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EVOLUCIÓN DEL SECTOR SERVICIOS Y EL COMERCIO INTERNACIONAL DE SERVICIOS: EL CASO DE BRASIL

Genilson Valotto Patuzzo


 


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6.5. El Comercio Internacional de Servicios Brasileños

Después de trazar algunas consideraciones del sector servicio brasileño y su desarrollo tras los años noventa, vamos a analizar ahora en detalle la participación de Brasil en el comercio internacional de servicios y la internacionalización del sector, ocurrida por la creciente presencia del capital internacional en el mercado interno brasileño. En un primer momento, debemos plantearnos ¿el por qué de exportar servicios?, y ¿Cuales son las actividades que se consideran exportación de servicios?

El primero cuestionamiento tal vez sea una pregunta sencilla que se puede presentar varias respuestas sencillas, como; es el motor de las economías avanzadas; es la gran fuente de empleo; exportar servicios es participar en una de las industrias con mayor potencialidad y crecimiento en el mercado internacional. Pero, hay algunas respuestas más adecuadas al entorno reciente de las economías. Pues, cuando tratamos de industrias de servicios se habla de empresas que no contaminan el medio ambiente y por lo tanto se trata de industrias limpias, contribuye al crecimiento de la economía mediante transferencia de tecnología y mejoramiento de los canales de información.

Cuanto a la segunda, desde la entrada en vigor del AGCS, GATS según sus siglas en inglés, se ha producido una demanda creciente de información estadística detallada, pertinente e internacionalmente comparable sobre el comercio de servicios. Los negociadores comerciales necesitan las estadísticas, a ser posible por modos de suministro, como orientación para negociar compromisos específicos y controlar sus efectos económicos en cada tipo de servicio. Las estadísticas son necesarias, entre otras cosas, para evaluar las oportunidades de acceso a los mercados, comparar los compromisos de liberalización, evaluar el grado de liberalización alcanzado en determinados sectores y mercados y contar con datos estadísticos en la solución de diferencias (OMC, 2006a)113.

Así, el informe de la OMC (2006a)114 establece la categoría de los servicios que se comercializan internacionalmente como servicios comerciales. Estos se han definido como integrados por todos los servicios menos los gubernamentales. A su vez, los servicios comerciales se han subdividido en tres grupos, que son:

1) Transporte - incluye los servicios de transporte realizados por los distintos medios posibles (aéreo, marítimo, por carretera, ferrocarril, el espacial y por tuberías, etc.). Se consideran tanto los servicios de transporte de pasajeros y mercancías, como los servicios auxiliares al transporte (carga y descarga, mantenimiento, etc.). 2) Viajes - se consideran los gastos en bienes y servicios adquiridos en una economía por viajeros procedentes de otra economía a título personal, por motivos relacionados con la salud o la educación. Los bienes y servicios más comunes abarcados por esta actividad son el alojamiento, los alimentos y las bebidas, el esparcimiento y el transporte, etc. 3) Otros servicios comerciales - esta rama de actividades corresponde a las siguientes actividades: i) Construcción - se incluyen trabajos de construcción e instalación realizados por empresas de un país en otro diferente. No se consideran las actividades con un periodo de ejecución superior a un año (en tal caso, los flujos producidos son inversión directa) ni las realizadas a través del establecimiento de filiales. ii) Comunicaciones - comprende los servicios de correos, recogida, transporte y entrega de paquetes postales, cartas, etc. Asimismo, se incluyen los servicios de telecomunicaciones (transmisión de sonido, imagen, otras informaciones por teléfono, télex, televisión por cable y por radiodifusión, servicios de satélite, correo electrónico, servicios de fax, etc.; también incluye los servicios empresariales de red, teleconferencias y servicios de apoyo, los servicios de telefonía móvil, de rutas de internet y de acceso en línea, incluido el acceso a internet. iii) Seguros - se incluyen todo tipo de seguros (transporte de mercancías, seguros de vida y fondos de pensiones, etc.), así como los servicios auxiliares a los mismos (comisiones, evaluación de riesgos, etc.). iv) Servicios financieros - se consideran todos los servicios ligados a la intermediación financiera bancaria y no bancaria115 (comisiones bancarias, asesoramiento y gestión de carteras). v) Servicios informáticos y de información - comprende los servicios informáticos (equipos de informática, soporte y procesamiento de datos), de agencias de noticias (suministro de noticias, fotografías y artículos a los medios de difusión) y de servicios de bases de datos y sistemas de búsqueda en internet. vi) Otros servicios empresariales - se incluyen una serie de servicios a empresas no considerados en actividades anteriores, como los servicios relacionados con el comercio, arrendamiento de explotación (alquileres) y servicios diversos prestados a las empresas, profesionales y técnicos, tales como servicios jurídicos, de contabilidad, de consultores en administración, relaciones públicas, publicidad, investigación de mercados y encuestas de la opinión pública, investigación y desarrollo, arquitectura, ingeniería y otros servicios técnicos, agricultura, minería, etc. vii) Servicios personales, culturales y recreativos - comprende servicios audiovisuales y conexos (servicios y derechos relacionados con la producción cinematográfica, musical, etc.), educativos, culturales, deportivos, etc. viii) Royalties y derechos de licencia - se incluyen los cobros y pagos entre residentes y no residentes relacionados con el uso de derechos de propiedad (patentes, marcas comerciales, franquicias, etc.).

