BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales

EVOLUCIÓN DE LOS VÍNCULOS COMERCIALES EN AMÉRICA DEL NORTE Y EL ESTE ASIÁTICO 1994-2004

Alfredo Sánchez Ortiz




Esta página muestra parte del texto pero sin formato.

Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (370 páginas, 1.37 Mb) pulsando aquí

 

 

Capítulo 4. Vínculos Comerciales TLCAN – Este Asiático

4.1. Introducción

Desde el inicio de las negociaciones del TLCAN se registraron cambios importantes en el patrón de comercio y flujos de inversión e incluso reacciones políticas de los líderes de los principales países como China y Japón. En este contexto China propuso a la ANSEA el Proyecto del Área del Libre Comercio entre China y la ANSEA , que finalmente se acordó en la Conferencia Ministerial de China y la ANSEA celebrado en noviembre de 2001 dando inicio a un TLC para el 2011.

Es un hecho que el establecimiento de la UE y el TLCAN han planteando desafíos serios para el desarrollo del Este Asiático. Después de la firma del TLCAN se observan cambios en la relación de EE.UU. con los países asiáticos en general y mas concretamente, como se demuestra en esta tesis en el comercio y en la IED, en el incremento de Acuerdos de integración entre países del Asia Pacifico, e incluso en aspectos cualitativos como en el discurso de gobernantes y algunos sectores de la sociedad civil. Se puede decir que a partir del TLCAN se registra en la región del Este Asiático una franca integración comercial y económica.

El vinculo comercial y de flujos de la IED del TLCAN en la región del Asia Pacifico no es un vinculo en el sentido de causalidad, puesto que en los asuntos internacionales existen múltiples variables imposibles de controlar en un modelo, pero si de establecer una relación de concomitancias, es decir de sucesos económicos que se corresponden en el tiempo como el TLCAN junto a muchos otros factores imponderables en los cambios mencionados. ¿Es el TLCAN una de las causas por las que el comercio intra-asiático se ha expandido rápidamente? Es difícil responder debido a la imposibilidad de estimar empíricamente los efectos de diferentes factores económicos como inversión, producción, tecnología, mercado, distribución, etc., en concomitancia con circunstancias políticas nacionales e internacionales, conjugadas con elementos socio-históricos de los grupos. Todo flujo comercial refleja ajustes y desequilibrios simultáneos en los mercados. Es imposible separar las variables de necesidad individual para cotejarlas con determinantes comerciales en la oferta diferenciada de satisfactores y patrones de consumo. Asumiendo gratuitamente, estándares ideales de producción, distribución, costo y precio.

La siguiente exposición es, por lo tanto, cualitativa en naturaleza.

En este capitulo se proporciona una visión analítica sobre el grado de vinculación existente entre el TLCAN y los países del Este Asiático, en dos rubros; uno fáctico, el comercio de mercancías y los flujos de Inversión Extranjera Directa; y otro especulativo, representado en los cambios del discurso tanto gubernamental como de la oposición. Este análisis emplea el método cronológico, tomando como referente el antes y el después del TLCAN.

4.2. Comercio Intra-Asiático en Productos y Servicios

4.2.1. Patrón de Comercio

Señalábamos al principio de este Capitulo que con la presencia internacional del TLCAN una porción creciente del comercio asiático se encauzó hacia los propios países asiáticos. Consecuentemente, el volumen del comercio intra-asiático creció aun más rápido de lo que proporcionalmente ha crecido el comercio total de estos países. Pero igualmente hay que tomar en consideración que el comercio intrarregional en Asia Pacifico es particularmente intenso, pues la tasa de crecimiento de la región figura entre las más elevadas del mundo. La economía china siguió en expansión con un crecimiento en su PIB del 9.3 por ciento que estimuló el auge del comercio, tanto en el país como en la región, y por primera vez la exportación China fue superior a la de Japón.

En la región Noreste los países más desarrollados se desvincularon de los menos desarrollados; a diferencia del Sureste que reforzó la relación entre los desarrollados y los menos desarrollados. El noreste en general mantuvo niveles altos de intercambio comercial con EE.UU, a pesar del TLCAN.

Resulta interesante observar que el comercio del Sudeste y del Noreste Asiático hacia los PAD’S es el único que creció del 1990 al 2000. En 1994 el 48.7% del total de exportaciones entre los PAD’S y Japón fue dirigido a la región. Además según el Informe Económico 2001 del FMI, en el comercio del 2000 un porcentaje mayor del total de las importaciones (52.6%) vino de la región. (Informe Económico del 2001, del FMI). Aunque en el 2003 el flujo comercial decayó de manera ligera en el Sudeste y drástica en el Noreste.

De acuerdo con lo anterior la región Sureste, se vio más afectada en la reducción de exportaciones que la región Noreste, que tiene los países más desarrollados y vinculados con EE.UU..

Los países del Sureste, reducen sus importaciones más que los del Noreste, lo que indica menor dependencia de los países del TLCAN.

