BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

INVERSION EXTRANJERA EN EL DESARROLLO DE LA REGION MINERA DE ANTOFAGASTA (CHILE): HISTORIA Y PERSPECTIVAS.

Jan José Cademartori D.



Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (420 páginas, 1,94 Mb) pulsando aquí

 

 

5.10. EL (SUB) DESARROLLO PRODUCTIVO DE TOCOPILLA Y TALTAL.

Tocopilla, ubicada en el Norte de la región, y Taltal, localizada en el Sur de la misma, son las comunas que siguen en importancia a Antofagasta y Calama. Ambos puertos conocieron épocas de gloria con la minería del salitre hace un Siglo. La producción salitrera, en continuo crecimiento, ocasiona un fuerte movimiento portuario de carga. En la década de 1930 Tocopilla contaba con 15 mil habitantes y en 1969, con 30 mil, una población mayor que la de hoy. En 1915 fue instalada la central eléctrica que alimenta la mina de Chuquicamata y que se mantiene como una de las más importantes fuentes de actividad económica273. También hay un puerto privado de embarque de salitre que pertenece a Soquimich, empresa de la cual ya se ha hablado

Tocopilla y Taltal han permanecido en situación de estancamiento económico y pobreza generalizada, lo cual se refleja en que la población de Tocopilla ha caído en un 4% y la de Taltal, ha aumentado apenas en un 2% entre los años 1992 y 2002. La situación de pequeñas ciudades como Tocopilla y Taltal o la de los pueblos pre-andinos en donde escasea el agua, contrasta con el crecimiento de la población de la ciudad de Antofagasta.

La participación de la provincia de Tocopilla en la fuerza de trabajo de la RA descendió continuamente desde 1972 hasta 1998 (Gráfico 5.10.1). Según datos de una Encuesta del año 2000, la situación de sus personas en edad de trabajar se distribuía como lo indica el Cuadro 1. La suma de personas cesantes y con trabajo ocasional abarcaba un 42% de la muestra. La tasa oficial de pobreza del año 2002 de Taltal triplicaba la de la ciudad de Antofagasta y la de Tocopilla la duplicaba. De acuerdo a ciertas estimaciones efectuadas por la autoridad comunal de Taltal publicadas en la prensa, su tasa de desempleo habría alcanzado en 1999 niveles cercanos al 40%.

El destino de los recursos naturales condiciona la trayectoria de las ciudades pequeñas y su producción a menor escala. Como se mostró en el Cuadro 5.3.2, el sector Agricultura, Caza y Pesca ha perdido empleos entre 1990 y 2004. Previamente, en el Cuadro 1.2.5 se observó que el sector agropecuario- silvícola ha mantenido su participación marginal del 0,1% en el PIB de la RA, mientras que el sector Pesca ha venido perdiendo la suya (1981-1990 versus 2000-2001). Este último sector registró un crecimiento negativo entre 1990 y 2000 (Cuadro 5.5.3). La productividad del sector consolidado Agricultura y Pesca era inferior en 1998-2000 que en 1990-1992 (Cuadro 5.4.1) y es decreciente en relación a la productividad nacional (Cuadro 5.4.2). Este cuadro sectorial genera la polarización territorial en la RA. La actividad pesquera de Tocopilla ha sido frenada por la sobre-explotación general del recurso, la pequeña minería ha casi desaparecido y no se han creado nuevas industrias, salvo nuevas centrales que producen energía para las minas. Como se indicó antes, estas centrales eléctricas pertenecen a grandes grupos externos a la región que usan Tocopilla como mero lugar de emplazamiento. Estos grupos también dan lugar a la formación de une elite de profesionales bien pagados que contrasta con la situación económica de la mayoría de la población. Las expectativas económicas de sus herederos, estimula a la elite a emigrar a las ciudades más grandes, creando un círculo vicioso de pobreza de acumulación en recursos humanos y materiales274. La calidad de vida tampoco resulta atractiva. Como se indicó antes, una de las centrales termoeléctricas generó un conflicto ambiental a causa de la utilización de una sustancia altamente contaminante del aire de la ciudad de Tocopilla. Además, desde hace varias décadas la bahía ha sido contaminada con una espesa capa negra de desechos mineros.