Los servicios de manera general apoyan el comercio de bienes y otros servicios, los cuales no podrían llegar a su destino si no existieran los canales de distribución y comercialización que proveen las industrias de servicios. Los servicios de distribución son un vínculo crucial entre productores y consumidores, de manera que el desempeño de esta industria es importante para el bienestar de los consumidores.

Sin embargo, debido a la creciente importancia del comercio internacional de servicios y principalmente los servicios comerciales, que son los más significativos para los países exportadores de servicios, Rubalcaba (1999) señala:

(...) los más recientes adelantos de la economía de servicios se han centrado en la condensación de la relación entre servicios e industria, estudiando la complementariedad al mismo tiempo entre ambas economías como distinguir la naturaleza específica de los servicios. Esta nueva visión pone los servicios comerciales en una posición privilegiada para la investigación. Ellos han sido considerados el representante más significativo de la integración entre los bienes y servicios, así como el sector más activo de la nueva estructura económica. Esto está justificado por dos hechos básicos: por una parte, los servicios comerciales han disfrutado del crecimiento más alto en el empleo y valor añadido de cualquier sector en los últimos 20 años; por la otra, los servicios comerciales ejemplifican la relación de servicio industrial dentro de una profunda transformación de la dinámica económica.116

En este sentido, "la revolución de los servicios"117 obedece fundamentalmente a su carácter cada vez mas comerciable y a la rápida expansión de los que están basados en conocimientos (como los técnicos y profesionales). Éstos contradicen los modelos que planteaban que los servicios son, como muchos investigadores decían en otros tiempos, actividades con poca intensidad de capital y escaso aumento de la productividad, ya que las industrias de servicios son los principales inversores en TI del mundo. El gasto en servicios basados en conocimientos, que tienen una elevada elasticidad, está aumentando rápidamente en los países en desarrollo e industriales.

Esto se está empezando a reflejar en Brasil, pues las exportaciones del sector servicios brasileñas crecieron case el triple de la de la media mundial en 2005, según el ministerio de desenvolvimiento brasileño. En cuanto las ventas externas en el segmento de servicios en el mundo tuvieran un incremento de 10,5%, las ventas brasileñas tuvieran un incremento de 28,3% en relación al año de 2004. Con este resultado, Brasil se calificó en la 13ª posición entre los mayores crecimientos de todo el mundo, en el cual, Brasil ocupa la 35ª posición entre los mayores exportadores de servicios del mundo, con 0,6% de la participación mundial. Mientras tanto, en el mismo periodo las compras brasileñas al exterior se incrementaron un 38,7%. Con este incremento, según la OMC, Brasil es el 27º mayor importador de servicios del mundo, siendo históricamente deficitario en el sector como demuestra el gráfico 7.