Es útil construir un panorama evolutivo del comercio intrarregional en el Este Asiático, comparándolo con los grandes bloques comerciales; TLCAN y UE. La taza del comercio intra-regional en los países asiáticos, excluyendo a Japón, se está acercando a la de Norteamérica, dominada por EE.UU. y Canadá.

La porción de comercio intrarregional en el comercio total dentro de Asia todavía es sustancialmente menor al del comercio intrarregional dentro de la UE. Esto es comprensible, dado el alto nivel de cooperación intra-regional, facilitación comercial, construidos mediante un solo marco jurídico político-institucional y su sistema monetario unificado que desarrolló Europa en las últimas décadas. Sin embargo, el tamaño del comercio intra-regional de Asia como porción del comercio total es muy notable, en vista de la falta de los aparatos políticos formales jurídicos y monetarios para facilitar el comercio intrarregional.

En la UE el comercio intra-regional se concentra principalmente en transferencias intra-firmas por compañías multinacionales. Gracias al lanzamiento del euro, el comercio dentro de la región se facilito al eliminar servidumbre y control monetario externos. Por otra parte aunque EE.UU., Canadá y México tienen una división vertical de mano de obra, los efectos de la creación comercial y transferencia comercial están muy marcados, es un desacierto en el TLCAN. Las tasas de exportación mexicana para EE.UU. y Canadá crecieron del 19% en 1994 al 65% en el 2003. En el proceso de creación de mercados y transferencia comercial, EE. UU. absorbio la mayoría de los productos básicos incrementados. En 1998, EE.UU. atrajo el 77.8% del mercado externo mexicano, y el 80% del canadiense.

Esta grafica comprueba nuevamente que la región Noreste, se vio más favorecida en la Balanza Comercial, respecto a la del Sureste, ratificando un mayor desarrollo de la zona Noreste.

La mayoría de las economías del Este asiático llevan una política con orientación de exportación; lo importante es producir para exportar. Las porción de comercio intrarregional en el comercio total dentro de Asia todavía es sustancialmente menor de lo que es en el comercio intrarregional dentro de la UE. Esto es comprensible dado el alto nivel de cooperación intrarregional y facilitación comercial que se ha desarrollado en Europa en las ultimas décadas. Sin embargo, el tamaño del comercio intrarregional de Asia como porción del comercio total es muy notable en vista de la falta de arreglos formales para facilitar el comercio.

Mucho de este crecimiento en el comercio intrarregional es el resultado del importante papel que ha jugado Japón en la facilitación de mercados y la transferencia de tecnología. No obstante, ese papel ha cambiado dramáticamente a través de los años. Al principio, el comercio entre Japón y los PAD’S fue dominado por lo que puede ser catalogado como típico comercio norte-sur. Primeramente, los productos eran embarcados desde Japón a los PAD’s. Recientemente, ese patrón comercial ha llegado a ser mucho más complejo, y las exportaciones de los PAD’s son principalmente mercancías manufacturadas.

La región Sureste, incrementó más su comercio con Japón que la región Noreste, porque así convenía a Japón, aprovechando las ventajas en el intercambio comercial con una región menos desarrollada que la japonesa.

El patrón global de comercio en la región asiática ha cambiado. En 1994, el 21.85 % del total de la importación japonesa provenía de los Países Asiáticos en Desarrollo (PAD’s). No obstante, solo el 12.35 % del total de las exportaciones de estos PAD’s fue destinado a Japón. Desde el punto de vista de Japón, el balance es al reverso; los PAD’s sumaron el 29.9 % del total de las importaciones de Japón monto que representaba al 31.4 % de sus exportaciones totales. El patrón japonés es más simétrico debido a que sus importaciones de los PAD’s representan la fracción mayor de sus importaciones globales, pero menor al excedente total de sus exportaciones.

Otro factor en el comportamiento económico de los países asiáticos en las últimas décadas es su participación en el mercado mundial. Los países de Asia Pacifico son vendedores y compradores de bienes a nivel mundial, sobre todo de los países desarrollados.

En el comercio internacional han incrementado sus importaciones procedentes de los países desarrollados, lo que ha contribuido a aumentar su cuota de mercado. A partir de los años ochentas adquirieron importancia las importaciones procedentes de los países del área asiática, conformándose cada vez más el bloque regional con efectos negativos en el comercio mundial .

El mercado de Japón aparece como el más importante de la región para la mayoría de los países de Asia Pacífico, excepto para Hong Kong que mantiene relaciones especiales con los mercados de China y Corea.

El siguiente grafico muestra el destino del comercio originado en los países de Asia Pacífico de 1991 al 2001.

Posterior a la vigencia del TLCAN la dirección del comercio Asia Pacífico se trasforma, la región Noreste reduce sus tratos con la UE, mientras la del Sureste intensifica su comercio con la Unión Europea, siendo la beneficiaria directa de esta nueva relación, pero decrece con los países occidentales (Canadá, EE.UU., México, Chile y Perú).