La rica tradición organizativa de Tocopilla y el orgullo de su pasado explican que su población haya amenazado con boicotear las elecciones municipales de Octubre del 2000 para protestar por su abandono. Frente a la movilización colectiva el Gobierno de Chile aceptó en 2002 crear una Zona Franca Industrial para la comuna. Esta pretende atraer inversionistas privados interesados en proveer insumos o efectuar reparaciones a la industria minera. Este proyecto parece no dar los resultados esperados aunque es temprano para una evaluación. Tampoco ha tenido gran impacto la pavimentación de la ruta costera que une Antofagasta con la Zona Franca Comercial de la ciudad de Iquique. En gran parte Iquique ha dejado de ser un polo comercial pues Chile ha firmado muchos tratados comerciales que han anulado la ventaja de ser una zona franca; el Perú ha hecho lo propio instalando la Zona Franca de Tacna.

Ambas ciudades, Tocopilla y Taltal, también han sido zonas afectadas por el efecto desplazamiento en el mercado del cobre y por las nuevas políticas del Estado hacia los pequeños mineros. La pequeña minería era una fuente de empleo importante en ambos puertos. No obstante aquello, la expansión de la gran y mediana minería significó que a mediados de los noventa se fuera saturado el mercado mundial del cobre con la oferta que provenía de las transnacionales instaladas en Chile, agravada con la baja de la demanda mundial durante la " crisis asiática " (Capítulo 4.4.1). Esta crisis del precio del cobre influyó en la huelga de hambre de un grupo de pequeños mineros de Tocopilla que se encerraron en las minas acompañados de sus familias. La primera vez en agosto del 2000, la segunda vez en 2002275. Al mismo tiempo, en 1998 quebró la empresa minera Punta Grande ubicada en Taltal, la cual empleaba 380 trabajadores provocando un problema social para la comuna276.

No se trata de una crisis aislada. n Chile, el mayor número de microempresas que desaparecen entre 1995 y 2001, se encuentra en el sector de Minería, Petróleo y Canteras (tasa de mortalidad del 57% sin contar otro 17% que estaba inactiva)277. Según otra estimación, a mediados de los años ochenta, en Chile existían unos 30 mil empleos entre los pirquineros (micro) y la pequeña minería. En 1998 sólo quedaban unos 2 mil278. Otra fuente estima que de las 4.000 pequeñas minas existentes en Chile en 1990, en 1999 quedaban 500, 6 de ellas estaban activas en la Región RA279. Esta caída tendría que haberse producido especialmente después de 1995 pues hasta ese año, y desde 1990, la pequeña minería del cobre se mantenía en torno a un 13% del empleo del cobre; justamente, entre 1995 y 1996, la prensa registra en Tocopilla una importante caída en el empleo de la pequeña minería.

La pequeña minería también ha sufrido la reducción de subsidios durante los gobiernos de la Concertación. El Estado apoya desde los años treinta a los pequeños mineros, comprando su producción para refinarla en las plantas de la Empresa Nacional de Minería (ENAMI) antes de venderla al exterior. Los pequeños mineros reciben el precio internacional menos los costos de refinación. A partir de 1994, los costos internacionales de refinación han caído debido a progresos tecnológicos en la industria. Sin embargo, ENAMI, aparentemente no traspasa estas rebajas a los pequeños mineros; en abril 2005 los cargos de refinamiento eran casi tres veces superiores a los del mercado internacional 280. Otro estudio revela que en 1994 comienza a ser eliminado en forma progresiva el subsidio a los precios de los pequeños mineros. Entre 1995 y 1996 el subsidio cayó de $3,6 millones a $2,0 millones y sería totalmente reemplazado por un crédito a la pobreza en el año 2000. Con estas medidas se esperaba restringir el apoyo financiero a los productores "viables en el largo plazo" 281.