De acuerdo con este gráfico, la posición claramente deficitaria de Brasil en el comercio de servicios, observase un déficit en el año de 2005 el mayor en la década de 2000. Los principales responsables por este déficit por orden de importancia son: alquiler de equipamientos, transportes, servicios de informática y información, viajes internacionales, seguros, audiovisual, servicios relacionados al comercio y servicios financieros. El país, por otro lado, presenta saldo positivo en algunos sectores de servicios como: arquitectura y ingeniería, instalaciones y mantenimiento de despachos, servicios profesionales, de comunicaciones, pase de los atletas profesionales, publicidad y construcción civil.

Evidentemente, Brasil no explora de manera eficaz las actividades que son superavitarias, donde debería especializarse en ellas y obtener mejores resultados en la balanza comercial. Sin embrago, hay también un factor relevante a ser explicado en los sectores de saldo negativos, que está vinculado a las barreras artificiales al comercio de algunos sectores, especialmente por la existencia de regulaciones gubernamentales en los mercados de servicios en el proceso de liberalización negociadas en Doha.

Negociaciones estas retomadas en marzo de 2007, después del embajador brasileño, Antonio Patriota, declarar que Brasil está dispuesto a hacer concesiones en los sectores de servicios y de bienes industriales para retomar las negociaciones da Roda de Doha y declara "estamos mirando atentamente para los sectores de bienes industriales y servicios y preparados para hacer las concesiones necesarias de modo a obtener un acuerdo satisfactorio" y continua "en una negociación, usted no puede solamente querer ganar. Tiene que mostrar flexibilidad".

Pero, esta retomada de negociaciones tenemos que ver con cautela la liberalización de los servicios donde Brasil posee saldo positivo. Eso porque las estadísticas de servicios aún poseen deficiencias en los datos y no muestran con exactitud los flujos internacionales. Por ejemplo, el sector alquiler de equipamientos, que es deficitario, puede se referir a remesas de lucros de las empresas multinacionales. Por consiguiente, vale exponer que los servicios de construcción, arquitectura e ingeniería, publicidad y profesionales, donde el país posee saldo positivo, con la liberalización se pueden perder mercado y eficiencia.

En el contexto, vale recordar que el sector servicios es el único - cuando se considera de forma agregada el comercio internacional de bienes (agrícolas e industriales) y de servicios- en que el país tiene una posición deficitaria. En el caso de bienes, cuando se ve conjuntamente el sector agrícola y los bienes industriales, el superávit brasileño supera los US$ 42 billones en 2005, el cual se reduce para US$ 36 billones al computar el sector de servicios. Adicionalmente, verifica que el sector de servicios responde solamente por 11% de las exportaciones brasileñas, en cuanto las importaciones saltan para los 22%. Y, con la liberalización tiene el riesgo de no elevar las exportaciones en el sector agrícola de forma substancial, contribuyendo para reducir el saldo positivo en el comercio de bienes y alagar el déficit en servicios.

Estos efectos podrá ser aún más negativos y agravados en el panorama internacional de reducción en el crecimiento del PIB, en la queda y cantidad de las commodities industriales y agrícolas y, el retorno de los capitales de los países emergentes para su sitio de origen y principalmente con la subida de los tipo de interés en la economía norte-americana, que es el principal importador y exportador de servicios brasileños, 48,5% y 54,1%, respectivamente en 2006.

