregado, o si la educación disminuye la delincuencia. En este contexto, las transferencias condicionadas podrían compensar algunos costos de oportunidad de utilizar los servicios de educación y salud.

Además, las transferencias serían efectivas cuando las condiciones de la economía política sean débiles en los procesos de redistribución, pues al ser exclusivamente para los hogares pobres, los recursos del Estado son distribuidos con mayor focalización y con un cierto grado de eficiencia. Entonces, al carecer la economía política de claros y fuertes procesos de distribución las TCE disminuirían esas asimetrías, generando un “contrato social” entre el Estado y los beneficiarios que se manifiesta de modo definitivo con la corresponsabilidad requerida por el programa, la cual garantiza la inversión en capital humano. Es decir, las transferencias se justificarían también en ausencia de objetivos de redistribución, como un medio para mejorar los incentivos para los hogares a invertir en capital humano.

A la vista de los argumentos a favor y en contra, difícilmente se puede afirmar que las TCE son la solución idónea para la pobreza tanto de corto como de largo plazo, peor aún manifestar que todos los países del mundo deberían tener un programa de transferencias de efectivo. Por esta razón, es menester indagar sobre los efectos que transferencias de este tipo han generado sobre los países que los han aplicado, especialmente en materia laboral.

3.4. Impacto de las TCE en la acumulación de capital humano

Existen diferentes tipos de estudios en los países que han aplicado este tipo de programas. Entre los más destacados se encuentran los relacionados con la inversión en capital humano de los hijos de los hogares beneficiarios de las TCE. Como se mencionó anteriormente, el objetivo principal de los programas de transferencias monetarias en incentivar la inversión de los hogares beneficiarios en el capital humano de sus hijos. Dicho de otra manera, que los padres inviertan el dinero fruto de la transferencias en la educación y salud de sus hijos. En este sentido, la presente sección muestra los impactos que se han encontrado con relación a salud y educación de programas de este tipo.


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