En el Chile oficial, la desaparición de la pequeña minería es parte de la modernización de la sociedad. Ello se reflejó en la falta de interés de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI) por defenderlos282. El Plan Estratégico de ENAMI justifica la eliminación de los subsidios aludiendo a las duras condiciones de trabajo, al riesgo de accidentes, a los efectos ambientales de la pequeña minería y a su baja productividad. Este discurso pretende justifcar la "conversión productiva de los pequeños mineros". Para legitimar su discurso, ENAMI ha reducido la contaminación ambiental de sus Fundiciones, traslada su Gerencia General desde Santiago a Copiapó y financia un programa de apoyo social a los pirquineros pobres. Este enfoque modernizante no toma en cuenta que actividades como la pequeña minería, la pesca artesanal, no sólo son generadores de producción e ingresos, sino de identidades colectivas que se trasmiten de generación en generación283.

Además los pequeños mineros de Tocopilla arriendan las minas por valores equivalentes al 10% del valor bruto de su producción, más royalties que oscilan entre el 10% y el 30%. Un alto porcentaje de estos yacimientos (62%) es subarrendado a la Compañía Minera de Tocopilla (grupo Luksic)284. Se trata de contratos inestables cuya duración fluctúa entre un mes y un año. La misma arrendadora procesa la producción de estas pequeñas minas gracias a un contrato con ENAMI. Asimismo, los pequeños mineros consideran ser explotados por intermediarios que arriendan pertenencias a la Compañía Minera Tocopilla, lo cual encarece el precio a pagar. Estas tendencias se superponen a su escasez de recursos y a la competencia por el agua.

La crisis de Tocopilla y Taltal, de Mejillones a comienzos de la década, también se explica por la crisis del sector pesca industrial. El aumento del poder de consumo de la Región podría haber provocado un gran crecimiento de la oferta de productos del mar para mejorar la nutrición de la población. Si bien, el boom exportador pesquero le permitió a Chile ocupar en 1999 el tercer lugar mundial en desembarque, desgraciadamente, ha puesto en peligro los stocks de sus principales especies marinas, sobre todo acabando con la sardina española y con el jurel 285

La actividad pesquera de la provincia de Tocopilla se encuentra dividida entre la pesca industrial y la pesca artesanal. Empero, ambas han sido limitadas por el agotamiento de los recursos pesqueros. El gráfico 5.10.2 enseña la caída en la producción pesquera en la RA provocada por el agotamiento de las especies. En particular, la pesca artesanal reclama la violación de su zona de pesca exclusiva por las grandes empresas y la carencia de medios elementales, principalmente, puertos y canales de distribución adecuados a sus necesidades. A pesar de lo anterior, las estadísticas de desembarque físico, nacionales y regionales, posteriores al año 1998, sugieren que la crisis ha afectado más a la pesca industrial que a la pesca artesanal (Gráfico B). Después de 1998 la producción pesquera regional se ha recuperado pero sin cambios significativos en su participación en el empleo.

Entre los principales productores y exportadores, se encuentra el Grupo Angelini, cuyas empresas pesqueras se cuentan entre las grandes de América latina (Capítulo 4.2) . Su pesca masiva no se destina a la alimentación de la población, sino principalmente a la harina de pescado, uno de los principales rubros de exportación de Chile y alimento para los animales. Sus instalaciones principales están en el puerto de Iquique, pero su pesca se efectúa en todo el norte, incluyendo la Región RA, en Corpesca de Tocopilla y Mejillones. Para hacer frente a los problemas del sector se ha registrado un aumento de la centralización del capital pesquero durante los años noventa286. Esto ha permitido al grupo Angelini seguir en buena posición pero concentrando sus sedes en Iquique para operar en todo el Norte.