Otro punto de gran relevancia que debemos destacar para el panorama internacional de Brasil, está relacionado al cambio recientemente de la moneda, donde podemos observar en el gráfico 8 cuando Brasil deja el Cruzeiro Real para Real, en el cual la política monetario se valoriza el Real el sube el tipo de cambio real efectivo y las exportaciones de bienes bajan significativamente post 1994. Mientras tanto, el sector servicios se mantiene estable hasta 2004, cuando Brasil decide ampliar su liberalización en el sector. El conjunto de reformas implementadas durante los años 90 estubo comprometido con la integración de Brasil en la economía internacional. Por esto, la estabilidad monetaria asume gran relevancia, pues las grandes empresas multinacionales no tenían como evaluar precisamente el desempeño económico, la rentabilidad y los costos de producción y servicios.

Ahora bien, el país que llevaba case 15 años de alta inflación, adopta un programa de estabilización anclada en el dólar americano, permitiendo que el mercado interno internacionalizase sus costes y precios a partir de 1994, que fue acompañada por una mayor apertura comercial y financiera. Aún que, la rápida crecida en la tasa de cambio en la moneda contribuyó para la ampliación en la oferta de productos importados sin la contrapartida en la expansión de los bienes y servicios exportados. Como consecuencia, Brasil paso de una posición de superávit para deficitario en la balanza comercial.

No obstante, entre los años 1998 y 1999, la moneda Brasileña vuelve a sufrir una desvaluación y con la entrada de las IED en el país la balanza comercial vuelve a estabilizar gracias a las exportaciones de bienes que se incrementan de manera substancial post el año 2000 como se ve en el gráfico 8.

Este rápido descenso en la balanza comercial, el gobierno se ve obligado a implantar diversas medidas para equiparar en mercado interno del externo, con la intención de promover la inserción competitiva, la intención de la modernización productiva, para volver ser competitivo en el mercado internacional.

Con el avance del MERCOSUR, firmado en 1991, y fundamentado en un nuevo modelo económico, Brasil altero su inserción en la economía mundial, principalmente después que la política adoptada freno las altas tasas de inflación. En función de eso, procuró estimular la liberalización comercial. Pues, la liberalización comercial fue la responsable pela ampliación en la oportunidad de ser establecida en Brasil una nueva condición de inserción internacional. Donde Brasil disponía en la década de 80 el tercero mayor generador de excedentes comerciales del mundo, abajo solamente de Japón y Alemania.

Brasil se transformo abruptamente post implantación del Plan Real, en una economía deficitaria en los intercambios comerciales, como logramos observar en el gráfico 9. Esta apertura comercial drástica y desacompañada de políticas industriales y agrícolas adecuadas, llevo a desarticulación de algunas redes productivas, provocando la sustitución de productos nacionales por importados, donde las medidas gubernamentales volcadas para la valorización del cambio, las exportaciones encontraran una barrera adicional, y estimulo el crecimiento de las importaciones de bienes y servicios y gastos con servicios en el exterior.

Según Pochmann (2002), la adopción del no cumplimento en la reglamentación comercial como un fin, en sí mismo. O sea, como instrumento de ampliación de la oferta de productos importados y, por consecuencia, del combate a inflación, devengó serios problemas. De un lado, la economía perdió la oportunidad de usar la política comercial como estimulo a las exportaciones y de incorporación de nuevas tecnologías. Mientras, la participación brasileña en las exportaciones mundiales de productos manufacturados disminuyó, en cuanto las exportaciones de productos primarios fueron elevadas. Debido a la proporción, los años 90 representaran la vuelta a la dinámica comercial cerca de la verificada en Brasil de los años 30, cuando exportaba bienes de bajo valor agregado y pequeño contenido tecnológico e importaba bienes de mayor valor agregado y coeficiente tecnológico.

Así, logramos constatar que el país tiene perdido en relación a la situación económica en comparación con las naciones desarrolladas. Al contrario del ocurrido entre la década de 30 y 80, cuando hubo la elevación de la renta por habitante en Brasil en comparación con los EUA, por ejemplo. Mientras tanto, después de los años 80, Brasil sufre una reversión en la situación socioeconómica con la adopción de las políticas liberales de los años 90, aumentando la discrepancia en la renda per cápita del brasileño en relación al norte americano.


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