Sin embargo las relaciones de triángulo comercial entre Japón, el Este asiático y EE.UU. están seriamente desequilibradas. La mayoría de las economías del Este asiático tienen un balance favorable en su comercio con EE. UU. (Ver cuadro) Desde el establecimiento del TLCAN, los efectos de la transferencia comercial han sido muy notables, lo cual demuestra un alto grado de vinculación entre estas economías, de tal forma que el comercio del Este de Asia con el TLCAN está siendo sustituido por el comercio intra-regional dentro del mismo TLCAN. A partir de la instauración del TLCAN, con respecto a EE.UU. las importaciones de Japón y los 4 dragones asiáticos cayeron de 28% a 17% del total americano, diferencia representada en la caída de sus exportaciones hacia EE.UU. del 17 al 12%. El continuo y artificial crecimiento económico de EE.UU. y su obligada expansión de importaciones juegan un papel importante en el incremento del comercio dentro del TLCAN. El balance comercial favorable a México y Canadá en el mercado de los EE.UU. creció de casi veinte millones de dólares en 1994 a 52.5 billones en 1998. Lo cual demuestra el grado de vinculación entre estas economías

De acuerdo con esta información, durante el periodo de análisis, se puede apreciar un descenso de mercancías hacia EE.UU. por parte de casi todos los países asiáticos con excepción de China, que fortaleció su comercio con EE.UU.. Estos indicadores prueban que sí hubo influencia del TLCAN en el intercambio comercial entre los países del Este Asiático con EE.UU. dando lugar a desviación comercial, interpretable como una de las causas en la integración económica y política de la región Asia Pacífico. Se observa que el Sudeste asiático tuvo déficit comercial con occidente de .4 millones de dólares y con EE.UU de -2.3 millones de dólares. El Noreste comercializo 2.2 millones de dólares con occidente y 3.6 millones de dólares con EE.UU, situaciones compensadas con un mayor intercambio intra regional, evidenciando que la interdependencia e integración comercial alcanzada es mayor a un nivel subregional que regional, incluso se puede pensar en una competencia entre ambas subregiones por ganar los mercados de la UE y EE. UU. Estos datos señalan que los principales mercados para el Sudeste asiático en orden de importancia son: Japón, China y la UE; mientras que para el Noreste son: China, Japón y la misma subregión del Noreste. Además, en los años que se analizan, ambas regiones pierden mercado y presencia; el Noreste en la UE y el Sureste en EE.UU..

A partir del TLCAN, se reduce el comercio de la región Asia Pacífico, con los países del TLCAN, la baja actividad comercial perjudicial a México se explica por la pérdida de ventajas competitivas o por la absorción de EE.UU..

La actividad comercial entre los países del TLCAN con los de la región Asia Pacífico descendió, en menor grado con el Noreste, perjudicando más a los países menos desarrollados del Sureste.

Para el 2004 el comercio estadounidense con Asia experimentaba un cambio iniciado desde mediados de los noventas a consecuencia del TLCAN . Según el informe de la OMC, el comercio de mercancías y de servicios comerciales siguió creciendo en Asia a un ritmo más rápido que el comercio mundial. Las exportaciones de mercancías se incrementaron el 25%, hasta alcanzar un valor de 2.385 billones de dólares y las exportaciones de servicios comerciales el 21%, a 436,000 millones de dólares. En la región, el valor en dólares de las importaciones aumentó más que el de las exportaciones, tanto en el comercio de mercancías como de servicios (Informe 2005 del Comercio Mundial, OMC; 9)

De conformidad con los datos anteriores las exportaciones intraregionales en AFTA , TLCAN y UE registran un considerable aumento en los tres bloques regionales a partir de los 90’s sobre todo para AFTA. Nuevamente con datos del FMI se evidencia el efecto del TLCAN en el incremento del comercio interregional en la región Asia Pacífico, consiguiendo una integración regional por reacción en contra de la presión comercial y geopolítica que este mecanismo ha ejercido.

Con respecto a las importaciones, las importaciones de capital mantienen el flujo previo al TLCAN, cuando los PAD’s exportaban productos primarios e importaban maquinaria y productos terminados. Hay una proporción alta de importaciones de equipo de capital, materiales y componentes en el total de importaciones provenientes del resto de Asia Pacifico (principalmente Japón y otros PARI), y en menor volumen desde fuera de la región asiática. Reflejando el patrón de comercio triangular, es mayor la proporción en exportaciones de materiales altamente procesados y productos terminados para EE.UU., La Unión Europea y otros mercados fuera de Asia, que a otros destinos en Asia .

En cuanto a las importaciones, sucede algo similar a lo observado en las exportaciones, es decir, se da una estrecha vinculación de los mercados asiáticos con los de Norteamérica, advertida en la integración y dependencia de los PARI primero con Japón y luego con EE.UU. y Canadá. Cuando estos últimos tienen en el año 2001 un decremento en sus importaciones, lo mismo sucede a los PARI. Así, cuando Japón tuvo perdida en sus importaciones (2001 y 1998), los PARI registraron igualmente saldo negativo en su volumen de importaciones.


Grupo EUMEDNET de la Universidad de Málaga Mensajes cristianos

Venta, Reparación y Liberación de Teléfonos Móviles
Enciclopedia Virtual
Biblioteca Virtual
Servicios