Intentando frenar el agotamiento de los recursos, en el año 2002, se dictó una nueva Ley de Pesca, (llamada " ley corta"). Si bien ésta coloca límites de extracción, entregó a los grandes grupos económicos cerca del 80% de los permisos de captura por diez años, usando como parámetros su producción anterior y su mayor capacidad de almacenamiento. Al mismo tiempo la ley los eximió de pagar un derecho de explotación. Tampoco se prohibió la pesca de arrastre que ha causado enormes daños ambientales pues extrae todo tipo de organismos sin discriminación287. Los porcentajes asignados a la pesca artesanal (que representa la mayor parte del empleo del sector pesca) fueron marginales según los pescadores artesanales. Así la nueva Ley de Pesca fortaleció la hegemonía de los grupos y podría haber agravado el problema; hay temor que después de 2001 la biomasa de las principales especies pesqueras continúe decayendo debido a la carencia de estudios científicos previos para determinar los límites máximos de extracción288.

No era fácil oponerse a esta ley de Pesca. La pesca de exportación pertenece a los principales ejes de la economía. Como lo señalara el Ministro de Economía del Presidente Lagos, ésta fue la ley más importante de la " Agenda Pro-crecimiento " económico de su gobierno ya que " produjo un cambio de fondo en el sector de la pesca al brindarle la estabilidad institucional que no tenía " 289. Tampoco fue fácil conseguir su aprobación en el Parlamento después de largos años de debate. Mientras tanto, en la ciudad de Antofagasta y en otros puertos los pescadores artesanales efectuaron barricadas para protestar por las cuotas y por la reducción de su zona exclusiva de cinco a tres millas en el Norte290.

El efecto " desplazamiento " de la pequeña producción de Tocopilla y Taltal también se debe a décadas de contaminación marina. No había diagnósticos globales pero en las costas de la RA abundan depósitos de minerales acumulados. En Tocopilla hay focos de contaminación por plantas mineras, termoeléctricas, y en el pasado, por las mismas industrias pesqueras. Una planta de oro en la caleta pesquera de Cifuncho, dejó altas concentraciones de mercurio. En la comuna de Taltal, en Punta Grande, se menciona una planta de cobre cuyos efectos van a durar muchos años y la minera Esmeralda, donde se extraía oro, dejó una secuela histórica.

En la comuna de Antofagasta, en la Caleta El Cobre, opera una planta minera a la orilla del mar, que ha presentado efectos nocivos para el medio ambiente. En el puerto de Antofagasta, hubo 18 emisarios en la costa, que por muchos años descargaron aguas servidas al mar, y que fueron utilizados para descargar residuos industriales. También en la zona del puerto de Antofagasta, en décadas pasadas era común escuchar a trabajadores del sector comentar sobre derrames accidentales de estanques de cianuro. Finalmente, la contaminación que existió en el río Loa, terminó en el mar291. Posteriormente ocurrieron varios desastres ambientales en la RA (Capítulo 13.9). Así, la contaminación marítima ha perjudicado la actividad pesquera y el turismo, limitando la diversificación productiva. Se sospecha que la enorme expansión minera sigue contaminando el océano.

Finalmente en la decadencia de la provincia de Tocopilla influyeron las medidas de " modernización " de grandes empresas (termoeléctricas y una minera no metálica) que han reducido su personal. Muchos de sus empleados fueron despedidos de manera abrupta. Como resultado de estos procesos estos trabajadores realizaron intentos de micro-emprendimientos (taxis colectivos, kioscos, comercios, servicios básicos) que no prosperaron y que no hacen más que redistribuir valor 292.

En resumen, la crisis de Tocopilla y Taltal refleja las políticas de mercado liberales que han favorecido a los grandes intereses económicos en desmedro de los pequeños productores, y con ello, ha acelerado la declinación de un conjunto de identidades y prácticas sociales que animaban la vida de ciudades, caletas pesqueras y pueblos del Norte de Chile. Su desaparición y estancamiento reproducen la dependencia y la vulnerabilidad de una economía de enclave. El caso del agua que se analizara en la próxima sección es otro ejemplo de centralización de poder económico como resultado de la especialización minera.


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles